Buenos resultados, mayor equidad

La economía sigue creciendo. El índice de 4.2 por ciento logrado en los primeros nueve meses del año es otra muestra de ese comportamiento.
No es una sorpresa, porque el desempeño de los últimos años, con una media de crecimiento anual cercana al 7

La economía sigue creciendo. El índice de 4.2 por ciento logrado en los primeros nueve meses del año es otra muestra de ese comportamiento.

No es una sorpresa, porque el desempeño de los últimos años, con una media de crecimiento anual cercana al 7 por ciento, muestra una tendencia consistente. Pero lograr esa consistencia en momentos de dificultades mundiales, es un elemento de mucho valor.

Según reveló el Gobernador del Banco Central, el 72 por ciento de las actividades económicas crecieron. Y dentro de ellas con los mayores niveles, la minería, las zonas francas y la Agropecuaria, áreas estrechamente vinculadas al sector externo, porque generan divisas y producen alimentos. También crean empleos, en el caso de las zonas francas, de forma intensiva.

Como elementos trascendentes, por su importancia en mantener la estabilidad cambiaria que a su vez es una pieza básica de la estabilidad macroeconómica, en los primeros meses del año se revirtió la baja que se había producido el año pasado en las remesas familiares.

La inversión extranjera, un indicador que contribuye al financiamiento del déficit corriente de la balanza de pagos, aportó en el período US$1,835.7 millones, con proyección  a cerrar el año sobre US$2,000 millones. Probablemente, hasta las autoridades monetarias se han sorprendido con este resultado.

El crecimiento económico no necesariamente representa desarrollo y mucho menos equidad social. El verdadero desarrollo llega con la redistribución equitativa y eso se logra vía políticas esencialmente sociales, dirigidas al reparto de la renta nacional.

El desempeño económico hasta septiembre es positivo, y esperamos que continúe de esa manera, pero hay que insistir en que la equidad en el gasto, con atención al área social, es clave para disminuir la pobreza y las grandes brechas que separan a ricos y pobres.

El gobernador Héctor Valdez Albizu lo ha dicho: “debemos hacer un esfuerzo para que nuestro modelo económico se reoriente, teniendo al desarrollo integral del ser humano como su eje central, enfatizando la educación, la salud, la vivienda digna y la igualdad de oportunidades para todos”.

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