Los indignados de EU

En todo el verano, estaban de moda los acampamentos en España. Acudían allí los desempleados, las personas que habían perdido sus modos de vida u otros solidarios no menos motivados que repentinamente no estaban en capacidad para cubrir sus obligacion

En todo el verano, estaban de moda los acampamentos en España. Acudían allí los desempleados, las personas que habían perdido sus modos de vida u otros solidarios no menos motivados que repentinamente no estaban en capacidad para cubrir sus obligaciones de viviendas.

A distancia, esos acampados eran vistos como desadaptados. En la misma España se podía encontrar a críticos de esa clase de manifestación. A veces los identificaban como “los mismos vagos” de siempre.

Sin embargo, la realidad es que la crisis que ha vivido España o Grecia, o cualquier otro de los países de la zona euro, ha generado un grupo muy grande de desplazados y familias han visto disminuir sus ingresos.

La crisis en Estados Unidos,  reflejada primero en el crack financiero y sucesivamente en las pérdidas millonarias, se ha extendido a los empleos. El presidente Barack Obama ha buscado fórmulas para estabilizar la economía, pero el camino no ha sido fácil. La lucha por el control político ha matizado cualquier intento de solución.

Ahora las calles de Nueva York, en particular la zona de Wall Street y la semana pasada Washington,  son escenarios de un panorama parecido a los vividos en varias ciudades españolas. El desempleo (9%) y la pérdida de calidad en la vida del estadounidense medio han estimulado las manifestaciones.

Para algunos “Ocupa Wall Street” no es más que la expresión de izquierda del “Tea Party”. De hecho, el vicepresidente Joe Biden comentó que las protestas “tienen mucho en común con el Tea Party”. Obama fue comprensivo y dijo que el movimiento refleja la frustración del pueblo norteamericano.

Pero los protagonistas lo han explicado: “Quienes piensan que somos una pandilla de hippies sin futuro deberían asistir a nuestros debates y escuchar  a nuestros invitados. Este es un movimiento que se va a construir poco a poco con la participación ciudadana y cuyo objetivo es cambiar el statu quo. Importa poco el resultado político de las próximas elecciones. Aspiramos a mucho más”.

La crisis en el primer mundo debe ayudar a entender que los términos de la gobernabilidad actual deben ser revisados, a nivel global.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas