Asociaciones feministas francesas acaban de lanzar la campaña «Señorita, una casilla de más», para exigir que se quite la casilla «señorita» que aparece en las planillas de los bancos y administraciones públicas y privadas.
Las asociaciones feministas Chiennes de Garde y Osez le féminisme, consideran que el uso de dicha palabra trasmite cierta visión de la mujer y establece una diferencia de tratamiento entre hombres y mujeres.
Laurence Waki, autora de un libro sobre este tema («Madame ou Mademoiselle»), comparte la opinión de estas asociaciones, ya que para ella, el término «señorita» refleja una infantilización de las mujeres.
Dijo que cuando alguien respeta a una mujer, la llama señora y que esta diferencia, incluso, puede tener consecuencias en la vida diaria.
