George Michael afirmó el domingo que se mereció el mes en prisión que le impusieron el año pasado porque estaba drogado cuando estrelló su vehículo Range Rover.
El ex cantante de Wham! dijo que su karma lo llevó a esa sanción, pues tenía “una cuenta que pagar” debido a que infringía reiteradamente la ley.
Esa consideración hizo más fácil aceptar el castigo, aseveró el artista, según extractos de una entrevista que difundió el domingo la radio de la BBC.
Michael fue sentenciado a ocho semanas de prisión porque estrelló en julio su automóvil contra una tienda fotográfica en Londres mientras estaba bajo los efectos de medicinas con receta y marihuana.
El juez ordenó que Michael cumpliera cuatro semanas en la cárcel y cuatro en libertad condicional.
El músico, cuyos éxitos incluyen “Faith” y “Freedom”, recibió además una multa de 1.250 libras (unos 2.000 dólares) y le fue retirada la licencia de manejo durante cinco años.
Su pareja, Kenny Goss, se ha cansado de su mal comportamiento y quiere poner fin a su relación de 15 años. “Desde hace algún tiempo, ha tenido demasiadas segundas oportunidades, más de las que Kenny estaba dispuesto a dar. Él siempre ha sido fiel a George, pero no siempre ha sido correspondido”, ha comentado una fuente cercana.
