El ministro de las Fuerzas Armadas advirtió a los “hijos de papi y mami” que son miembros de los institutos armados, que si no están prestos a ponerse al servicio de sus dotaciones, serán separados de las filas militares.
El almirante Sigfrido Pared Pérez dijo que prefiere dirigir una institución con cinco o diez mil miembros menos, pero que todos estén disponibles en sus cuarteles, antes que tener una cantidad mayor y no poder contar con ellos.