Las drogas en el país

Todavía en la década del 90 me mantenía activo con relación al tema de los estupefacientes y el narcotráfico.

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Continuación del artículo: Narcotráfico y guerrillasEl organismo -dijo el Procurador General- no aceptará las torturas y las desapariciones y menos aún las autodefensas, como organismos para combatir a los grupos…

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Continuación del artículo “DNCD”La DNCD no está al margen de la sociedad dominicana ni integrada por ángeles bajados del cielo; son hombres y mujeres, con defectos y virtudes, pero tenemos que reconocer que están…

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Drogas, Santiago y maratónEn la ciudad de Santiago de los Caballeros, un grupo de hombres y mujeres ha integrado un comité con la finalidad de organizar el “Maratón de la Salud, Juventud contra las Drogas”.

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CAPÍTULO VI. Orientación sobre drogas. Aumento del consumo de drigas en el país. Un maratón contra las drogas. El narcotráfico amenaza. Mi solidaridad con Beras Goico. Un conversatorio sobre drogas. En el año 1990, le di seguimiento…

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Prevención y FamiliaEn una conferencia que dictamos hace unos días en la seccional del Colegio de Ingenieros en Santiago, planteamos la situación de la familia en nuestro país, la influencia de los estupefacientes…

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He aquí el contenido íntegro de una carta que remití al comandante de la revolución cubana, presidente de la República de Cuba, Fidel Castro:

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Respuestas recibidasHe aquí algunas de las respuestas que recibí de las sugerencias que hice para la labor educativa: Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra:Santiago de los Caballeros,

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A los directores de periódicosSantiago de los Caballeros, 12 de septiembre del 1989.Señores:Rafael HerreraDirector “Listín Diario”.Adriano TejadaDirector “La Información”

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Una carta para AgripinoSantiago de los Caballeros. 5 de septiembre del 1989.Monseñor Agripino Núñez Collado. Rector Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra  Recinto Universitario.Ciudad.…

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Con motivo de la entrega por decisión judicial de un barco que fue sorprendido con un cargamento de drogas, critiqué esa sentencia diciendo:

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Continuación del artículo¿Está el narcotráfico ganándonos la batalla?Apropósito del desgarrante drama colombiano es propicia la ocasión para reiterar no sólo nuestra militancia en la lucha contra este…

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En su oportunidad hice causa solidaria con los amigos, cuyos hijos habían sido víctimas del vicio de las drogas ilegales. A uno de ellos le escribí:

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Denunciar el fenómeno de las drogas ilegales lo tomé como divisa, por lo que escribí el siguiente artículo relativo al trabajo colectivo y las drogas:

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La Unión Deportiva de Santiago, me invitó a dictar una conferencia con el tema “Delincuencia y Sociedad”; la misma fue expuesta por mí en fecha 24 de abril de 1989. He aquí las conclusiones:Preocupación por nuestros jóvenes

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La Unión Deportiva de Santiago, me invitó a dictar una conferencia con el tema “Delincuencia y Sociedad”; la misma fue expuesta por mí en fecha 24 de abril de 1989. He aquí las conclusiones:Preocupación por nuestros jóvenes

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Ante la difamación e injuria lanzada en mi contra por los aliados del narcotráfico, mi amigo Narciso Isa Conde, escribió:

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Oro y cocaínaAl final del pasado año, 1988, fuimos informados de que grupos de dominicanos vinculados con el narcotráfico estaban haciendo operaciones con oro y cocaína.Luego de recibir la información…

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El narcotráfico contó con aliados que, por dinero, hicieron campaña sucia de todo tipo contra mí y mi familia, pero siempre recibí el apoyo de lo mejor de mi sector profesional, como se destaca:

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El sistema y un escándaloCon motivo del escándalo que se ha producido en el país por la denuncia hecha por el presidente de la Cámara de Diputados en el sentido de que legisladores prestan sus placas oficiales a personas…

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Ante una comisión de diputados ratifiqué lo que sabía con relación con los narcotraficantes y los legisladores:

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Debidamente informado de que el narcotráfico hacía gestiones para que se nombrara un fiscal de su agrado en Santiago, se lo hice saber a la opinión pública:Afirman ‘narcos’ tratan influir nombramiento fiscal de Santiago

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No me limité a expresar mi disgusto por la salida del licenciado Castellanos Estrella, de la fiscalía de Santiago, sino que precisé que él no había recibido el apoyo que necesitaba para enfrentar el narcotráfico.  Por tal razón dije:

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Continuación de:Carta a Víctor José CastellanosD.-El narcotraficante está ganando la batalla en el terreno policial. No escapa a tu inteligencia que el nivel de credibilidad de la Policía…

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Continuación de:Carta al secretario de las FF.AA.Cuando lanzamos críticas a una persona, civil o militar, no es con el ánimo de que se extiendan a la institución u organismo de que forma…

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La situación amarga que viven hoy muchos hogares dominicanos, la comencé a denunciar desde hace varios años, partiendo de la experiencia que viví en el seno de muchas familias cuyos hijos fueron víctimas del vicio de las drogas, lo que me impulsó&#8

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He aquí el contenido íntegro de otra carta que remitimos al licenciado Víctor José Castellanos Estrella, procurador fiscal de Santiago:

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Escribir artículos y dictar conferencias fueron  labores que en un principio dieron sus frutos para la edificación de la opinión pública. He aquí algunos escritos que hice para fijar en la conciencia pública el fenómeno de las drogas y lo…

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Continuación del artículoPreguntas en una charla en LiceyEn el plano nacional, aunque no se han hecho estudios profundos con relación al uso de drogas ilegales, un  trabajo preparado el año…

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Al fiscal de SantiagoHe aquí el contenido íntegro de una carta que remití al procurador fiscal de Santiago.“Estimado Víctor:Por órgano de los diferentes medios  de comunicación del país…

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Las denuncias que formulaba respondían a mi convicción de que nuestro pueblo estaba en presencia  del fenómeno de las drogas y la incidencia del narcotráfico. Poco a poco el tiempo me fue dando la razón, y así lo escribí: Drogas,…

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Araíz de la puesta en vigencia de la Ley 50-88, para sancionar la producción, consumo y tráfico de estupefacientes, surgieron distintas opiniones en torno a ese estatuto legal. Al respecto escribí:

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La labor de orientación con relación al tema de las drogas y el narcotráfico la llevé a cabo no solamente en Santiago y otros pueblos del Cibao, sino también en otras regiones del país, como se evidencia por la charla que dicté en Barahona, de&#823

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Mientras mis adversarios políticos y los narcotraficantes y sus aliados me amenazaban, reiteraba mis denuncias en su contra:

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Creía, y todavía hoy sigo con la creencia, que  deben ser creados tribunales especiales para conocer todo lo relacionado con las drogas ilegales, y así lo expuse en su oportunidad:

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Una investigación procedePara que la comunidad de Santiago esté tranquila, y no se sigan haciendo comentarios de toda índole, se impone que se aclare la situación que se ha presentado con la falsificación de certificados…

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La influencia del narcotráfico en los organismos del Estado dominicano viene desde lejos, como lo revela el escrito que publiqué dando a conocer la forma como se ocultaban informaciones vinculadas con los narcotraficantes y sus operaciones ilícitas.&#8

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Los profesionales que elaboraron el trabajo de investigación, al cual y hicimos  referencia, con relación a los adolescentes y el uso de  sustancias narcotizantes en nuestro país, hicieron el siguiente análisis:

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Debo reconocer y recordar que en todo momento, con motivo de mis actividades contra el fenómeno de las drogas narcóticas, recibí…

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Refiriéndose al tema relacionado con mi denuncia, y los funcionarios del Palacio Nacional que favorecían al narcotráfico, el doctor Marino Vinicio Castillo,en esa época, le declaró a la prensa lo siguiente:

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La presencia del narcotráfico, su influencia en los organismos del Estado dominicano, comenzó a ser de notoriedad en la década…

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No tenía la menor duda de que el presidente Balaguer y el general Imbert estaban identificados en la lucha contra el narcotráfico. Por…

Las drogas en el país

Los fenómenos sociales tienen que ser combatidos con el accionar de los mejores hombres y mujeres de la sociedad, sin importar posición…

Las drogas en el país

No podía perder ninguna oportunidad para denunciar la penetración del narcotráfico y su influencia. Los medios de comunicación,…

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Trasciende investigaciones amenazas contra hijos de Negro Veras están avanzadas Están adelantadas las investigaciones que se realizan…

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El sentir solidario, la identificación del pueblo con los que sinceramente luchan por las causas justas, ha sido recibido por los que tienen…

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El mismo periódico (El Nacional), en la misma fecha que publicó la declaración de Velázquez Mainardi, también reseñó…

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Para salirle al paso a una campaña que habían hecho algunos grupos ligados al narcotráfico para indisponerme con los jueces y…

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Contra mí y mi familia se lanzó todo el peso del narcotráfico, hasta  el punto de que el gobierno me invitó a salir…

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Desde un principio, mi comunicación permanente con sectores muy diversos de la ciudad de Santiago de los Caballeros, fundamentalmente de los…

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Doctor, ¿por qué fumo marihuana?No puede usted desconocer que la juventud siempre vive llena de esperanzas; que…

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Aquí hay muchos profesionales que diariamente van a los estrados a defender drogadictos y traficantes y eso no quiere decir, en modo alguno,…

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Al leer el contenido de la charla a que hice referencia anteriormente, se debe tomar en consideración la fecha de la misma y las observaciones…

Las drogas en el país

IntroducciónLos fenómenos sociales no hacen acto de presencia de un día para otro; ellos nacen y…

Todavía en la década del 90 me mantenía activo con relación al tema de los estupefacientes y el narcotráfico. Por mi incidencia en el asunto de las drogas, y conociendo mi actitud ante ese fenómeno, fui invitado por la Dirección Nacional de Control de Drogas a dictar una conferencia en la ciudad capital. Para esta época al frente del organismo estaba el contraalmirante Julio César Ventura Bayonet. (183)

Ante la preocupación que estaba generando en el seno de la sociedad dominicana el consumo y tráfico de estupefacientes, y en interés de afianzar la campaña de orientación por los medios de comunicación, siempre hice hincapié en la necesidad de que desde el Estado se aportaran recursos para favorecer instituciones encargadas del tratamiento de los adictos. En ese sentido escribí:

Narcotráfico, Influencia, Dinero

No todas las fortunas que hoy hay en el país son producto del narcotráfico, pero sí las hay que están selladas de marihuana y cocaína; las medidas legales estarían dirigidas  no a los patrimonios sanos, sino a los sucios, que hoy son muchos en el país. Todo aquello que puede ser adquirido con dinero está al alcance de los que tienen amplios recursos económicos y están dispuestos a invertirlos para sacar algún provecho para sus fines ilícitos y los narcotraficantes no tienen limitación alguna para poner dinero en manos de los que no tienen ninguna clase de escrúpulos para vender su conciencia y hasta su propia vida.

Mientras Hogares Crea, Casa Abierta y otras instituciones que luchan contra la drogadicción y el crimen del narcotráfico no disponen de dinero para sus actividades, los narcotraficantes hacen gárgaras con los millones de pesos que tienen invertidos y que, con suma facilidad, se puede determinar su origen espurio.

Mientra el narcotráfico disponga de la mercancía más apreciada dentro del ordenamiento social actual, el dinero, seguirá ejerciendo influencia en el país y su desarrollo no se va a detener por más lamentaciones que se expresen desde las alturas del poder. (184)

El Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores –CODIA-. Me invitó a dictar una conferencia en la que abordara el tema de “Las Drogas, La Sociedad y Estabilidad Familiar”. En mi intervención dije, entre otras cosas:
“En la medida que la familia se mantiene unida, se fortalece la sociedad en general; de igual manera, el relajamiento de los vínculos familiares es expresión de degeneración, decadencia y descomposición social”.

 “Si de la familia se apodera el relajamiento, se orienta directamente hacia la destrucción; no puede existir en el seno de la familia una actitud de relajamiento de los vínculos de las relaciones de la mujer y el hombre, de los hijos y de los padres”.

“Si la familia ha permanecido como un factor activo de la sociedad, pasando de una etapa inferior a una superior, es porque ha avanzado; su avance se debe no a los logros económicos, sino a los afectivos, a los sentimientos de cariño que genera el lazo familiar, el amor, la solidaridad, la confianza mutua se expresan, real y efectivamente, en la comunidad familiar”. (185)
 
A manera de conclusiones

Es muy posible que a ningún habitante de la República Dominicana le pasara por la mente en 1974, que nuestro país llegaría a convertirse en lo que es hoy, centro de cruce de tráfico internacional de drogas ilegales, y escenario para los narcotraficantes dirimir sus conflictos, por asuntos propios de sus negocios ilícitos, por medio del crimen.

Lo que sí consta es que ya desde la década del sesenta del siglo pasado, había advertido que aquí estaba en pleno desarrollo el tráfico y consumo de estupefacientes, y que el narcotráfico estaba tomando cuerpo penetrando las instituciones del Estado.

El presente trabajo solamente puede apreciarse en su justo valor si se toman en cuenta las fechas de las distintas fuentes que me han servido de base para elaborarlo y fundamentarlo.

Por tanto, invito a las personas que han leído este escrito a que examinen la fecha de cada charla, conferencia, artículo o declaración pública que hice con relación al fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico.

Debo aclarar que este trabajo lo he organizado y publicado pensando en mis nietos y nietas, para que ellos puedan apreciar la posición, la actitud de su abuelo ante un fenómeno que, como las drogas narcótica y el narcotráfico, hoy alarma a una gran parte de la humanidad.)

FUENTES:
(1) El Nacional. 17 de abril de 1974.  (2) El Nacional de Ahora. 22 de noviembre de 1974. (3) El Nacional de Ahora. 30 de noviembre de 1974. (4) El Nacional de Ahora 18 de diciembre de 1974. (5) El Nacional de Ahora. 15 de diciembre de 1974 (6) El Nacional de Ahora. 25 de marzo de 1975.(7) Listín Diario. 8 de enero de 1988. (8) El Sol y La Información. (9) El Nacional 11 y 12 de enero 1988. (10) Última Hora. 12 de enero de 1988. (11) Diario Libre. 12 de enero de 1988. (12) El Nuevo Diario. 13 de enero de 1988. (13) La Información. 15 de enero de 1989. (14) La Información. 16 de enero de 1988. (15) El Nacional de Ahora. 18 de enero de 1988. (16)  La Noticia. 18 de enero 1988.(17)  La Información. 19 de enero 1988.(18) El Nuevo Diario. 19 de enero 1988.(19) Última Hora. 19 de enero 1988.(20) El Nacional de Ahora. 19 de enero de 1988.(21)  El Nacional. 20 de enero 1988.(22) Revista Hablan Los Comunistas. 20 de enero de 1988.(23) El Nuevo Diario. 21 de enero de 1988.(24) El Nuevo Diario. 21 de enero 1988.(25) El Nacional 21 de enero de 1988.(26) El Nacional. 22 de enero 1988.(27) La Información. 23 de enero 1988.(28) El Nacional. 23 de enero 1988.(29) El Nacional. 24 de enero 1988.(30) El Nacional. 25 de enero de 1988.(31) La Información. 26 de enero de 1988.(32)  La Noticia. 26 de enero de 1988.(33) El Nuevo Diario. 29 de enero de 1988.(34) El Nacional. 29 de enero de 1988.(35) La Información. 30 de enero de 1988.(36) El Nacional. 30 de enero de 1988.(37) El Nacional. 31 de enero de 1988.(38) El Nacional. 31 de enero de 1988.(39) La Noticia. 2 de febrero de 1988.(40) El Nacional. 5 de febrero de 1988.(41) El Nuevo Diario. 9 de febrero 1988.(42) El Nuevo Diario. 17 de febrero 2011.(43) La Información. 17 de febrero de 1988.(44) La Información. 18 de febrero de 1988.(45) El Nacional. 19 de febrero de 1988.(46) El Nacional. 19 de febrero de 1988.(47) El Nacional. 19 de febrero de 1988.(48) El Nacional. 20 de febrero de 1988.(49) El Nacional. 20 de febrero de 1988.(50) Listín Diario. 23 de febrero de 1988.(51) El Nacional. 27 de febrero de 1988.(52) El Nuevo Diario. 15 de abril de 1988.(53) La Información. 16 de abril de 1988.(54) La Noticia. 16 de abril de 1988.(55) La Información. 18 de abril de 1988.(56) La Información. 18 de abril de 1988.(57) El Nacional. 18 de abril de 1988.(58) La Información. 19 de abril de 1988.(59) El Nuevo Diario. 20 de abril de 1988.(60) El Nuevo Diario. 21 de abril de 1988.(61) La Información. 20 de abril de 1988.(62) El Nacional. 24 de abril de 1988.(63) Última Hora. 25 de abril de 1988.(64) La Información. 26 de abril de 1988.(65) Periódico Hablan los Comunistas No.471.(66)  Periódico Hablan los Comunistas No.471.(67) El Nacional. 22 de mayo de 1988.(68) El Nacional. 24 de mayo de 1988.(69) El Nacional. 22 de mayo de 1988.(70) El Nacional. 2 de junio de 1988.(71) El Nacional. 4 de junio de 1988.(72) El Nacional. 10 de junio de 1988.(73) El Nacional. 11 de junio de 1988.(74) El Nacional. 12 de junio de 1988.(75) El Nacional. 16 de junio de 1988.(76) El Nacional. 19 de junio de 1988.(77) La Información. 21 de junio de 1988.(78) La Información. 24 de junio de 1988.(79) El Nacional. 30 de junio de 1988.(80) El Nuevo Diario. 15 de julio de 1988.(81) El Nacional. 15 de julio de 1988.(82) El nacional. 17 de julio de 1988.(83) El Nuevo Diario. 18 de julio de 1988.(84) El Nacional. 21 de julio de 1988.(85) El Nacional. 07 de agosto de 1988.(86) El Nacional. 16 de agosto de 1988.(87) El Nacional. 20 de agosto de 1988.(88) El Nacional. 11 de septiembre de 1988.(89) El Nacional. 15 de septiembre de 1988.(90) El Nacional. 18 de septiembre de 1988.(91) Última Hora. 21 de octubre de 1988.(92) Hoy. 22 de octubre de 1988.(93) El Nacional. 28 de octubre de 1988.(94) El Nacional. 5 de noviembre de 1988.(95) El Nacional. 7 de noviembre de 1988.(96) El Nuevo Diario. 11 de noviembre de 1988.(97) El Nacional. 12 de noviembre de 1988.(98) Última Hora. El Nuevo Diario. 12 de noviembre de 1988.(99) El Nacional. 14 de noviembre de 1988.(100) El Nacional. 17 de noviembre de 1988.(101) El Nacional. 20 de noviembre de 1988.(102) El Nacional. 24 de noviembre de 1988.(103) El Nacional. 4 de diciembre de 1988.(104) El Nacional. 10 de diciembre de 1988.(105) El Nacional. 1ro. de enero de 1989.(106) El Nacional. 28 de enero de 1989.(107) Nuevo Diario. 31 de enero de 1989.(108) La Información. 1ro. de febrero de 1989.(109) Diario Libre. 9 de febrero de 1989.(110) El Nuevo Diario. 16 de febrero de 1989.(111) El Nacional. 24 de febrero de 1989.(112) La Información. 24 de febrero de 1989.(113) La Información. 27 de febrero de 1989.(114) El Nacional. 9 de marzo de 1989.(115) El Nuevo Diario. 11 de marzo de 1989.(116) Última Hora. 13 de marzo de 1989.(117) La Información. 14 de marzo de 1989.(118) El Sol. 16 de marzo de 1989.(119) El Nacional. 16 de marzo de 1989.(120) El Nacional. 18 de marzo de 1989.(121) El Nacional. 26 de marzo de 1989.(122) El Nacional. 28 de marzo de 1989.(123) La Información. 6 de abril de 1989.(124) El Nuevo Diario. 7 de abril de 1989.(125) La Información. 7 de abril de 1989.(126) El Nacional. 9 de abril de 1989.(127) El Nacional. 16 de abril de 1989.(128) El Nacional. 21 de abril de 1989. (129) El Nacional. 23 de abril de 1989.(130) El Nacional. 23 de abril de 1989.(131) El Nacional. 30 de abril de 1989.(132) Listín Diario. 3 de mayo de 1989.(133) La Información. 4 de mayo de 1989.(134) El Nuevo Diario. 5 de mayo de 1989.(135) El Nacional. 12 de mayo de 1989.(136) El Nacional. 1ro. de junio de 1989.(137) El Nacional. 15 de junio de 1989.(138) El Nacional. 8 de julio de 1987.(139) El Nuevo Diario. 14 de julio de 1989.(140) La Información. 9 de agosto de 1989.(141) El Nacional. 20 de agosto de 1989.(142) El Nuevo Diario. 21 de agosto de 1989.(143) El Nuevo Diario. 21 de agosto de 1989.(144) La Información. 25 de agosto de 1989.(145) El Nacional. 28 de agosto de 1989.(146) El Nuevo Diario. 31 de agosto de 1989. (147) La Información. 4 de septiembre de 1989.(148) El Nuevo Diario. 8 de septiembre de 1989.(149) El Nacional. 13 de septiembre de 1989. (150) El Nuevo Diario. 08 de septiembre de 1989. (151) El Nacional. 17 de septiembre de 1989.(152) Archivo personal Dr. Veras. (153) La Información.(154)  14 de septiembre de 1989.(155)  El Siglo. 15 de septiembre de 1989.(156) Archivo personal doctor Veras.(157) Periódico El Nuevo Diario. 12 de septiembre de 1989.(158) Archivo personal del Dr. Veras.(159) Archivo personal del Dr. Veras.(160) El Nacional. 19 de septiembre de 1989.(161) Listín Diario. 28 de octubre de 1989.(162) La Información. 1ro. de noviembre de 1989. (163) El Nacional. 19 de noviembre de 1989.(164) La Información. 21 de noviembre de 1989.(165) El Nacional. 25 de noviembre de 1989.(166) El Nacional. 8 de diciembre de 1989.(167) El Nacional. 10 de diciembre de 1989.(168) El Nacional. 15 de diciembre de 1989.(169) La Información. 13 de enero de 1990.(170) El Nacional. 2 de enero de 1990.(171) El Nuevo Diario. 23 de enero de 1990.(172) El Nuevo Diario. 19 de mayo de 1990.(173) El Nuevo Diario. 5 de julio de 1990.(174) El Nacional. 22 de septiembre de 1990.(175) El Nuevo Diario. 1990.(176) La Información. 7 de mayo de 1992.(177) El Nacional. 4 de octubre de 1990.(178) El Nacional. 25 de octubre de 1990.(179) El Nacional. 23 de mayo de 1992.(180) El Nacional. 14 de noviembre de 1992.(181) El Nacional. 1 de abril de 1995.(182) El Nacional. 24 de junio de 1995.(183) Listín Diario. 26 de febrero de 1997.(184) El Nacional. 21 de septiembre de 2002.(185) La Información. 5 de abril de 2005.

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Continuación del artículo: Narcotráfico y guerrillas

El organismo -dijo el Procurador General- no aceptará las torturas y las desapariciones y menos aún las autodefensas, como organismos para combatir a los grupos alzados. Si para acabar con la subversión es preciso recurrir a estos métodos, el país primero debe tomar el toro por los cachos y enfrentar el problema, planteando ante el Congreso de la República nuevas normas que se ajusten a esos intereses.

Tenemos la creencia de que la sociedad colombiana luce hoy desarmada y confundida. Se quiere enfrentar con las mismas armas a los narcotraficantes y a los que luchan, desde su criterio ideológico, por transformaciones sociales profundas. No es correcto aplicarle la misma ley a un terrorista vinculado con el narcotráfico que a un hombre o mujer activista del movimiento guerrillero. En Colombia la Ley de Seguridad Pública sanciona por igual a los delincuentes de narcotráfico y a los guerrilleros.

Aunque el Procurador General dice en su carta a los máximos representantes del Poder Legislativo que no aceptará las torturas, a los dominicanos que guardan prisión en Bogotá se les aplicaron todas clases de torturas, físicas y morales, al momento de su detención.

Y la influencia militar en el seno del servicio judicial es tan notoria que el representante del ministerio público que ordenó la puesta en libertad de tres de los jóvenes dominicanos fue cancelado el mismo día y en su lugar designado otro que revocó el auto. Así de sencilla es la situación en Colombia.

Los fenómenos sociales no se solucionan con medidas odiosas y despóticas. El hambre, la miseria, el desempleo, el analfabetismo, la corrupción, etc., son fenómenos propios de sistemas sociales atrasados, con estructuras rígidas, que no satisfacen las necesidades prioritarias del ser humano.

Para enfrentar el narcotráfico no bastan las medidas policiales y legales; se requiere el concurso de la ciudadanía sensata, de los hombres y mujeres sensibles del país. A los narcotraficantes hay que tratarlos como lo que son: delincuentes, criminales. El movimiento guerrillero y popular, tiene otra fisonomía, otra motivación en su lucha y, por tanto, requiere de un tratamiento totalmente diferente. (180).

Porque sabía quiénes se oponían al organismo encargado de perseguir a los vinculados con el consumo de estupefacientes y el narcotráfico, dije:

«Para enfrentar el narco no bastan las medidas policiales y legales; se requiere de la ciudadanía sensata, de los hombres y mujeres sensibles del país».

Dirección Nacional de Control de Drogas

En los últimos tiempos hemos observado que la Dirección Nacional de Control de Drogas, es objeto de ataques cuando uno de sus miembros es señalado de haber participado en una acción represiva. De inmediato se mueve toda una maquinaria publicitaria para dar la impresión, ante el pueblo, de que ese organismo carece de calidad para actuar en el seno de la sociedad dominicana.

No escapa a la inteligencia de los dominicanos que la Dirección Nacional de Control de Drogas es el órgano llamado a investigar, descubrir, reunir pruebas y someter a la acción de la justicia ordinaria a todos los que se colocan al margen de la ley que sanciona la producción, consumo, tráfico y distribución de estupefacientes en el país.

Por su función, por los fines para los cuales fue creada, la Dirección Nacional de Control de Drogas, tiene como adversarios a los que están involucrados en la producción, consumo y distribución de drogas narcóticas.

Todo un bloque es controlado por el narcotráfico: Escritores, poetas, artistas, abogados, médicos, ingenieros, agricultores, chóferes, policías, jueces, fiscales, altos funcionarios, “tigres”, lumpen, en fin, los narcotraficantes tienen a su alcance lo que en nuestro medio puede ser objeto de venta y cambiado por dinero. Ante tal situación la opinión pública nacional debe tomar con muchas reservas las denuncias y acusaciones que se hacen contra la Dirección Nacional de Control de Drogas y sus principales miembros.

Siempre nos hemos opuesto a la acción odiosa, represiva y despótica, sin importar el organismo que la lleve a cabo, pero no nos dejamos arrastrar de los que, con la finalidad de restarle calidad a los que persiguen, a los que producen, distribuyen, consumen y trafican con drogas, quieren presentarlos como bestias.

En la Dirección Nacional de Control de Drogas, en verdad, hay miembros que se colocan al margen de la ley en sus actuaciones; lo mismo ocurre en todo organismo integrado por seres humanos. Pero el comportamiento de un hombre en particular no puede servir para involucrar a la institución entera. En la Dirección hay oficiales que han hecho muchos aportes a la lucha contra el narcotráfico y deben contar con la solidaridad, el concurso y respeto de los dominicanos honestos y responsables. (181).

Siempre he creído que para enfrentar un fenómeno social no bastan medidas legales y represivas, se imponen acciones comunes, por tal motivo expuse las siguientes ideas:

Crisis y drogadicción

En el curso de un conversatorio al que fuimos invitados por un grupo de profesores secundarios de Santiago, nos correspondió abordar el tema relacionado con la crisis de la sociedad dominicana y la drogadicción, y dijimos:
La realidad que nos presenta el organismo familiar, el desarrollo de los niños y la formación del hijo; el papel de la escuela, etc., nos obligan a pensar que lejos de ser un factor el que incide en el desarrollo de la drogadicción, son varios y de naturaleza diferente.

La sociedad nuestra tiene, necesariamente, que cambiar. De mantenerse ella como está organizada actualmente, resulta imposible eliminar el fenómeno de la producción, distribución y consumo de estupefacientes. Si vemos el fenómeno de las drogas como de naturaleza social, hay que comenzar sanando el orden social. Si la sociedad está enferma resulta evidente que va a generar enfermedades, y una de esas enfermedades es la drogadicción.

Los padres, las madres y los hijos; la escuela y los profesores; las universidades y los que en ellas imparten cátedras; las instituciones del Estado, en fin, todo el conglomerado dominicano, aunque se define en forma aislada, representa una parte de un todo, de la sociedad dominicana, y, lamentablemente, la sociedad no tiene el don de escoger solamente los fenómenos positivos sino que también asimila los negativos.

Y uno de esos fenómenos negativos es la drogadicción. La sociedad dominicana está pagando el costo social de su crisis de fondo, no coyuntural. Los costos sociales tienen que ser enfrentados de la misma forma que los beneficios, aunque estos últimos sólo benefician a un sector de la sociedad.

No se puede decir, de una manera seria y responsable, que el fenómeno de la drogadicción es responsabilidad de los padres legítimos o legales ni de los hijos nacidos al margen del matrimonio; querer hacer recaer la responsabilidad de un solo lado es interpretar en forma caprichosa y antojadiza la realidad dominicana.

La familia, la escuela, el Estado, en fin, todas las instituciones dominicanas, civiles y militares, unas más que otras, tienen responsabilidad en la crisis que padece la sociedad dominicana y que se extiende hasta la enfermedad de la drogadicción.

La organización económica, política, educacional, policial, militar y familiar está hoy afectada por una crisis profunda; la extensión de la crisis llega a todas las familias, sin importar origen social, económico y político.

Cuando decimos que el Servicio Judicial está en crisis, lo que expresamos es una situación real, objetiva, viva. No es solamente el Servicio Judicial el que manifiesta crisis; el Servicio de Educación, el Servicio de Salud; el Servicio Policial, también revelan crisis profunda.

Si nos apartamos de las instituciones que integran el Estado dominicano y lanzamos una mirada hacia la actividad comercial, al mundo de los negocios, al mundo empresarial, también ahí observamos crisis. No se puede decir, en honor a la verdad, que el comerciante, el industrial y el banquero de hoy es el mismo de ayer; la crisis ha arropado a toda la sociedad. No hay que excluir nada; ni a las instituciones del Estado, ni a las de carácter privado, ni a las vinculadas con el comercio ni a las que están relacionadas con las profesiones liberales. (182).

FUENTES:
(180) El Nacional. 14 de noviembre 1992.
(181) El Nacional. 1 de abril 1995.
(182) El Nacional. 24 de junio 1995.

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Continuación del artículo “DNCD”

La DNCD no está al margen de la sociedad dominicana ni integrada por ángeles bajados del cielo; son hombres y mujeres, con defectos y virtudes, pero tenemos que reconocer que están ejecutando una tarea sumamente delicada, difícil y enfrentados a grupos que, como los narcotraficantes, tienen toda clase de recursos. El narcotráfico no es un poder, es un imperio; tiene aviones, helicópteros, barcos, armas de diferentes calibres, poetas, artistas, periodistas, abogados, en sí, con su poder económico el narcotráfico tiene posibilidad de cambiar hasta la mentalidad del ser humano.

El día que la DNCD no cumpla su función, se corrompa, haga cosas contra el pueblo, seremos los primeros en denunciarlo; pero mientras se enfrente con seriedad al narcotráfico, cuenta con nuestro respaldo que debe ser el mismo que le brinden todos los dominicanos que tienen la esperanza de que aquí algún día se pueda vivir en una sociedad decente, sana, sin delincuentes tipo narcotráfico y así no vamos a tener necesidad de disponer de un organismo que, como la DNCD, hoy tiene que hacer el papel represivo contra el narcotráfico. (177).

Diferentes instituciones y personas físicas organizaron en Santiago una actividad con la finalidad de despertar en la comunidad la lucha contra las drogas ilegales. He aquí lo que escribí con respecto al maratón:

Éxito del maratón

Ante el drama que vive el país, expresado en el hambre, la miseria, el desempleo, la insalubridad, ausencia de buen servicio en el transporte público y falta de agua potable; apagones, carestía de los artículos de primera necesidad, desabastecimiento, pérdida de poder adquisitivo de la moneda nacional, represión selectiva y colectiva, crímenes con estampa política, desconocimiento de las decisiones judiciales por las autoridades encargadas de ejecutarlas, en fin, ante la violación constante de los derechos y las libertades públicas, por encima de todos estos males, el pueblo dominicano sigue demostrando su gran sensibilidad, su preocupación por construir una sociedad nueva, renovada.

El pasado domingo, el pueblo de Santiago comprendiendo que el fenómeno de la drogadicción forma parte también de los problemas que afectan a todos los dominicanos, se dio cita en el Maratón de la Salud, Juventud contra las Drogas.

Hombres y mujeres del pueblo, empresarios, comerciantes, estudiantes, profesionales de diferentes áreas, jóvenes, adultos, niños, ancianos, minusválidos, en fin, la comunidad de Santiago dijo presente en una actividad sin precedentes en el país en lo que se refiere a su naturaleza y carácter masivo.

Desde las primeras horas de la mañana comenzaron a llegar, a la cabeza del Puente Hermanos Patiño, civiles y militares, deportistas, etc., con el fin de participar en el maratón. Al momento que se entonó el himno nacional y se hizo el disparo de salida, hasta llegar a la meta ubicada en la parte frontal del Monumento a los Héroes de la Restauración, se pudo ver a cientos y cientos de personas, unas corriendo, otras trotando y caminando.

De los participantes, unos cantaban, otros palmoteaban consignas contra el vicio de las drogas, mientras que miles y miles de santiaguenses desde sus casas, o parados en las aceras, expresaban su identificación con el maratón.  Un hecho sirve para destacar el éxito del primer maratón contra las drogas, “Ruta de la Salud”. Un joven, con muletas, hizo el recorrido completo; con sus muletas y una pierna recorrió más de ocho kilómetros. Su ejemplo, su coraje, firmeza y decisión de llegar a la meta, vale todo el maratón y va a servir para que todos los años Santiago realice el Maratón de la Salud, Juventud contra las drogas.

Los que dedicaron horas y horas en la organización del maratón, los que hicieron sinceros aportes de toda índole, los que prestaron su concurso en el orden material y espiritual, el domingo vieron materializado su esfuerzo.
Santiago, se movilizó contra el fenómeno de las drogas, dijo no al narcotráfico y demostró que, por encima del desastre nacional en lo económico y social, todavía quedan hombres y mujeres que creen en que se puede construir la sociedad del futuro, la sociedad a que aspira vivir la mayoría de los dominicanos.

El Comité Organizador, la Asociación de Atletismo de Santiago, la Dirección Nacional de Control de Drogas, el Comando de la Policía Nacional, Región Norte, la Unión Deportiva de Santiago, así como otras instituciones clubísticas, deportivas, religiosas y educativas; la Gobernación Provincial y el Ayuntamiento de Santiago y entidades cívicas, populares y culturales que participaron en la organización del maratón deben sentirse satisfechas por el éxito de la actividad. (178).

No había que ser muy inteligente para darse cuenta la influencia que comenzaba a ejercer el narcotráfico en el seno de la sociedad dominicana; en tiempo oportuno advertí esa situación, y expuse mi criterio así:

Poder y narcotráfico

El día sábado 9 de mayo en curso, fuimos invitados a participar en un programa de televisión y el entrevistador nos preguntó si creíamos que el narcotráfico había tomado fuerza en el país en los últimos años.

Les respondimos que sí, que estábamos plenamente convencidos del gran poder, de la influencia que tiene el narcotráfico en las diferentes áreas de nuestra sociedad. También le dijimos que en todos los países donde el narcotráfico adquiere poder es porque tiene el apoyo oficial, que sin el apoyo del poder político el narcotráfico no puede desarrollarse, y que en nuestro país si los narcotraficantes han ampliado su radio de acción es porque cuentan con apoyo del poder.

El narcotráfico-le seguimos explicando al periodista- ha dejado de ser un poder para convertirse en un imperio. El tiene artistas, abogados, médicos, ingenieros, periodistas, poetas, aviones barcos y aliados en el poder político.

Si hace veinte años los narcotraficantes carecían de influencia y poder, hoy no se puede decir lo mismo; ya ellos han afincado su influencia en áreas de poder, y el poder es el poder, y más cuando el poder es el resultado de la influencia del dinero.

El dinero es la mercancía más apreciada en las sociedades donde los narcotraficantes se han hecho fuertes. Con el dinero se consigue desde el poder político hasta la sonrisa de los adversarios más encarnizados.

No hay un organismo del Estado donde el narcotráfico no haya demostrado tener poder, influencia y voz. El que diga lo contrario pretende engañarse, confundir al pueblo, es un estúpido, loco o informado por un sinvergüenza.

Y para enfrentar el narcotráfico no puede un país estar supeditado a lo que haga o no haga un organismo determinado. La Dirección Nacional de Control de Drogas, hasta ahora, ha cumplido con sus funciones en represión, pero ella no tiene la posibilidad de hacerlo todo.

Si sigue todo como hasta ahora, el narcotráfico terminará arropando a la sociedad entera. Se impone un amplio movimiento de opinión pública, se necesita una voluntad política que enfrente el narcotráfico con firmeza, se necesita una acción de la familia, a nivel de escuelas, en fin, todas las fuerzas sanas de la sociedad dominicana tienen que ponerse en tensión. El fenómeno de las drogas no se elimina con acciones limitadas y aisladas; no, se necesita un trabajo conjunto, de equipo y bien coordinado, donde se combine lo preventivo, educativo y represivo, pero si el Estado no interviene en este trabajo cualquier acción resulta frustratoria. Esa es la verdad. (179).

Para que la sociedad dominicana comprendiera la influencia del narcotráfico en otros lugares de América Latina y el Caribe, expuse:

Narcotráfico y guerrillas

El pueblo colombiano vive hoy una etapa de terror. Allá no hay seguridad personal para nadie; cada ciudadano está expuesto a que en cualquier momento le desprendan la cabeza. Y lo lamentable del caso es que no existe coherencia con respecto a la forma de enfrentar a los terroristas; en el mismo seno del Estado colombiano, entre legisladores, políticos y autoridades judiciales hay contradicción para llevar a cabo acciones legales contra los delincuentes.

Recientemente salió a la luz pública en Colombia la diferencia existente entre el Procurador General de la Nación, Carlos Gustavo Arrieta, y los presidentes del Senado de la República y de la Cámara de Representantes de Colombia.

El Procurador General, les remitió una carta a los congresistas donde les decía, entre otras cosas, “nadie quiere debatir abiertamente las reglas del juego para dar paso a una mano dura contra la guerrilla y, mientras de un lado dicen que se debe soltar la rienda a las Fuerzas Armadas, también abogan por el respeto a las normas fundamentales”. (180).

FUENTES:
(177) El Nacional. 4 de octubre 1990.
(178) El Nacional. 25 de octubre 1990.
(179) El Nacional. 23 de mayo 1992.
(180) El Nacional. 14 de noviembre 1992.
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Drogas, Santiago y maratón

En la ciudad de Santiago de los Caballeros, un grupo de hombres y mujeres ha integrado un comité con la finalidad de organizar el “Maratón de la Salud, Juventud contra las Drogas”.

El principal objetivo del Comité al organizar el maratón es llamar la atención de los habitantes de Santiago, y de todo el país, con relación a la necesidad de estar alerta ante el fenómeno de las drogas, la penetración en el país de los estupefacientes y un llamado a la meditación para que los dominicanos interesados en el futuro positivo del país se identifiquen con la labor educativa de prevención contra el uso de los estupefacientes.

Hombres y mujeres de la prensa, empresarios, profesionales del derecho y de otras áreas han estado trabajando, conjuntamente con personas e instituciones vinculadas con diferentes actividades deportivas, para que el maratón sea todo un éxito. La actividad cuenta, además, con el concurso y la colaboración del Departamento Nacional de Control de Drogas y el Comando de la Regional Norte de la Policía Nacional.

El día domingo, siete de octubre próximo, a las nueve horas de la mañana, es la fecha escogida por el Comité Organizador, para la realización del evento, y en el mismo participarán experimentados corredores de campo y pista, grupos familiares y estudiantes en caminatas a paso corto. (174).

Ante informaciones que recibí de los servicios de inteligencia del Estado, de un atentado contra mi vida, visité la Dirección de Control de Drogas, a exponer la situación. La prensa hizo la siguiente reseña de mi visita:

DNCD se reúne con Negro Veras para tratar sobre protección personal y campaña drogas.

Miembros de los organismos del Estado relacionados con la prevención y el control del narcotráfico sostuvieron una reunión con el doctor Ramón Antonio Veras, en la cual se habría tratado la protección del abogado santiagués y su familia así como la campaña que éste lleva a cabo en contra de ese mal y la campaña educativa que ha diseñado.

De acuerdo con lo informado a El Nuevo Diario, el encuentro se produjo en la Dirección Nacional de Control de Drogas, ubicado en la avenida Máximo Gómez, de esta capital.

Siempre con lo señalado, el abogado santiagués llegó alrededor de las diez de la mañana al lugar acompañado de varios agentes vestidos de civil, portando armas largas, y de inmediato fue llevado ante el coronel Rafael Guerrero Peralta, quien se encontraba junto a otros integrantes del Consejo Nacional de Drogas y la Junta Directiva.

Se indicó que la reunión tuvo el propósito de discutir en torno a informaciones que tendrían esos organismos del Estado relacionadas con la seguridad personal del doctor Veras y su familia, que en los últimos meses han sido amenazadas por grupos vinculados con narcotráfico.

En ese encuentro también se discutieron, siempre según los informes, la campaña que a nivel nacional lleva a cabo el abogado santiagués para enfrentar el narcotráfico, así como las medidas de prevención que deben adoptarse.

Esa reunión fue confirmada por una vía telefónica por el doctor Negro Veras, quien manifestó que no tiene ningún problema en reunirse con cualquiera persona o institución, y que además está obligado a preservar la seguridad de su familia. (175).

En vista de que Freddy Beras Goico, estaba siendo amenazado por el narcotráfico, le escribí unas cortas líneas, y le dije:

Negro Veras respalda a Freddy Beras Goico

Respecto al caso tuyo ahora, quiero traerte a la memoria lo que ocurrió recientemente. Como tú recordarás, el martes 24 de marzo, próximo pasado, tú y yo nos encontramos, por coincidencia, en un lugar en la ciudad capital donde se discute a alto nivel la lucha contra el narcotráfico en el país y en el plano internacional. Cuando abandoné el lugar, luego de tu partida, observé que un vehículo ocupado por tres personas, con cara de maleantes, le dio seguimiento al que me transportaba; aproveché un momento, detuve mi vehículo en forma inesperada y los que me seguían se desviaron de mi ruta. Al otro día, en Santiago, recibí dos llamadas anónimas en las que me hacían referencia a la reunión que había sostenido el día anterior en la capital y la posibilidad de que mi vida corriera peligro. No le hice caso a lo ocurrido en la capital ni a las llamadas que me hicieron en Santiago.

Te traigo esto a colación para que mantengas tus medidas de seguridad y no subestimes al enemigo que es muy poderoso y con mucha influencia. El narcotráfico no es un poder en el mundo, ya es un imperio.

No olvides que puedes contar con mi plena solidaridad. Tu causa es la mía y la de miles de dominicanos que no se pueden expresar en forma pública.

El narcotráfico tiene influencia, poder y dinero, pero no tiene la razón, esa la tenemos nosotros y con nosotros está lo limpio que hay en los cuerpos armados del país y en el seno de la sociedad dominicana.

En otras oportunidades he dicho, como tú puedes decir ahora, si los narcotraficantes me atacan les responderé; creo en la paz para los que creen en ella, pero no en los que viven y estimulan el crimen, el odio y el terror. Abrazos fraternos, Atentamente, Ramón Antonio Veras”. (176).

En sus comienzos, la Dirección Nacional de Control de Drogas fue objeto de ataques provenientes de grupos ligados con el narcotráfico. Para que la opinión pública no resultara desinformada, escribí el siguiente artículo:

La DNCD

La opinión pública nacional no se debe dejar confundir por los que utilizando diferentes medios, y con argumentos y fines ulteriores, buscan la forma de presentar el Departamento Nacional de Control de Drogas, como integrado por un grupo de delincuentes, forajidos, desalmados y desaprensivos.

No escapa a la inteligencia del pueblo dominicano que el Departamento Nacional de Control de Drogas, es el organismo que tiene por finalidad principal investigar, perseguir y detener a las personas que, de una u otra forma, intervienen en la producción, elaboración, consumo y distribución de estupefacientes.

Los hombres y mujeres que tienen a su cargo la misión de accionar contra los que se colocan al margen de la Ley 50-88, de seguro que no son de la simpatía de los que a nivel nacional e internacional tienen relación con las drogas narcóticas, no importa que sea en la producción, en el consumo o tráfico.

El Departamento Nacional de Control de Drogas, como instrumento represivo insertado en el seno de la sociedad dominicana, está integrado por hombres y mujeres, y como tales pueden cometer faltas en el ejercicio de sus funciones. Ningún organismo humano está al margen de las debilidades, de los defectos y las acciones pecaminosas.

Pero una cosa es que una institución esté integrada por personas que tengan como única finalidad la maldad, la tortura y la protección de la delincuencia, y otra, muy distinta, es la misión de un organismo que, como el Departamento Nacional de Control de Drogas, hasta ahora ha demostrado que está orientado, única y exclusivamente, para enfrentar a los que se colocan al margen de la Ley 50-88.

Algunas personas nos han sugerido que expresemos, por medio de declaraciones o artículos, críticas contra el Departamento Nacional de Control de Drogas. Les hemos respondido que no, que no escribimos por encargo de nadie y que las bóvedas del Banco Central no tienen dinero para hacer que impulsemos una tecla para escribir una letra o palabra contra una persona o institución, si no estamos plenamente convencidos de que lo que estamos diciendo es la expresión de la verdad o el resultado de nuestra íntima convicción. Hasta ahora nadie puede decir, seriamente, que el Departamento Nacional de Control de Drogas, se ha prestado como instrumento represivo para perseguir a dirigentes sindicales, populares o de determinada concepción ideológica. Su labor ha estado dirigida a enfrentar a las personas que, en una u otra forma, tienen relación con el consumo y tráfico de estupefacientes; el día que el DNCD se desvíe de su función y se ponga a perseguir dirigentes populares, sociales y políticos pierde su fisonomía, se desnaturaliza y carece de credibilidad ante las personas decentes del país.

Por el mismo hecho de ser un organismo integrado por seres humanos está llamado a cometer errores. (177)

FUENTES:
(174) El Nacional. 22 septiembre 1990.
(175) El Nuevo Diario. 1990.
(176) La Información. 7 de mayo 1992.
(177) El Nacional. 4 de octubre 1990.
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CAPÍTULO VI. Orientación sobre drogas. Aumento del consumo de drigas en el país. Un maratón contra las drogas. El narcotráfico amenaza. Mi solidaridad con Beras Goico. Un conversatorio sobre drogas.

En el año 1990, le di seguimiento al tema de la familia y las drogas.

La Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra me invitó a una conferencia sobre la familia y las drogas; expuse las siguientes ideas:

Droga, familia y prevención.

La sociedad -se ha dicho- no es más que el desarrollo de la familia; si el hombre sale corrompido de la familia, así entrará a la sociedad. Esta es una verdad irrefutable, en la medida que se descompone la familia, se refleja la descomposición social.

En nuestro país no podemos querer tapar el sol con un dedo. Se advierten signos de deterioro familiar. Las causas pueden ser de índole diferente, pero sí tenemos que buscarla en el seno de la sociedad; pretender buscar al margen de la sociedad el relajamiento familiar, es un querer ladrarle a la luna.

Debemos adentrarnos, buscar el fondo, el origen del fenómeno de la descomposición familiar porque puede estar en la crisis que afecta la sociedad dominicana en el orden económico, social y político; en la sociedad del padre y la madre de abandonar el hogar y ligarse a la producción; en la participación de los niños y adolescentes en la producción social; los padres, en su afán de tener un buen patrimonio económico, están abandonando a los amigos la terminación de la formación de la conducta de su hijo; la jurisdicción de la fábrica, en forma horrible e innoble, llena de dinero devaluado las carteras de los padres que se olvidan del cariño, amor y comprensión de los hijos, en fin, es que también la familia en su conjunto ha sido arropada por la crisis que padecemos.

Hay que cuidar la familia. Si la familia sigue el relajamiento que se advierte hoy, vamos directos a una sociedad viva sin esperanza de cariño, sin amor, sin comprensión. Hay que hacer comprender a cada padre de familia que cada cabeza de familia debería ser pontífice y rey en su casa. Para ganarse tal calidad, tiene que identificarse con sus hijos.

Por encima de la situación de mal profundo que existe en nuestra sociedad, la familia debemos mantenerla como algo limpio, no tocado por el tufo de la podredumbre que se presenta como signo de destrucción social. Cada padre debe sentirse bien con su hijo, orientarlo siempre, y comprender que su misión como padre de un niño termina con la formación. El estado en que vive hoy nuestro país hay que hacer caer sobre cada quien su responsabilidad: lo primero, la familia, lo segundo, escuela, y lo tercero la sociedad en su conjunto.
Tenemos que darle a la posteridad hombres y mujeres ejemplares. Como no podemos controlar la escuela ni la sociedad, controlemos la familia. Formemos hijos que sean, en el futuro, dignos continuadores de padres ejemplares.

Mañana, los hijos van a transmitir a nuestros nietos el comportamiento humano que han heredado del hogar que los formó; la buena o mala actitud humana se transmite de generación en generación. Cada acto del padre es un eslabón importante en la conducta del hijo.

El respeto comienza en la familia y una vez que lo tenemos vamos con él a todas partes y lo llevamos por toda la vida. Una enfermedad está rompiendo el respeto en la familia; tenemos que recobrar el respeto, la reciprocidad de tolerancia, la identificación en la solución de los problemas de la familia. La droga no puede tragarse la familia. Si hemos vencido situaciones muy adversas, podemos imponernos al fenómeno de las drogas.

Si los padres han perdido el control en el seno de la familia por la embestida de las drogas, entonces los padres debemos de volver nuevamente a la escuela para ponernos a la altura de los tiempos y poder orientar a nuestros hijos.

CONCLUSIONES:

1.- La familia sigue, como ayer, constituyendo el núcleo colectivo de la sociedad. 2.- En los últimos tiempos se advierten signos de deterioro en le seno de la familia. 3.- No obstante sus deficiencias, la familia constituye hoy el órgano más importante para prevenir el vicio de las drogas narcóticas. 4.- Se impone, en los padres, un reordenamiento ante su comportamiento frente a los hijos. 5.- Los padres deben interesarse por la formación, carácter, comportamiento y relación de sus hijos con la escuela y amigos. (171).

Continuando con las charlas y conferencias, en fecha 7 de mayo de 1990, el Movimiento Nuevo Periodismo, me invitó a exponer mis ideas sobre La Justicia ante el narcotráfico. Estas fueron mis conclusiones:

1.- El estado de descomposición que existe hoy en el país es un caldo de cultivo para el desarrollo de las drogas narcóticas, el poder del narcotráfico y la imposibilidad de existencia de un Poder Judicial capaz de enfrentarlo.

2.- La base económica de la sociedad dominicana genera, hoy, un Servicio Judicial tolerante, venal, sumiso y adecuado al desarrollo del narcotráfico.

3.- La debilidad del Servicio Judicial Dominicano, la corrupción existente en él, es expresión directa del modelo económico que padecemos los dominicanos hoy.

4.- La tolerancia judicial con el narcotráfico, también se manifiesta en otras instituciones del Estado dominicano. La justicia es la parte débil de todo el conjunto de órganos del Estado que el narcotráfico arropa con su poder económico.

5.- Si queremos tener un Servicio Judicial firme, serio, responsable, honesto, laborioso y decidido ante la delincuencia, incluyendo el narcotráfico, tenemos que cambiar la forma de organización social existente, buscar otro modelo para nuestra sociedad, un modelo diferente al actual aún sea dentro del mismo sistema.

6.- Se pueden superar, en parte, las deficiencias del Servicio Judicial dominicano cambiando la forma de elección de los jueces e incorporando nuevos tribunales. Respecto a la forma de elección, el cambio tiene que venir desde los organismos encargados de su elección; el pueblo debe participar, en forma directa, en los organismos que han de elegir los jueces.

7.- Para adecentar el servicio Judicial y ponerlo acorde con el desarrollo del narcotráfico a nivel nacional e internacional, hay que modificar la Constitución y las leyes Electoral y de Organización Judicial.

8.- Si se logra, con un gran movimiento de opinión pública, que se ponga a la ofensiva ante la embestida del narcotráfico, se modifica la Constitución vigente y se pueden introducir reformas a todo el instrumento legal que regula la designación de los jueces de los tribunales, se pueden alcanzar logros positivos.
9.- Mientras en el país se mantenga la forma actual de elección y designación de los jueces, el servicio Judicial estará, siempre, a merced del narcotráfico y toda la delincuencia de cuello blanco.

10.- La solución al problema del Servicio Judicial dominicano, no está al margen de la solución de otros problemas que se presentan en otras áreas del Estado dominicano. Los males del Servicio Judicial dominicano, son la continuación de otros que se presentan en todas las instituciones y que no se denuncian públicamente porque tienen poder material, político o económico; la justicia es la parte débil de la corrupción, por eso contra ella se hacen críticas directas y públicas. Con las mismas monedas que los narcotraficantes compran a algunos jueces, también compran a funcionarios de otros poderes del Estado. (172).

En una charla que dicté en el barrio Los Pepines de Santiago, aporté diferentes datos relacionados con las drogas ilegales y los adictos:

Negro Veras revela 210 mil dominicanos consumen drogas
SANTIAGO.- Cerca de 210 mil dominicanos, equivalente a un 7 por ciento de la población dominicana, están inmersos en el consumo de drogas, reveló el doctor Ramón Antonio Veras (Negro), presidente del Patronato de Lucha Contra las Drogas de Santiago.

Dijo que esa cifra indica que “de una u otra forma cada hogar dominicano tiene el toque en su puerta de un traficante, de un adicto o de un intermediario.

Negro Veras, hablando en el transcurso de una charla que ofreció en el Club de Los Pepines (CUPE), explicó que en la década del 60 el consumo de drogas en la República Dominicana sólo alcanzaba el 2 al 3 por ciento.

Añadió que para 1975, de acuerdo a datos estadísticos, el nivel de consumidores de estupefacientes aumentó a un 10 por ciento. Continuó diciendo que en los años comprendidos entre 1975 y 1985 República Dominicana ya tenía 60 mil consumidores de drogas.

“Este fenómeno grave, que ya no esta solo en las urbanizaciones lujosas, sino que también está en los barrios populares y hambrientazos del país, esto es una realidad en el seno de la sociedad dominicana”, puntualizó.

Precisó que el mayor consumo de drogas en dominicana se da en las ciudades de Santo Domingo, La Romana, San Pedro de Macorís, San Francisco de Macorís, Puerto Plata y Santiago de los Caballeros. Informó que la causa principal del alto consumo de drogas en República Dominicana es que el país está siendo utilizado como puente del tráfico de estupefacientes.

Como segundo factor citó la grave crisis económica que vive el pueblo dominicano y en tercer lugar está la descomposición de la familia dominicana. (173).

FUENTES:
(171) El Nuevo Diario. 23 de enero 1990.
(172) El Nuevo Diario. 19 de mayo 1990.
(173) El Nuevo Diario. 5 de julio 1990.
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Prevención y Familia

En una conferencia que dictamos hace unos días en la seccional del Colegio de Ingenieros en Santiago, planteamos la situación de la familia en nuestro país, la influencia de los estupefacientes y algunas sugerencias que consideramos de singular importancia para buscar, dentro de lo posible, una solución o para atenuar su desarrollo.

Entre los puntos que planteamos en las conclusiones, se destacan los siguientes:

  1. El desarrollo de las drogas narcóticas ha aumentado en forma alarmante en los últimos años en nuestro país.
  2. El relajamiento del núcleo familiar es una expresión directa de la crisis general que afecta a toda la sociedad dominicana.
  3. Se impone una profunda reflexión en todas las familias dominicanas, sin importar que se trate de familia legal o legítima, o de la familia llamada no legal.
  4. Los padres, en el seno de la familia, deben dedicarle más tiempo a los hijos; mantener con ellos una permanente comunicación, darles un tratamiento de amigos.
  5. Una labor directa de los padres hacia los hijos representa el mejor método de prevención contra la enfermedad de la drogadicción.
  6. Se impone una labor de educación colectiva, dirigida por el Estado, hacia el núcleo familiar, a los hijos y a los jóvenes en general. 
  7. Los padres deben hacer una labor de comunicación directa y permanente con los directores de escuelas públicas y colegios privados respecto al comportamiento de los hijos. 
  8. Procede organizar encuentros familiares en cada ciudad del país para que los padres intercambien opiniones.
  9. Las instituciones públicas y privadas, culturales, profesionales y de toda índole deben celebrar encuentros locales, regionales y nacionales para intercambiar con los padres o jefes de familias respecto al desarrollo de las drogas en el país. Las sugerencias que planteamos a los ingenieros asistentes a la conferencia no son limitativas; otras medidas se deben tomar en cuenta en el seno de la familia dominicana para aislar del hogar la influencia que tienen hoy los estupefacientes.

No cuadra, hoy, en los padres, desempeñar el papel de simples suministradores de fondos para los gastos en el hogar y en los estudios; limitar a los padres a misión semejante sería aceptar la condición del padre material, el suministrador de fondos en la casa y hasta tener el hogar como una especie de pensión o de hotel.

Y la casa no puede ser una pensión ni un hotel. El hogar tiene que ser el techo que cubre a una sociedad pequeña que recibe el nombre de familia, no importa que se identifique como la familia legítima o no legítima. Poco importa el calificativo.

No pretendemos dictar pautas, ni recetar normas de comportamiento familiar; lo único que se busca es abrir un debate sobre el que creemos es de importancia en estos momentos. (168).

La sociedad de Santiago valoró mi accionar contra las drogas, como se hizo constar:

Núñez Collado: ¡El Hombre del Año!

“Al surgir la inquietud por conocer quién podría ser el de Santiago, varias personas entrevistadas consideraron a Núñez Collado el “hombre del año”, porque fue el vocero oficial de la Iglesia Católica en los planteamientos sobre distintas manifestaciones de la sociedad”.

“Consideraron, además, que es el “hombre del año por intervenir en los movimientos huelgarios y encabezar fórmulas contra el narcotráfico, entre otras cosas”.

“De los treinta entrevistados, cinco de ellos postularon al abogado Negro Veras. No mencionaron otros candidatos”. (169)

Porque consideré que procedía modificar la Ley 50-88, escribí:

Modificar la Ley 50-88

Cuando la sociedad es atacada por agentes nocivos, se impone utilizar en su contra todos los medios y recursos para combatirlos, y los narcotraficantes son grupos antisociales que con sus actividades dañan la salud de los seres humanos.

Por tanto, se impone enfrentarlos. En nuestro país, las acciones de los narcotraficantes han avanzado en todos los órdenes; ellos han penetrado, con sus recursos económicos las diferentes áreas de las actividades comerciales.

No tenemos la menor duda de que el dinero de los narcotraficantes está sirviendo de base para diferentes operaciones; en corto tiempo los narcotraficantes van a controlar, por completo, todo lo que se refiere a actividades comerciales y con influencia en la vida política del país. El narcotráfico, de seguir como va, será dueño y señor hasta del comportamiento intelectual de muchos dominicanos.

Cuando un narcotraficante se da el lujo de regalar de cumpleaños un carro de lujo último modelo, y celebrar la fiesta en forma pantagruélica es porque su poder económico es muy fuerte y sus relaciones con el poder político, a nivel de Estado, es muy amplio. Y que conste, no estamos hablando en sentido figurado.
Por tanto, para limitar a tiempo el poder del narcotráfico, se impone que se tomen medidas que guarden proporción con el fenómeno a enfrentar. Aunque estamos conscientes de que a nivel oficial no se han tomado medidas fuertes para enfrentar la acción de los narcotraficantes, creemos que todavía se puede hacer algo. Así, por ejemplo, para controlar las grandes inversiones de los narcotraficantes con su dinero fruto del crimen, se debe modificar la Ley 50-88, que sanciona la producción, consumo y distribución de estupefacientes.

Una modificación a la referida ley puede referirse a la creación de un departamento, dependiente del Departamento Nacional de Control de Drogas, con un equipo humano altamente calificado y de probada honestidad, con la facultad para recibir informaciones y datos respecto al origen de las fortunas de determinadas personas físicas o morales, así como investigar y tomar cuantas medidas sean de lugar para poner los bienes de los narcotraficantes bajo secuestro y, luego, comprobada su procedencia criminal confiscarlos.

No todas las fortunas que hoy hay en el país son fruto del narcotráfico, pero sí las hay que están selladas de marihuana y cocaína; las medidas legales estarían dirigidas, no a los patrimonios sanos, sino a los sucios, que hoy son muchos en el país. Por lo menos en la ciudad de Santiago hay personas físicas que, individualmente, tienen más de cuarenta millones de pesos, y hace dos años no disponían de un centavo.

Mientras hogares Crea, Casa Abierta y otras instituciones que luchan contra la drogadicción y el crimen del narcotráfico no disponen de recursos para sus actividades, los narcotraficantes hacen gárgara con los millones de pesos que tienen invertidos y que, con suma facilidad, se puede determinar su origen espurio. Solamente hace falta una voluntad oficial que dicte medidas legales al efecto. (170).

FUENTES:
(168) El Nacional. 15 de diciembre 1989.
(169) La Información. 13 de enero 1990.
(170) El Nacional. 2 de enero 1990.

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Para que nadie se engañara del avance del narcotráfico en el país, reiteraba mi posición así:No hay ninguna duda de que en el seno de la sociedad dominicana existe hoy, en la conciencia de sus mejores hijos, una posición seria con respecto al fenómeno de las drogas y contra la delincuencia vinculada con el narcotráfico. Toda una serie de actividades llevadas a cabo en amplios sectores del país nos han permitido formarnos una idea algo clara de la vocación de rechazo a la producción, consumo y tráfico de estupefacientes.

Pero si es cierto que en el seno del pueblo hay preocupación e interés por enfrentar el fenómeno, no es menos cierto que no existe una voluntad política oficial dirigida a enfrentar el mal. Si desde las alturas del poder existiera una línea política de prevención combinada con la que hay de represión, una mejor labor se hubiera hecho en lo que va de año. A nivel oficial, solamente se cuenta con la labor que hace el Departamento Nacional de Control de Drogas, y nada más.

La labor curativa –encabezada por Hogares Crea y Casa Abierta- no recibe del gobierno los recursos indispensables y necesarios para la labor que se ha propuesto llevar a cabo. El gobierno ha sido en la práctica, indiferente o tacaño con las dos únicas organizaciones que tienen los padres de los adictos para ver a sus hijos curados.

Al finalizar el año mil novecientos ochenta y ocho, dijimos que si se hacía un balance de la lucha de los dominicanos, a nivel de sectores públicos y privados, se comprobaba que no habíamos ganado la batalla a la drogadicción y el narcotráfico en el terreno social, económico, judicial ni policial. Y si hoy, ya en el mes de diciembre del año mil novecientos ochenta y nueve, nos hacemos la misma pregunta, la respuesta tiene que ser la misma.

Muchos factores se entrelazan en nuestro país para que el fenómeno de la drogadicción y el crimen del narcotráfico no puedan ser enfrentados en forma colectiva, con apoyo oficial y a nivel de masas.

Tenemos el convencimiento de que el ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, no está aliado con el narcotráfico, pero no podemos decir lo mismo de personas que están a su lado. La ciudadanía sensata del país tiene la creencia de que algo de influencia sirve de protección a las actividades delincuenciales del narcotráfico, lo que frena la acción represiva y, por vía de consecuencia, hace posible la distribución y abre la puerta al consumo de estupefacientes.

Creemos que para que se haga una labor efectiva, tanto a nivel de los grupos sociales de naturaleza privada como del sector público, se impone que desde el poder se dé demostración de no identificación con el narcotráfico. El ciudadano presidente debiera, luego de una investigación minuciosa, seria y responsable, sacar de su lado a toda persona, civil o militar, que preste su concurso, no importa en la forma que sea, al narcotráfico.

Lamentablemente en nuestro país desde que se habla de la ligazón del narcotráfico con grupos de poder oficial, de inmediato se levantan voces exigiendo pruebas, datos, etc. Creemos que cuando se habla de vinculación del narcotráfico con sectores de poder, el gobierno lo que tiene que hacer es utilizar sus mecanismos de inteligencia, poner en acción a los hombres de sus cuerpos armados al frente de la investigación, y que la opinión pública tenga la plena confianza de que los resultados de la misma serán conocidos por ella y, además, que se tomaran medidas ejemplarizadoras contra los cómplices del narcotráfico. Si no se procede así, cada fin de año nos lamentaremos con decir que estamos perdiendo la batalla frente al narcotráfico. (166).

Sabía los riesgos que entrañaba enfrentar el narcotráfico, y consejos no me faltaron, pero seguí adelante y así lo hice constar:

Narcotráfico, amenazas, etc.

Muchos amigos nos han aconsejado que no continuemos con las actividades públicas contra la producción, consumo y tráfico de estupefacientes. Comprendemos la preocupación de nuestros amigos, y hasta de familiares cercanos, por la labor que realizamos, y a veces sus consejos reiterados nos ponen a meditar.

Pero creemos que aquí no todo está perdido. Nuestros amigos y familiares tienen razón con los consejos que nos dan pero estamos plenamente convencidos de que lo mejor del pueblo dominicano, tanto civiles como militares, no se identifican con la delincuencia del narcotráfico; esto nos impulsa a seguir difundiendo en el seno del pueblo, en centros educativos, gremiales, barriales, etc., el fenómeno de la drogadicción y la delincuencia del narcotráfico.

La práctica de la vida, la actividad diaria, nos ha enseñado que en nuestro país, en cada sector social, lo mejor, lo más sano rechaza el narcotráfico y no hace alianza con él. Los militares más decentes, honrados y dignos; los miembros de la Policía Nacional, a nivel de rasos y altos oficiales, los integrantes de la vida civil en sus diferentes vertientes clasistas, se oponen al narcotráfico de una manera sincera y leal. Esto nos basta, nos anima y vincula a otras personas con sensibilidad a la lucha contra el narcotráfico.

Sabemos que hay grupos, tanto en el área civil, militar y policial, que por una u otra razón –sea política, personal o por complicidad con el narcotráfico- nos adversan. De esto tenemos constancia.

La actividad contra el narcotráfico nos ha aportado una gran experiencia. Así, por ejemplo, hace unos días un agente de la Policía Nacional, perteneciente al Servicio Secreto, en la ciudad de Santiago, se refirió a nuestra persona en términos hirientes, lanzó por su boca “maco y cacata”, por suerte que ese agente no representa lo mejor de su departamento, y tiene una conducta tan baja como el tamaño que la naturaleza le dio. Y que conste, que a nuestros familiares cercanos y amigos íntimos les hemos dicho que si en los próximos días algo nos pasa, a ese agente hay que pedirle cuenta, además de las cuentas que tiene por el rosario de abusos y atropellos que ha cometido en Santiago.

Si el nuestro fuera un país institucionalizado, hubiéramos accionado judicialmente contra ese agente por amenazas, o hubiéramos llevado el caso a conocimiento de sus superiores jerárquicos. Pero lamentablemente, aquí vivimos como los chivos sin ley, donde cada quien hace lo que le venga en ganas; lo único que hay que hacer es luchar por no dejarse matar por un “tigre”, “tabarrón”, maleante o un agente policial protervo, engreído, prejuiciado o aliado con lo peor de la sociedad dominicana.

Así como pasamos momentos amargos cuando sabemos que personas, de la vida civil, policial o militar, externan criterios adversos en contra nuestra, por la posición que mantenemos contra el narcotráfico, y por violación a los derechos humanos y las libertades públicas, también pasamos momentos agradables cuando compartimos con hombres y mujeres sensibles, opuestos a las lacras que genera la sociedad. Así, por ejemplo, el pasado domingo, en horas de la mañana, en una conferencia que dictamos a los clubes de leones de Jarabacoa, Constanza, Baitoa y Luperón, reunidos en Santiago, los leones, sus domadoras y cachorros, nos animaron para seguir, en 1990, como en 1989, enfrentando a los delincuentes del narcotráfico y a toda la basura social que le sirve de apoyo.

Entonces, estamos claros. Los amargados y resentidos sociales, tanto de la vida civil como policial, pueden seguir lanzando veneno en contra nuestra. Creemos que tenemos la razón y que a nuestro lado está lo mejor. Y punto. (167).

No tenía ninguna duda de la necesidad de tocar las fibras sensibles de los padres y las madres para que comprendieran, a nivel de familia, la necesidad de que compartieran inquietudes con sus descendientes, haciéndoles referencias al fenómeno de las drogas ilegales. De ahí mi reiteración por medio de artículos.

FUENTES:
(166) El Nacional. 8 de diciembre 1989.
(167) El Nacional. 10 de diciembre 1989.

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He aquí las sugerencias que hice en simposio de fecha 13 de noviembre de 1989.Por las Drogas, Sugerencias

En el simposium celebrado en fecha 13 de noviembre en curso, 1989, organizado por la Dirección Nacional de Control de Drogas, formulamos algunas conclusiones en las que tiene que ver el gobierno y la familia. He aquí algunas de ellas:

  1. La familia, no obstante el relajamiento existente en la misma, sigue siendo el órgano de la sociedad dominicana que está en mejores condiciones de prevenir la drogadicción.
  2. El gobierno debe lanzar una amplia campaña de educación, por todos los medios de comunicación -radio, prensa escrita y televisión- con mensajes dirigidos a la familia, escuela y juventud.
  3. Se impone un estudio, pormenorizado, en todos los barrios de las principales ciudades del país, para determinar la penetración de la drogadicción y luego tomar los correctivos de lugar.
  4. La Secretaría de Educación debe incluir en los programas escolares el estudio y discusión del fenómeno de la drogadicción y el narcotráfico.
  5. Los padres deben dedicarle más tiempo a los hijos; mantener con ellos una permanente comunicación. Esto se puede lograr con la orientación estatal, con la educación por los medios de comunicación.
  6. Los colegios y escuelas públicas deben organizar un programa de doce meses destinado a los padres de familia con la finalidad de orientarlos en la relación padre-hijos-escuelas-drogas.
  7. Cada centro escolar del país –público o privado- debe tener un asesor de estudiantes con especialidad en asuntos de drogas narcóticas.
  8. La Secretaría de Educación debe exigir que cada estudiante para obtener el título de bachiller tiene que presentar, por escrito, por lo menos diez conferencias dictadas en clubes culturales, gremios, sindicatos, clubes de servicio o comunidades campesinas.
  9. Se debe imponer que todas las universidades del país –estatal o privada- impartan cursos intensivos preparando promotores para educar a nivel de masas respecto al uso de las drogas y el crimen del narcotráfico.
  10. En cada centro laboral –público o privado- se deben impartir charlas y conferencias todos los meses, destinadas a orientar a los empleados y trabajadores, con la finalidad de que la orientación llegue a los padres de familia y a todo el sector laboral del país.
  11. El Estado dominicano, debe incluir en su presupuesto un capítulo especial, para aportes económicos a Hogares Crea y Casa Abierta.
  12. La Secretaría de Estado de Educación y de Salud, deben organizar programas educativos respecto a lo nocivo del uso de las drogas. (163).

Un seminario en Licey

En cualquier lugar donde fuera necesaria y requerida mi presencia, ahí estaba yo prestando mi colaboración, y cumpliendo con mi deber en la lucha contra las drogas ilegales, como fue mi intervención en el seminario que se efectuó en Licey, y que la prensa reseña así:

Inician Hoy Licey Primer Seminario Contra las Drogas.

LICEY AL MEDIO. Con gran expectativa se inicia hoy aquí el primer seminario municipal contra las drogas y el crimen del narcotráfico, que cuenta con los auspicios del club cultural y deportivo Juan Pablo Duarte.

La actividad, que se extenderá hasta el jueves 23, contará la participación de destacadas personalidades de Santiago, incluidos médicos, psicólogos, periodistas, abogados y otros que se han distinguido, en la lucha contra la drogadicción.

El evento está programado para arrancar hoy con una exposición acerca de “Drogas Peligrosas y Daños Físicos al Consumidor”, la que estará a cargo del doctor René Alba y la psicóloga Iluminada García.

Mañana miércoles Perfecto Martínez, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), filial Santiago, hablará de los medios de comunicación ante el tráfico y el consumo de drogas, junto a Walker Tomás González.

El jueves, el doctor Ramón Antonio –Negro- Veras intervendrá para referirse al origen y desarrollo del tráfico y consumo de drogas en República Dominicana y situación actual.

Todas las actividades se iniciarán a partir de las 7 y 30 de la noche y a cada participante se le otorgará un diploma o certificado de asistencia.

Los certificados se entregarán el sábado en el local del club Juan Pablo Duarte, donde también se presentará la tuna de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra.

Los principales dirigentes de la entidad, que viene operando desde 1976, dijeron que este primer seminario contra las drogas y el crimen del narcotráfico fue organizado bajo el entendido de que se hace urgente y necesario intensificar la lucha contra ese flagelo. Hicieron un llamado a todos los residentes en este municipio y demás comunidades vecinas para que respalden masivamente esta actividad porque la lucha contra este mortífero vicio se impone hoy más que nunca. (164).

En el siguiente escrito narro algunas de mis intervenciones públicas con el tema de las drogas, y lo desarrollo así:

Preocupación, Familia y Drogas

En los últimos tiempos teníamos una gran preocupación que creíamos era solamente nuestra. Pero en el transcurso de los días nos hemos dado cuenta que no, que nuestra inquietud también está en la conciencia de la generalidad de los dominicanos.

La observación nuestra partía del hecho de que todas las charlas y conferencias que nos han solicitado organizaciones clubísticas, gremiales, universitarias y educativas intermedias, tienen relación con la familia.

El 10 de octubre, 1989, el Colegio Dominicano de Ingenieros y Arquitectos, Seccional de Santiago nos invitó a dictar una conferencia con el tema “Drogas, Sociedad y Estabilidad Familiar”.

El 27 de octubre, 1989, la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, en el seminario “La Familia Como Instrumento de Prevención”, nos invitó a presentar las conclusiones del encuentro.

El primer Simposium sobre las Drogas en el país, organizado por la Dirección Nacional de Drogas, efectuado el 13 de noviembre, 1989, nos invitó a exponer el tema de “Familia, Narcotráfico y la Realidad de Hoy”, esto en horas de la mañana.

El Colegio San Francisco de Asís, de Santiago, en la celebración de una jornada de “Escuelas sin Drogas”, nos solicitó exponer el tema “La Familia: Padres, Hijos, Alumnos y Profesores, en la Temática de las Drogas”, el mismo día 13 de noviembre, 1989, pero en horas de la noche.

El Colegio la Esperanza, de Santiago, el día 20 de noviembre, 1989, nos pidió dictáramos una conferencia con el tema: “La Familia, Escuela y Drogas”.
El día 21 de noviembre, 1989, la Alianza Cibaeña, de Santiago, nos invitó a participar en un panel en el que se debatió también el tema de la familia como alternativa de solución a la drogadicción.

Al recibir la solicitud en el mes de noviembre para dictar varias conferencias con el tema de la familia y las drogas, pensamos que se debía a que como las actividades del Movimiento Familiar Cristiano habían incidido para que se dictará el Decreto 1656, de fecha 18 de diciembre de 1971, instituyendo el mes de noviembre de cada año “Mes de la Familia”, período en el cual realiza esa asociación sus campañas en beneficio de una familia dominicana mejor, las diferentes organizaciones lo habían tomado en cuenta y nos habían solicitado las intervenciones con el tema de la Familia.

Pero el día martes 14 de noviembre, 1989, al leer los periódicos nacionales, observamos que una de las noticias más destacadas fue la opinión externada por el obispo Mamerto Rivas y el sacerdote Luis Rosario, que afirmaron que “la ruptura de las buenas relaciones familiares ha provocado el auge del consumo y tráfico en la República Dominicana…”

La Asociación de Médicos Pediatras de Santiago, nos solicitó y aceptamos dictar una conferencia, el día 22 de noviembre, 1989, con el tema “Drogas y Familia”.
Es evidente, hay preocupación profunda en el seno de nuestra sociedad por la incidencia de las drogas y el deterioro de la familia. (165).

FUENTES:
(163) El Nacional. 19 de noviembre 1989.
(164) La Información. 21 noviembre 1989.
(165) El Nacional. 25 de noviembre 1989.
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He aquí el contenido íntegro de una carta que remití al comandante de la revolución cubana, presidente de la República de Cuba, Fidel Castro:
Fidel, Una Carta y Un Libro

El 22 de abril del año en curso le enviamos al comandante doctor Fidel Castro, una carta con los siguientes términos:

“Distinguido compañero: Sé que no escapa a su inteligencia la preocupación de los hombres y mujeres sensibles de América Latina y el Caribe, respecto al fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico. Millones de latinoamericanos y caribeños se movilizan hoy contra el flagelo de las drogas y el crimen del narcotráfico.

“Sin temor a equivocación Cuba es, hoy por hoy, el país de nuestro continente que se puede dar el lujo de decir que su territorio es libre de drogas narcóticas e influencia económica, política y social del narcotráfico.

“Por la posición que tiene el gobierno de Cuba contra el narcotráfico y las drogas narcóticas, creo que es su gobierno el que tiene más calidad para, a nivel internacional, incidir en la discusión del fenómeno de las drogas narcóticas y el narcotráfico.

“Todos los países, desde EEUU hasta Colombia, a nivel de sus organizaciones cívicas y políticas, están expresando su preocupación por el fenómeno de las drogas narcóticas. Pero ninguno ha dado demostración, o demostrado interés, en que se discuta el tema de las drogas narcóticas o ilegales y el narcotráfico”.

El motivo de la presente es para sugerirle, como latinoamericano, caribeño, hombre de paz y preocupado por los problemas sociales de toda índole, que el gobierno de Cuba tome la iniciativa de convocar a un encuentro internacional o continental para discutir el fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico”.

“En el evento a efectuarse en Cuba para tratar el punto antes indicado cada participante debe pagar su pasaje y estadía. Cuba debe aportar, única y exclusivamente, su hospitalidad e iniciativa. Espero que la inquietud que planteo por medio de la presente sea ponderada con la misma urgencia que amerita”.  Con respeto, distinción y afecto le saluda, atentamente.

Hemos decidido publicar esta carta, ahora, porque a raíz de la remisión que hicimos de ella al Dr. Fidel Castro, comentamos la sugerencia del contenido de la misma con un periodista amigo, quien ahora, luego de las denuncias y situaciones que se han presentado en Cuba, por casos de narcotráfico, nos preguntó si creíamos que todavía Cuba era el país adecuado para celebrar un encuentro internacional o continental para discutir el fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico.

Al amigo periodista que nos hizo la pregunta, le respondimos diciéndole que mantenemos el criterio de que Cuba es el lugar ideal para celebrar un encuentro internacional o continental donde se discuta el fenómeno de las drogas narcóticas y el crimen del narcotráfico.

Nuestra creencia parte de que, hoy por hoy, Cuba es el país de América Latina y el Caribe, donde la presencia de drogadictos es, prácticamente, inexistente y allá se ha enfrentado el narcotráfico en forma objetiva; aplicándole la ley, en forma directa, sin andar con paños tibios. Aquellos que han hecho alianza impúdica con el narcotráfico, han pagado, en Cuba, con sus vidas, el precio de la traición a la confianza del pueblo y de la Revolución.

Los que quieran saber por qué decimos que Cuba es el país ideal para celebrar un encuentro en el que se discutan los efectos de la drogadicción y el crimen del narcotráfico, que lean el libro “Narco Tráfico: Crimen sin Fronteras”. Este libro no tiene desperdicios con respecto al trato que dan en Cuba a los que hacen alianza con el narcotráfico. (160).

En el curso de un seminario organizado por la Universidad Católica Madre y Maestra, participé como expositor y dije entre otras cosas:

Abogado Veras critica timidez atacar drogas

Santiago.- Uno de los ponentes del seminario “Familia y Drogadicción”, que se celebró ayer en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, consideró que el Gobierno ha sido tímido para enfrentar la drogadicción y el narcotráfico.

El doctor Ramón Antonio Veas argumentó que el Gobierno se ha limitado a dictar la Ley 50-88, que crea la Dirección Nacional de Control de Drogas, y a declarar el año 1989 como de la lucha contra las drogas.

Expresó que las autoridades no han tomado la iniciativa para la educación a la población contra las drogas y el narcotráfico, y “no ha colaborado como debiera con Casa Abierta y los Hogares Crea.

Veras abogó porque todas las instituciones del país deben orientar a los alumnos en el sentido de que la drogadicción, el tráfico ilícito de drogas, como el terrorismo y el apartheid, son delitos internacionales, y por tanto, afectan a toda la humanidad.

Respecto al rol de la escuela pública y privada, el doctor Veras entiende que debe tomar una posición activa en el país ante el fenómeno de las drogas, y de igual manera, las universidades deben seguir la línea de la PUCMM.

Otros de sus planteamientos es el relativo a que la Secretaría de Educación incluya en los programas escolares el tema Drogadicción y Narcotráfico.

Asistieron cientos de estudiantes de escuelas públicas y privadas, profesores, padres de familia y personas de la comunidad muy interesadas en los temas tratados. (161).

Lavado y Narcotráfico

Como una forma de alertar de que en Santiago los narcotraficantes estaban lavando sus recursos económicos con inversiones, declaré:

Veras sostiene narcotráfico fundamenta desarrollo ciudad.

A juicio del presidente del Patronato Nacional de Lucha contra las Drogas en el Cibao el desarrollo de Santiago en los últimos años ha estado fundamentado en la actividad que tienen los narcotraficantes en diferentes áreas de la economía.
El doctor Ramón Antonio Veras (Negro) dijo que en el sector bancario, financiero, inmobiliario, urbanizaciones, agencias de vehículos y otras áreas de la economía interviene en el lavado de dinero, proveniente del narcotráfico.

Indicó que Santiago es el caso más notorio y añadió que ese fenómeno se presenta en Puerto Plata y otras poblaciones del país. Manifestó que en Santiago los narcotraficantes tienen una inversión que sobrepasa los 200 millones de dólares. (162).

He aquí las opiniones del periodista Rafael G. Santana, con relación a mi posición contra las drogas:

Las recomendaciones de Negro Veras

Si me pidieran seleccionar el profesional del año, diría Doctor Ramón Antonio Veras (Negro).

Confieso que no tengo relaciones amistosas ni profundas con el doctor Veras. Lo conozco por medio de las declaraciones de prensa y su firme posición en pro de una juventud mejor y contra el narcotráfico.

Durante el finalizado simposio nacional sobre la realidad del consumo de drogas y los efectos del narcotráfico en el país, celebrado en el auditorio del Banco Central, auspiciado por el Consejo Nacional de Control de Drogas y la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), tuvimos el honor de estrechar manos con el doctor Negro Veras, oír sus charlas y ser testigo de una brillante exposición llena de sinceridad, humanismo y gallardía.

Profesionales de la talla de Negro Veras en las diferentes vertientes de la ciencia, es que necesita nuestro país para salir del subdesarrollo sico-mental, el atraso económico y la deshumanización que se manifiesta en la carencia de valores morales.

La disertación del doctor Negro Veras no tiene desperdicios y sus sugerencias podrían ser el inicio de un movimiento nacional que ponga en acción a los diferentes sectores para arrancar del núcleo familiar y la sociedad el consumo de drogas y el narcotráfico.

En lo referente a la adicción, consumo, tráfico y familia las ponencias del doctor Veras y del padre Luis Rosario, de la Pastoral Juvenil de la Iglesia Católica, constituyen el soporte de una iniciativa hacia la definición de una política coherente en cuanto a la prevención, la orientación, la rehabilitación, persecución y castigo a los traficantes.

FUENTES:
(160) El Nacional. 19 septiembre 1982.
(161) Listín Diario. 28 de octubre 1982.
(162) La Inforamción. 1 noviembre 1982.
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Respuestas recibidas

He aquí algunas de las respuestas que recibí de las sugerencias que hice para la labor educativa:

Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra:
Santiago de los Caballeros,
República Dominicana,
10 de septiembre de 1989.
Dr. Ramón Antonio Veras
Ciudad

Estimado doctor Veras:

A través de su carta del 5 del mes en curso, del periódico “La Información” y de otros medios de comunicación, me he enterado de su propuesta de que la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra organice un seminario sobre uno de los problemas más preocupantes de hoy, como es el narcotráfico y la narcodependencia.

Tanto en nuestra condición de Rector de esta Casa de Estudios, como de ciudadano, compartimos sus inquietudes y acogemos con beneplácito cualquier iniciativa que, como la suya, pueda contribuir, no sólo a crear conciencia en la ciudadanía sobre este moderno flagelo, sino, sobre todo, a buscar a través del análisis y la investigación las posibles soluciones que ayuden a preservar en nuestro país los principios y valores que sustentan la República Dominicana, nacida bajo el lema de “Dios, Patria y Libertad”.

Estoy designando un comité para que, en coordinación con usted, sugiera los temas, los expositores y panelistas, y la fecha que se considere conveniente para la realización del seminario mencionado.

Aprovecho esta ocasión para hacer de su conocimiento que nuestra universidad está participando, desde aproximadamente un año, en una investigación de carácter internacional, auspiciada por la Federación Internacional de Universidades Católicas, cuyo objetivo principal es justamente buscar un modelo inculturado para enfrentar el desafío de la droga.

En el trabajo de investigación mencionado están participando, además, investigadores de Universidades de Colombia, Bolivia y Brasil. El seminario propuesto por usted sería una ocasión para dar a conocer los alcances de esta investigación que ya tiene realizado un diagnóstico, que fue discutido recientemente en Buenos Aires por representantes de las instituciones académicas que lo están llevando a cabo.

Tan pronto como haya una sugerencia sobre los asuntos más arriba indicados, tendré mucho gusto en reunirme con usted y con los miembros del comité que estoy designando, integrado por el profesor Emilio Yunén, Vicerrector Académico; el Dr. José Luis Alemán, S. J., Director del Centro de Investigaciones; la señora Miriam Cerda, Directora de Relaciones Públicas y los profesores José Valdez y Víctor José Castellanos.  Al felicitarle por su permanente inquietud acerca de un problema que, como el señalado, nos concierne a todos, aprovecho la ocasión para saludarle con sentimientos de consideración y aprecio. Mons. Agripino Núñez Collado. Rector. (157).

Unión Deportiva de Santiago, Inc.
-UDESA-
Santiago, Rep. Dom.,
14 de septiembre de 1989.
Doctor:
Ramón Antonio Veras
Ciudad
Distinguido señor:

Acusamos recibo de su atenta comunicación de fecha 11 de septiembre del corriente año, en la que nos sugiere la realización de una jornada Contra Las Drogas Narcóticas y el Crimen del Narcotráfico a través de los Clubes Deportivos y Culturales de la provincia.

Nuestro Comité Ejecutivo conoció en su reunión última el contenido de su comunicación y decidió expresarle nuestras simpatías, tanto a usted como a la jornada que nos sugiere.

Sin embargo estructuralmente hablando la Unión Deportiva no podría preparar esa jornada con los clubes debido a que el Movimiento Deportivo Olímpico es un movimiento de organismos y en Santiago existe el organismo competente para este caso que lo es la Asociación de Clubes de la Provincia de Santiago, ASOCLUPSA, institución, afiliada a UDESA a la que le estamos remitiendo su comunicación así como hemos conversado con los miembros del Comité Ejecutivo de la ASOCLUPSA y simpatizan con la idea para realizarla dentro de la jornada conmemorativa del Día Nacional de los Clubes que se celebra el día 9 de octubre de cada año. Dicha jornada tendrá una duración de varios días, por lo que ellos se pondrán en contacto con usted.

De todas maneras la UDESA apoyará con todas sus asociaciones miembros la actividad y luchará por su éxito. UDESA, es un organismo cuyos miembros son asociaciones. La Asociación de Clubes es un organismo cuyos miembros son clubes. La ASOCLUPSA es miembro de UDESA. A la espera de su mejor comprensión, nos reiteramos de usted. Muy atentamente. Lic. Guillermo J. Saleta. Presidente. Lic. Pedro Domínguez Brito. Secretario. (158).

Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores. Delegación Regional Norte.

Santiago, R. D. 14 de septiembre de 1989.
Señor:
Dr. Ramón Antonio Veras
Presidente
Patronato Nacional Antidrogas,
Inc., de Santiago
Ciudad
Distinguido Doctor:

Luego de un afectuoso saludo, procedemos a dar respuesta a su significativa carta, enviada el pasado día 6 del presente mes.

Es de todos conocido, de la firme y permanente batalla, que vienen librando diferentes instituciones públicas y privadas en general y su persona en particular, en contra de ese mal que vive acechando continuamente la tranquilidad familiar, socavando las bases morales de nuestra sociedad e invirtiendo los más sanos valores heredados de nuestros antepasados; nos referimos al consumo y distribución de las drogas narcóticas, que tanto se ha incrementado en los últimos tiempos.

Consideramos como muy acertadas las sugerencias que usted hace, de que se aprovechen los medios de comunicación televisivos, radiales y escritos, para desarrollar una campaña de prevención, educación y concientización en contra de este mal social, con el fin de evitar, que nuestra juventud continúe siendo su víctima, llevando la intranquilidad y el desasosiego de nuestras familias; le manifestamos nuestra solidaridad, con la propuesta hecha por usted a Monseñor Agripino Núñez, de la celebración de un seminario que analice los daños y consecuencias que ocasiona a la familia y la sociedad.

Aprovechamos esta comunicación para solicitarle nos ofrezca una conferencia sobre el tema en cuestión, cuyo título podría ser: “Drogas, Sociedad y Estabilidad Familiar”, a celebrarse en caso de ser aprobada por usted, el próximo mes de octubre en nuestro salón de conferencias. Esperando haber dado respuesta a su comunicación y ser favorecidos con nuestra solicitud. Se despiden de usted, muy atentamente. Ing. Civil Danilo Santiago. Secretario General. Ing. Rafael F. Domínguez. Presidente. (159).

FUENTES:
(157) El Nuevo Diario. 12 septiembre 1989.
(158) Archivo personal del Dr. Veras.
(159) Archivo personal del Dr. Veras.
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A los directores de periódicos

Santiago de los Caballeros, 12 de septiembre del 1989.

Señores:
Rafael Herrera
Director “Listín Diario”.
Adriano Tejada
Director “La Información”
Germán Ornes C.
Director “El Caribe”.
Radhamés Gómez Pepín.
Director “El Nacional de Ahora”.
Aníbal De Castro.
Director “Última Hora”.
Miguel A. Cedeño.
Director “El Sol”.
Miguel A. Prestol.
Director “La Noticia”.
Mario Álvarez Dugan.
Director “Hoy”.
Osvaldo Santana.
Director “Nuevo Diario”.
Bienvenido Álvarez V.
Director “El Siglo”.
Distinguidos directores:
Ocupamos su atención para exponerles una sugerencia que recientemente le hicimos al ciudadano presidente, doctor, Joaquín Balaguer; en razón de que una parte de la idea expuesta al Presidente tiene relación con los medios de comunicación escritos, como los que ustedes dirigen, creemos conveniente conocer su criterio al respecto.

La sugerencia que hicimos al ciudadano presidente, fue en el sentido de que creíamos conveniente estudiar la posibilidad de elaborar un mecanismo que obligue a los medios de comunicación –prensa, radio y televisión- a prestar su concurso gratuito en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico. Una medida legal, le dijimos al Presidente, sería que la radio y la televisión entren en cadena a una misma hora de la noche, todos los días, para difundir mensajes relacionados con las drogas narcóticas. De igual manera –le precisamos- la prensa escrita puede, en virtud de una ley, insertar todos los días, en media página, un mensaje escrito.

Lo más importante, en la lucha contra el vicio de las drogas ilegales es la prevención, con la finalidad de que nuestros jóvenes no lleguen al uso y, luego, se conviertan en enfermos, en adictos. Con la educación logramos la prevención; una sana y correcta orientación. El índice de adictos ha aumentado, en nuestro país, en los últimos años en forma alarmante.

Si por un lado se hace una adecuada y correcta campaña de orientación contra el uso de las drogas narcóticas, y por el otro se enfrenta, también con una buena campaña, el narcotráfico, de seguro que nuestra sociedad no tendrá que verse ante el drama de luto, sangre y dolor que vive hoy el hermano pueblo de Colombia. Es preciso impulsar hoy las teclas de las maquinillas para escribir un mensaje en la prensa escrita, en lugar de que mañana se tenga que utilizar el dedo para apretar el gatillo contra los criminales del narcotráfico; lancemos ideas hoy para no lanzar balas mañana.

Creemos que está dentro de sus posibilidades externar su criterio con relación a la idea que le planteamos al ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer.
Les pedimos excusas por ocupar su precioso tiempo; al escribirles estas líneas estamos animados, única y exclusivamente, por el interés de que el pueblo dominicano disponga, de ser tomada en cuenta nuestra propuesta, de una correcta y colectiva información ante la embestida lanzada por el narcotráfico contra nuestra juventud. La penetración social de las drogas narcóticas en nuestro país va más allá de los cálculos conservadores que se puedan hacer.
Con respeto y consideración, les saluda. Atentamente. Dr. Ramón Antonio Veras. (153) (154) (155).

Una carta para Adora

Santiago de los Caballeros, 13 de septiembre del 1989.
Señores: Directivos de la Asociación Dominicana de Radiodifusores (Adora).
Santo Domingo, D. N.
Atención: Teo Veras.
Distinguidos directivos:

Antes de abordar el tema de nuestro interés, queremos felicitarlos por el inicio de su gestión al frente de Adora. Les deseamos éxitos y que bajo su dirección la organización avance, se mantenga fuerte y desempeñando una labor positiva para sus miembros y toda la sociedad.

De inmediato pasamos a tratar el punto que motiva la presente. Hace unos días nos dirigimos al ciudadano Presidente, doctor Joaquín Balaguer, sugiriéndole que estudie la posibilidad de elaborar un mecanismo legal que obligue a los medios de comunicación -prensa, radio y televisión- a prestar su concurso gratuito en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico. Una medida legal, le dijimos al Presidente, sería que la radio y la televisión entren en cadena, a una misma hora de la noche, todos los días, para difundir mensajes relacionados con las drogas narcóticas. De igual manera, le precisamos al primer mandatario, la prensa escrita puede, en virtud de una ley, insertar todos los días, en media página, un mensaje escrito.

De seguro que ustedes, por la vinculación con el pueblo, tienen un conocimiento algo completo de la triste realidad que está viviendo hoy la sociedad dominicana con el fenómeno de las drogas narcóticas, y el poder económico, político y social que está tomando el narcotráfico.

Está dentro de las posibilidades de la organización que ustedes dirigen estimular un proyecto que, como el que planteamos al Presidente de la República, sirva para orientar a nuestros niños, a nuestros jóvenes y a la población dominicana en general.

En este año, declarado por el Poder Ejecutivo como año de la lucha contra las drogas, la labor de educación para prevención contra las drogas ilegales, el mejor aporte de Adora a la sociedad dominicana sería tomar la iniciativa de que se legisle para reglamentar la educación por órgano de la radio y la televisión.
Una orientación masiva a la población dominicana, se convertiría en un verdadero ejemplo de sensibilidad, desprendimiento y solidaridad de parte de Adora hacia el pueblo dominicano.

Nos identificamos plenamente con las palabras pronunciadas por su Presidente, señor Teo Veras, al momento de la juramentación de la directiva que ustedes tan dignamente integran, cuando dijo:

“Un radio difusor tiene un poder incalculable y por tanto una responsabilidad social; el Estado pone en sus manos un instrumento educativo, cultural, informativo…”

Precisamente, ese gran poder de ustedes, el poder de Adora, es que queremos que se ponga al servicio del pueblo dominicano para contribuir en la lucha por prevenir el mal, la enfermedad de la drogadicción y el crimen del narcotráfico.

No estamos recurriendo a una posición de sensiblería ante ustedes; no, lo que queremos es llevar hasta el ánimo de todos los miembros de Adora, la necesidad de que nuestro pueblo sea orientado correctamente para prevenirlo de una enfermedad que, como la drogadicción está golpeando el alma, el corazón y la conciencia de todos los dominicanos.

A ustedes les solicitamos, que lean detenidamente el contenido de esta carta y piensen, detenidamente, en sus hijos, en la sociedad dominicana y en el futuro armonioso de la humanidad. Conocemos las buenas condiciones humanas de ustedes.

Todos los dominicanos, sin distinción de color, raza, credo religioso, posición comercial o criterio ideológico están en el deber de no permitir que se despida el presente siglo con el fenómeno de las drogas destruyendo al ser humano, y el narcotráfico convertido en dueño y señor del destino de la humanidad. Con respeto y alta consideración les saluda. Atentamente. Ramón Antonio Veras. (156). l

FUENTES:
(154) La Información. 14 de Sept. 1989.
(155) El Siglo. 15 de septiembre 1989.
(156) Archivo Personal doctor Veras.

Continuará la semana próxima

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Una carta para Agripino

Santiago de los Caballeros. 5 de septiembre del 1989.
Monseñor Agripino Núñez Collado. Rector Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra  Recinto Universitario.

Ciudad. Estimado Monseñor:

Ocupo su atención para transmitirle una idea que creo puede servir como punto de orientación para una actividad relacionada con un fenómeno que, por su naturaleza nociva, afecta a todo el género humano: Las drogas narcóticas.
La idea, que espero prenda en su conciencia, es que considero oportuno, conveniente y necesario la celebración de un seminario, organizado por PUCMM, que aborde el tema de las drogas narcóticas y su incidencia en el seno de la familia dominicana. Lo más importante del seminario sería que los expositores a intervenir, sean padres de familia con hijos que estén o hayan estado afectados por la drogadicción. Los comentaristas pueden ser de instituciones públicas y privadas interesadas en el problema de la drogadicción y el narcotráfico. Espero reflexione con respecto a la idea y sugerencia que le formulo por medio de la presente.  Con distinción y alta consideración, le saluda. Atentamente, Dr. Ramón Antonio Veras. (149)

Una carta a los empresarios

Santiago de los Caballeros 6 de septiembre del 1989. Señores:
Directivos Asociación Industrial Región Norte (Airen). Directivos Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago (ACIS). Directivos Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA). Directivos Asociación Médica de Santiago. Directivos Asociación de Abogados de Santiago, Inc. Directivos Asociación de Mayoristas de Provisiones de Santiago (Amaprosan).
Ciudad. Distinguidos Directivos:

Adjunto a la presente les remitimos copia de una idea que expusimos recientemente en un programa de televisión respecto a la necesidad y posibilidad de que el Poder Ejecutivo dicte una ley o decreto obligando a los medios de comunicación del país, prensa escrita, radio y televisión, a prestar sus concurso para orientar a la ciudadanía con relación a los efectos negativos de las drogas narcóticas y el narcotráfico. De igual manera, hicimos una sugerencia a Monseñor Agripino Núñez Collado, para que estudie la posibilidad de celebrar un seminario en el que se analice la influencia nociva de las drogas narcóticas en el seno de la familia y la sociedad. Por cartas separadas nos dirigimos, recientemente, tanto al doctor Joaquín Balaguer, como a monseñor Agripino Núñez Collado, exponiéndoles en forma detallada nuestra inquietud. Por medio de la presente solicitamos de las organizaciones que ustedes presiden nos expongan, por la vía que consideren más oportuna, su opinión en torno a la idea de que se dicte una ley o decreto que obligue a los medios de comunicación del país a prestar su concurso diario a la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico, así como la sugerencia hecha a monseñor Agripino Núñez Collado, para la celebración en Santiago de un seminario con el tema ya indicado.

Aguardamos su contestación al respecto. Con estima y consideración les saluda. Atentamente. Dr. Ramón Antonio Veras. Presidente Patronato Nacional Antidrogas, Inc., de Santiago. (150).

Una carta al Cardenal

Santiago de los Caballeros. 11 de septiembre del 1989.
Monseñor Nicolás López Rodríguez, Arzobispo de Santo Domingo. Santo Domingo, D. N.
Estimado Monseñor:

Hemos considerado prudente y procedente remitirle la presente para llevar a su conocimiento una idea que, por tener relación con un fenómeno que, como el de las drogas ilegales, hoy preocupa a todo el mundo y en particular al pueblo dominicano; de seguro que es de su interés.

La idea que nos permitimos plantearle es que recientemente nos dirigimos al ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer sugiriéndole que estudie la posibilidad de elaborar un mecanismo legal que obligue a los medios de comunicación –prensa radio y televisión- a prestar su concurso gratuito en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico. Una medida legal sería que la radio y la televisión entren en cadena, a una misma hora de la noche, todos los días, para difundir mensajes relacionados con las drogas narcóticas. De igual manera, la prensa escrita puede, en virtud de una ley, insertar todos los días, en media página, un mensaje. El objetivo de difundir mensajes, por órgano de los medios de comunicación, tiene como finalidad una labor de orientación y prevención. Hace unos días usted habló “de la necesidad de que sean fortalecidos los planes de prevención contra la drogadicción; que se diseñen programas dirigidos a orientar a la juventud en ese sentido”.
Precisamente, orientación es el método más eficaz para luchar contra la drogadicción; así se enfrenta el fenómeno, el mal, en su nacimiento. Los medios de comunicación son los órganos principales para edificar a la ciudadanía respecto a los fenómenos sociales. Estoy de acuerdo con usted, en el sentido de “que el problema del narcotráfico hay que enfrentarlo ya, con toda la responsabilidad, integridad, valentía y decisión porque en la medida en que se le deje tomar cuerpo, y es lo que luce en Colombia, será mucho más difícil”. Monseñor, es ahora que tenemos que luchar; mañana sería tarde. Una forma de luchar, en el plano ideológico, contra el crimen del narcotráfico es orientar al pueblo dominicano utilizando los medios de comunicación del país. La única forma de llevar a la práctica la concepción que usted tiene de “que todos los dominicanos deben tomar conciencia del problema, de la gravedad que conlleva el narcotráfico, y al mismo tiempo haría falta todo un proceso de educación a la juventud”, es que los dominicanos, aún aquellos que no saben leer y escribir, pero sí escuchar, reciban un mensaje de orientación ayudado por una acción decidida que debe ser -como dijo usted- “comenzando por el Gobierno y ayudado por todos los estamentos sociales, hasta la persona más sencilla”. El objetivo de esta carta es que usted analice la idea que le hemos planteado al ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, y si la considera positiva para la lucha contra la drogadicción y el crimen del narcotráfico, interponga sus buenos oficios a fin de que sea llevado a la práctica la idea que se dicte una ley o decreto que obligue a los medios de comunicación -radio y televisión a entrar en cadena, media hora todas las noches, para difundir mensajes contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico, y de igual manera se legisle para que los otros medios de comunicación -periódicos y revistas- inserten, todos los días, media página con mensajes contra el fenómeno de las drogas narcóticas y el crimen blanco del narcotráfico.

Con distinción y respeto le saluda. Atentamente. Dr. Ramón Antonio Veras. (151).

Una carta a UDESA

Santiago de los Caballeros. 11 de septiembre de 1989.

Señores: Directivos de la Unión Deportiva de Santiago (Udesa). Ciudad.
Atención: Guillermo Saleta.

Señores Directivos:

Tengo la firme creencia de que los fenómenos sociales sólo se pueden enfrentar con éxito con acciones sociales; en las que participen las fuerzas motrices sanas organizadas. Por tanto, como la drogadicción es un fenómeno social que afecta la salud de los dominicanos, tanto a la presente como a la futura generación, es por lo que confiamos en el futuro luminoso de la humanidad debemos aplicar métodos de lucha social contra ese fenómeno que hoy preocupa a toda la humanidad.

Desde hace muchos años los clubes culturales y deportivos del país se han convertido en poleas transmisoras de las inquietudes de los barrios, de sus comunidades y otras áreas de la sociedad dominicana. Las inquietudes de toda índole se expresan, muchas veces, en nuestro medio social, por órgano de los clubes culturales y deportivos.

En razón de que la Unión Deportiva de Santiago, que ustedes presiden, tiene estrecha relación con los diferentes clubes culturales y deportivos de Santiago, me permito sugerirles la celebración de una jornada de charlas y conferencias en todos los barrios de la ciudad de Santiago.

En detalles, la idea es la siguiente: 1.- Una jornada contra las drogas narcóticas y el crimen del narcotráfico; 2.- La jornada se celebrará el mismo día, a la misma hora, en todos los locales de los clubes culturales y deportivos de Santiago; 3.- Las charlas y conferencias deben tratar sobre drogas narcóticas y narcotráfico; 4.- El material humano que va a participar como exponente podemos garantizarlo; 5.- Les corresponde a ustedes organizar la actividad y la fecha; 6.- La mejor hora es comenzar las conferencias y charlas a las 8:30 e la noche; 7.- No se requiere ninguna inversión económica para esta actividad; 8.- De acogerse esta sugerencia Santiago seguirá al frente de la lucha activa en contra de la drogadicción y el narcotráfico; 9.- Las charlas y conferencias los exponentes deben darlas por escrito para que el material quede como consulta del club cultural y deportivo y, 10.- Antes de celebrarse la jornada se debe hacer una amplia movilización de la opinión pública de Santiago.

Creo que la idea que expongo puede tener sus frutos. Desde el mes de junio del año pasado, 1988, hasta ahora, septiembre 1989, he participado como exponente de ochenta y cuatro (84) charlas y conferencias en barrios, clubes culturales y deportivos; centros educativos primarios, intermedios y universitarios y he observado el gran interés de los asistentes por los temas relacionados con la drogadicción y el crimen del narcotráfico.

Espero tomen en cuenta la sugerencia que les hago por medio de la presente.
Atentamente, Dr. Ramón Antonio Veras. (152).

Continuará la semana próxima

FUENTES:
(149) El Nacional. 13 de septiembre 1989.
(150) El Nuevo Diario. 8 de sept. 1989.
(151) El Nacional. 17 de sept. 1989.
(152) Archivo personal de Negro Veras.

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Con motivo de la entrega por decisión judicial de un barco que fue sorprendido con un cargamento de drogas, critiqué esa sentencia diciendo:Negro Veras cree entrega Río Truando fortalece a narcos. Dice hacen interpretación “Judaica” de Ley sobre drogas

SANTIAGO.- El doctor Ramón Antonio (Negro) Veras considera que la entrega del barco Río Truando fortalece el narcotráfico, y opina que lo que procedía era que la embarcación permaneciera en puerto hasta que un tribunal decidiera su suerte.

El doctor Negro Veras explica que no es lo mismo que se encuentre alguna cantidad de droga en la maleta de un pasajero que acaba de descender de un avión, que la misma sea incautada al interior de la nave como sucedió en este caso.

El texto completo de las declaraciones del doctor Veras es el siguiente:
Con la entrega de la montonave Río Truando, se debilita en el país la lucha contra las drogas narcóticas y el crimen del narcotráfico. Lo que procedía era mantener como cuerpo del delito la montonave hasta tanto los tribunales dominicanos decidieran la suerte del caso que motivó su incautación por las autoridades.

La montonave Río Truando, forma parte del cuerpo de delito del expediente. Fue el medio utilizado por los narcotraficantes  para introducir al país la cocaína, y el artículo 34 de la Ley 50-88 no tiene desperdicios cuando se refiere a los bienes muebles e inmuebles, y demás equipos y objetos utilizados para ilícitamente almacenar, conservar, fabricar, elaborar drogas narcóticas, así como los objetos, los vehículos y demás medios de transporte, incluyendo, naturalmente embarcaciones marítimas.

No es lo mismo cuando en un medio de transporte se encuentra la droga narcótica, que cuando se encuentra en la maleta de un pasajero, ya fuera del medio que le transportó. Es el caso de la montonave Río Truando, la droga se encontró dentro; no en el exterior, ni en poder de una persona en particular. Por tanto, el medio de transporte tenía que ser retenido al igual que la tripulación, solamente después de determinar la no culpabilidad de cada uno de los tripulantes, éstos podían ser puestos en libertad. (146).

El día domingo 3 de septiembre del año 1989, Freddy Beras Goico, en reconocimiento a mi labor de lucha contra las drogas ilegales y el narcotráfico, me invitó a su programa “El Gordo de la Semana” para hacerme entrega de una placa de reconocimiento. Aproveché la ocasión para exponer algunas ideas que fueron recogidas en la prensa escrita, así:

Propone acciones anti-drogas

El doctor Ramón Antonio (Negro) Veras propuso ayer al presidente Joaquín Balaguer que imponga una ley o decreto que obligue a los medios de comunicación, televisión y radio, dedicar una hora diaria a la educación contra las drogas, y media página de los periódicos.

Al propio tiempo, el presidente del Patronato Nacional de Lucha Contra las Drogas sugirió a monseñor Agripino Núñez Collado la realización de un seminario, auspiciado por la PUCMM, para determinar los alcances de la drogadicción. Denunció que narcotraficantes planean inducir al consumo de estupefacientes a hijos de empresarios de esta ciudad, no los identificó.

Dijo que la propuesta a Balaguer puede ser tomada en cuenta y que la hace con la mejor buena fe, ya que el tráfico y consumo de drogas debe enfrentarse con la prevención de los ciudadanos, para que no caigan en ese mal.

Veras expresó que en la sugerencia que hace a Núñez Collado, los expositores en el seminario deben ser los padres de familia que hayan tenido hijos involucrados en la drogadicción. El jurista intervino ayer en el programa “El Gordo de la Semana”, donde su productor Freddy Beras Goico, le entregó una placa de reconocimiento por su lucha contra la corrupción y el narcotráfico. Beras Goico dijo que Veras ha trazado una hermosa pauta de honestidad y moralidad al pueblo dominicano. El expresidente de la Asociación de Abogados de Santiago recibió la placa en medio de lágrimas.

Sostuvo que en el seminario que propone se podrá analizar ampliamente el problema de la drogadicción y sacar conclusiones. Dijo que hace las sugerencias como ciudadano y como padre de familia. (147).

V.- Una sugerencia mia para educar contra drogas y narcotráfico. Una carta al doctor Balaguer, a Agripino, a los empresarios, al cardenal, a Udesa, a los directores de periódicos, a los dueños de emisoras. Respuestas recibidas de mis sugerencias. Una carta a Fidel Castro, narcotráfico y lavado. Mi posición sobre las drogas en un seminario. Las drogas y la familia. El narcotráfico y sus amenazas. Reconocimientos. Modificar la Ley 50-88.

Retomando la idea que había expuesto en el programa El Gordo de la Semana, decidí dirigirme a distintas instituciones y personas del país planteándoles la conveniencia de hacer una labor educativa a nivel nacional con relación al uso nocivo de las drogas ilegales.

Le remití cartas al doctor Joaquín Balaguer, a monseñor Agripino Núñez Collado, a los directivos de la Asociación de Industriales Región Norte (Airen); Asociación de Comerciantes e Industriales de Santiago (ACIS); Colegio de Ingenieros, Arquitecto y Agrimensores (CODIA); Asociación Médica de Santiago; Asociación de Abogados de Santiago, directivos Asociación de Mayoristas de Provisiones de Santiago (Amaprosan); al Cardenal Nicolás López Rodríguez; a la Unión Deportiva de Santiago (Udesa); directores de la Asociación Dominicana de Radiodifusores (Adora) y a los miembros de la junta directiva de la Dirección Nacional de Control de Drogas.

Me voy a permitir transcribir íntegramente las cartas que tuve a bien enviar a las personas y organismos ya indicados.

Una Carta al doctor Balaguer

Santiago de los Caballeros
5 de septiembre del 1989.
Doctor
Joaquín Balaguer
Presidente Constitucional de la República
Palacio Nacional
Santo Domingo, D. N.

En nuestra condición de Presidente del Patronato Nacional Antidrogas, Inc., en la ciudad de Santiago, nos permitimos llevar a usted una inquietud que, por el desarrollo en el país del uso de las drogas narcóticas y la influencia del crimen del narcotráfico, también puede ser compartida por usted.

Hemos considerado que con el fin de prevenir a los dominicanos en el uso de las drogas narcóticas, y la influencia del crimen del narcotráfico, se imponga una campaña de prevención contra el vicio de las drogas nocivas. La campaña de difusión estaría orientada a llevar a la conciencia de los dominicanos, niños y jóvenes; hombres y mujeres; adultos y ancianos, la necesidad de enfrentar las drogas narcóticas y el narcotráfico.

La vía más adecuada, para una campaña permanente y sin costo alguno para el gobierno, es elaborar un mecanismo legal que obligue a los medios de comunicación  -prensa, radio y televisión- a prestar su concurso gratuito en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico.

Una medida legal sería que la radio y la televisión entren en cadena, a una misma hora de la noche, todos los días para difundir mensajes relacionados con las drogas narcóticas. De igual manera, la prensa escrita puede, en virtud de una ley, insertar todos los días, en media página, un mensaje escrito.

Organismos internacionales han informado que en nuestro país hay unos doscientos mil (200,000) dominicanos adictos a las drogas; igual criterio, respecto a la cantidad, ha externado el doctor José Joaquín Puello, presidente del Comité Olímpico Dominicano.

Tenemos la firme creencia de que los miembros de ADORA y la Asociación de Dueños de Periódicos, van a ver con buenos ojos la sugerencia que le formulamos a usted por medio de la presente.

No podemos olvidar, ciudadano Presidente, que hoy debemos de preservar con salud lo mejor que tienen nuestro país: la niñez y la juventud.

Esperamos que las sugerencias que hacemos por medio de la presente tenga en usted una buena acogida. Atentamente, Dr. Ramón Antonio Veras. (148).

FUENTES:

(146) El Nuevo Diario. 31 de agosto 1989.
(147) La Información. 4 septiembre 1989.
(148) El Nuevo Diario. 8 sept. 19829.
Continuará la semana próxima

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Continuación del artículo

¿Está el narcotráfico ganándonos la batalla?

Apropósito del desgarrante drama colombiano es propicia la ocasión para reiterar no sólo nuestra militancia en la lucha contra este mal, si no la necesidad de que la sociedad dominicana se sacuda a todos los niveles.

Hoy es un prestigioso hombre de leyes que hace la advertencia; ayer, hace apenas 11 días, era el secretario de las Fuerzas Armadas quien acusaba a la justicia dominicana de actuar con lenidad ante el narcotráfico.

Si a esto sumamos que efectivamente las autoridades policiales del país no han gozado de la confianza pública suficiente como para que un ciudadano se acerque a hacer una denuncia responsable, podemos concluir que aunque no estamos desarmados y se realizan esfuerzos por combatir el tráfico y consumo de drogas, es mucho lo que nos falta por andar.

Estamos frente a un fenómeno social de una penetración y poderío tal que no se puede combatir con falsas poses. Si no hay medidas efectivas y a fondo, removiendo de raíz todo lo que sea necesario, nada descarta que el acontecer de esa grande e infortunada nación suramericana se pueda dar en nuestro país.

Porque no se trata de que esté a favor o en contra de las drogas. La mejor muestra fue el millón de almas que ayer domingo agitó pañuelos blancos en la Plaza Bolívar de Bogotá para despedir a uno de sus muertos, como queriendo indicar que el país entero repudia a los narcotraficantes y sus brutales métodos.

Se requiere además una gran voluntad política que sea capaz de involucrar a todos los sectores que real y efectivamente estén dispuestos a jugárselas contra esa nociva práctica.

Y eso es lo que pedimos a las autoridades dominicanas al reaccionar indignados por la sangre derramada en Colombia, ya que como bien dijera Negro Veras los narcotraficantes no aplican en el país los mismos métodos que en otras partes porque no han visto llegado el momento necesario, pero de seguro que no les faltan recursos, influencias, impunidad y tolerancia para hacerlo. Manos a la obra. (143).

Con la finalidad de que los padres y las madres de Santiago se dieran cuenta de cómo las drogas ilegales estaban dominando la voluntad de sus hijos, me manifesté en la siguiente forma:

Alarma Negro Veras incidencia logra narcotráfico ciudad.

El presidente del Patronato Nacional de lucha contra las Drogas en el Cibao, denunció que narcotraficantes están realizando trabajos dirigidos a corromper hijos de personas prestigiosas y de gran influencia social y económica de esta ciudad.

El doctor Ramón Antonio Veras (Negro), dijo tener datos precisos y nombres específicos de que hijos de familias de distinción y prestigio de Santiago son atraídos por narcotraficantes al uso de cocaína y marihuana.

Veras, ex presidente de la Asociación de Abogados de Santiago explicó que el objetivo de los narcos con esa labor es neutralizar a la comunidad enfermando a hijos de familias con calidad para enfrentarlos.

“Los narcotraficantes consideran que ligando a los hijos de esas familias al consumo de drogas sus padres no se atreverán a denunciar la incidencia de ese mal social”, declaró.

Manifestó que la situación se torna más grave tomando en consideración que las autoridades no han sido lo suficiente enérgicas, agresivas y firmes para enfrentar el narcotráfico. El reconocido jurista santiaguense comentó que aquí se han dado casos relacionados con narcotraficantes que en otras ciudades no ocurren.

Basta señalar que en Santiago un narcotraficante le hizo frente con una metralleta a la Policía y al Ministerio Público, y a otro presunto narco se le ocuparon más de seis armas de fuego de distintos calibres”, añadió.

Igualmente recordó que aquí se detectó una banda que falsificaba certificados médicos y de Interior y Policía para legalizar armas de fuego a narcotraficantes, y que de eso estuvo apoderada la fiscalía hace nueve meses y de ahí nada pasó hasta el punto que la policía no sometió a los involucrados en ese hecho.

Sostuvo que la ciudadanía no tiene confianza de denunciar la incidencia del narcotráfico porque muchas veces no sabe si está hablando con un defensor del orden público o un aliado de los traficantes de drogas. (144).

Para que nuestro pueblo se fuera formando una idea clara de lo que llegaría a ser en el futuro el poder del narcotráfico, escribí:

Narcotráfico y Métodos

Muchos dominicanos se sienten alarmados por las acciones criminales desarrolladas por los narcotraficantes en Colombia; tales acciones no deben sorprender a nadie; el narcotráfico tiene diferentes métodos que aplica conforme las circunstancias: activos o pasivos, persuasivos o agresivos; en nuestro país está, ahora, en la etapa persuasiva.

En la etapa persuasiva el narcotráfico utiliza medios para convencer a sus adversarios; los medios van desde la gentileza personal hasta la generosidad económica con sus adversarios. En estos momentos, el narcotráfico no precisa de métodos violentos para lograr sus objetivos en nuestro país; basta el empleo del dinero, los regalos onerosos  y otras atenciones con valor económico.

Con una bolsa de dinero, regalando un inmueble o un vehículo, resuelve el narcotraficante sus problemas judiciales. Pero el día que el Poder Judicial se disponga a enfrentar el narcotráfico, imponiéndole fuertes sanciones, de inmediato cambia de método; en lugar de la bolsa de dinero, utiliza la metralleta accionada por pandillas de criminales.

Aquellos que creen que el narcotráfico es un poder, están equivocados; el narcotráfico es un imperio, con ribetes internacionales. Cuando una clase social, o un grupo tiene poder lo ejerce a nivel local; el narcotráfico tiene a sus servicios intelectuales, artistas, políticos, armas de diferentes calibres, aviones, barcos, territorios propios y, naturalmente, la mercancía más apreciada en nuestro sistema: el dinero.
El narcotráfico extiende su brazo criminal a todas las fronteras y sistemas sociales. Allí donde el narcotráfico no puede desarrollar, a nivel local, su sucio comercio sea por razones de control político o de índole económica, busca la forma de obtener el beneficio del tráfico, del puente o el lavado.
El narcotráfico utiliza nuestro país, hoy, como puente, lavado, y distribución de cocaína y marihuana. Realiza sus actividades sin el menor problema; si cae en manos de los servicios represivos, a los pocos días o meses está en libertad, la que logra sea por complacencia de algunos jueces, el temor de unos y por el soborno a otros.

El día que aquí se le ponga la situación difícil, el narcotráfico va a cambiar de método; aplicará el gatillo alegre contra toda persona física o institución privada o estatal, que le haga oposición a su negocio. En la medida que el narcotráfico adquiere poder económico se fortalece en el orden social, político, militar y criminal.

El tiempo, los hechos, están demostrando que, poco a poco, el narcotráfico ha penetrado en una forma tal en la sociedad dominicana que, en todo análisis que se haga, sea político, económico o de cualquier índole, hay que tomarlo en cuenta. Y el que crea lo contrario está subestimando una realidad viva, objetiva, que hoy, lamentablemente forma parte de la vida nacional. Aunque los dominicanos no quieran, tienen una espina en la garganta: el crimen del narcotráfico, con mucho poder, con mucho dinero y también con influencia política. (145).

FUENTES:
(143) El Nuevo Diario. 21 de agosto 1989.
(144) La Información. 25 de agosto 1989.
(145) El Nacional. 28 de agosto 1989.
Continuará la semana próxima

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En su oportunidad hice causa solidaria con los amigos, cuyos hijos habían sido víctimas del vicio de las drogas ilegales. A uno de ellos le escribí:Carta a otro padre, amigo

Estimado Leopoldo: Por medio de esta columna, en fechas 20 de noviembre del año 1988 y 26 de enero del año 1989, remití cartas a dos colegas con relación a hijos suyos que han tenido problemas con drogadicción. Ahora me dirijo a ti con el mismo dolor, pesar y preocupación que cuando escribí a mis otros dos amigos y compañeros de profesión.

Leopoldo, tú sabes que aunque no tenemos identificación en el pensamiento político e ideológico, siempre hemos mantenido relaciones fraternas en el plano profesional, de amistad y con una franqueza que raya en lo familiar.

Parece ser que el origen social de ambos, el hecho de haber trabajado durante muchos años juntos e identificarnos plenamente en la forma como se debe ejercer la profesión de abogados, ha creado entre tú y yo cierta comunidad de sentimientos afectivos que, con el transcurso de los años, se fortalecen más y más.

El cariño que siento por ti, y toda tu familia, es lo que me ha consternado al saber que tu hija querida, Manitú, ha caído en la drogadicción, en el uso de la cocaína. Manitú, es para mí como una hija. La vi nacer, desarrollarse y hacerse todo una señorita; hoy la recuerdo cuando ella iba a buscarte al trabajo, te besaba, se sentaba en tus piernas, en fin, la recuerdo con su carita angelical, con su piel y sus cabellos que la identifican como la típica mujer dominicana.

Sé lo duro que esto ha sido para ti, pero tú no tienes la culpa. Le diste a tu hija cariño de padre, y hasta cierto tiempo de hermanos; le diste una educación fina, tanto a nivel escolar como familiar; lo mismo se puede decir de las atenciones de madre que le dio María. Por tanto, no tienes nada de qué avergonzarte; cumpliste con tu deber como hombre, como padre y con el nivel de trato que te impone la educación familiar.

El objetivo de esta carta no es expresarte mi cariño, lamento y sentir por lo que hoy te afecta a ti y a tu familia. Lo que persigo es animarte a ti y a tu familia. Lo que persigo es animarte a ti y a María para que cada uno, como padre y madre, se eleven por encima de la frustración, demuestren valor personal, coraje y se enfrenten a la realidad, rescaten a Manitú del estado en que hoy se encuentra.

Creo que con ella no todo está perdido; todavía se puede salvar, no olvides que la responsabilidad de uno como padre solamente termina con la muerte; tu responsabilidad como padre te impone hoy buscarla y ponerla en manos de un organismo que la pueda curar. La drogadicción es una enfermedad. Tengo la firme creencia de que tu hija no ha sido culpable de haber caído en la drogadicción; ha sido víctima de la sociedad en que vivimos, una sociedad propicia para los vicios; los genera por todas partes, los alimenta. Tu hija no ha sido más que una víctima y a ti te corresponde, como padre, como hombre y como ciudadano, no dejar que el vicio, la cocaína, se trague a tu hija.

Conozco tu temperamento, sé que eres batallador, valiente, decidido, dispuesto a ganar la batalla; no olvides que siempre te he dicho que, como abogado, eres un litigante que hay que ganarle hasta más allá de la sentencia irrevocable.

Entonces, si has demostrado en todo el curso de tu vida como buen hijo, como brillante estudiante y profesional, y como padre ejemplar, que eres capaz de vencer todos los obstáculos, ¿por qué no dar un paso hacia delante para que Manitú vuelva al hogar, se cure y nuevamente tenerla entre nosotros como la hermosa mulata, con su sonrisa quinceañera, como la hija mimada tuya y de María?

Anímate, Leopoldo, vamos a ganarle la batalla a las drogas narcóticas y a los narcotraficantes. A lo mejor ignoras que tu situación no es única en Santiago; son cientos los hogares que hoy se sienten desgarrados porque miembros de la familia han caído víctima de las drogas.

Si tú guardas silencio, si no haces nada por salvar a Manitú, el narcotráfico se va a sentir bien y el fenómeno de las drogas ilegales va a decir que ha derrotado un hogar, una familia, dirigida por un hombre como tú, ciudadano ejemplar, ejemplo como profesional capacitado y honesto.

Vamos a movernos Leopoldo, y tú cuentas conmigo siempre; siempre estaré a tu lado. Por el cariño que merece Manitú, por el amor que le tienes a tu compañera María, levántate hoy con más bríos que nunca para que tú, hoy como lesionado por las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico, sea un militante más en esta lucha que necesita el concurso de hombres como tú. Te quiere, tu amito de siempre. (141)

Ante una entrevista que me hizo un periodista del Nuevo Diario, con relación al desarrollo del narcotráfico en el país, le dije:

Negro Veras afirma el narcotráfico está ganando la batalla a sectores que se oponen a esa práctica.

El doctor Ramón Antonio Veras -Negro- consideró ayer que el tráfico y consumo de drogas le está ganando la batalla a todos los sectores que se oponen a esa práctica ilegal.

Hablando a través de la línea telefónica con El Nuevo Diario, el destacado jurista santiagués dijo que “en Estados Unidos de Norteamérica, en Alemania, Francia, Italia, Perú, Bolivia, Colombia y República Dominicana son evidentes los logros alcanzados por el crimen del narcotráfico, tanto en el aspecto económico, social, político, policial y judicial.

El doctor Negro Veras fue entrevistado en torno a el terrorismo implementado por los narcotraficantes en Colombia, donde en los últimos días han asesinado a un juez, al jefe de la Policía de Antioquia y a un senador, que también aspiraba a la presidencia de esa nación.

Los asesinados por pistoleros del cartel de la cocaína fueron el magistrado Carlos Valencia García, el coronel Waldemar Franklin Quintero y Luis Carlos Galán.

Sobre el particular, el doctor Negro Veras sostuvo que el tráfico de drogas está ganando la batalla a los que luchan contra ese flagelo, y que las estadísticas demuestran, particularmente en nuestro país, lo siguiente: Hoy, los narcotraficantes no aplican en el país los mismos métodos que están aplicando en Colombia porque no ha llegado el momento necesario, pero ellos están preparados para esto, porque tienen recursos económicos, influencias políticas, impunidad y tolerancia en algunos organismos represivos; subrayó Negro Veras.

Precisó que “el día que el narcotráfico aquí se le reprima va a enfrentar a las instituciones y a  personas que se les enfrenten”, y recordó que en Santiago un solo narcotraficante se le ocuparon más de seis armas de diferentes calibres y uno hizo uso de una metralleta”.

El doctor Negro Veras amplió que “los hechos están ahí y cada día se comprueban en la práctica”, porque las sociedades, incluyendo la dominicana, lucen desarmadas ante el narcotráfico.

Señaló que en vista de que el narcotráfico y el consumo de drogas es un fenómeno social se necesitan para enfrentarlo con éxito una lucha social, a nivel de masa, con la complacencia del poder político; de lo contrario “las drogas narcóticas seguirán agrietando la sociedad dominicana. (142)

En esa misma línea, el periódico El Nuevo Diario, refiriéndose a una opinión mía escribió:

¿Está el narcotráfico ganándonos la batalla?

El prestigioso jurista santiagués doctor Ramón Antonio Veras (Negro), sostiene una tesis, que nos reiteró en el día de ayer, de que el tráfico y consumo de drogas y sus representantes les están ganando la batalla a quienes pretenden combatir esa práctica ilegal y nociva.

Avala sus afirmaciones con datos muy específicos y que se acrecientan cuando nos asaltan hechos como los acaecidos recientemente en Cuba, y los de Colombia del fin de semana, donde el narco-terrorismo asesinó brutalmente a un juez, al jefe de la Policía de Antioquia y a un senador de gran liderazgo a quien se veía como el posible sucesor del actual presidente de la República.

El doctor Veras ha sostenido, que particularmente en nuestro país las estadísticas demuestran que el tráfico de drogas está imponiéndose al esfuerzo de las autoridades y demás sectores interesados en combatir ese flagelo. Cita que hace diez años existían 10 ó 12 mil adictos a las drogas, y que hoy ya son 200 mil según datos del DEA referidos recientemente por el doctor José Joaquín Puello.

Como corolario señala que el narcotráfico ha penetrado en diferentes áreas de nuestra economía y que el Poder Judicial dominicano, en su generalidad, ha sido tolerante, indiferente o cómplice.

FUENTES:
(141) El Nacional. 20 de agosto 1989.
(142) El Nuevo Diario. 21 de agosto 1989.
(143) El Nuevo Diario. 21 de agosto 1989.
Continuará la semana próxima

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Denunciar el fenómeno de las drogas ilegales lo tomé como divisa, por lo que escribí el siguiente artículo relativo al trabajo colectivo y las drogas:Drogas y Trabajo Colectivo

Uno de los fenómenos sociales que hoy más preocupa a los dominicanos es el que se refiere a las drogas narcóticas y el narcotráfico. Alrededor de este fenómeno se movilizó el pasado año más de un millón de personas en la ciudad de Santiago de los Caballeros. Diferentes instituciones cívicas, religiosas, culturales y barriales y de masas intervinieron en la movilización del pueblo contra las drogas ilegales y el narcotráfico.

De la misma manera que se hicieron amplias movilizaciones en Santiago, en otras ciudades del país, principalmente en la ciudad capital, organizaciones de masas se pusieron al frente para estimular la lucha contra el flagelo de las drogas narcóticas. Las amplias movilizaciones sirvieron para demostrar que en el seno de nuestro pueblo hay un gran sentir para expresarse contra las drogas ilegales y el narcotráfico.

Conviene que las aspiraciones de lucha del pueblo dominicano contra el fenómeno de las drogas ilegales se mantengan como hasta ahora y no penetre en la conciencia del ciudadano un espíritu de frustración como ha ocurrido en otras actividades.

Siempre hemos dicho, por medio de artículos, charlas y conferencias, que si las drogas narcóticas y el narcotráfico es un fenómeno social, debe ser enfrentado con un sentido social, con la participación del pueblo, de las masas populares; con la presencia de las fuerzas motrices más sanas y decididas de nuestra sociedad.

Los fenómenos sociales son el resultado de problemas que nacen y se desarrollan en nuestra sociedad y, por tanto, es la sociedad misma, con sus recursos humanos y de toda índole, la llamada a enfrentarlos.

Una organización, o persona en forma individual; una institución represiva, policial o militar, no está en capacidad de hacerle frente a un fenómeno social como es el de las drogas narcóticas y el narcotráfico. Tiene más importancia y valor el trabajo que hace un conjunto de organizaciones e instituciones, que el que hagan mil personas en forma aislada e individual. El trabajo colectivo da resultados positivos.

Lo que sí debe cuidar nuestro pueblo es que las personas e instituciones que luchen contra el fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico, estén probadas en la práctica, sean de una sensibilidad probada, tengan un gran peso en el seno del pueblo y que sus acciones sean ejecutadas sin ningún otro fin que no sea librar a nuestro país de las lacras del narcotráfico.

El oportunismo no puede tener espacio en una lucha que, como la que se lleva a cabo contra el crimen del narcotráfico, requiere el concurso de todas las fuerzas sanas de la sociedad dominicana. Es de esperar que los dominicanos con dignidad, decoro y respeto se integren, formando una especie de mosaico de responsabilidad y decencia, para que en nuestro país las drogas narcóticas y el narcotráfico sean mantenidos a raya y, dentro de lo posible, librar a lo mejor del país, la juventud, de algo que está hiriéndola en lo más profundo de su corazón. (137).
Para que se comprendiera mi posición con relación a la acción policial y las drogas, expuse:

Drogas y Función Policial

Recientemente un periodista nos preguntó si creíamos que en los últimos tiempos ha avanzado en el país la lucha contra las drogas ilegales y el narcotráfico.

A la pregunta formulada por el periodista respondimos diciéndole que tenemos la creencia de que la lucha contra las drogas narcóticas y el narcotráfico había perdido fuerza a nivel de confianza pública, y que muchas personas consideran que las actuaciones policiales restan credibilidad a la institución para ponerse al frente de la lucha contra el fenómeno de las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico.

Para responder la pregunta del periodista partimos de que para enfrentar el narcotráfico se precisa de una institución seria, responsable y que genere confianza; si los hombres y mujeres del pueblo ven que el organismo encargado de reprimir el crimen carece de credibilidad, de seguro que se van a negar a prestar su concurso y colaboración para enfrentar la delincuencia.

Ningún ciudadano decente –le dijimos al periodista- está dispuesto a hacer causa común con la Policía Nacional en la lucha contra el crimen del narcotráfico, si la institución policial se coloca al margen de la Constitución, las leyes y las decisiones judiciales; en los últimos tiempos la policía está demostrando que maneja la ley a su antojo, capricho y prejuicio.

Si la Policía Nacional no respeta las decisiones judiciales, no tiene calidad para exigir que los ciudadanos respeten la ley, y mucho menos puede pedir colaboración en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico. Si las actuaciones de la institución policial se mueven en forma antojadiza, caprichosa, prejuiciada e ilegal, jamás tendrá como aliados para enfrentar el crimen a la ciudadanía sensata, decente y respetuosa de la ley.

Hay una evidente incoherencia entre la institución policial perseguir el crimen del narcotráfico, a los que violan la ley que sanciona el uso y tráfico de drogas narcóticas, y a la vez ella misma violar la Constitución, la ley de Hábeas Corpus y las decisiones judiciales. Hay una manifiesta contradicción entre reclamarle al pueblo que cumpla con la ley, por un lado, y la Policía Nacional ejecutar desacatos, por el otro.

No se puede reclamar la ley violándola, no se puede predicar la moral ejecutando acciones inmorales; no se puede exigir solidaridad y colaboración practicando el revanchismo y el individualismo, no puede una institución convertirse en guardián de la seguridad ciudadana y al mismo tiempo pisotear los derechos humanos y las libertades públicas, no se puede pedir una justicia digna, honrada e imparcial y a la vez desconocer sus decisiones.

Tenemos la firme creencia de que en nuestro país la lucha contra las drogas narcóticas y el crimen del narcotráfico se ha limitado, se ha reducido en la práctica, porque el pueblo dominicano no cree en las actuaciones policiales. No hay concordancia entre perseguir el crimen del narcotráfico y desconocer las decisiones judiciales. (138).

Al cumplirse 26 años del triunfo de la Revolución Cubana, le remití una carta al Comandante Fidel Castro, en la que le felicité por su posición seria contra las lacras y los vicios sociales. En una parte de la misiva le dije:

“Comandante, los hombres y mujeres del mundo, con dignidad y decoro, están plenamente convencidos de que su gobierno, su persona y la revolución se mantienen al margen de toda actividad ilícita y que vaya en contra de la moral revolucionaria. Contra las lacras sociales se levantaron los héroes y mártires del 26 de julio. Con el contenido de esta carta quiero, primero, testimoniarle una vez más mi solidaridad con la Revolución Cubana, segundo, ante los traidores y malvados que con sus acciones delincuenciales pretenden manchar la limpia moral de la revolución, expresarle mi repudio y, tercero, desearle a usted, Comandante, mucha salud y larga vida para el bien de Cuba y de todos los que, desde diferentes trincheras, luchamos por un futuro mejor para la humanidad. (139).

Con motivo de un acuerdo relacionado con el narcotráfico, firmado entre nuestro país y los Estados Unidos, declaré:

Veras Elogia Acuerdo de Intercambio Fiscal

“El expresidente de la Asociación de Abogados de Santiago, Ramón Antonio Veras, saludó ayer el acuerdo firmado entre los gobiernos dominicanos y de Estados Unidos, que trata de evitar que ciudadanos de ambos países evadan el pago de impuestos. El jurista santiaguense expresó que todo aquello que vaya en provecho de controlar el dinero proveniente del narcotráfico debe ser bien aceptado.

“Lo que creemos es, en el caso específico de la firma del acuerdo entre República Dominicana y Estados Unidos, que en el fondo no es exclusivamente para controlar el dinero proveniente del narcotráfico, sostuvo”.

Dijo que el acuerdo busca que Estados Unidos tenga un control mayor en otras áreas fiscales con respecto a la República Dominicana. Negro Veras expresó que las autoridades norteamericanas saben más que las dominicanas y que los nacionales de ambos países, que en los Estados Unidos se dedican al tráfico y consumo de drogas narcóticas.

El doctor Ramón Antonio Veras dijo que el principal mercado internacional del narcotráfico está en Estados Unidos y no en la República Dominicana.
“Lamentablemente, el pueblo dominicano en los últimos tiempos se ha dejado manejar por los Estados Unidos, principalmente en el área del narcotráfico”, indicó.

Dijo que fue así que el país aceptó, pura y simplemente, sin modificación alguna, la implantación de la Ley 50-88, que no ha cumplido la finalidad perseguida por ella. (140) l

FUENTES:
(137) El Nacional. 15 de junio 1989.
(138) El Nacional. 8 de julio 1989.
(139) El Nuevo Diario. 14 julio 1989.
(140) La Información. 9 de julio 1989.
Continuará la semana próxima

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La Unión Deportiva de Santiago, me invitó a dictar una conferencia con el tema “Delincuencia y Sociedad”; la misma fue expuesta por mí en fecha 24 de abril de 1989. He aquí las conclusiones:

Preocupación por nuestros jóvenes

Talvez nunca, como en esta época, la juventud ha suscitado de modo tan vehemente el interés de los distintos sectores que componen la sociedad dominicana. Los problemas de los jóvenes son, hoy, los problemas de todos los dominicanos porque en cada hogar se expresa preocupación por el comportamiento de nuestra juventud.

Se explica la singular atención que recibe el problema de la delincuencia si se toma en cuenta la extraordinaria actividad, jamás vista, que la juventud viene expresando en actos completamente extraños, a los jóvenes de generaciones pasadas.

Al hablar de la juventud y la delincuencia, no ignoramos que los jóvenes se sienten vivamente afectados por los mismos problemas que afectan a todas las demás personas, sin distinción de edad, pues los problemas de juventud, siempre constituyen problemas fundamentales del desarrollo social.

Si comprendemos que los rasgos que caracterizan a la juventud son, además de su dinamismo, su percepción de lo nuevo, su falta de experiencia social, también debemos admitir que la delincuencia como fenómeno social tiene características específicas dentro de la posición social de los distintos grupos que componen la sociedad dominicana. Si las pandillas juveniles se han desarrollado en los barrios marginados, la drogadicción se observa con mayor índice en los estratos sociales pertenecientes a las clases económicas poderosas.

Los jóvenes, según su extracción social, están afectados en una u otra forma por la influencia del medio social en que desarrollan sus actividades, y en igual sentido incide sobre los mismos la influencia de modelos extranjeros que, por el gran número de dominicanos que residen en otros países en condición de inmigrantes, mantienen una constante comunicación con los jóvenes que residen en el país.

La crisis que afecta a nuestra sociedad en todos los órdenes, la ausencia de estructuras familiares verdaderamente fuertes etc…, condicionan la influencia que, sobre nuestros jóvenes pueden ejercer las distintas formas de degradación, la tendencia a actos delictivos, la narcomanía, y otros actos antisociales que se expresan como vicios o formas negativas de conducta social.

El incremento de la población joven en el país plantea a las autoridades, a la familia, en fin, a todas las instituciones que en una u otra forma tienen que ver con el desarrollo social, la necesidad de hacer comprender a nuestros jóvenes que el mundo del futuro es su mundo, y que la manera como han de vivir en él dependerá, en primer lugar, de ellos mismos, de su comportamiento y de la manera como contribuye a la edificación de la sociedad del futuro.

Las energías que los jóvenes gastan en actividades reñidas con la ley y la moral, deben ser orientadas a fortalecer su preparación, su dominio de las ciencias y las artes, y principalmente a prepararse para que mañana puedan dirigir los destinos del país. (134).

A la orientación de la juventud dominicana estaban dirigidos la mayoría de mis artículos, como el que transcribo a continuación:

Nada de temor, de frente

Como se presentan las cosas en nuestro país, con el tiempo ningún ciudadano se va a disponer, para garantizar su seguridad personal y la de su familia, a no denunciar las lacras, los subproductos de la sociedad y la delincuencia de cuello blanco. La realidad está demostrando que aquí los que enfrentan el narcotráfico, la corrupción administrativa a nivel oficial, el ladronismo, a los jueces venales e irresponsables; los negocios sucios y de mala ley, en fin, los que aquí les dan el frente a los problemas que existen reciben como sanción la palabra hiriente, la invectiva, la amenaza criminal, la marginación profesional y todas las acciones tormentosas que contra un ser humano se puedan tomar.

Realmente estamos en una disyuntiva: o nos comportamos indiferentes ante los problemas económicos, políticos y sociales del país, o les damos el frente estando expuestos a sufrir las consecuencias que entraña una actividad de ciudadanos responsables.

Los que, en una u otra forma, están contra las lacras sociales, son los más. Pero los que las enfrentan en forma pública, son muy pocos. Los que se benefician de la basura que genera el sistema, constituyen una minoría insignificante, pero agresiva, con mucho poder económico y vinculación política.

La generalidad de los dominicanos está contra las drogas ilegales y el narcotráfico, pero solamente una minoría se expresa contra ese fenómeno. Se guarda silencio por no sufrir las consecuencias que entraña enfrentar el crimen del narcotráfico que dispone de muchos recursos en el orden económico, político y hasta social.

Es una verdad que a la gran mayoría de los dominicanos le repugna el ladronismo oficial, la corrupción administrativa. Pero no muchos dominicanos la enfrentan y la denuncian; muchos prefieren guardar silencio ante que ponerle el dedo a esa llaga que debilita más y más la misma base de la sociedad en que vivimos.

El silencio no puede seguir siendo la posición correcta ante los problemas que afectan a nuestro país. Cada día el círculo de los que se benefician del narcotráfico, la corrupción y los subproductos sociales, se hace más amplio; mientras que el mosaico de los denunciadores, a nivel público, se reduce.

Se impone crear en nuestros hijos la conciencia de que los que denuncian al sistema, tienen la razón, aunque no dispongan de poder económico ni de poder político. Hay que convencer a nuestros hijos de que ellos tienen que ser jóvenes beligerantes, activos, militantes, que no guarden silencio ante los abusos, los atropellos; ante el crimen ni la barbarie.

Si formamos a nuestros hijos con la falsa creencia de que aquí todo está perdido y que las lacras sociales simbolizan el miedo, el poder y lo mejor, estamos perdidos; no podemos levantar un país de cretinos, de hombres castrados; de hombres que mañana pongan  sus conocimientos, su talento y firmeza al servicio de los peores intereses del país. Por nuestros niños, por nuestros jóvenes, por lo mejor que tiene nuestra sociedad, tenemos que educar a los dueños del futuro de que si es cierto que aquí hay una mayoría insignificante y rapaz no es menos cierto que también hay un puñado de hombres y mujeres dispuestos a trillar un camino nuevo para las futuras generaciones, no importa el precio que se tenga que pagar. (135).

Había que comenzar a establecer diferencias. Por tal motivo escribí:

Los empresarios de ayer y hoy

Con motivo de un reconocimiento que fue objeto la directiva de la Asociación de Abogados de Santiago, que presidimos durante el periodo 1987-88, un periodista nos dijo que le sorprendía la presencia de tantos empresarios y comerciantes en el acto.

Le dijimos que en Santiago no todos los empresarios, banqueros y comerciantes son mafiosos; que mantenemos cordiales relaciones con hombres vinculados al sector comercial, bancario y empresarial; que no tenemos ningún prejuicio contra los hombres y mujeres que, en las distintas áreas de la economía del país, ejercen una actividad honrada y digna, no ligada al bajo fondo.

Tenemos la creencia –le dijimos- que por lo menos en Santiago, la gran mayoría de los empresarios y comerciantes son personas serias, honradas, decentes, con gran sentido de lo que es el comercio; que no están ligados con el nuevo grupo de mafiosos que simplemente tienen dinero, mucho dinero, pero no tienen la menor idea de lo que es la decencia, la honradez y la dignidad.

Es cierto –le continuamos explicando al periodista- que en los últimos años en Santiago se ha introducido un grupo de personas que no merecen ninguna confianza como comerciantes, empresarios ni como ciudadanos. Simplemente son personas descalificadas, que tienen dinero fruto del crimen del narcotráfico o dinero fruto de la politiquería. Estas personas no tienen la menor idea de lo que es un empresario o un comerciante; simplemente creen en su dinero y para ellos la moral se llama dinero, la dignidad es dinero y la honradez es dinero.

Aquellos que han llegado al país con millones de dólares, y luego los han convertido en millones y millones de pesos fruto del crimen del narcotráfico, son los que han permitido que algunas personas confundan a los hombres vinculados con las actividades comerciales, empresariales y bancarias en un plano de decencia, con los que por el solo hecho de tener mucho dinero han incursionado en actividades de las que no tienen la menor idea y mucho menos conocen los principios que rigen la sociedad capitalista a nivel de hombres de negocios.

Con muchos empresarios y comerciantes mantenemos estrechas relaciones de amistad, con un gran sentido de respeto, fraternidad y comprensión. Hay empresarios y comerciantes de Santiago que son orgullo de las actividades comerciales del país.

Es de esperar que con el tiempo el grupito de “nuevos empresarios tigres” sean marginados de las organizaciones que los agrupa a todos. Así se podrá saber dónde están los mansos y dónde están los cimarrones. (136). l

FUENTES:
(134) El Nuevo Diario. 5 de mayo 1989.
(135) El Nacional. 12 de mayo 1989.
(136) El Nacional. 1 de junio 1989.
Continuará la semana próxima

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La Unión Deportiva de Santiago, me invitó a dictar una conferencia con el tema “Delincuencia y Sociedad”; la misma fue expuesta por mí en fecha 24 de abril de 1989. He aquí las conclusiones:

Preocupación por nuestros jóvenes

Talvez nunca, como en esta época, la juventud ha suscitado de modo tan vehemente el interés de los distintos sectores que componen la sociedad dominicana. Los problemas de los jóvenes son, hoy, los problemas de todos los dominicanos porque en cada hogar se expresa preocupación por el comportamiento de nuestra juventud.

Se explica la singular atención que recibe el problema de la delincuencia si se toma en cuenta la extraordinaria actividad, jamás vista, que la juventud viene expresando en actos completamente extraños, a los jóvenes de generaciones pasadas.

Al hablar de la juventud y la delincuencia, no ignoramos que los jóvenes se sienten vivamente afectados por los mismos problemas que afectan a todas las demás personas, sin distinción de edad, pues los problemas de juventud, siempre constituyen problemas fundamentales del desarrollo social.

Si comprendemos que los rasgos que caracterizan a la juventud son, además de su dinamismo, su percepción de lo nuevo, su falta de experiencia social, también debemos admitir que la delincuencia como fenómeno social tiene características específicas dentro de la posición social de los distintos grupos que componen la sociedad dominicana. Si las pandillas juveniles se han desarrollado en los barrios marginados, la drogadicción se observa con mayor índice en los estratos sociales pertenecientes a las clases económicas poderosas.

Los jóvenes, según su extracción social, están afectados en una u otra forma por la influencia del medio social en que desarrollan sus actividades, y en igual sentido incide sobre los mismos la influencia de modelos extranjeros que, por el gran número de dominicanos que residen en otros países en condición de inmigrantes, mantienen una constante comunicación con los jóvenes que residen en el país.

La crisis que afecta a nuestra sociedad en todos los órdenes, la ausencia de estructuras familiares verdaderamente fuertes etc…, condicionan la influencia que, sobre nuestros jóvenes pueden ejercer las distintas formas de degradación, la tendencia a actos delictivos, la narcomanía, y otros actos antisociales que se expresan como vicios o formas negativas de conducta social.

El incremento de la población joven en el país plantea a las autoridades, a la familia, en fin, a todas las instituciones que en una u otra forma tienen que ver con el desarrollo social, la necesidad de hacer comprender a nuestros jóvenes que el mundo del futuro es su mundo, y que la manera como han de vivir en él dependerá, en primer lugar, de ellos mismos, de su comportamiento y de la manera como contribuye a la edificación de la sociedad del futuro.

Las energías que los jóvenes gastan en actividades reñidas con la ley y la moral, deben ser orientadas a fortalecer su preparación, su dominio de las ciencias y las artes, y principalmente a prepararse para que mañana puedan dirigir los destinos del país. (134).

A la orientación de la juventud dominicana estaban dirigidos la mayoría de mis artículos, como el que transcribo a continuación:

Nada de temor, de frente

Como se presentan las cosas en nuestro país, con el tiempo ningún ciudadano se va a disponer, para garantizar su seguridad personal y la de su familia, a no denunciar las lacras, los subproductos de la sociedad y la delincuencia de cuello blanco. La realidad está demostrando que aquí los que enfrentan el narcotráfico, la corrupción administrativa a nivel oficial, el ladronismo, a los jueces venales e irresponsables; los negocios sucios y de mala ley, en fin, los que aquí les dan el frente a los problemas que existen reciben como sanción la palabra hiriente, la invectiva, la amenaza criminal, la marginación profesional y todas las acciones tormentosas que contra un ser humano se puedan tomar.

Realmente estamos en una disyuntiva: o nos comportamos indiferentes ante los problemas económicos, políticos y sociales del país, o les damos el frente estando expuestos a sufrir las consecuencias que entraña una actividad de ciudadanos responsables.

Los que, en una u otra forma, están contra las lacras sociales, son los más. Pero los que las enfrentan en forma pública, son muy pocos. Los que se benefician de la basura que genera el sistema, constituyen una minoría insignificante, pero agresiva, con mucho poder económico y vinculación política.

La generalidad de los dominicanos está contra las drogas ilegales y el narcotráfico, pero solamente una minoría se expresa contra ese fenómeno. Se guarda silencio por no sufrir las consecuencias que entraña enfrentar el crimen del narcotráfico que dispone de muchos recursos en el orden económico, político y hasta social.

Es una verdad que a la gran mayoría de los dominicanos le repugna el ladronismo oficial, la corrupción administrativa. Pero no muchos dominicanos la enfrentan y la denuncian; muchos prefieren guardar silencio ante que ponerle el dedo a esa llaga que debilita más y más la misma base de la sociedad en que vivimos.

El silencio no puede seguir siendo la posición correcta ante los problemas que afectan a nuestro país. Cada día el círculo de los que se benefician del narcotráfico, la corrupción y los subproductos sociales, se hace más amplio; mientras que el mosaico de los denunciadores, a nivel público, se reduce.

Se impone crear en nuestros hijos la conciencia de que los que denuncian al sistema, tienen la razón, aunque no dispongan de poder económico ni de poder político. Hay que convencer a nuestros hijos de que ellos tienen que ser jóvenes beligerantes, activos, militantes, que no guarden silencio ante los abusos, los atropellos; ante el crimen ni la barbarie.

Si formamos a nuestros hijos con la falsa creencia de que aquí todo está perdido y que las lacras sociales simbolizan el miedo, el poder y lo mejor, estamos perdidos; no podemos levantar un país de cretinos, de hombres castrados; de hombres que mañana pongan  sus conocimientos, su talento y firmeza al servicio de los peores intereses del país. Por nuestros niños, por nuestros jóvenes, por lo mejor que tiene nuestra sociedad, tenemos que educar a los dueños del futuro de que si es cierto que aquí hay una mayoría insignificante y rapaz no es menos cierto que también hay un puñado de hombres y mujeres dispuestos a trillar un camino nuevo para las futuras generaciones, no importa el precio que se tenga que pagar. (135).

Había que comenzar a establecer diferencias. Por tal motivo escribí:

Los empresarios de ayer y hoy

Con motivo de un reconocimiento que fue objeto la directiva de la Asociación de Abogados de Santiago, que presidimos durante el periodo 1987-88, un periodista nos dijo que le sorprendía la presencia de tantos empresarios y comerciantes en el acto.

Le dijimos que en Santiago no todos los empresarios, banqueros y comerciantes son mafiosos; que mantenemos cordiales relaciones con hombres vinculados al sector comercial, bancario y empresarial; que no tenemos ningún prejuicio contra los hombres y mujeres que, en las distintas áreas de la economía del país, ejercen una actividad honrada y digna, no ligada al bajo fondo.

Tenemos la creencia –le dijimos- que por lo menos en Santiago, la gran mayoría de los empresarios y comerciantes son personas serias, honradas, decentes, con gran sentido de lo que es el comercio; que no están ligados con el nuevo grupo de mafiosos que simplemente tienen dinero, mucho dinero, pero no tienen la menor idea de lo que es la decencia, la honradez y la dignidad.

Es cierto –le continuamos explicando al periodista- que en los últimos años en Santiago se ha introducido un grupo de personas que no merecen ninguna confianza como comerciantes, empresarios ni como ciudadanos. Simplemente son personas descalificadas, que tienen dinero fruto del crimen del narcotráfico o dinero fruto de la politiquería. Estas personas no tienen la menor idea de lo que es un empresario o un comerciante; simplemente creen en su dinero y para ellos la moral se llama dinero, la dignidad es dinero y la honradez es dinero.

Aquellos que han llegado al país con millones de dólares, y luego los han convertido en millones y millones de pesos fruto del crimen del narcotráfico, son los que han permitido que algunas personas confundan a los hombres vinculados con las actividades comerciales, empresariales y bancarias en un plano de decencia, con los que por el solo hecho de tener mucho dinero han incursionado en actividades de las que no tienen la menor idea y mucho menos conocen los principios que rigen la sociedad capitalista a nivel de hombres de negocios.

Con muchos empresarios y comerciantes mantenemos estrechas relaciones de amistad, con un gran sentido de respeto, fraternidad y comprensión. Hay empresarios y comerciantes de Santiago que son orgullo de las actividades comerciales del país.

Es de esperar que con el tiempo el grupito de “nuevos empresarios tigres” sean marginados de las organizaciones que los agrupa a todos. Así se podrá saber dónde están los mansos y dónde están los cimarrones. (136). l

FUENTES:
(134) El Nuevo Diario. 5 de mayo 1989.
(135) El Nacional. 12 de mayo 1989.
(136) El Nacional. 1 de junio 1989.
Continuará la semana próxima

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Ante la difamación e injuria lanzada en mi contra por los aliados del narcotráfico, mi amigo Narciso Isa Conde, escribió:Ataques que dignifican

Negro ha enfrentado con valor sin par la mafia de la droga y le ha impedido con sus enérgicas denuncias muchos negocios multimillonarios.

Y eso no lo perdonan los malvados. No lo perdonan sobre todo porque no procede de cualquier personaje. Procede de una persona con autoridad moral, con estima pública. Procede de una voz que pesa, de una opinión apreciada, de un profesional sin mancha.

Y precisamente por eso se ha recurrido al método del anónimo, del panfleto irresponsable, del pasquín insultante. Sus autores saben perfectamente que su versión no tiene posibilidad de penetrar la conciencia nacional y por eso lo hacen con fines de herir de manera personal. Es un recurso de guerra sicológica que persigue perturbar para exterminar. (130).

Para que se comprendiera que estaba consciente de los riesgos que entrañaba al enfrentar el narcotráfico, escribí:

Riesgos de una lucha

Denunciar las lacras que genera una sociedad en descomposición, como la nuestra, tiene sus riesgos porque los que se benefician del subproducto social, se sienten molestos cuando se toca, aunque sea con el pétalo de una flor, el rámpano que les aporta beneficios.

En una conferencia que dictamos a instancia de la Unión Deportiva de Santiago -Udesa- hicimos referencia a los problemas que tiene que enfrentar la persona física o moral que denuncie la influencia negativa de las drogas narcóticas y el poder de los narcotraficantes.

Denunciar el narcotráfico y la forma cómo está penetrando en nuestra sociedad -dijimos en la conferencia- entraña poner en juego la propia vida, la de sus familiares más cercanos y hasta de los amigos más íntimos.

El que denuncia ante la opinión pública el lavado de dólares que hacen los narcotraficantes, la penetración económica en diferentes áreas de la economía nacional, su influencia en el servicio judicial y los métodos criminales y gansteriles de que hacen uso para silenciar a sus adversarios o a los que compiten con sus negocios, está expuesto a morir asesinado en manos de un criminal por encargo o soportar la muerte civil o moral.

La gran cantidad de recursos económicos de que disponen los narcotraficantes les permite comprar conciencia para eliminar físicamente, o comprar una pluma para herir, injuriar, difamar o de cualquier forma hostilizar a sus adversarios.
Por suerte que no todo está perdido. No todos los hombres y mujeres del país están dispuestos a ponerse al servicio del crimen del narcotráfico. Al margen de los que se han convertido en instrumento dócil del narcotráfico, están los que aquí rechazan el crimen, los abusos, atropellos y métodos de baja ley.

Si el narcotráfico ha creado formas nuevas de cómo exterminar a sus enemigos, las fuerzas sanas de nuestra sociedad han sabido poner en alto su gran sentido humano, su profunda sensibilidad, el gran sentido y contenido de la solidaridad, así como rechazar los medios sucios e irresponsables que solamente se anidan en los corazones de seres humanos perversos, mediocres y cobardes.

Los que abrazan la lucha social con seriedad, y están dispuestos a enfrentar a los aliados del narcotráfico y otras lacras de la sociedad, tienen que estar preparados, física y mentalmente, para hacerle frente a lo peor.

La época en que los luchadores sociales tenían como adversarios, solamente a los políticos y grupos de poder, ya pasó; hoy hay que prepararse para luchar contra enemigos ligados con el crimen, con el más bajo fondo social, con enemigos que no tienen el menor escrúpulo para ejecutar la acción más mezquina y perversa.

No olvidemos que en esta sociedad hay hombres buenos, pero también los hay malvados; los malvados se burlan en público de los hombres de bien, y en secreto los respetan y envidian. También así se manifiesta la cobardía. (131).
En el curso de un acto en el cual recibí el apoyo solidario del movimiento obrero, sindical, clubístico y profesional, dije lo siguiente:

Veras promete seguir lucha adecentamiento de sociedad

Santiago.- El doctor Ramón Antonio Veras (Negro) se comprometió a “continuar la batalla por el adecentamiento de la sociedad dominicana y advirtió que no se dejará intimidar por los agentes de la corrupción y del narcotráfico que mantienen en su contra una campaña de difamación, de injurias y de amenazas, incluyendo a su familia.

En un firme y emotivo discurso que pronunció el jueves en la noche para agradecer el reconocimiento que le hizo la Asociación de Abogados, de la que es presidente, el doctor Veras manifestó que “los que están ligados con el crimen del narcotráfico y los que se han robado, ayer y hoy, los dineros del pueblo, no nos van a intimidar con sus amenazas de asesinarnos a nosotros y a nuestros hijos”.

“A los cobardes les responderemos con la firmeza; a los irresponsables con posiciones francas y abiertas; a los que nos atacan en forma artera le responderemos con la lucha del pueblo organizado; en fin, a quienes nos atacan les responderemos, como hoy, con la fuerza invencible de lo más sano que tiene la ciudad de Santiago”, puntualizó el destacado jurista cibaeño.

Hizo fuertes críticas a los agentes del narcotráfico y reconoció que “hoy estamos enfrentados a un adversario que no cree en la libertad, en la paz ni en el derecho, sino en el crimen espeluznante, en el terror individual y en la perversidad”. Y agregó “El narcotráfico trabaja sin escrúpulos, sin conciencia y se busca como aliados a personas cobardes, sin honor, llenos de complejos, envidia, rencores y todos los resabios, sentimientos y bajas pasiones humanas”.
En otra parte de sus palabras refirió que las situaciones más conflictivas en su gestión como presidente las confrontó precisamente por su lucha contra el narcotráfico y sus pretensiones de penetrar el Servicio Judicial; defensa abierta a la licenciada Semírame Olivo de Pichardo, actual Procuradora General de la República; y su actitud para que se mantuviera al frente de la Fiscalía al licenciado Víctor José Castellanos.

De Olivo de Pichardo (presente en la ceremonia) dijo que “es una mujer que simboliza lo digno, lo responsable, talentoso y valiente de la mujer dominicana”, y del licenciado Castellanos, que “le dio brillo a la Fiscalía, enfrentó con valor y responsabilidad a los delincuentes de cuello blanco y de cuello sucio”.

Mostró su satisfacción porque entiende que la lucha de la asociación ha dado sus frutos porque ya son cientos de miles de dominicanos que levantan su voz condenando el crimen del narcotráfico, el uso de las drogas ilegales y su carácter negativo para la salud del pueblo.

Veras reconoció que en su lucha contra el narcotráfico no estuvo solo en la directiva que presidió, señalando que la bandera fue levantada y sostenida con igual fuerza por los demás directivos, abogados Clyde Eugenio Rosario, Adelaida Peralta, Delfia Tenf, Juan Hernández, Frank Inoa Bisonó, Bárbara López y Félix Olivares. (132).

Distintos sectores de Santiago estaban integrados a la lucha contra las drogas ilegales, como se evidencia por esta reseña:

Exponen dertientes de drogadicción

El problema de las drogas, su tráfico y sus consecuencias fue ampliamente analizado por juristas, sicólogos y siquiatras en la tertulia de los martes del night club “Tempo”.

Los exponentes en el panel fueron el doctor Ramón Antonio Veras, presidente del Patronato Nacional de Lucha contra las Drogas en el Cibao, el sicólogo y catedrático universitario Luis José Iglesias, el periodista Marcos Tejada Céspedes, director de prensa del Canal 7 Cibao y el sicólogo siquiatra Carín Mustafá Bretón.

La exposición de cada uno de los panelistas se inició dentro de un ambiente de entusiasmo de los asistentes. (133).

FUENTES:
(130) El Nacional. 23 de abril 1989.
(131) El Nacional. 30 de abril 1989.
(132) Listín Diario. 3 de mayo 1989.
(133) La Información. 4 de mayo 1989.
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Oro y cocaína

Al final del pasado año, 1988, fuimos informados de que grupos de dominicanos vinculados con el narcotráfico estaban haciendo operaciones con oro y cocaína.

Luego de recibir la información comentamos la situación con un alto funcionario judicial y amigo, pero como carecíamos de datos precisos no hicimos ninguna denuncia al respecto.

El día 8 del mes de marzo próximo pasado, nos visitó el periodista Rafael Rodríguez, y luego de hablar sobre diferentes temas y concederle una entrevista, le dijimos que el narcotráfico ha madurado planes en los que están en juego millones de dólares. Hay muchos millones –le recalcamos- y algo que tiene más valor comercial que dólar; el periodista hizo la reseña de lo que habíamos dicho y salió publicada en el periódico El Nacional de fecha 9 del mes de marzo.

Hace unos días la prensa nacional publicó una noticia en la que se informaba que dominicanos y extranjeros están haciendo operaciones en oro. No sabemos si los datos e informaciones que nos aportaron el pasado año tienen relación con la noticia que se ha publicado en estos días. Pero sí es una verdad que llegó hasta nosotros la noticia de que personas vinculadas con el narcotráfico estaban haciendo operaciones con oro y cocaína.

No tenemos en nuestras manos ningún documento que sirva de base a la información que nos proporcionaron, como tampoco disponemos de nombres de personas vinculados con el caso de la ligazón de operaciones de cocaína con oro.

Lo que sí nos ha llamado la atención es que en el mes de diciembre pasado nos dieron los datos y ahora la opinión pública es informada de las operaciones de oro.

Creemos que resulta sumamente interesante que se investigue a fondo la denuncia que se ha hecho en el sentido de que empresarios están exportando, en forma clandestina, grandes cantidades de oro. Las investigaciones proceden porque, además de las informaciones que no dieron en el sentido de que personas vinculadas con el narcotráfico están realizando operaciones de oro y cocaína, resulta que el oro es una de las más importantes riquezas mineras del país.

Son muchos los intereses que se están moviendo en nuestro país alrededor de las drogas narcóticas. Sumas millonarias son invertidas por los narcotraficantes en diferentes negocios.

El desarrollo económico de los narcotraficantes ha llegado a un nivel tal que algunas personas cuando están interesadas en obtener una alta suma de dinero para desarrollar su empresa o negocio, y ante las trabas que les ponen las instituciones bancarias, están recurriendo a personas vinculadas con el narcotráfico y que, en cuestión de horas, les prestan tres y cuatro millones de pesos. (127).

Para que no se fuera a creer que mis opiniones eran aisladas, en este escrito traigo a colación criterios de otras personas con relación a la justicia. Veamos:
¡Ay, la Justicia!

Cuando comenzamos diciendo que el servicio judicial dominicano no actuaba con firmeza frente al narcotráfico, se nos llamó deslenguado, terrorista judicial, incitador a la desconfianza de la justicia, fabulador, etc. Pero en los últimos tiempos no es la voz nuestra la que se escucha. El ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, el obispo Fabio Mamerto Rivas y otros ciudadanos se han pronunciado con relación a la posición del servicio judicial ante el narcotráfico.

Recientemente el arzobispo de Santo Domingo, monseñor Nicolás López Rodríguez, en una homilía en la catedral primada de América, y con el tema “Los Países de América Unidos en la lucha contra las drogas”, dijo que “el problema del narcotráfico no tendrá solución hasta que los gobiernos se decidan a establecer una red de controles tan eficaces o más como de los mismos delincuentes, aplicando sanciones severas e implacables a los magnates de ese sórdido comercio”.

Refiriéndose al servicio judicial, monseñor Nicolás López Rodríguez, dijo: “Es preciso que estos señores sean llevados a los tribunales para que den cuenta de sus fechorías si es que aparecen todavía algunos jueces con dignidad, vergüenza, autoridad y convencido”.

El día 15 del mes de octubre del pasado año, 1988, el doctor Joaquín Balaguer, refiriéndose a la justicia, dijo: “El mal que hay en la República Dominicana para combatir el narcotráfico radica en que tenemos una justicia que se vende y que más que eso, es un mercado”.

Después de las palabras del doctor Joaquín Balaguer, el obispo de Barahona, Fabio Mamerto Rivas, dijo: “La justicia dominicana como que es medio sinvergüenza”.

Tenemos la firme creencia de que si no todos los jueces del país por lo menos la gran mayoría ha sido débil, tolerante, con los narcotraficantes. Hay jueces que no reciben dinero por las decisiones benignas en provecho de los narcotraficantes, pero lo hacen por complacencia con abogados o por temor a la acción criminal de los narcotraficantes.

Decir que todos los jueces del país son corruptos y que reciben dinero de los narcotraficantes, es no decir la verdad. Pero sí es verdad que la gran mayoría le hace el juego al narcotráfico, y algunos magistrados con sus sentencias dan pábulo para que el pueblo crea que han emitido sus sentencias a favor de narcotraficantes a cambio de dinero.

Y lo lamentable del caso es que los jueces serios, honestos y responsables, y que tienen un buen nombre ganado, les hacen el juego a sus compañeros de funciones que sí tienen una actuación dudosa. En sí, hacen una alianza los buenos con los malos, los dignos con los malvados, y de ahí la confusión de que muchas personas, equivocadas o no, emitan criterios golpeando a todos los jueces con el mismo mazo y midiéndoles con la misma vara, lo que no debiera de ser. (128).

Las drogas ilegales seguían avanzando, como se comprueba por los datos que figuran en este artículo:

Las drogas, fenómeno social

De seguro que ya no tienen ninguna duda aquellos que en nuestro país decían que no era más que una fábula el hecho de la presencia de las drogas narcóticas en el seno de nuestra sociedad. Recientemente la prensa nacional dominicana publicó la información hecha por organismos norteamericanos que luchan contra el narcotráfico y las drogas ilegales, en el sentido de que se estima que en la República Dominicana hay unas doscientas cuarenta mil personas consumiendo cocaína y marihuana.

La cantidad de doscientas cuarenta mil personas consumiendo estupefacientes en nuestro país representa un cuatro por ciento de la población total, lo que en sí constituye un número sumamente alto si se toma en cuenta que hace alrededor de unos quince año era insignificante el número de nacionales que hacían uso de drogas narcóticas. Si hace unos años solamente determinados sectores de clases sociales dominantes hacían uso de fármacos, cocaína y marihuana, hoy es una verdad irrefutable que las drogas narcóticas han penetrado a toda la sociedad, sin importar sectores, clases y capas sociales.

Conviene precisar que el aumento progresivo en el uso de las drogas narcóticas ha ido en una proporción igual al aumento de la presencia de los narcotraficantes en la República Dominicana. Así como va el aumento de los narcotraficantes y su poder económico y de influencia social y política, en esa misma medida crece el uso de drogas en el seno de nuestra sociedad.

Resulta penoso que lo mejor de nuestro país, la juventud, esté hoy, en amplios sectores, a merced de la voluntad criminal de un grupo de desalmados -los narcotraficantes- que en interés de hacer dinero dañan la salud y también el porvenir de nuestros jóvenes.

Las estadísticas demuestran que para detener el uso de las drogas ilegales y la influencia del narcotráfico se impone una amplia movilización de la opinión pública. Datos confiables demuestran que si en todo el año 1988 fueron detenidas 1,464 personas por estar vinculadas con el uso o tráfico de drogas ilegales, ya en lo que va del año 1989 se han detenido 1,585.

Los padres no pueden confiar todo el trabajo de enfrentamiento a las drogas narcóticas y al narcotráfico a la función de los organismos de seguridad del Estado. Se impone que los padres desempeñen también su papel que puede ser el principal, el de prevención.

Los fenómenos sociales hay que combatirlos con lucha social. La presencia de las drogas ilegales en el país no es una cuestión de una persona o institución en particular; se requiere una labor de masas, en la que estén en tensión todas las fuerzas motrices sanas que todavía quedan en la sociedad dominicana.

Nadie puede ser indiferente a un fenómeno que está penetrando a nuestra sociedad y que afecta la salud, y que también incide a nivel de criminalidad. El narcotraficante primero suministra alegremente la cocaína o la marihuana, pero después que ha torcido la voluntad pasa a la ejecución del crimen. (129).

FUENTES:
(127) El Nacional. 16 de abril 1989.
(128) El Nacional. 21 de abril 1989.
(129) El Nacional. 23 de abril 1989.
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El narcotráfico contó con aliados que, por dinero, hicieron campaña sucia de todo tipo contra mí y mi familia, pero siempre recibí el apoyo de lo mejor de mi sector profesional, como se destaca:Abogados de Santiago salen en defensa de Negro Veras; ante campaña en su contra dicen es hombre irreprochable

El texto completo de la declaración de la seccional de Santiago del Colegio Dominicano de Abogados es el siguiente:

“En los últimos tiempos sectores desaprensivos de la sociedad dominicana han iniciado una campaña en contra del Dr. Ramón Antonio Veras y de sus familiares, incluyendo a su madre y hermanos, con el avieso propósito de intentar empañar la vida pública y privada de este distinguido colega y ciudadano dominicano, debido a la actitud seria y responsable mantenida por el Dr. Veras ante diferentes males de la vida nacional.

Ante esta mezquina campaña, que por lo sórdida y falaz de la misma desdice mucho de sus promotores, la Seccional de Santiago del Colegio de Abogados de la República se ve en el ineludible deber de responder a los calumniadores señalándoles que:

PRIMERO: Que el Dr. Ramón Antonio Veras, es un abogado que por el irreprochable ejercicio de la abogacía, siempre ha merecido gran respeto y alta consideración de parte de los abogados serios de Santiago y el país, al punto de que en varias ocasiones ha sido directivo prominente de la Asociación de Abogados de Santiago, cuya presidencia ocupó durante dos períodos consecutivos.

SEGUNDO: Que iguales atributos pueden decirse del Dr. Veras como ciudadano, ya que en su vida pública y privada se ha mostrado como un ferviente defensor de los mejores intereses del pueblo dominicano y de la paz mundial, lo cual le ha merecido el respeto de numerosas organizaciones nacionales e internacionales.

TERCERO: Que esta Seccional del Colegio de Abogados quiere dar pública constancia de que apoya de manera firme, irrestricta y decidida al Dr. Veras, y advierte a estos sectores cobardes y perversos, lo más podrido de nuestra sociedad, que el Dr. Ramón Antonio Veras, no está solo, que la Seccional de Santiago del Colegio de Abogados estará en todo momento junto a él en su lucha contra el narcotráfico.

En la ciudad de Santiago de los Caballeros, Municipio y Provincia de Santiago, República Dominicana, a los cinco (5) días del mes de abril del año mil novecientos ochenta y nueve (1989)”. (124)

La situación del narcotráfico en Santiago cada día resultaba más y más preocupante, así lo declaré:

En un gesto de evidente preocupación, el doctor Veras se preguntó que si no hay “narcos” en la cárcel santiaguense, entonces será que no hay tráfico ni consumo de drogas aquí o si es que los que han apresado han sido puestos en libertad alegremente.

¿O es, continuó preguntándose el jurista local, que ellos (los narcotraficantes), gozan de gran impunidad en la justicia?

A su juicio, estas son preguntas que la ciudadanía sensata tiene que formularse. Ahora bien, no escapa al conocimiento de la opinión pública nacional, que en el seno de la sociedad dominicana existe temor de denunciar a los criminales involucrados en el negocio de las drogas.

Sin embargo, para Negro Veras, ese es un temor fundado porque los hechos, que son la realidad de la vida, demuestran que en los últimos días han salido a relucir casos donde se ve que el narcotráfico ha penetrado todas las instituciones del Estado.

“Con toda franqueza lo vamos a decir por este medio”, destacó de manera resuelta el abogado santiaguense, para agregar de inmediato: “nos sentimos ruborizados en estos días cuando leímos en la prensa una carta remitida por un ayudante fiscal de Santiago.

En esa correspondencia, el funcionario judicial señalaba una relación de tarjetas encontradas en la cartera de un real o presunto narcotraficante.

El doctor Negro Veras consideró que en cualquier país del mundo donde esa noticia se publique de seguro que causa una conmoción social y política de grandes magnitudes.

Expresó que, “sin embargo, aquí eso sale publicado en un matutino con amplio despliegue y sin embargo, eso se ha quedado ahí”. (125).

La presencia de los métodos de criminalidad e influencia del narcotráfico lo denuncié a tiempo:

Delincuencia en política

Los dominicanos que incidimos en la lucha social y política, tenemos que estar preparados para luchar en todos los terrenos: ideológico, político, legal, social, etc.

La época en que los que participaban en política tenían que prepararse para hacer frente exclusivamente a sus adversarios políticos, ya ha terminado. Los hombres y mujeres que tienen militancia política, o los que sin estar organizados en un partido participan en el proceso social y político del país, tienen que estar dispuestos a combatir en todos los terrenos.

Aquí se está luchando en el terreno político, social y contra la delincuencia ligada a la política. Sin lugar a discusión el hampa, grupo del más bajo fondo, está interviniendo en la lucha política, si no directamente por lo menos por órgano de sus representantes.

Hasta hace algún tiempo, cuando un dominicano planteaba un criterio político, o de índole social, recibía de sus adversarios una respuesta política que podía ser discutida en el orden político, con la altura y decencia que mandan las reglas de respeto a las opiniones contrarias.

Creemos que la presencia en el país, el desarrollo y poder del narcotráfico, es lo que ha contribuido a que la lucha política se salga de los marcos de la decencia para caer en los métodos propios del hampa política. Y esto tiene su explicación. La explicación que damos al por qué han cambiado el tono y los métodos de la lucha política en el país con la presencia del narcotráfico, se basa en que como los narcotraficantes son atacados desde diferentes ángulos y no tienen la preparación, ni base para justificar su criminal negocio, se ven en la necesidad de recurrir a grupos que por paga salen en su defensa, aunque de una forma encubierta, velada, artera.

Los dominicanos debemos prepararnos para presenciar en el país todo lo negativo y sucio que se da en otras sociedades en las cuales el narcotráfico, cuando se ve acorralado, denunciado, puesto en evidencia, utiliza el hampa, el gangsterismo, para enfrentar a sus enemigos.

Si hemos visto, en los últimos tiempos, crímenes espeluznantes –la cabeza desprendida del cuerpo, un ser humano picado, asaltos nocturnos, y otras acciones criminales con igual factura- tenemos que estar conscientes de que quedó atrás la época en que aquí se presentaban hechos criminales normales.

El narcotráfico no solamente ha traído al país las drogas narcóticas y dólares para lavarlos; también trajo en su maleta una forma nueva de crimen, de acciones delictivas, de métodos reñidos con la decencia y la moral que impera en nuestra sociedad.

Los días venideros demostrarán que el razonamiento que hemos hecho con respecto a la delincuencia, sus métodos nuevos y narcotráfico, tiene cierta base y que todavía los que viven del negocio de las drogas narcóticas no han desarrollado al máximo su incidencia en el crimen.

A medida que avance el proceso de penetración de las drogas, mayor será la incidencia del narcotráfico en el crimen en el país; el narcotráfico buscará la forma de eliminar, por cualquier vía, a sus adversarios. El narcotráfico quiere muertos a los adversarios; no importa que la muerte sea física o moral; la muerte, por cualquier vía. (126).

FUENTES:

(124) El Nuevo Diario. 7 de abril 1989
(125) La Información. 7 de abril 1989.
(126) El Nacional. 9 de abril 1989.
Continuará la semana próxima

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El sistema y un escándalo

Con motivo del escándalo que se ha producido en el país por la denuncia hecha por el presidente de la Cámara de Diputados en el sentido de que legisladores prestan sus placas oficiales a personas vinculadas con el narcotráfico, algunas personas han dicho que lo denunciado tiene por finalidad socavar la base de la democracia representativa y que es obra de adversarios al sistema social dominante.

Están equivocados los que quieren hacer responsables a quienes expresan su sentir contra el sistema de las lacras que genera. No son los hombres y mujeres del pueblo los que tienen la culpa de que, personas desaprensivas, sin ningún respeto a las normas más elementales de decencia y dignidad política, se enganchen a políticos. Desde que en nuestro país un grupo de “tigres”, oportunistas y sinvergüenzas decidió hacer de la política un negocio, son muchas las cosas feas que se han visto y que faltan por ver.

No es lo mismo participar en la política por convicción ideológica, sensibilidad, responsabilidad y compromiso histórico con las masas populares, que inscribirse en un partido con el fin de hacerse de un dinero robado al erario o a las empresas estatales.

Si los defensores del sistema no quieren que salgan a la luz pública tantas y tantas cosas sucias que ponen en evidencia la debilidad de la formación económica que impera aquí, lo que tienen que hacer es luchar para que se transforme el sistema o, dentro del mismo sistema, buscar mecanismos que hagan invulnerable la voluntad política que el pueblo expresa en los procesos electorales.

Si aquí el pueblo tuviera plena posibilidad de escoger a los hombres y mujeres que han de desempeñar cargos como diputados, senadores, síndicos y regidores, no salieran a la luz pública hechos bochornosos de corrupción; no se vieran a legisladores ligados con denuncias que repugnan a la conciencia ciudadana, en fin, no se escucharan tantas y tantas cosas feeeeeas.

En todos los partidos hay hombres y mujeres responsables; personas que, aunque están en partidos políticos del sistema, merecen todo el respeto y la consideración de los ciudadanos honrados. Pero también hay hombres y mujeres malvados politiqueros que se inscriben en partidos para obtener un cargo electivo y adquirir una o dos exoneraciones como diputados o senadores; adquirir uno o dos solares municipales como regidores. En sí, en esta sociedad se ve de todo: hombres buenos y malos, hombres honrados y ladrones; políticos de derecha muy serios, políticos de izquierda muy vagabundos.

A los que quieren hacer responsables a los denunciadores de los fenómenos negativos que genera nuestra sociedad les podemos decir que no lancen la culpa sobre el cartero de la mala noticia que trae la carta. Este sistema genera vicios con independencia de los deseos de adversarios. (121).

Ante los legisladores comisionados

Con motivo de la denuncia formulada por el presidente de la Cámara de Diputados, en el sentido de que legisladores facilitaban sus placas oficiales a personas vinculadas con el narcotráfico, fuimos invitados a comparecer ante una comisión de senadores y diputados designados para investigar lo revelado.

Ante la comisión expusimos los datos e informaciones que teníamos de lo denunciado por el presidente de la Cámara de Diputados. Le dijimos que una persona de nuestra entera confianza nos había informado, el día 4 del mes de diciembre del pasado año, 1988, que narcotraficantes estaban utilizando placas de legisladores para transitar con impunidad por la frontera o introducir cocaína desde Haití hasta la República Dominicana.

También le informamos, que el día 6 del mismo mes de diciembre, en horas de la tarde, nos visitó un periodista y directivo de un medio de comunicación de Santiago, para hacernos una entrevista y que en el curso de la misma abordamos el tema de las drogas ilegales y el narcotráfico y le dijimos de la revelación que nos habían hecho del asunto de las placas, los narcotraficantes y los legisladores, pero le pedimos que no publicara lo que le estábamos diciendo porque no teníamos documentos a mano, pero que la persona que nos dio la información prometió aportarnos unas fotos de los vehículos con las placas de los legisladores.

El periodista conservó el secreto. Ni él ni nosotros nos referimos al asunto hasta que el presidente de la Cámara de Diputados hizo público lo que, desde diciembre, ya nos habían informado.

En ningún momento dijimos que teníamos prueba de lo que se nos había informado. Si las hubiéramos tenido, las ponemos en manos del periodista y de otros medios de comunicación.

Lo que el presidente de la Cámara de Diputados denunció en el mes de marzo del año 1989, a nosotros se nos había revelado en diciembre pasado, pero sin una prueba documental no podíamos llevar a la opinión pública la información de la cual éramos portadores a nivel confidencial. Siempre estuvimos a la espera de las fotos de las placas y los vehículos, pero no llegaron a nuestras manos. A la comisión de legisladores le dijimos lo que sabíamos. Ni más ni menos. Además, lo denunciado por el presidente de la Cámara de Diputados no fue llevado a su conocimiento por nosotros. Nunca hemos hablado con él personalmente. (122).

Combinaba mi labor de escribir artículos en la prensa, con conferencias en clubes sociales y culturales, como lo destaca esta publicación:

Negro Veras dicta charla Rotarios

“El jurista doctor Ramón Antonio Veras (Negro), dirigente de la Asociación de Abogados de Santiago y del Comité de los Derechos Humanos, ofreció una charla con el tema: “Las Drogas Narcóticas en República Dominicana”, a la membresía del Club Rotario Santiago Monumental.

El charlista invitado por los rotarios ocupó el turno central durante la reunión-cena de compañerismo rotario celebrada en el restaurant El Dragón.
El doctor Veras ofreció un pormenorizado historial relacionado con “El Trafico de Drogas en la República Dominicana, el Desarrollo de las drogas narcóticas hoy, Desarrollo de las drogas ilegales de nuestro país y las drogas narcóticas penetran y las hay aquí.

El doctor Veras dio respuesta a preguntas de varios de los presentes al final de su charla que mereció los mejores comentarios de la selecta concurrencia”.
Ofrecemos a continuación fragmentos de la charla:

“En la lucha contra el narcotráfico no se puede tener una posición derrotista, fatalista; hay que buscar la forma de cómo enfrentar el fenómeno; como fenómeno social tiene que ser atacado por lo mejor de la sociedad y con los métodos más adecuados. Tenemos la firme creencia de que la lucha contra el fenómeno de las drogas ilegales tiene que ser una labor de conjunto. Ella debe comenzar en el hogar, en el seno de la familia; con nuestros hijos, abordando el tema con la mayor crudeza, franqueza y amplitud. No podemos esconder a nuestros hijos ningún dato o información, sin importar lo espeluznante que sea; con ellos debemos hablar como padres, amigos y compañeros, ante ellos tenemos que convertirnos en orientadores, educadores y denunciadores.

Además de la orientación en el seno de la familia, la labor de los educadores es importante; muy importante. Talvez estemos equivocados pero creemos que, hasta ahora, el fenómeno de las drogas ilegales no ha sido abordado en las escuelas públicas y privadas con la profundidad requerida.

El trabajo en el Servicio Judicial tiene que ser firme. Hay que luchar para que en el país exista una justicia seria, responsable, honorable, valiente y honrada; preparada, laboriosa, confianza pública en la lucha contra el narcotráfico; se necesita una Policía Nacional en la cual el pueblo pueda confiar, las Fuerzas Armadas tienen que seguir, como hasta ahora, conjuntamente con la Dirección Nacional de Drogas, dando la batalla; lo mejor de nuestros cuerpos armados se debe mantener firme en la lucha contra las drogas narcóticas, tiene que aislar de su lado a toda persona, civil o militar, que el rumor público, con sentido de responsabilidad, vincule con el narcotráfico.

En fin lo más importante en la lucha contra el narcotráfico es la lucha de las masas populares. Las organizaciones de masas, los sindicatos, los gremios de profesionales, las asociaciones de toda índole, los clubes de servicios, en sí, todo lo mejor de nuestro pueblo tiene que constituir un frente amplio, convertir a todas las fuerzas motrices del país en un baluarte en la lucha contra las drogas ilegales y el narcotráfico.

No olvidemos que hoy en nuestro país no hay un gran consumo de drogas narcóticas, pero sí va en aumento. En Colombia, los jóvenes de Bogotá comenzaron a ingerir sustancias adictas desde los diez años. No esperemos que Santiago, Puerto Plata, Baní, San Francisco de Macorís, Barahona, el Distrito Nacional y La Romana, así como otros pueblos nuestros, se conviertan en pueblos enfermos, con jóvenes convertidos en guiñapos humanos, en seres vivientes inútiles para la sociedad y para servirle a la humanidad”. (123).

FUENTES:
(41) El Nacional. 26 de marzo 1989.
(42) El Nacional. 28 de marzo 1989.
(42) La Inforamción. 6 de abril 1989.
Continuará la semana próxima

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Ante una comisión de diputados ratifiqué lo que sabía con relación con los narcotraficantes y los legisladores:Negro Veras ratifica ante comisión legisladores prestan placas a narcos
El doctor Ramón Antonio Veras (Negro) al testimoniar ayer ante la Comisión Mixta del Congreso que investiga el escándalo de legisladores vinculados al narcotráfico ratificó al jurado una información suya en el sentido de que legisladores prestan sus placas oficiales para el tráfico de “cocaína” desde Haití hacia República Dominicana.

Negro Veras, ex presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, quien se ha visto acosado por el narcotráfico por sus denuncias persistentes contra el vicio, también negó que haya suministrado información alguna al presidente de la Cámara de Diputados sobre el caso que envuelve a los congresistas en general.

Dijo que la información de que diputados y senadores prestan sus placas oficiales a narcotraficantes la recibió en diciembre 4 de 1988, y de forma oficiosa la ofreció a un periodista de Santiago bajo el compromiso de no divulgarla hasta que obtuviera detalles más acabados.

Aclaró que compareció ayer ante la Comisión que integran senadores y diputados en atención a una invitación que le hizo el senador por el Distrito Nacional, el reformista Jacinto Peynado, Negro Veras llegó al edificio del Congreso poco después del medio día y salió de las oficinas en que fue interrogado cerca de las 4 de la tarde.

Insistió el reputado abogado de Santiago que en ningún momento ha hablado personalmente con el presidente de la Cámara de Diputados, Luís José González Sánchez respecto de la denuncia que ha conmovido los cimientos del Congreso.

Negro Veras, quien ha abrazado la causa por la defensa de los derechos humanos, puso en dudas que la comisión que tiene a su cargo la difícil tarea de investigar a un enemigo con dinero, poder y peligroso, llegue a las últimas consecuencias del caso que ha trascendido la frontera del país, y divulgado al mundo por las agencias noticiosas internacionales. (118).

Abundando sobre el mismo tema de los legisladores y los narcos, escribí:

Una denuncia y consecuencias

La denuncia formulada por el presidente de la Cámara de Diputados, recogida por la generalidad de los medios de comunicación del país, respecto al hecho de que legisladores prestan sus placas a personas vinculadas con el narcotráfico, sirve como punto de referencia para comprobar algunos aspectos relacionados con la forma como está organizado nuestro país desde el punto de vista institucional y la influencia del narcotráfico en la vida nacional.

Si se efectuaran elecciones separadas para elegir presidente y vicepresidente; senadores y diputados, síndicos y regidores, el pueblo dominicano tuviera posibilidad de, al expresar su voluntad política, escoger, entre los diferentes candidatos, los que considere que reúnen mejores condiciones de seriedad, talento, honestidad y laboriosidad.

La boleta electoral de arrastre trae consigo que el ciudadano que se decide por el presidente y vicepresidente está también votando por los otros candidatos aunque no sean de su confianza ni simpatía. Es posible que un partido presente como candidato a la presidencia y vicepresidencia a dos ciudadanos honrados, pero ellos arrastran, como una atarraya, a todo un conjunto de hombres y mujeres –diputados, senadores, síndicos y regidores- que no son más que un grupo de “tigres” pillos, cabilderos, vagabundos y aliados a los delincuentes de cuello blanco, incluyendo a los narcotraficantes.

La denuncia hecha por el presidente de la Cámara de Diputados en el sentido de que legisladores prestan sus placas a los narcotraficantes, revela el gran poder que tiene en nuestro país el narcotráfico. Nunca hemos puesto en duda ese poder, pero ahora la opinión pública se convence, con mayores datos e informaciones, que cuanto hemos dicho del poder e influencia del narcotráfico, es la expresión de la verdad y que las denuncias nuestras no tienen otra finalidad que no sea poner a la parte sana de nuestra sociedad en alerta.

De seguro que muchos de los defensores del sistema social que impera en nuestro país están hoy decepcionados al saber que uno de los poderes del Estado –el legislativo- ha sido puesto en entredicho en lo que a credibilidad pública se refiere. Resulta sumamente grave, chocante, que precisamente cuando uno de los poderes del Estado –el Ejecutivo- declara el año 1989 de lucha contra las drogas, salga a la luz pública un escándalo, como el denunciado por el presidente de la Cámara de Diputados, que da cuenta de la ligazón de legisladores con narcotraficantes.

Y lo lamentable de todo esto es que la situación de ligazón del narcotráfico con grupos de poder es más grave de lo denunciado por el Presidente de la Cámara de Diputados. Nuestro pueblo no sabe la profundidad, lo hondo que ha calado en nuestra sociedad el narcotráfico. La ligazón de narcotraficantes con legisladores es, como dice nuestro pueblo, paja de coco comparado con lo que realmente existe. (119).

Las denuncias que formulaba respondían a la verdad, estaba debidamente informado, por lo que escribí:

Denuncias confirmadas

En una carta que remitimos en el mes de diciembre del pasado año al ex procurador fiscal de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, que fue publicada en diferentes medios de comunicación, le decíamos: “El narcotráfico está planeando una acción en grande a ejecutar en los últimos días de este mes o en los primeros meses del próximo año. De esta información no tengo documentos escritos, pero sí confiables datos que poco a poco estoy amarrando. No olvides que cuando digo que la buera es prieta es porque tengo los pelos en las manos. Los días dirán”.

El día 7 del mes de marzo, en curso, la prensa nacional dio la información de la denuncia hecha por el Partido de la Liberación Dominicana –PLD- de un plan dirigido por elementos ligados al narcotráfico encaminado a realizar acciones desestabilizadoras para atribuirlas a ese partido.

En un seminario efectuado el día 11 del mes de febrero próximo pasado, en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, respondiendo una pregunta formulada por uno de los estudiantes asistentes, dijimos: “El próximo objetivo de los narcotraficantes es, en las venideras elecciones, apoderarse del Senado de la República para así tener un control directo del servicio judicial del país”.

Recientemente la prensa nacional publicó la denuncia hecha por el director de un programa de televisión en el sentido de que tenía informaciones de que narcotraficantes de Santiago habían celebrado reuniones en las que discutieron la posibilidad de en las próximas elecciones controlar el Senado por medio de senadores suyos.

El día 4 del mes de diciembre del pasado año, una persona de nuestra entera confianza nos informó que los narcotraficantes estaban utilizando placas de legisladores para transitar con impunidad por la frontera e introducir cocaína desde Haití hasta la República Dominicana.

El día 6 del mismo mes de diciembre, en horas de la tarde, nos visitó un periodista y directivo de un medio de comunicación de Santiago, para hacernos una entrevista. En el curso de la misma abordamos el tema de las drogas ilegales y el narcotráfico; entre otras cosas le dijimos que habíamos sido informados de que legisladores estaban prestando sus placas a narcotraficantes para introducir cocaína desde Haití; también le dijimos que esa información era confiable porque la persona que nos la había dado es muy seria y está bien informada.

Además, le dijimos al periodista que esa información la mantuviera en secreto porque estábamos a la espera de unas fotos que nos iban a suministrar de los vehículos con las placas de los legisladores.

La denuncia que hicimos mediante carta al fiscal de Santiago, la información que le dimos al periodista respecto al préstamo de placas de legisladores a narcotraficantes y la exposición que hicimos ante los asistentes al seminario de la PUCMM, han sido hechos y circunstancias que han tenido confirmación por las denuncias hechas, la semana pasada, por el PLD, el presidente de la Cámara de Diputados y un periodista director de un programa de panel de televisión.

Conviene precisar que las acciones que el narcotráfico tiene por finalidad llevar a cabo no es solamente la denunciada por el Partido de la Liberación Dominicana, sino otras de mayor dimensión en las que se mueven cientos de millones de dólares. Como dijimos en diciembre: los días venideros dirán. (120).

FUENTES:
(118) El Sol. 16 de marzo 1989.
(119) El Nacional. 16 de marzo 1989.
(120) El Nacional. 18 de marzo 1989.
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Debidamente informado de que el narcotráfico hacía gestiones para que se nombrara un fiscal de su agrado en Santiago, se lo hice saber a la opinión pública:

Afirman ‘narcos’ tratan influir nombramiento fiscal de Santiago

“SANTIAGO.- Grupos de narcotraficantes, especialmente de esta ciudad, influyen económicamente para que el nuevo procurador fiscal pendiente de designación aquí sea alguien de su confianza.

La denuncia es del presidente del Patronato Nacional AntiDrogas, comité de Santiago, doctor Ramón Antonio Veras.

Explica que de acuerdo a los detalles que ha obtenido, la designación del nuevo fiscal, que sustituirá al interino está aprobada “y su nombramiento es cuestión de días. Asegura Veras que los grupos del narcotráfico “están flojando miles y miles de pesos” para asegurarse que el nuevo fiscal responde a sus intereses. También denuncia que el narcotráfico ha madurado planes “en los que están en juego millones de dólares.

Hay muchos millones y algo que tiene más valor comercial que el dólar”, advierte en una declaración a nombre del PANAD, bajo su firma.

Recordó una carta del 21 de diciembre de 1988 remitida al entonces procurador fiscal, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, cuyo contenido confirma ahora el Partido de la Liberación Dominicana con su denuncia de ayer. Veras explica que en diciembre precisó a Castellanos Estrella que el narcotráfico estaba planeando una acción en grande, a ejecutarse en ese mes o en los primeros del próximo año (1989).

El jurista había expuesto que aunque como prueba no tenía documentos escritos, los datos que poseía eran confiables. A su entender, la denuncia dada por el Partido de la Liberación Dominicana aparecida el martes en diarios nacionales, confirma sus planteamientos ofrecidos en diciembre de 1988. (114).
En su oportunidad denunciamos la vinculación de narcotraficantes con legisladores del país, como lo recoge la prensa: “SANTIAGO.- Juristas locales consideran que la denuncia sobre participación de senadores y diputados en actividades del tráfico de drogas narcóticas desde y hacia el país, no hace más que reconfirmar informaciones anteriores sobre el particular, y por lo menos dos de esos abogados pidieron la renuncia del actual presidente de la Cámara de Diputados, ante la situación creada.

En declaraciones, el presidente de esta zona del Patronato Nacional de Lucha Contra las Drogas, doctor Ramón Antonio Veras, y los también doctores (abogados) Ángel Julián Serulle y Héctor Grullón Moronta, calificaron las denuncias como altamente inquietantes para la sociedad dominicana ya que se está hablando de uno de los poderes del Estado.

Veras, señaló en conversación con reporteros de El Nuevo Diario, que la denuncia sobre esas prácticas de prestar placas de diputados a narcotraficantes, responde a la verdad, ya que desde Haití narcotraficantes dominicanos, utilizando placas de legisladores dominicanos, estaban introduciendo grandes cantidades de cocaína a nuestro territorio, para luego ser trasladada a Estados Unidos.

“Ante esa información que recibimos, se la comunicamos a un periodista y director de un medio de comunicación de Santiago, y le dijimos, que estábamos esperando unas fotos en las que se probaba el tránsito de los vehículos cuando iban a Haití y cuando regresaban con el material, con la cocaína”, afirmó el doctor Veras.

Dijo que esa información la dio en el mes de diciembre y le dijo al periodista y director del medio que no hiciera pública la información hasta tanto obtuviera las fotos y otros datos.

Afirmó que la denuncia hecha por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) sobre acciones que pensaban llevar a cabo los narcotraficantes, también la había hecho el día 22 de diciembre pasado, en una carta publicada, en este mismo periódico, (El Nuevo Diario), en su página once, en la carta dirigida al procurador fiscal en forma pública a través de este periódico, le dijimos: “el narcotráfico está planeando una acción en grande a ejecutar en los últimos días de este año, o en los primeros meses de 1989, finaliza diciendo el doctor Ramón Antonio Veras en sus declaraciones para El Nuevo Diario”. (115).

El diputado Luís González Sánchez declaró que hacía tiempo que le habíamos hecho la denuncia de relaciones entre narcos y legisladores:

González Sánchez insiste; dice oficiales DNI le dieron informes.

“El presidente de la Cámara de Diputados insistió hoy en su afirmación de que los informes que ofreció al hemiciclo, en sesión secreta, sobre la alegada vinculación de algunos de sus miembros con acciones del narcotráfico, les fueron ofrecidos por oficiales del Departamento Nacional de Investigaciones (DNI), comentaristas de televisión, abogados y dirigentes de clubes.

Mientras, el senador Jacinto Peynado garantizó hoy que si la comisión que investiga las denuncias comprueba que hay legisladores implicados con narcotraficantes, sus nombres serán dados a la publicidad.

El presidente de la Cámara de Diputados, Luís José González Sánchez, no identificó a los oficiales del DNI que le habrían dado esos informes, ya que alegadamente, las confidencias les fueron ofrecidas por la vía telefónica.
No obstante, dijo que entre las demás personas que le hablaron sobre la supuesta implicación de legisladores en las acciones de narcotraficantes ciertamente se encuentran Ercilio Veloz Burgos, el abogado de Santiago Ramón Antonio Veras, un comentarista de televisión del canal 7 Cibao, al que no identificó, y varios dirigentes clubísticos, de quienes tampoco ofreció nombres.

También, González Sánchez explicó que su conciencia le obliga a compartir con sus colegas las confidencias que había recibido “y si no hubiese divulgado esos informes en la sesión secreta, juro que me hubiese dado un tiro”. (116)
Aunque el narcotráfico había hecho gestiones para que se designara en Santiago un fiscal titular que fuera su aliado, no resultó así como bien se lo declaré a la prensa.

Veras estima designación fiscal es un nuevo golpe al narcotráfico

“El doctor Ramón Antonio Veras, presidente del Patronato Nacional Anti-Drogas, consideró que la designación del licenciado Neuli Cordero González, como nuevo fiscal de Santiago, constituye un golpe contra el narcotráfico.

El doctor Veras, ex presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, estimó que el narcotráfico había movido mucho dinero, en los últimos días, para que la designación del titular de la fiscalía, recayera en uno de sus aliados.

El jurista puso, a manera de ejemplo, que esa intención de los narcotraficantes, la denunció el pasado fin de semana, por intermedio de la prensa nacional.

Y agregó que el licenciado Cordero González, desde ahora, debe contar con el respaldo de todos los abogados sanos, decentes y responsables de esta ciudad.
De acuerdo al doctor Veras, la decisión del presidente Balaguer, de nombrar en el cargo al licenciado Cordero González, tiene un gran acierto.

Dijo que su designación, constituye la mejor selección de los abogados que habían sido recomendados para dirigir la fiscalía de este distrito judicial.

Según el doctor Veras, nuevamente el narcotráfico fracasa en sus intenciones de querer apoderarse de algunos sectores importantes de la justicia. Consideró que todos los sectores progresistas de la ciudad, deben apoyar la designación del licenciado Neuli Cordero González, como nuevo fiscal de Santiago”. (117).

FUENTES:
(114) El Nacional. 9 de marzo 1989.
(115) El Nuevo Diario. 11 de marzo 1989.
(116) Última Hora. 13 de marzo 1989.
(117) La Información. 14 de marzo 1989.
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No me limité a expresar mi disgusto por la salida del licenciado Castellanos Estrella, de la fiscalía de Santiago, sino que precisé que él no había recibido el apoyo que necesitaba para enfrentar el narcotráfico.  Por tal razón dije:

Policía Nacional no colaboró con fiscal santiagués

“El doctor Ramón Antonio Veras (Negro) indicó que la renuncia del Procurador fiscal de este distrito judicial, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, se debió a la falta de colaboración de la policía, también a las apetencias personales de algunos abogados que no fueron solidarios con el funcionario, a la falta de apoyo de los gremios de los profesionales del Derecho y a escasez de recursos para enfrentar el narcotráfico en esta ciudad”. (108).

El gobierno presidido por el doctor Joaquín Balaguer, con su gestión de los diez años, quiso que me integrara a colaborar con el régimen; no acepté cargo, como lo reseña la prensa de la época:

El Gobierno trabaja en la creación de organismos para enfrentar narcotráfico; lo constituirían personalidades.

“Se informó que un alto funcionario del gobierno solicitó al doctor Ramón Antonio (Negro) Veras, que forme parte de una comisión que se integrará en Santiago, pero el jurista rechazó aceptar la designación porque, según se dijo, no quiere formar parte de ninguna institución, sin importar la naturaleza, que tenga carácter oficial.

Consultado al respecto, el doctor Veras confirmó que, ciertamente, se le ofreció formar parte de una comisión que a nivel oficial se va a formar en Santiago con el fin de que esté al frente de la lucha contra las drogas y el narcotráfico.

Dijo Negro Veras que prefiere, como simple ciudadano, continuar la lucha contra el fenómeno de las drogas, pero sin ninguna vinculación oficial, aunque confió que prestará toda la colaboración que requiera la comisión que se integre al efecto. Esta es la segunda vez durante el presente gobierno que el doctor Ramón Antonio (Negro) Veras, se le solicita que forme parte del gobierno. Se recuerda que en el mes de febrero, del pasado año, en una visita que hizo el doctor Veras al Palacio Nacional se le invitó a formar parte del gobierno desempeñando una alta posición, oferta que rechazó aunque agradeció la distinción que había tenido hacia él el presidente Balaguer.

En la actualidad Negro Veras preside en Santiago el Patronato Nacional Antidrogas, que funciona para toda la región del Cibao”. (109).

Preocupado por el desarrollo de las drogas ilegales, la influencia de los narcotraficantes, y al observar con la facilidad que obtenían su libertad una vez eran detenidos los narcotraficantes, en fecha 16 del mes de diciembre de 1988, me dirigí a los directores de las escuelas de derecho de las universidades PUCMM, Utesa, O&M, sugiriéndoles la celebración de un seminario, taller o mesa redonda para discutir la posición que debe adoptar el abogado o abogada, padre de familia, ante la petición que le haga un traficante o presunto narcotraficante de drogas narcóticas para que los defienda ante los tribunales.
A mi inquietud solamente respondió la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, la que por órgano del director del Departamento de Ciencias Jurídicas, licenciado Adriano Miguel Tejada, me informó de su asentimiento a la idea que había externado al respecto.

La PUCMM no solamente dio respuesta positiva a mi sugerencia sino que, tomando en cuenta que el gobierno había declarado el año 1989 como “Año de la Lucha Contra las Drogas”, decidió organizar un seminario sobre “La Ética y la Profesión Judicial” y me asignó, como exponente el tema: “El Abogado y los Crímenes Socialmente Nocivos. El Abogado Padre de Familia”.

Las conclusiones de mi ponencia fueron las siguientes:

Tomando como fundamento los puntos antes expuestos, presenté mis conclusiones así:

1ro. Los abogados y abogadas que tienen la calidad de padre o madre de familia, no deben asistir en sus medios de defensas a las personas que figuran en los expedientes relacionados con drogas ilegales y narcotráfico;

2do. Los abogados o abogadas que desem-peñen una función pública de relevancia y que puedan, en una u otra forma, influir en la conciencia de los ciudadanos, no deben asistir en sus medios de defensas a las personas vinculadas con expedientes por drogas ilegales o narcotráfico, sin importar que tengan o no la calidad de padre o madre de familia;

3ro. Los abogados o abogadas que desem-peñen cargos de directivos de las Asociaciones, Seccionales o el Colegio de abogados, se deben de abstener de asistir en sus medios de defensas a las personas que figuran en los expedientes por drogas ilegales o narcotráfico;

4to. Todo abogado o abogada que sirva como asesor legal de clubes culturales, sociales, recreativos, deportivos, religiosos, de escuelas o colegios, se deben abstener de prestar sus servicios profesionales a las personas involucradas en expedientes de drogas ilegales o narcotráfico;

5to. Se debe estudiar la posibilidad de que se formen en cada ciudad del país asociaciones de profesionales del derecho que tengan como objetivo principal no asistir en sus medios de defensas a personas vinculadas con expedientes de drogas ilegales o narcotráfico. (110).

La Asociación de Baloncesto de Santiago (Abasaca) hizo un reconocimiento a la labor que en Santiago estábamos llevando a cabo el licenciado Víctor José Castellanos y yo contra el narcotráfico, como lo reseñó la prensa de la época:

¿Te Enteraste?

“Comenté esta mañana en la redacción deportiva de El Nacional, lo bien que me sentía por la decisión de la Asociación de Baloncesto de Santiago (Abasaca) de rendir homenaje a dos héroes de la lucha contra las drogas en la ciudad cibaeña.

Los doctores Ramón Antonio Veras (Negro) y Víctor José Castellanos, abogados de mucho prestigio y seriedad en Santiago, hablarán en el acto de apertura del Torneo de Baloncesto de esa ciudad.

Es una demostración de que el periodista Carlos Manuel Estrella, se identifica con la lucha de los juristas Negro Veras y Castellanos. Así también los restantes miembros de la Abasaca y el arquitecto Emiliano Morel, presidente del Comité Organizador de la justa que reúne a los clubes Sameji, Cupes, de los Pepines, Domingo Paulino, Plaza Valerio, Pueblo Nuevo y Gregorio Urbano Gilbert. Pienso que Negro Veras y Castellanos, que han combatido a los traficantes de drogas, sin importar ser asesinados por esos malvados, merecen ese y un millón de reconocimientos más, pues es una demostración de que la juventud apoya a sus hombres valientes, abnegados y honestos.

Felicito a la gente de Abasaca. Mis congratulaciones a los juristas Negro Veras y Castellanos. Y que Dios los acompañe para que sigan luchando contra el narcotráfico”. (111)

El periodista y comentarista deportivo Rolin Fermín, también escribió:
“Una edición más de la justa del aro y el balón arranca hoy, la Novena, la que emerge como una de las más interesantes y debatidas en los últimos años. La nueva versión está dedicada a la lucha contra las drogas y tocará al ex –procurador de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos, realizar el saque de honor.

Ramón Antonio Veras (Negro), presidente del Patronato Regional contra las Drogas, agotará turno para motivar la decisión de la Asociación de Baloncesto de Santiago, de consagrar el evento en honor a la lucha contra las drogas y el narcotráfico”. (112).

Carlos Manuel Estrella, escribió:

Espaldarazo a Lucha Contra Drogas

“A pesar de mi doble calidad de cotidiano articulista de este diario, y ahora presidente del Comité Ejecutivo de la Asociación de Baloncesto de Santiago (ABASACA), no puedo ignorar la importancia y trascendencia de la ceremonia de apertura del IX torneo de baloncesto superior de esta provincia, efectuada el pasado viernes en el Palacio de los Deportes “Oscar Gobaira”.

Por prurito y ética no quería traer ese tema a este espacio. Pero debo hacerlo porque no es sólo deportivo, ni pretendo referirme a mí, sino a los personajes que allí coincidieron en lo que sin dudas fue un espaldarazo a la lucha de los sectores más sensatos de la sociedad en contra del vicio de las drogas y el negocio del narcotráfico.

La participación de los juristas Ramón Antonio Veras (Negro) y Víctor José Castellanos Estrella, quienes han estado a la vanguardia en la lucha contra las drogas, fue un justiciero reconocimiento a su labor y valentía para enfrentar ese mal y los sectores que se mueven en la impunidad de las sombras del poder.

Una instalación deportiva llena de bote en bote, con más de ocho mil almas, fue escenario para que la gente tomara consciencia de que la actividad del músculo y el espíritu es el mejor medio para alejar a la juventud de los vicios así como para motivarla a que se entreguen a la práctica sana del deporte”. (113). l

FUENTES:
(108) La Información. 1 de febrero 1989.
(109) Diario Libre. 9 de febrero 1989.
(110) El Nuevo Diario. 16 febrero 1989.
(111) El Nacional. 24 de febrero 1989.
(112) La Información. 24 de febrero 1989.
(113) La Información. 27 de febrero 1989.
Continuará la semana próxima

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Continuación de:

Carta a Víctor José Castellanos

D.-El narcotraficante está ganando la batalla en el terreno policial. No escapa a tu inteligencia que el nivel de credibilidad de la Policía Nacional para enfrentar el narcotráfico, está por el suelo. Los dominicanos no tienen confianza en ir a la Policía Nacional y exponerle la presencia, acciones y negocios de los narcotraficantes; prefieren visitarte a ti o ir a mi oficina. Tú tienes pruebas de que familiares de adictos, por mi mediación, han tenido la confianza de ir a tu despacho conmigo y no a la Policía Nacional. Todo esto independientemente de que el poder de los narcotraficantes llega hasta el punto de que, como es de tu conocimiento, tienen armas de diferentes calibres, las exhiben en forma alegre,  y dispuestos a desprenderle la cabeza al primero que trastorne sus negocios de drogas ilegales.

e) El narcotráfico está planeando una acción en grande a ejecutar en los últimos días de este mes o en los primeros meses del próximo año. De esta información no tengo documentos escritos, pero sí confiables datos que poco a poco estoy amarrando. No olvides, que cuando digo que la burra es prieta es porque tengo los pelos en las manos. Los días venideros dirán.

Quiero precisarte que tengo en mi poder prueba escrita o información testimonial confiable de todo lo que te he dicho por medio de la presente. Sé que tus declaraciones, a lo mejor, reflejan el criterio del funcionario judicial más que las del hombre que tiene en sus manos las pruebas y las informaciones de primera mano que demuestran que sí, que el narcotráfico, lamentablemente, está ganando la batalla social, económica, judicial y policial. Tenemos que aprender a que una cosa son nuestros deseos y otra, muy distinta, es la realidad. La dura realidad.

No te dirijo esta carta con ánimo de polemizar; simplemente la he hecho para puntualizar lo que, en términos generales, declaré hace unos días. Entre tú y yo el narcotráfico no va a abrir brecha; sabes que en la lucha contra el fenómeno de las drogas ilegales y el narcotráfico, somos aliados consecuentes, sinceros, fraternos y leales.  Con el cariño sincero de siempre te saluda. Atentamente”. (105).

Siempre sentí el calor solidario de los mejores sectores de la sociedad dominicana. La solidaridad conmigo y mi familia se manifestó desde todos los litorales políticos del país. El Comité Político del Partido Comunista Dominicano (PCD), en la edición número 469 del periódico Hablan Los Comunistas, declaró. Estaba convencido de lo que llegaría a ser en el país el uso de las drogas, lo que me impulsaba a exponer permanentemente mis ideas con relación a ese vicio, como se evidencia por el artículo que escribí así:

Drogas, división, etc.

El problema de las drogas ilegales y el narcotráfico reside no sólo en que daña la salud del ser humano, sino que contribuye a dividir la sociedad, no desde el punto de vista clasista, sino que crea rencores, rencillas, odios y desavenencias en el orden social, familiar, laboral, profesional, etc.

Una demostración de las fricciones que crean las drogas ilegales y la influencia del narcotráfico,  se comprueba en la sociedad dominicana.

Aquí desde que las drogas y el narcotráfico tomaron fuerza, prácticamente se ha dividido la familia, división entre el padre que ve con pesar y amargura a su hijo enfermo, adicto a las drogas, y no sabe cómo enfrentar la situación, y por otro lado la madre atormentada, angustiada, golpeada en lo más profundo de su corazón al ver a su hijo hecho un guiñapo humano, a lo mejor creyendo que el padre puede solucionar el problema inmediato. División en el seno de los abogados, entre los que abiertamente declaran que no defienden narcotraficantes y los que sostienen que sí, que son profesionales liberales, técnicos del derecho y que nada les impide vender sus servicios a quien mejor se lo pague.

División, por un lado, entre el juez serio, honesto y responsable que tiene una posición de firmeza y línea dura contra los narcotraficantes, y por el otro, el juez sinvergüenza deshonesto e irresponsable que inclina su voluntad por dinero o cobardía.

División entre amigos que tienen criterios diferentes con relación a la necesidad que hay de enfrentar públicamente el narcotráfico; división entre militares y policías, unos con línea dura contra el narcotráfico y otros complacientes o indiferentes al problema.

División entre intelectuales, unos que ponen su talento al servicio del narcotráfico, y otros que ponen su inteligencia y su pluma para enfrentarlo; división entre los empresarios que han hecho su dinero con las reglas normales del sistema, y otros que, de la noche a la mañana, han hecho fortunas fabulosas con el dinero del crimen del narcotráfico, división entre la banca que se ha desarrollado conforme el proceso social dominicano, y la que se ha hecho al vapor con el dinero lavado del narcotráfico.

División entre los vecinos que no hacen vida social con los narcotraficantes, y los que asisten a las fiestas de los “narcos” en las que regalan relojes a los que les hacen compañías en su orgía; división entre los estudiantes que dicen no necesitar drogas narcóticas para estimular sus estudios, y los que dicen que “usar drogas narcóticas” contribuye a elevar el nivel en los estudios”.

En fin, las drogas ilegales han dividido la sociedad dominicana en todas las esferas de la vida nacional, comenzando con los militantes religiosos y terminando con los que activan en la vida política del país.

Hoy por hoy no hay un lugar o ambiente social en el que las drogas ilegales estén ausentes; están presentes en todas partes y su uso es tema de discusión en restaurantes, clubes sociales, centros deportivos, profesionales, laborales, en sí, en una u otra forma se discute el efecto nocivo que producen las drogas ilegales.

Las opiniones están divididas; unos consideran que usar drogas narcóticas es algo que forma parte de la vida privada de cada persona física. Otros creen, por el contrario, que el fenómeno de las drogas, al afectar la salud del ser humano tiene que ser enfrentado, a nivel social, por todos, sin importar color, religión, posición social e ideológica.

Si el narcotráfico está sembrando la mala ley entre nosotros, si pretende dañar a nuestros hijos, a la juventud dominicana; si pretende convertir a la República Dominicana en una sociedad de hombres y mujeres enfermos, sin sentido de la lucha, del deber, del amor, del trabajo, de la felicidad, del afecto, de la solidaridad, en fin, si el narcotráfico pretende transformar las costumbres sanas y nobles del pueblo, debemos, por sentido de la vida, por sentido familiar, por respeto a las mejores tradiciones de nuestros hombres y mujeres amantes de la paz y el trabajo, enfrentarlo movilizando lo mejor del país, sin importar que forme parte de la sociedad civil organizada o del estamento militar. (106).

El narcotráfico tomaba fuerza en el seno de la sociedad dominicana. El licenciado Víctor José Castellanos hizo una labor positiva en la fiscalía de Santiago, lo que no era del agrado de los narcos y sus aliados, y disgustado renunció  al cargo que desempeñaba. Ante su decisión le declaré a la prensa:

Renuncia fiscal de Santiago por presiones de narcotráfico; afirma estaba “asqueado”

El procurador fiscal de Santiago renunció a su cargo con efectividad al día de hoy debido a que calificó como situación “asqueante”, y por las presiones a que lo estaban sometiendo sectores vinculados al narcotráfico.

Habla Negro Veras

El doctor Ramón Antonio Veras calificó de lamentable la renuncia del fiscal de Santiago del que dijo que es “un funcionario sencillamente ejemplar en el desempeño de sus funciones.

“El no estaba obligado ni al sacrificio ni a convertirse en un Quijote. Ante esa renuncia me permito llevar al doctor Joaquín Balaguer una petición como ciudadano, como padre de familia y como directivo del Patronato Nacional Anti Drogas, que ante la renuncia del licenciado Castellanos Estrella se nombre en su lugar a una persona que reúna las condiciones de honrado, valiente, talentoso, firme y responsable”, dijo el doctor Negro Veras.

Agregó que la persona que vaya a ocupar el lugar dejado por el fiscal de Santiago debe haber exhibido una conducta pública ejemplar en la lucha contra el narcotráfico, “sin importar militancia o pensamiento político”.

“El ciudadano presidente Balaguer debe saber que en Santiago hay una ardua lucha contra el narcotráfico y que en la Fiscalía se requiere una persona seria, ecuánime, responsable y dispuesta a jugarse la vida defendiendo esa lucha”, expresó el doctor Veras a requerimiento del El Nuevo Diario por la vía telefónica.

Indicó que personas vinculadas al negocio del narcotráfico se han dado a la tarea de frotarle 350 mil pesos por la cara a funcionarios judiciales que no han cedido ante esa tentación y agregó que ese es el tipo de fiscal que se necesita allí tras la renuncia de Castellanos Estrella.

“Pero sabemos que no todos los funcionarios judiciales están dispuestos a soportar un cañonazo de 350 mil pesos”, advirtió Veras. (107).

FUENTES:
(205) El Nacional. 1 de enero 1989.
(206) El Nacional. 28 de enero 1989.
(207) El Nuevo Diario. 31 enero 1989.
Continuará la semana próxima

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Continuación de:

Carta al secretario de las FF.AA.

Cuando lanzamos críticas a una persona, civil o militar, no es con el ánimo de que se extiendan a la institución u organismo de que forma parte esa persona. No escapa a su inteligencia el que, en los últimos tiempos, personas vinculadas a los cuerpos policiales han sido sorprendidas traficando con estupefacientes y esto no quiere decir, en modo alguno, que toda la institución puede ser señalada como vinculada con esta actividad.

No compartimos el criterio externado por la FF.AA. en el sentido de que nuestra declaraciones sean “desestimulantes para los institutos armados”, por el contrario, creemos que la crítica sana, hecha por nosotros o cualquier ciudadano, contribuye a fortalecer la imagen de las FF. AA. Porque pone de manifiesto que si bien es cierto que uno u otro militar deshonra a la institución, el cuerpo, como integridad, se mantiene al margen de los actos bochornosos e ilegales.

Creemos que los cuerpos armados no tienen ninguna duda  de nuestra posición abierta en contra de todo lo que signifique delincuencia en nuestra sociedad y muy especialmente en contra de la producción, consumo y tráfico de estupefacientes.

Precisamente, señor secretario, la denuncia que hicimos de que un narcotraficante había sido puesto en libertad en forma irregular, ha puesto precio, a nivel nacional e internacional, a nuestra cabeza; y no dude usted que el documento emitido por las FF. AA., y que motiva esta carta, aliente a grupos desaprensivos del narcotráfico y a otros sectores vinculados al crimen político, a elaborar planes criminales en contra de nuestra vida y la de familiares cercanos.

No creemos que el documento emitido por las FF. AA. solicitándonos explicación de nuestra declaración, tenga fines aviesos ya que la institución tiene legítimo derecho a solicitarle explicaciones a cualquiera, sean personas físicas o morales, que se refiera a ella.

Lo que sí es lamentable es que personas malvadas se aprovechen de ustedes para fines  inconfesables en contra nuestra.

Por último, en dicho documento, las FF. AA., nos solicitan que señalemos, públicamente, además de los militares, a los funcionarios del actual gobierno que estarían involucrados en actividades de narcotráfico.

Respecto a los militares ya le hemos respondido, en cuanto a los funcionarios, que suponemos civiles, podemos decirle que tenemos en nuestro poder documentos que revelan que altos funcionarios vinculados con el gobierno prestan su concurso a grupos relacionados con el narcotráfico.

Lamentablemente, los documentos e informaciones de los cuales hablamos, fueron obtenidos en razón de nuestro ejercicio profesional de abogado, lo que nos impide, como Ud. bien sabe, revelar su origen.

La manera como los narcotraficantes obtienen licencia “legal” para portar armas de diversos calibres es una de las diferentes formas que reciben el apoyo de funcionarios ya que sin su concurso esto sería imposible.

Creemos que con el contenido de esta carta se satisface, en gran parte, el requerimiento hecho por la Secretaría de las Fuerzas Armadas en su comunicación. Le confieso, señor secretario, que con la presente no nos anima polemizar con los cuerpos armados ya que en la lucha contra el crimen del narcotráfico tenemos, con las FF. AA. más puntos que nos unen que los que nos pueden separar.

Con respeto y consideración le saluda. Atentamente, Dr. Ramón Antonio Veras.
(*) (Fuente: archivo personal del Dr. Ramón Antonio Veras).

El narcotráfico, ante la imposibilidad de silenciarme o eliminarme físicamente, gestionó ante instancias oficiales para que se me fabricara un expediente político por conspirador para así justificar mi expulsión del país; recurrí nuevamente ante la opinión pública y  denuncié las pretensiones de deportación.

He aquí algunas publicaciones relacionadas con el asunto antes expuesto:
“El Dr. Veras invitado a salir del país”. 1988. “Invitan a Negro Veras a abandonar el país, porque organismos de seguridad no garantizan su vida, jefe P.N. habría invitado a Negro Veras salir del país.” El Nuevo Diario, 19 de abril de 1988.

“Hecho preocupante, como sin frenos”. El Nuevo Diario. 19 de abril de 1988.
“Negro Veras no comenta supuesta recomendación para que abandone país”. La Información. 20 de abril de 1988.

“¿Deportar a Negro Veras?” El Sol. 25 de abril de 1988.

Las pretensiones de deportación no se materializaron. Le di continuación a la campaña de denuncia que llevaba a cabo ante la opinión pública y que fue recogida por distintos medios de comunicación de la época.

Al llegar a su final el año 1988 le declaré a los medios de comunicación del país, mi creencia con relación a lo que, a mi entender, había significado la lucha contra las drogas ilegales. Nuestra opinión no fue compartida por Víctor José Castellanos, quien en ese momento ocupaba la función de fiscal titular de Santiago.

Le respondí de manera pública al licenciado Castellanos Estrella, en la forma siguiente:

Carta a Víctor José Castellanos

Estimado Víctor: En declaraciones que hice a la prensa recientemente dije, entre otras cosas, que aunque durante el año 1988 se ha llevado una fuerte lucha contra las drogas ilegales y narcotráfico, estamos perdiendo la batalla en el terreno social, económico, judicial y policial y que, además, el narcotráfico está preparando una acción en grande que llevará a cabo en los últimos días de este mes o en los primeros meses del próximo años. Luego de mis declaraciones tú dijiste, por medio de la prensa radial y escrita, que rechazabas lo que yo había dicho y que a mí que presentara las pruebas de lo que decía.

Por medio de la presente te ratifico lo que declaré recientemente en el sentido de que el narcotráfico, no obstante las acciones tomadas en su contra, está ganando la batalla, y esto así por lo siguiente:

a) El narcotráfico está ganando la batalla en el terreno social, porque a la luz de la realidad dominicana son más y más los dominicanos, de uno y otro sexo y de las diferentes clases y capas sociales, que se convierten en adictos a las drogas ilegales, y si tú quieres comprobar esto solamente tienes que visitar los barrios donde habita en Santiago la clase alta, media y baja. Tú mismo declaraste a la prensa, en el día de hoy que: “la semana pasada once personas, entre ellas dos mujeres, fueron traducidas a los tribunales al ocupárseles cocaína y otro tipo de drogas narcóticas”.

Estos datos revelan, por sí solos, el nivel de penetración social que tienen las drogas ilegales en el seno de la sociedad. En este orden te puedo decir, en nuestro lenguaje de abogados: a confesión de parte relevo de prueba.

b) El narcotráfico está ganando la batalla en el terreno económico, y esto así porque las informaciones publicadas en la prensa, así como los expedientes que reposan en los archivos del Departamento Judicial bajo tu responsabilidad, demuestran que en Santiago un solo narcotraficante tiene, en dinero efectivo, más de sesenta millones de pesos, y entre vehículos y bienes inmuebles más de noventa millones de pesos. No escapa a tu conocimiento el gran poder que ejerce el narcotráfico en el sector financiero del país hasta el punto de que, hoy por hoy, los narcotraficantes tienen más fuerza económica de circulación diaria, que los comerciantes y empresarios que han hecho su dinero con las reglas normales del sistema social imperante en el país.

c) El narcotráfico está ganando la batalla en el terreno judicial. En este orden creo que tú tienes más informaciones y datos que yo, pues los hechos son los hechos y no se derriten; basta con hacerse la pregunta de ¿cuántos narcotraficantes hay, en la actualidad, detenidos en la ciudad de Santiago por tráfico de drogas ilegales? Esta pregunta tú puedes responderla más que nadie, aunque sé que para ti es un trago amargo saber que el esfuerzo que has hecho ha sido en vano, pues los narcotraficantes se ríen con la muela de atrás ya que su prisión, momentánea, ha sido como un simple paso, un susto en su labor habitual. No olvides lo que ha dicho el doctor Balaguer (la justicia es un mercado, se vende); el arzobispo Nicolás López Rodríguez (la justicia es la culpable del desarrollo del narcotráfico), el obispo Mamerto Rivas (la justicia dominicana como que es medio sinvergüenza). (105).

FUENTES:
(*) Archivo personal del doctor Veras.
(105) El Nacional. 1 de enero 1989.

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La situación amarga que viven hoy muchos hogares dominicanos, la comencé a denunciar desde hace varios años, partiendo de la experiencia que viví en el seno de muchas familias cuyos hijos fueron víctimas del vicio de las drogas, lo que me impulsó a escribir el siguiente artículo:

Las drogas y una madre desesperada

El estado de desesperación de algunos padres por el problema de sus hijos adictos a las drogas, es sumamente alarmante.

Hace unos días una madre nos llamó por teléfono a nuestra oficina: nos dijo que tenía urgencia en hablarnos sobre algo que era de su interés; le dijimos que podía visitarnos en horas de la tarde de ese mismo día; la madre accedió.

Una vez en nuestra oficina, la señora madre nos dijo: “el motivo de mi visita es con el fin de exponerle un problema que afecta a toda mi familia, mi hijo mayor desde hace muchos años es un adicto a las drogas narcóticas; él ha llegado a un estado tal de adicción que, cuando no dispone de dinero para comprar cocaína, amenaza con eliminar físicamente a su hermana, mi otra hija, que es doctora; no sé qué hacer, pues él ha estado sometido a los tribunales, pero inmediatamente lo ponen en libertad; temo por la vida de mi hija; la desesperación se ha apoderado de mí; no sé qué hacer, estoy viviendo momentos amargos; soy viuda y no quisiera que mi hija se convierta en una víctima de su hermano; quisiera que usted me diga qué puedo hacer, estoy desesperada”.

Las palabras de la atormentada madre llegaron a lo más profundo de nuestro corazón; comprendimos su situación y preocupación y en su condición es posible que se encuentren otras madres dominicanas, por el problema de las drogas narcóticas.

Creemos que se debe legislar para que, casos como el que preocupa a la madre que nos visitó, sean resueltos. El grado de desarrollo que ha tomado en el país el uso y abuso de las drogas narcóticas no se soluciona con la Ley 50-88, ni con instituciones como Hogares Crea o Casa Abierta.

Aquí se necesitan organismos estatales que tengan por finalidad curar a los enfermos víctimas de las drogas ilegales. El caso que narramos de la madre que nos visitó no es el único que conocemos; son muchos los hogares de Santiago que están hoy destrozados por el problema de las drogas ilegales.

Las autoridades deben estudiar la posibilidad de que ante el requerimiento de un familiar cercano, un adicto a las drogas ilegales sea internado en un centro de recuperación con el fin, primero, de curar a un enfermo, y segundo, evitarle fatales consecuencias a la sociedad y a la familia del adicto.

Lamentablemente hoy no hay en nuestro país una institución financiada por el Estado y dirigida por verdaderos especialistas en diferentes ramas de las ciencias médicas y sociales, para internar a los adictos. Por muy positiva y necesaria que sea la labor de Hogares Crea, creemos que el número de adictos a las drogas ilegales, y los problemas familiares que están creando, están por encima de su capacidad.

Quisiéramos que la madre que nos visitó no vea un desenlace fatal como ella supone que puede ocurrir, es decir, el adicto agrediendo a su hermana para que le suministre dinero para comprar cocaína. (104).

CAPITULO IV.- El narcotráfico y el comienzo de su influencia en el Estado dominicano. Las Fuerzas Armadas y el narcotráfico. Un emplazamiento. El narcotráfico impulsa mi salida del país. Se pierde batalla contra el narcotráfico.

Nueva carta al fiscal de Santiago. Renuncia del fiscal de Santiago. Sugerencias a universidades sobre drogas ilegales y narcotráfico. El reconocimiento de Abasaca al fiscal de Santiago. El narcotráfico y un nuevo fiscal de Santiago. El narcotráfico y los regidores. El narcotráfico me difama. Otra carta a un padre de familia. El narcotráfico sigue ganando la batalla.

En el año 1988 ya el narcotráfico se sentía con firmeza e influencia en diferentes instituciones y organismos del Estado dominicano, incluyendo el área policial y militar.

Por el hecho de yo denunciar ante la opinión pública que oficiales de alto rango habían participado en una fiesta en la ciudad capital celebrando la puesta en libertad de un narcotraficante, recibí constantes amenazas al igual que mi familia. La situación llegó a tal punto de que la Secretaría de Estado de las Fuerzas Armadas me emplazó, por medio de un comunicado publicado en la prensa escrita, para  que aportara la prueba de mi denuncia, lo que hice de inmediato, tal como fue publicado en el periódico El Siglo de fecha 1 de noviembre de 1989.

Con relación al mismo caso, en fecha 30 de octubre de 1989 le remití una carta pública al secretario de Estado de las Fuerzas Armadas de esa época, teniente general Elías Wessin y Wessin, la cual textualmente dice así:
Carta al secretario de las FF.AA.

Lunes 30 de octubre de 1989. Señor: Tte. General Elías Wessin y Wessin. Secretario de la FF.AA. Su despacho.

Señor Secretario:

Diferentes medios de comunicación del país han publicado una declaración emitida por la Secretaría de las Fuerzas Armadas, en la que se nos pide que señalemos,  por el medio que consideremos mas idóneo, los nombres de los militares que participaron en una fiesta que tuvo lugar en el sector Arroyo Hondo de la capital, en la que supuestamente fue celebrada la puesta en libertad de un narcotraficante.

De seguro que la mención nuestra a  que la comunicación hace referencia, es a una declaración que hicimos al día miércoles 25 del mes en curso en el programa Revista 110. Que produce el doctor Julio Hazím, en el sentido de que el 31 de diciembre del año 1987, en una residencia del sector de Arroyo Hondo, se había celebrado una fiesta por la puesta en libertad de un narcotraficante y que a la misma habían asistido militares incluyendo oficiales.

El día 7 del mes de enero del año 1988, con motivo en la puesta en libertad, en forma irregular, de una persona vinculada con el narcotráfico, hicimos la denuncia en nuestra condición de Presidente,  para esa época, de la Asociación de Abogados de Santiago.

Ante nuestra denuncia fue reapresado el narcotraficante; entonces la Procuraduría General de la República, ordenó una investigación del caso y se comprobó la forma ilegal en que se obtuvo la libertad del delincuente.

Además de la investigación ordenada por la Procuraduría General de la República, la directiva de la Asociación de Abogados de Santiago decidió realizar otra más profunda.

Una de las personas que la Directiva de la Asociación entrevistó, manifestó que en una fiesta celebrada en la ciudad de Santo Domingo, en Arroyo Hondo específicamente, en la que estaba presente el narcotraficante puesto en libertad en forma ilegal, se encontraban, además, varios militares e incluso nos señaló el nombre de un oficial activo de las FF.AA. y de otro retirado.

El resultado de la evaluación que hizo la Asociación de Abogados de Santiago, se le envió, mediante carta de fecha 12 de febrero de 1988, al secretario de Estado de las Fuerzas Armadas por lo que es de suponer que en los archivos de esa Secretaría, reposa la comunicación del gremio de abogados de Santiago, a la que nos remitimos.

Además, luego, en forma confidencial, hablamos con un oficial activo de la FF.AA. que en presencia de otro y a su requerimiento, confirmó su asistencia a la fiesta, aunque dijo que había sido sorprendido en su buena fe respecto al origen y naturaleza de la invitación a la fiesta.

En otro orden, el documento emitido por la Secretaría de las Fuerzas Armadas, dice que…”la denuncia de Veras, así como otras que se han producido últimamente constituyen un ultraje a la dignidad de los hombres de uniforme”.

Debemos precisar señor secretario , que respetamos mucho la dignidad del ser humano así como las honras bien ganadas y tenemos por norma no herir sentimientos y mucho menos los de una institución que, como las FF.AA., es hoy la única, conforme lo hemos dicho en reiteradas oportunidades y por diferentes medios, que mantiene un sentido real de institución y disciplina y en la que están los hombres que, en su momento oportuno, junto a los civiles dignos y sanos, van a producir los cambios que requiere nuestro país.

Lo dicho anteriormente no lo hacemos para halagar a los hombres de uniforme, ganar aprecio político ni por sensiblería. Nuestro criterio responde a convicciones desde hace mucho tiempo afinadas y afianzadas. (*).

FUENTES:
(104) El Nacional. 10 de diciembre 1988.
(*) Archivo personal del Dr. Veras.

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He aquí el contenido íntegro de otra carta que remitimos al licenciado Víctor José Castellanos Estrella, procurador fiscal de Santiago:Carta al Fiscal de Santiago

“Honorable Magistrado:

En los últimos días he sentido preocupación por el gran desarrollo en Santiago de las drogas ilegales y el amplio poder de los narcotraficantes. Ante tal situación he decidido remitirle esta carta y exponerle algunas ideas, las cuales sugiero analice detenidamente porque creo pueden ser de utilidad en la lucha contra la última lacra que ha generado el sistema social bajo el cual vivimos, el de las drogas narcóticas y el crimen organizado con su cabeza visible en los narcotraficantes.

No escapa a su inteligencia que hasta ahora las medidas de orden represivo y legal contra los narcotraficantes no han dado los resultados apetecidos, por lo que se impone buscar nuevos medios y métodos, principalmente de orden social, en los que tenga una participación activa y determinante el pueblo, la juventud, los educadores, etc. La idea que me permito sugerirle es la siguiente:
Cuando ante un tribunal se vaya a conocer de un expediente, con motivo de un recurso de Hábeas corpus o del fondo, en los cuales estén involucrados reales o presuntos narcotraficantes, la fiscalía debe invitar para que estén presentes en la audiencia, 1.- A los estudiantes de colegios públicos y privados y secundarios; 2.- A los directivos de las Asociaciones de Padres y Amigos de los colegios, y escuelas si las hay; 3.- a los sacerdotes de las parroquias por donde tengan sus domicilios y residencias el o los narcotraficantes a los cuales se les va a conocer el recurso de Hábeas Corpus o el fondo del asunto; 4.- Al presidente de la Asociación de Abogados de Santiago; 5.- Al Secretario General de la Seccional del Colegio de Abogados; 6.- Al director de los clubes sociales Gurabito, Santiago, Centro Español; 7.- A un directivo de los clubes de servicios Leones, Activo 20-30, Rotario y de los Jaycees; 8.- A un directivo de los Caballeros de la Altagracia; 9.- Al director de un periódico local; 10.- A un representante del Sindicato o Colegio de periodistas.

Es posible que sea una tarea algo laboriosa, pero de seguro que dará sus resultados, ¿por qué? Por lo siguiente:

En la audiencia estarán presentes fuerzas vivas que, en una u otra forma, pueden ejercer cierta influencia de respeto, de valor ideal, ideológico. Sería como sentar a los reales o presuntos narcotraficantes ante un solo juez legal, pero ante varios jueces sociales. La decisión que se dicte en presencia de las personas que representan las organizaciones en la sala de audiencia, de seguro que serán portadoras de la vivencia que hayan tenido en todo el curso del proceso, además de que se formarán una idea, más o menos clara, del resultado del juicio e identificación, en caso de ser condenados, a los reales narcotraficantes.

El objetivo de lo que le planteo por medio de la presente no es que quiera pasar a los narcotraficantes por una especie de Horcas Caudinas. Es simplemente para que ante la debilidad de las instituciones para sancionar y enfrentar el narcotráfico, que sea el poder social, el poder del pueblo, el que imponga su sanción, aunque sea de presión moral.

Convocar a las personas o instituciones a una audiencia no está al margen de la Ley 50-88, ni en contra de las disposiciones del Código de Procedimiento Criminal; por el contrario, se afianza más la ley, se fortalece el carácter público del proceso, el pueblo se orienta mejor y de viva voz de lo que ocurre y, además, en la escuela o colegio, parroquia o centro de diversiones, etc., se sabrá, real y efectivamente, a qué miembro se tiene como integrante, asociado o feligrés.

Espero que lea detenidamente el contenido de esta misiva”. (102).
Porque consideraba que resultaba sumamente positivo poner al descubierto a todos aquellos que, en una u otra forma, estaban relacionados con el sucio negocio de las drogas, escribí planteando la siguiente sugerencia:

A las audiencias de la Ley 50-88

Hace unos días publicamos, en esta misma columna, una carta que le remitimos al licenciado Víctor José Castellanos Estrella, procurador fiscal del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de Santiago, en la que hacíamos una serie de sugerencias con la finalidad de que la ciudadanía sensata, preocupada por los problemas que afectan a la sociedad, particularmente la de Santiago, participe, en una u otra forma, en las audiencias en las que se conozcan expedientes relacionados con drogas ilegales y narcotráfico.

Ante la publicación de la carta algunos amigos nos han dicho que ven como positiva la sugerencia que hicimos al fiscal de Santiago, pero no creen que sea posible viabilizar la idea. Creemos que sí, que se pueden crear mecanismos que hagan efectiva la sugerencia.

En la carta le decíamos al procurador fiscal de Santiago, entre otras cosas, que cuando en la ciudad de Santiago se fuera a conocer de un expediente relacionado con la Ley 50-88, sea con motivo de un recurso de Hábeas Corpus o ante la jurisdicción de juicio, sería conveniente que él invitara, para que estuvieran presentes en la audiencia, como observadores u oyentes, a los directivos de la Asociación de Padres de los colegios privados y escuelas públicas, a los estudiantes de intermedia y secundaria, a los directivos de los clubes sociales, Leones, 20-30, Rotarios; al sacerdote de la parroquia por donde tiene su domicilio el narcotraficante acusado o prevenido, a los directivos de los Caballeros de la Altagracia, al director de La Información, a la directiva de la Asociación de Abogados de Santiago y de la Seccional del Colegio de Abogados, así como a otras instituciones cívicas y sociales de Santiago.

Para convocar a estas instituciones basta con poner a una secretaria de la fiscalía para que busque las direcciones y teléfonos de cada una de ellas; se hace contacto con la directiva o el presidente de la institución, o se le remite una carta-circular explicándole el objetivo de la misma y la preocupación de la fiscalía para que estén presentes en las audiencias en las que se conozcan expedientes relacionados con la Ley 50-88.

También se puede utilizar, como canal de comunicación con las instituciones, a la Asociación de Abogados de Santiago y la Seccional del Colegio de Abogados. Estas dos organizaciones de los abogados y abogadas de Santiago, serán informadas por la fiscalía cada que vez que se vaya a conocer un expediente tipificado con la Ley 50-88 y la Cámara Penal apoderada del mismo; ya en conocimiento de esa situación, los gremios de los abogados de Santiago, utilizando el correo o el teléfono, harán comunicación con los directivos de las instituciones a fin de que estén presentes en el conocimiento de la audiencia el día y hora indicados.

Creemos que sí, que se puede materializar la idea que expusimos al procurador fiscal de Santiago. Además, existen otros mecanismos, a lo mejor más efectivos que le que sugerimos, para que estén presentes las instituciones señaladas.
Lo que sí es cierto es que sin el concurso de la Asociación de Abogados de Santiago y la Seccional del Colegio, el procurador fiscal de Santiago no puede llevar a la práctica lo que le planteamos.

Cuando una sociedad es atacada, y sus mecanismos legales resultan ineficaces, debe apoyarse en sus instrumentos sociales, en las masas, en las partes sanas de la sociedad; nuestra sociedad está enferma y necesita ser curada o, por lo menos, salvar sus partes que todavía están sanas o que pueden ser salvadas.

La ciudad de Santiago no se está comportando indiferente ante el fenómeno de las drogas. Hemos visto que la ciudadanía sensata está de pie; hemos visto a los estudiantes marchar por las calles, hacer guardia en el frente del Palacio de Justicia, como diciendo: “Aquí está la juventud de Santiago, contra la influencia de los narcotraficantes, contra las drogas ilegales y contra todo lo nocivo que se mueva aquí”.

Si la mente humana es mala, como decía Orlando Martínez, busquemos la parte buena de ella para ponerla al servicio de nuestros niños, de nuestros jóvenes, pues son ellos, en fin de cuentas, los dueños del futuro, futuro que esperamos sea el gran futuro luminoso de toda la humanidad. (103).

FUENTES:
(102) El Nacional. 24 de noviembre 1988.
(103) El Nacional. 4 de diciembre 1988.
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Escribir artículos y dictar conferencias fueron  labores que en un principio dieron sus frutos para la edificación de la opinión pública. He aquí algunos escritos que hice para fijar en la conciencia pública el fenómeno de las drogas y lo nocivo para la sociedad:
Colegio, elecciones y narcotráfico
En diferentes oportunidades hemos dicho que la Ley 50-88, que sanciona el uso de drogas ilegales y el narcotráfico, no logrará los fines perseguidos si no se crean tribunales especiales para conocer exclusivamente de expedientes relacionados con drogas narcóticas y narcotráfico. También hemos dicho que esos tribunales especiales deben estar integrados por jueces designados por el Senado de la República de una terna o sugerencia que le presente el Colegio de Abogados de la República Dominicana.Hace unos días le planteaba la idea de la creación de los tribunales especiales a un amigo y colega. El nos dijo que la idea es muy buena pero que, en todo caso, depende de las personas que integren la directiva del Colegio de Abogados, porque se puede dar el caso que, en un momento dado, el colegio esté bajo la dirección de un grupo de abogados y abogadas relacionados con el narcotráfico, indiferentes al fenómeno de las drogas ilegales y al narcotráfico. Le dimos la razón al amigo y colega, y como el próximo mes de diciembre se efectuarán elecciones para escoger el comité directivo que regirá los destinos del Colegio de Abogados de la República Dominicana, conviene que desde ahora los abogados y abogadas comiencen a pensar, con mucho detenimiento, en los colegas que deben ser elegidos para dirigir nuestro gremio.
Creemos que a la dirección del colegio deben ir abogados y abogadas que, además de representar, real y efectivamente los intereses gremiales, hayan demostrado que no tienen ninguna vinculación con las drogas ilegales ni con los narcotraficantes. Además, creemos que las planchas que participen en las próximas elecciones deben decir claramente qué posición tienen con relación a las drogas ilegales y el narcotráfico.
La plancha que resulte ganadora de los comicios en el seno del Colegio de Abogados de la República Dominicana, debe ser la que en su programa de trabajo se obligue ante los colegas y la sociedad dominicana, que ninguno de sus miembros intervendrá en casos relacionados con la Ley 50-88, sin importar inocencia o culpabilidad de la o de las personas involucradas en el expediente, o lo que es lo mismo, que ningún directivo del Colegio puede desempeñar la función de abogado o abogada de casos de drogas ilegales o narcotráfico. Debemos de ser cuidadosos al escoger la próxima directiva que regirá los destinos de nuestro Colegio. Los colegas que tienen vinculación con el narcotráfico, no deben postularse para ningún cargo; hay que ser coherente: no se le prohíbe a ningún colega, abogado o abogada, que defienda ante los tribunales a los narcotraficantes, pero que no sea directivo del Colegio. Hay que cuidar la condición y calidad de directivo del gremio. Nuestro Colegio está llamado a desempeñar un papel preponderante en la escogencia de los jueces por el Senado, y resulta feo, chocante, que un directivo y abogado de los narcotraficantes influya para que se designen los magistrados que en un futuro van a juzgar a los narcotraficantes.
No constituye una deshonra para un abogado o abogada defender, como profesional del Derecho, a una persona acusada ante los tribunales de ser narcotraficante. Está dentro de su derecho, de su libertad de ejercicio profesional, el hecho de que un abogado defienda a determinada persona, sin importar la calidad o incriminación que tenga el expediente.
Lo que criticamos es, única y exclusivamente, la calidad de directivo del Colegio de Abogados de la República Dominicana y la situación de defensor de los narcotraficantes. Esto no quiere decir que pensemos que al abogado defender a un narcotraficante se identifica o hace causa común con el narcotráfico. Que quede esto bien claro. Lo que queremos es que se establezca una especie de incompatibilidad de tipo gremial, entre el que es directivo del colegio y ejerce la profesión de abogados asumiendo la defensa de presuntos narcotraficantes. (100).
He aquí la carta que remití a un amigo que estaba preocupado por un hijo involucrado en las drogas:
Carta a un amigo, por su hijo
Querido amigo, hermano y compañero:
El año 1988, a punto de llegar a su final, ha sido para mí traumático, no obstante que tiene significación personal ya que el próximo mes de diciembre cumplo cincuenta años de edad. Dos hechos marcan este año con el signo negativo, en el aspecto afectivo y personal: primero, yo descubrí la falsedad de amigos con los cuales había compartido la mayor parte de mi vida, y el segundo hecho se relaciona contigo, porque tu hijo Daelay se ha convertido en adicto a las drogas. No sabes el golpe que recibí en mi conciencia cuando supe que Daelay estaba internado en una clínica por efectos de drogas narcóticas. La noticia me dejó atónito, no supe qué hacer; solamente atiné a llamar a tu compañera y preguntarle, en forma muy disimulada, cómo estaba toda la familia, sin dejarle saber a ella que el motivo de mi llamada era que supiera que yo tenía conocimiento de lo ocurrido con Daelay.
Sé que esto ha sido un golpe muy duro para ti, conozco tu temperamento, tú forma de ser, tu disciplina y firmeza. Pero las realidades de la vida hay que enfrentarlas y cuando se trata de asuntos familiares, hay que darle el frente. Tú eres el padre de Daelay, pero no cómplice de sus hechos; estás vinculado a él por la sangre, relaciones afectivas y familiares, pero no por sus actos, a los cuales eres extraño. Lo mismo tiene que decir su madre.
El caso de tu hijo Daelay tenemos que analizarlo en forma objetiva, sin caer en la desesperación, el hijo tuyo no ha sido el primero y a lo mejor, durante mucho tiempo, no será el último. El fenómeno de las drogas narcóticas ilegales va a golpear el corazón de muchos padres.
Quiero confesarte que cuando te visité recientemente me sentí afectado al ver tu estado de ánimo; noté que tú estás destruido, fuera de ti, y no es para menos.  Daelay, es tu hijo mayor, con apenas veinte años de edad, y para ti resulta un golpe demoledor saber que él se encuentra internado en una clínica por una crisis de drogas narcóticas. Pero, tal como hablamos, tenemos que buscarle solución al problema de Daelay, no podemos ponernos a llorar y a lamentarnos. Los hechos son los hechos y nos se derriten, y como dice nuestro pueblo: a lo hecho pecho.

Lo primero es resolver el problema de Daelay. Los pasos que se han dado –con su internamiento- son los más positivos y adecuados; las diligencias que se están haciendo para fines de internamiento prolongado aquí o en el extranjero, las veo muy bien. Con los otros hermanitos, seguir las conversaciones como amigo y como padre, explicándoles lo que le ocurrió a Daelay y decirles que nada de lamentos, que lo de Daelay sirva solamente como una falla de juventud y nada más, y que pronto él se integrará a la familia como todo un hombre nuevo, con una dolorosa experiencia, pero experiencia al fin. Sé que para sus hermanos el caso de Daelay ha sido penoso; porque te confieso que yo, que no tengo vínculos de sangre con él, cuando llegué a tu casa y entré a su habitación y ví su motor, su guitarra, su equipo de música, su cama, sus perfumes, sus libros, etc., sentí nostalgia, en cada objeto material de su habitación figuraba a su persona.

No quiero que te amilanes, quiero verte como siempre te he visto: firme, decidido, dispuesto a la lucha, al combate. Lo que le ha ocurrido a Daelay, pudo haberle ocurrido a uno de mis hijos; vivimos en una sociedad preñada de vicios, y nuestros hijos no están al margen de ella. Tú, al igual que yo y todos los padres dignos del país, nunca pensaste que un hijo tuyo iba a caer en la drogadicción, pero no ignoras que una cosa es la educación que damos a nuestros hijos en la casa y otra, muy distinta, la influencia que ejerce el medio sobre ellos.

Te conozco; sé que eres un hombre valiente. Te he conocido en los estrados, con toga y birrete, defendiendo, con tu inteligencia, sagacidad y talento, la tesis jurídica que crees ajustada a la ley y al derecho; defendiendo los perseguidos políticos cuando aquí a muchos colegas se les encogían los órganos genitales; sé que desafiaste la dictadura trujillista y que preferiste el exilio antes que chuparle las medias al tirano, y cuando ha sido necesario, sin importar fronteras, has empuñado el fusil para defender los derechos de los que sufren.

Para terminar esta carta quiero decirte que vamos a luchar para que Daelay se sane completamente, sin importar los recursos a invertir y las puertas a tocar.
Ahora bien, no podemos quedarnos tranquilos; hoy, tú eres el padre víctima, mañana puedo ser yo, o cualquier otro padre dominicano. Por eso tenemos que ponernos en guardia. Creo que el narcotráfico hay que enfrentarlo. No hay que esperar más tiempo, unámonos. Busquemos alianza con lo mejor de nuestras Fuerzas Armadas; con lo poco que sirve de la Policía Nacional y el Servicio Judicial, y como el doctor Balaguer, ha demostrado, hasta ahora, que no está identificado con el narcotráfico, aprovechemos la presente coyuntura.

En mi vida no quiero ver otro padre dominicano en una situación semejante a la tuya. Sé que Daelay se va curar, eso lo deseo de todo corazón y tú lo sabes. Pero que Daelay sea la última víctima.

Espero que mis palabras lleguen a tu corazón y sean asimiladas por tu compañera y todos tus hijos, así como por tus amigos que, como yo, hoy están con el corazón desgarrado por el drama que vive tu primogénito Daelay y toda tu familia. Te quiero mucho. (101).

FUENTES:
(100) El Nacional. 17 de noviembre 1988.
(101) El Nacional. 20 de noviembre 1988.
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Continuación del artículo
Preguntas en una charla en Licey

En el plano nacional, aunque no se han hecho estudios profundos con relación al uso de drogas ilegales, un  trabajo preparado el año pasado por un grupo de médicos dominicanos dio como resultado que el uso de drogas ilegales, de diferentes naturaleza, había aumentado en el país, particularmente en la ciudad capital, en más de un cuarenta por ciento y que el uso se expresaba directamente tanto en colegios privados como en escuelas públicas, sin distinguir entre centros de educación a nivel primario, intermedio o secundario.

Con respecto al negocio de las drogas ilegales, tanto en Estados Unidos como en el país se observa una tendencia progresiva en el número y volumen de ganancias de los narcotraficantes. En el orden internacional, basta con señalar que “en el VI Congreso internacional de Combate a las Drogas, celebrado a principios del presente año en Río de Janeiro, se destacó que el tráfico de narcóticos se ha convertido en la tercera actividad lucrativa del mundo, sólo superada por las exportaciones de petróleo y de armas”.

En nuestro país resulta casi imposible, a nivel nacional, cuantificar el monto de las entradas de los narcotraficantes criollos aunque, por lo menos en la ciudad de Santiago, tenemos datos que nos llevan a considerar que los que se dedican al negocio de las drogas tienen inversiones por encima de los dos mil cuatrocientos millones de pesos. Basta con señalar que uno solo de ellos es dueño absoluto de lujosas urbanizaciones ubicadas en el centro de la ciudad, mientras que otro tiene inversiones, en dinero efectivo, por encima de los veintitrés millones de pesos.

Creemos que aunque a nivel nacional se está haciendo, en los últimos tiempos, esfuerzos, a nivel de algunas áreas de poder para controlar el uso de drogas ilegales y la influencia de los narcotraficantes, todavía estamos muy lejos de decir que se ha logrado un control efectivo del uso y negocio de las drogas ilegales. (97).

Los narcotraficantes ubicados en Santiago, tenían la creencia de que mis denuncias reiteradas servían de motivación a la persecución policial y decisiones judiciales, lo que les impulsó, en algunos momentos, a proferir amenazas en mi contra las cuales me vi en la necesidad de responderles, en la forma que fue recogida por la prensa así:

Negro Veras dispuesto a enfrentar narcos y criminales

Santiago. El abogado Ramón Antonio Veras, advirtió que está “preparado para enfrentar a los criminales ligados al narcotráfico en Santiago” en el terreno que escojan. Veras se refirió en esos términos a los traficantes de estupefacientes luego de aclarar que no tiene nada que ver con el apresamiento de dos sujetos sometidos a la justicia por alegada vinculación al comercio de las drogas.

Denunció que “elementos sospechosos” que consideró como “grupos de tabarrones, maleantes y criminales vinculados al narcotráfico”, se pasean por el frente de su oficina en forma amenazante.

“Estamos preparados para enfrentarlos en el terreno que escojan, porque no nos van a amedrentar y les vamos a responder con la misma arma que nos ataquen”, sostuvo el expresidente de la asociación de Abogados de Santiago.

Advirtió que las amenazas de esos individuos “no intimidan a nadie y la próxima vez que se presenten en forma provocadora en el frente de nuestra oficina les vamos a responder en la forma adecuada.

No vamos a esperar que se materialicen acciones criminales en contra nuestra”, enfatizó el doctor Veras. Y agregó que “el dinero, las armas y el número de vehículos de los narcotraficantes, no les da valor personal”.

Los individuos que merodean la oficina del doctor Veras estarían relacionados a quienes la Dirección General de Drogas vincula al narcotráfico en Santiago. (98).
Con la finalidad de no crear confusión, muchas veces me ví en la necesidad de aclarar opiniones que vertía por los medios de comunicación, en una conferencia o charla, como ocurrió con el artículo que transcribo más abajo.

Narcotráfico y autoridades de Santiago

En una charla que dictamos en la comunidad de Licey, Santiago, hicimos referencia a la situación que se presenta en la cárcel pública de Santiago, con el uso y tráfico de drogas ilegales, la cantidad de dinero que ha gastado un adicto y narcotraficante, y las bondades que se les dispensa a los delincuentes de cuello blanco, vinculados al narcotráfico, a los cuales se les alquilan habitaciones por la suma de cien pesos oro semanales.

Luego de nuestra exposición, el procurador fiscal de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, que se encontraba presente en el acto, restó veracidad a lo que habíamos dicho, y como él expuso su criterio en público nos vimos en la imperiosa necesidad de darle una explicación de lo denunciado.

Le dijimos al licenciado Víctor José Castellanos, que sabemos que está de buena fe interesado en enfrentar el uso y tráfico de drogas ilegales, pero que escapa a su control el funcionamiento de la cárcel pública de Santiago; que una vez que un narcotraficante es apresado la fiscalía no puede decir si está consumiendo droga, vendiéndolas en la cárcel ni el lugar que está recluido.

Explicamos también que ni el mismo jefe de la policía tiene el control de la situación que se presenta en la cárcel pública de Santiago. Esto lo dijimos en presencia del general José Ramón Mota Paulino, quien también se encontraba presente en la charla.

Tenemos la firme creencia de que, por lo menos en Santiago, el procurador fiscal, el jefe del Comando Norte y el jefe del Ejército Nacional, no tienen relación con los narcotraficantes ni son tolerantes con ellos, pero no podemos “meter las manos” más allá.

Son muchos los intereses que se mueven alrededor de los narcotraficantes, y si nos aventuramos a decir que el fiscal Víctor Castellanos, el jefe del Comando Norte Mota Paulino y el general García Tejada nos merecen confianza, es porque conocemos sus actuaciones, su firmeza, seriedad y responsabilidad como representantes del ministerio público, de los cuerpos policiales y militares, respectivamente.

Hay que ser muy cuidadoso para hacer una afirmación, incluir o excluir una persona o institución civil, policial o militar en el asunto del uso y negocio de las drogas, y tanto es así que en marzo del presente año, la televisión británica presentó una obra dramatizada bajo el título de Base Aérea. Mostraba a un grupo de oficiales norteamericanos inyectándose sustancias alucinógenas y totalmente borrachos en compañía de prostitutas.

El gobierno norteamericano protestó por la exhibición de la pieza, pero se vio en la imposibilidad de negar que tales situaciones no fueran reales.

Pero algo más, recientemente, en Detroit, 14 agentes fueron expulsados del cuerpo al resultar positivo los análisis de sangre efectuados para descubrir a adictos. Otros 12 fueron suspendidos de sus cargos por su vinculación, con los estupefacientes. Solamente entre 1986 y 1987, se enjuició en Miami, 36 policías por actividades similares. Una veintena más se encuentra bajo investigación”.

En el curso de la charla que dictamos en Licey, a la cual ya hemos hecho referencia, dijimos, y lo ratificamos ahora, que en nuestros artículos, charlas, declaraciones y conferencias con respecto al uso de las drogas ilegales y los narcotraficantes no buscamos herir a ninguna persona o institución. Nuestro único objetivo es denunciar el fenómeno para que sea conocido, y denunciarlo citando casos precisos que han ocurrido o están ocurriendo en el país.

Creemos que en la ciudad de Santiago de los Caballeros, algunas autoridades no han contado con el concurso de padres, directores de escuelas privadas y públicas, hombres y mujeres ligados a grupos de servicios, etc., para enfrentar el uso de drogas ilegales y el narcotráfico.

Si contamos con un jefe policial, un jefe del ejército y un fiscal no aliado con el narcotráfico, debemos de sacarle a esa situación el mayor provecho. Sería muy conveniente que en un futuro no muy lejano las fuerzas sanas de Santiago se pongan en tensión y den los primeros pasos para que los jefes policiales, militares, y el ministerio público sientan el calor solidario de la lucha contra el narcotráfico.

No todas las ciudades del país cuentan con un conjunto de fuerzas oficiales identificadas en la lucha contra los narcotraficantes. Si la Policía Nacional no se ha ganado la confianza pública, a nivel nacional, en la lucha contra el narcotráfico, aprovechamos la coyuntura que se presenta en Santiago con el general Mota Paulino; fortalezcamos la confianza que el pueblo tiene en las Fuerzas Armadas para enfrentar el narcotráfico y continuemos la solidaridad con el procurador fiscal, no olvidemos que también los padres, profesores y demás fuerzas sociales tienen responsabilidad en la lucha contra las lacras sociales, principalmente contra el narcotráfico. (99).

FUENTES:
(97) El Nacional. 12 de noviembre 1988.
(98) Última Hora. 12 de noviembre 1988.
(99) El Nacional. 14 de noviembre 1988.
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Al fiscal de Santiago

He aquí el contenido íntegro de una carta que remití al procurador fiscal de Santiago.

“Estimado Víctor:

Por órgano de los diferentes medios  de comunicación del país me he informado de la sugerencia que has hecho con relación a la necesidad de la formación de un frente contra el narcotráfico. Comparto tu opinión.

No escapa a tu conocimiento que el fenómeno del narcotráfico tiene fuerza en Santiago: cuenta con recursos económicos, con vínculos políticos, policiales y militares. Los hechos son los hechos y no se derriten, y los hechos nos dicen que en Santiago los narcotraficantes están acumulando fuerzas para luego lanzarse contra todos los que, en una u otra forma, nos oponemos a sus designios.

Los narcotraficantes en Santiago ya han demostrado que tienen armas, porque han exhibido hasta metralletas; tienen medios ilegales para legalizar sus armas, falsificando documentos de Interior y Policía y la Asociación Médica; tienen dinero, porque datos que nos han proporcionado revelan que en Santiago un solo narcotraficante tiene un patrimonio de más de sesenta millones de pesos, en fin, los narcotraficantes están sentando su base en forma firme en esta ciudad, y lo peor de todo es que algunos santiaguenses les hacen el juego, les temen o se transan con ellos por dinero, por halagos o por simple miedo.

En estos momentos, que tu vida y la de tu familia más cercana está amenazada, quiero estar más a tu lado como amigo, como colega, como padre de familia y como un simple ciudadano. He sentido en carne propia las acciones de los narcotraficantes hasta el punto de que, conjuntamente con mi familia, he tenido que cambiar totalmente mi vida privada y familiar; he limitado mi vida profesional y hasta he sido víctima de ataques mezquinos, hirientes y malvados lanzados, por todos los medios, por mis adversarios en el orden político, profesional y hasta por algunos que durante mucho tiempo dijeron ser mis amigos. Pero. ¡carajo! No importa, Víctor, vamos hacia delante, creo que estamos al lado de la verdad, de lo justo y de lo que le conviene y quiere la gran mayoría del pueblo dominicano, aunque hoy las grandes mayorías nacionales no puedan expresar su sentir.

El frente contra el narcotráfico, ante la dificultad en estos momentos de integrarlo a nivel nacional, puede comenzar en Santiago y en él conviene que estén integradas las siguientes personas, representativos o instituciones, por encima de diferencias políticas, ideológicas, sociales y religiosas: Un representante del ministerio público, la gobernadora de Santiago, el jefe de la Policía Nacional en Santiago, el jefe de la Aviación Militar en Santiago, el jefe del Ejército en Santiago, un profesional del derecho y uno de la medicina, un director de una escuela pública secundaria, un dirigente estudiantil y un dirigente sindical.

Un miembro del Sindicato de Periodistas, un representante de Hogares Crea, un representante de Adora, un sacerdote de parroquia y un empresario.

Te confieso que quisiera que la idea con relación al frente contra el narcotráfico no se quede en tu cabeza y en las páginas de los periódicos. La presente coyuntura es propicia para la creación de un instrumento alrededor del cual se integren todas las fuerzas sanas de Santiago que se oponen al desarrollo de las drogas ilegales y el narcotráfico. Con la formación del frente en Santiago, en todo el país se van a crear más hasta cubrir la República entera con una especie de sombrilla humana que proteja a nuestros hijos, y a las generaciones venideras, del flagelo de las drogas.

Ya para terminar quiero decirte que tienes que mantenerte, como hasta ahora, armado de valor personal; no ceder ante las amenazas; la difamación, intrigas, chismes y todas las bajas pasiones humanas, que el narcotráfico ha comprado con su dinero sucio de sangre, dolor, muerte y desesperación. (95) El Nacional. 7 de noviembre de 1988. (95).

En los marcos de las posibilidades de libertades públicas siempre aproveché los diferentes escenarios para edificar a distintos sectores de la sociedad dominicana, como se evidencia por la conferencia que dicté en la comunidad de Licey, y que fue recogida por la prensa así:

Negro Veras asegura poder de narcotraficantes logra invertir reglas de juego de la sociedad

“LICEY AL MEDIO, Santiago. El expresidente de la Asociación de Abogados de Santiago estimó que el poder del narcotráfico es tan influyente que ha logrado invertir las reglas del juego en nuestra sociedad. El doctor Ramón Antonio Veras dijo que esa inversión de reglas ha sido el eje principal en la crisis de valores que se observa en la sociedad dominicana.

El hombre digno y modelo ya no es el intelectual serio y honesto, ni el comerciante y empresario que ha prosperado con su trabajo digno y honrado. No; aquí lo que se resalta es el profesional o intelectual que pone su talento al servicio del narcotráfico”, señaló el jurista santiagués.

Precisó que de pronto se han convertido en hombres “dignos de la sociedad los comerciantes y empresarios que se convierten en socios de narcotraficantes para enriquecerse.

En fin, el narcotráfico ha extendido sus tentáculos a todas las instituciones del país, sin excluir ninguna, sin distinguir la sociedad civil organizada, incluyendo el estamento militar y policial”, manifestó Negro Veras.

El doctor Veras emitió sus consideraciones en una conferencia que dictó en este municipio sobre el abuso del consumo y tráfico de estupefacientes, a la que asistieron cientos de personas, incluyendo a las autoridades de la provincia.

Manifestó que los halagos de los narcotraficantes atraen a profesionales, intelectuales, civiles y militares. Agregó que los costosos regalos, las pomposas fiestas ponen en comunicación a los jefes del narcotráfico con los resortes del poder.

“En una fiesta organizada por los narcotraficantes y sus cómplices es fácil ver a jueces, fiscales, legisladores, abogados, representantes del cuerpo diplomático, de los cuerpos policiales y militares, en intercambios de impresiones y chocando las copas con los narcotraficantes”, señaló el doctor Veras. Citó como altamente preocupante el hecho de que, según indicó, los narcotraficantes en la ciudad de Santiago tienen inversiones que sobrepasan los dos mil 500 millones de pesos.

Podemos decir con documentos en las manos que en Santiago un solo narcotraficante tiene en efectivo alrededor de 60 millones de pesos”, afirmó el ex presidente de la Asociación de Abogados de Santiago. Abogó porque se fortalezca su idea de que se constituya en el Norte una asociación regional contra el narcotráfico, que se convierta en un instrumento de lucha, orientación y denuncia, con miras a enfrentar esa actividad”. (96)

Posteriormente escribí un artículo con relación a preguntas que me hicieron en el curso de mi exposición. He aquí lo que expuse:

Preguntas en una charla en Licey

A instancias del Club de Leones de la comunidad de Licey, Santiago, dictamos una charla con relación al sentido de la Ley 50-80, aspectos sociales de los narcotraficantes en el país.

Luego de terminada la charla, fuimos sometidos a un bombardeo de preguntas formuladas por los asistentes, calculados en más de mil personas. Un joven nos preguntó que si creíamos que como consecuencia de las medidas tomadas a nivel nacional e internacional para enfrentar el uso de drogas narcóticas y el narcotráfico, se había limitado su uso y negocio.

Le respondimos que no obstante las medidas tomadas, los informes de que disponemos nos decían que el uso de drogas narcóticas ha seguido aumentando tanto a nivel nacional como internacional.

Así, por ejemplo, “los procesos iniciados en 1987 en España por el tráfico de drogas fueron 24,515 prácticamente el doble de los 12,655 correspondientes al año anterior. Una selva de coca, con unas diez mil hectáreas, la más extensa que se ha descubierto en Colombia, fue allanada recientemente. El consumo de drogas en Argentina se ha convertido en una realidad alarmante, como consecuencia del tráfico cada vez mayor y la presencia de bandas de narcotraficantes internacionales”.

En otro orden, según fuentes de la Organización de las Naciones Unidas, en 1985 se confiscaron a lo largo y ancho del planeta 14 toneladas de heroína, 41 de opio, 56 de cocaína, 360 de hachís, y 6,500 de marihuana. De todos esos cargamentos las autoridades solamente son capaces de expropiar el 5% del tráfico internacional. (97).

FUENTES:

(95) El Nacional. 7 de noviembre 1988.
(96) El Nuevo Diario. 11 noviembre 1988.
(97) El Nacional. 12 de noviembre 1988.
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Las denuncias que formulaba respondían a mi convicción de que nuestro pueblo estaba en presencia  del fenómeno de las drogas y la incidencia del narcotráfico. Poco a poco el tiempo me fue dando la razón, y así lo escribí:

Drogas, hechos y realidad

Es una verdad irrefutable que los hechos se nutren de realidades. Por más que el ser humano se proponga desconocer una verdad, el tiempo le dará en la cara con la contundencia de los hechos que coronan esa verdad. Hemos dicho lo anterior porque cuando comenzamos, por medio de artículos, por programas de radio y televisión a denunciar la realidad, el desarrollo de las drogas ilegales y la influencia de los narcotraficantes en Santiago, algunas personas dijeron que nuestras denuncias tenían una fuerte dosis de política y que eran fundamentalmente alarmistas. Pero el tiempo se ha encargado de darnos la razón y ha hecho ver a los incrédulos de buena fe, y también a los malvados, que no hablábamos por hablar, que los hechos son los hechos y no se derriten.

Así, por ejemplo, habíamos denunciado que en Santiago no eran dos ni tres los que hacían uso de las drogas ilegales, que eran muchos los jóvenes que estaban en eso; que no eran ni dos ni tres los narcotraficantes, sino muchos; que los narcotraficantes tenían armas de diferentes calibres, incluyendo metralletas; que los narcotraficantes tenían una protección oficial que llegaba hasta las alturas; que los narcotraficantes disponían de fuertes sumas de dinero para comprar inmuebles, vehículos y también conductas torcidas y conciencias sucias. En fin, habíamos denunciado que las drogas ilegales no solamente penetrarían a los barrios marginados, a los de clases altas, a colegios, y hoy, según tenemos informes, el uso de las drogas ilegales ha tocado las puertas hasta de sindicatos de trabajadores.

Las últimas acciones llevadas a cabo por el procurador fiscal de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, contra los narcotraficantes, y las investigaciones posteriores demuestran que, pura y simplemente, la ciudad de Santiago es un nido de narcotraficantes; que uno solo de ellos dispone de una fortuna de más de sesenta millones de pesos incluyendo unos veinticinco millones en efectivo.

Además, las acciones del procurador fiscal de Santiago han servido para demostrar que en nuestro país los narcotraficantes no han comenzado a asesinar y a ejecutar acciones criminales, de todo tipo, porque no han sentido que el poder del Estado les ha ido encima, pero que si se ven acorralados estás dispuestos a pasar de las amenazas a los hechos. Por una acción del licenciado Víctor José Castellanos, han amenazado con atentar contra su vida y la de su familia más cercana.

Sabemos que los que subestimaban nuestras denuncias lo hacían, unos por desconocimientos de la realidad, otros por bellaquería, y algunos por complicidad con los narcotraficantes. Pretendían, los cómplices de los narcotraficantes, cubrir con el manto de la intriga, el chisme, la difamación, el revanchismo personal y la maldad, la verdad de los hechos.

Por feliz casualidad es mayoría el número de hombres y mujeres honestos del país, aunque los vagabundos aparentan ser más porque levantan su voz más alta para que no se escuche la verdad de las grandes mayorías, o de los que tratan de interpretar su sentir.

Si ayer escribimos en base a datos e informaciones aportadas por personas serias y responsables, con respecto al desarrollo de las drogas ilegales en Santiago y la influencia de los narcotraficantes, hoy podemos exhibir las pruebas; pruebas irrefutables, la prueba por excelencia –la prueba escrita-, y no prueba buscada ni fabricada por nosotros, sino una prueba arrojada por los mismos narcotraficantes. Hemos tenido que pagar con la más profunda amargura de nuestra vida el hecho de denunciar el uso de las drogas ilegales y la fuerza de los narcotraficantes en Santiago. Nuestros adversarios políticos e ideológicos; los enemigos por asuntos profesionales, y hasta amigos, que no eran más que enemigos encubiertos, se cebaron lanzando en contra nuestra palabras hirientes; utilizaron los medios de comunicación para golpearnos en el plano político, moral, profesional, familiar, hasta extender la cuerda del odio para llegar hasta herir a nuestros amigos más íntimos y queridos. Las zancadillas llegaron hasta indisponernos con los jueces para obligarnos a limitar o dejar el ejercicio de la profesión de abogado.

Pero ya lo hemos dicho; si en otras oportunidades hemos sido objeto de actos de violencia física y de encierros humillantes en las cárceles del país por decir lo que creemos es la verdad, hoy estamos dispuestos a pagar con nuestra propia vida por denunciar las lacras de nuestra sociedad entre las que hoy se destaca el fenómeno de las drogas y el narcotráfico.

Quisiéramos que ninguno de los hijos de los que nos difamaron, insultaron, injuriaron, utilizaron intriga para indisponernos con jueces y fiscales, militares, policías, etc., lleguen a convertirse en adictos a las drogas ilegales, porque se van a sentir mal, les va remorder su conciencia, y a lo mejor dirán, en voz baja, “!caramba!, si en lugar de ponernos a difamar e injuriar a Negro Veras, hubiéramos hechos causa común con él, hoy nuestros hijos no fueran enfermos, víctimas de las drogas ilegales”. De todas maneras, nosotros vivimos tranquilos. Por medio de esta columna tratamos de decir lo que ha ocurrido o está ocurriendo, o en todo caso, exponer una idea con relación a un fenómeno social, económico o político. Creemos que “lo pasado, es pasado. Siempre queda un futuro para todos aquellos que tienen virtud para arrepentirse y energía para reparar aquél”. (93)

Escritos permanentes relacionados con el narcotráfico, escribí en los distintos medios de comunicación, como los dos que transcribo a continuación:

Drogas, cárcel y santiago
Si en este país algunas personas se manifiestan contra el narcotráfico por estar a la moda, hay otras que tratamos de tener frente a ese fenómeno una posición coherente, denunciando el fenómeno, señalando sus causas y sus efectos, así como a sus encubridores.

En la ciudad de Santiago la lucha contra el narcotráfico y las drogas ilegales, no ha sido nada fácil. En un principio algunos santiaguenses de buena fe, subestimaban la profundidad, el alto desarrollo que había alcanzado el uso de las drogas narcóticas y el gran poder de los narcotraficantes. Hoy, ya no se discute la realidad que hace tiempo habíamos denunciado. Pero ahora queremos denunciar algo peor, y es el tráfico de drogas narcóticas en la cárcel pública de Santiago. De nada sirve la labor que hacen los medios de comunicación llamando al pueblo a que no haga uso de las drogas ilegales, y de la firme campaña llevada a cabo por el Procurador fiscal de Santiago, persiguiendo a los narcotraficantes, si una vez los enfermos  en el uso y los narcotraficantes son apresados, encuentran en la cárcel, los adictos “el material”, y los narcotraficantes siguen su negocio. Recientemente visitó nuestra oficina la hermana de un joven adicto a las drogas que se encuentra recluido en la cárcel pública de Santiago, y nos informó que desde que su pariente está detenido ha invertido en drogas narcóticas alrededor de nueve mil pesos oro; que “el material” que le suministran los narcotraficantes, en la misma cárcel, es “manteca”, mariguana, a “perico”, cocaína y otros tipos de drogas.  La hermana del recluso dio la información con mucho pesar y nos dijo que informaba el caso no por el dinero que había gastado su hermano, sino porque ella cree que el esfuerzo que están haciendo algunos ciudadanos, para enfrentar el narcotráfico, resulta frustrado ya que los adictos encuentran el veneno en la misma cárcel que debiera servir para curarlos, a la vez que los narcotraficantes aumentan en ella su fortuna porque venden las drogas narcóticas en el recinto carcelario a un precio más elevado que en la calle. La denuncia que nos hizo la hermana del recluso adicto que se encuentra en la cárcel pública de Santiago, nos ha llenado de estupor, indignación y desazón, porque ¿en qué estamos, es que el dinero del narcotráfico ha calado tan hondo en la conciencia de algunos dominicanos, es que el narcotráfico, es, real y efectivamente, el dueño de la sociedad dominicana?

¿Cuál es el límite de los narcotraficantes?  Señores, si no fuera porque conocemos los nobles sentimientos, el valor personal, la abnegación de la gran mayoría de los dominicanos, ahora mismo dijéramos: “Esto se jodio, aquí no hay nada que hacer; Víctor José, deje el cargo de fiscal, vuelva a su cátedra y entregue la fiscalía para que la ocupe un abogado o abogada que se identifique con los narcotraficantes”. Los adictos a drogas narcóticas y los narcotraficantes, encuentran en Santiago un campo ideal para sus vicios y actividades, porque además de ser un campo abierto para invertir –o lavar dinero sucio- tienen la ventaja de que si son detenidos en la cárcel pueden adquirir “su material” los adictos, y los narcotraficantes un campo de operaciones para la venta de sus productos.

Además si desean estar bien cómodos tienen la posibilidad de recibir en el alquiler, dentro de la cárcel pública de Santiago, habitaciones especiales a RD$100.00 por semana. Y que conste que todo lo que hemos relatado en este artículo es la expresión de la verdad. Una verdad tan grande como el Monumento a la Restauración o la catedral de Santiago. (94).

FUENTES:
(93) El Nacional. 28 de octubre 1988.
(94) El Nacional. 5 de noviembre 1988.
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Araíz de la puesta en vigencia de la Ley 50-88, para sancionar la producción, consumo y tráfico de estupefacientes, surgieron distintas opiniones en torno a ese estatuto legal. Al respecto escribí:Nueva Ley de Drogas

Medios de comunicación, personalidades, organizaciones de servicios y gremiales se han animado, y hasta sentido satisfecho, con la promulgación de la Ley 50-88 sobre Drogas y Sustancias Controladas de la República Dominicana, y que tiene por finalidad sancionar el uso y tráfico de drogas ilegales.

Para dar cumplimiento a la Ley 50-88, el Poder Ejecutivo ha designado a personas de la vida pública, vinculadas con organismos religiosos, policiales, militares, bancarios, cívicos, etc. Esto tiene como única finalidad llenar los requisitos legales; formalizar la creación de los mecanismos que señala la disposición legal ya indicada.

Tenemos la firme creencia de que la Ley 50-88, no va a contribuir en nada a solucionar el desarrollo del uso de las drogas ilegales y mucho menos a enfrentar el narcotráfico. Para hacerle frente al fenómeno de las drogas se requiere algo más que una simple Ley. Así, por ejemplo, los tribunales del país han demostrado, hasta ahora, que no han sido lo suficientemente fuertes, firmes y decididos para aplicar las disposiciones legales a los narcotraficantes.

La prensa nacional nos trae cada día informaciones en las cuales ciudadanos por ejemplo de Moca, Montecristi, Barahona y Puerto Plata expresan su indignación por las sanciones benignas que se les impone a los narcotraficantes, además, cuando los narcotraficantes resultan con sanciones ejemplarizadoras se “fugan” o son beneficiados con la libertad condicional.

Los mecanismos, los instrumentos que tiene la nueva Ley, son muy hermosos, pero en la práctica carecen de efectividad. Hemos dicho, y lo ratificamos ahora, que en el país para enfrentar el narcotráfico a nivel social se impone difundir en el seno del pueblo los efectos y consecuencias negativas de las drogas ilegales; una voluntad oficial firme y decidida para enfrentar el narcotráfico y sancionar a los que, en cualquier esfera, civil, policial y militar, les prestan concurso a los narcotraficantes, no importa lo tímida que sea la colaboración; crear un tribunal especial para que conozca, única y exclusivamente, de los casos de uso y tráfico de drogas ilegales; que el tribunal instituido al efecto esté compuesto por jueces sugeridos al senado de la República por el colegio de Abogados de la República Dominicana; celdas especiales para recluir a las personas condenadas por tráfico de drogas ilegales y, por último, que todas las emisoras del país dediquen un espacio diario para educar a la ciudadanía con relación al uso de drogas ilegales y sus consecuencias a nivel social, de salud y familiar. Las medidas que indicamos anteriormente son enunciativas; existen otras que se pueden aplicar y que no requieren del gobierno la gran inversión económica.

Lo lamentable de todo es que, a medida que transcurra el tiempo, el narcotráfico toma más y más fuerza en el país a nivel económico y social, mientras la juventud dominicana, decepcionada por la falta de esperanza en el porvenir, busca en las drogas una salida emocional a sus aspiraciones; el narcotráfico satisface sus aspiraciones desmedidas de dinero, a costa del sacrificio, el luto, el dolor y el hundimiento de lo poco sano que tiene la sociedad dominicana. (90)

La necesidad de la unificación de lo mejor del país para enfrentar el fenómeno de las drogas y su ilegalidad, lo expuse así:

Negro Veras sugiere “Frente regional” contra narcos

“SANTIAGO.- El jurista Ramón Antonio Veras sugirió hoy la creación de un frente regional contra el narcotráfico que integre representantes empresariales, la policía, la gobernación provincial, los miliares y a dirigentes sindicales.

La propuesta del ex presidente de la Asociación de Abogados de Santiago fue planteada en documento enviado procurador fiscal de esta ciudad, licenciado Víctor José Castellanos Estrella.

Veras sostiene que debe crearse un frente anti drogas en el país, pero que puede iniciarse en Santiago donde se ha reforzado una fuerte persecución contra el narcotráfico.

Dijo que deben estar integrados, además, un abogado, un director de colegio privado, el director de una escuela pública secundaria, dirigentes estudiantiles, directivos del sindicato de periodistas, un representante de Hogar Crea, un sacerdote de parroquia, y un representante de la Asociación de Radiodifusores.

“Te confieso que quisiera que la idea con relación al frente contra el narcotráfico no se quede en tu cabeza y en las páginas de los periódicos. La presente coyuntura es propicia para la creación de un instrumento alrededor del cual se integren todas las fuerzas sanas de Santiago que se oponen al desarrollo de las drogas ilegales y el narcotráfico”, indica Veras en su carta al fiscal.

Sostiene que con la creación del frente, que deberá constituirse en todo el país, se hará una especie de sombrilla humana que proteja “a nuestros hijos y a las generaciones venideras del flagelo de las drogas”.

Exhortó al fiscal Castellanos Estrella a no ceder frente a las amenazas, la difamación, la intriga y los chismes, “y todas las bajas pasiones humanas que el narcotráfico ha comprado con su dinero sucio de sangre, dolor, muerte y desesperación.

Veras indica que el narcotráfico en Santiago ha demostrado que tiene armas, “porque exhiben hasta metralletas, que tienen medios ilegales para legalizar sus armas, falsificando documentos de Interior y Policía y la Asociación Médica.

Hace algunas semanas Castellanos Estrella planteó la creación de un frente regional contra las drogas, tras advertir que este mal está creciendo de forma peligrosa en Santiago”. (91)

Para el año 1988, ya estaba edificado de la solidez económica de los narcotraficantes particularmente en Santiago, como se lo hice saber al país mediante una declaración pública que fue recogida por la prensa, así:

“SANTIAGO.- El doctor Ramón Antonio Veras afirmó que en esta ciudad hay narcotraficantes que tienen fortunas estimadas en más de 60 millones de pesos, razón por la cual ese sector debe ser enfrentado con decisión por las autoridades.

El doctor Veras dijo que en virtud del auge que está tomando el narcotráfico en el país, pero especialmente en esta ciudad, es importante la formación de un “frente Regional” que labore día y noche en la lucha contra los estupefacientes.

El profesional del derecho envió una carta al procurador fiscal de este distrito judicial, licenciado Víctor José Castellanos Estrella, en la cual le solicita su contribución para la formación del frente. Ese organismo estaría constituido por las autoridades judiciales, la policía, el ejército la gobernadora provincial, los gremios periodísticos, de abogados y otras importantes entidades que luchan contra el narcotráfico.

El doctor Veras dijo que tiene documentos que avalan la posesión de más de 60 millones de pesos en poder de una persona no identificada pero vinculada al narcotráfico.

Señaló que con el “Frente” se crearía una especie de “sombrilla humana” en todo el país.

Dijo que el flagelo de las drogas es un mal que hay que combatir con energía y decisión, como lo viene haciendo el procurador fiscal de este distrito judicial.

Estimó que las fuerzas sanas del país deben redoblar su lucha contra el narcotráfico. Indicó que los narcotraficantes tienen tanto poder que son capaces de falsificar documentos para poder obtener permisos para portar armas de fuego, incluyendo metralletas.

El profesional del derecho dijo que “el procurador fiscal de este distrito judicial merece el apoyo de todos los sectores conscientes del peligro que representan las drogas.

Exhortó el funcionario, en su carta, que “se mantenga firme en su lucha contra las drogas, aunque ese sector tenga el poder del dinero a base de sangre y dolor. (92).

FUENTES:
(90) El Nacional. 18 de septiembre 1988.
(91) Última Hora. 21 de octubre 1988.
(92) Hoy. 22 de octubre 1988.
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La labor de orientación con relación al tema de las drogas y el narcotráfico la llevé a cabo no solamente en Santiago y otros pueblos del Cibao, sino también en otras regiones del país, como se evidencia por la charla que dicté en Barahona, de la cual hago referencia en el siguiente artículo:En Barahona
Organizaciones religiosas, culturales, populares y democráticas, de la ciudad de Barahona, nos invitaron a dar una charla con relación a los efectos sociales de las drogas. Aprovechamos la ocasión para intercambiar opiniones con personas vinculadas con el movimiento sindical, cultural, religioso y político, así como con hombres y mujeres del pueblo.

La impresión que recibimos, al hablar con los miembros de la comunidad de Barahona, fue de que existe un gran descontento en el seno del pueblo por los problemas económicos, por la inflación, el desempleo y por el uso y tráfico de drogas en la ciudad.

Se nos informó que la miseria golpea a la gran mayoría de la población de Barahona, que en el Central Azucarero de la ciudad se elabora un plan para despedir a cientos de trabajadores principalmente a dirigentes sindicales; que el tráfico y uso de drogas ilegales se hace ante las propias narices de las autoridades de la localidad, y nos señalaron el caso de que recientemente una avioneta lanzó desde el aire bultos conteniendo cocaína que fue recogida, en tierra, por muchas personas que se han enriquecido de inmediato.

Se observa una preocupación en la población porque no se ve, en lo inmediato, una salida positiva a la dramática situación que viven los habitantes de Barahona. El pueblo de Barahona, dentro de lo grave de su situación de opresión social, económica, política y de desarrollo de las drogas y el narcotráfico, tiene la ventaja con respecto a otras de las grandes ciudades del país, que cuenta con un obispo dinámico, activo, que comprende la realidad que viven sus feligreses. Él está al día de lo que necesitan los hombres y mujeres de Barahona.

Lo más importante es que el obispo Rivas, no calla los problemas de Barahona; hace lo que dentro de su posibilidad puede hacer: denunciar los problemas, las lacras sociales, los que protegen el narcotráfico, etc. La crisis que sufre la gran mayoría del pueblo dominicano se ve en forma cruda en la zona sur del país. Barahona, es un testigo de la suma de todos los males sociales dominicanos.
Fuimos a Barahona a dictar una charla, pero la visita a esa comunidad nos sirvió para compartir durante todo un día con hombres y mujeres del pueblo, con obreros, campesinos sin tierra, religiosos, profesionales de diferentes ramas, militantes políticos, periodistas, activistas defensores de los inmigrantes haitianos, en fin, con jóvenes estudiantes de segundaria y universitarios.

Prometimos a los miembros de la comunidad de Barahona visitarlos en otras oportunidades, para seguir discutiendo sobre diferentes temas. (87).

Para que no se tuviera la falsa creencia de que el fenómeno de las drogas estaba presente solamente en nuestro país, expuse mis ideas de la realidad de ese fenómeno en territorio norteamericano. He aquí lo que escribí:

Consumo de drogas en EE.UU.
Estados Unidos, que ha sentado en el banquillo de los acusados a varias naciones por “no cooperar plenamente” en la lucha contra el narcotráfico, es -con la vigésima parte de la población mundial- el país de mayor consumo de Occidente (60 por ciento de la producción del orbe) y se ha iniciado ya como productor de estupefacientes, en particular de drogas artificiales, “accesibles” por su bajo precio a toda clase de personas.

La estimación económica que el abuso de las drogas ha representado para Estados Unidos, fue, durante 1983, de alrededor de 60,000 millones de dólares, según el Research Triangle Institute, que estudia los costos sociales de las enfermedades mentales del abuso del alcohol y las drogas. En 1985, de acuerdo al National Service On Drug Abuse, 70.4 millones de personas en Estados Unidos –el 37 por ciento de la población mayor de 12 años- había consumido una vez droga ilícita en su vida, y 23 millones –el 12 por ciento de la población mayor de edad- las utiliza de manera habitual.

El informe de la Contraloría General para ese año revelaba que eran 22.2 millones de personas las que en un total consumían drogas en este país, donde tal uso ha persistido y se ha incrementado en esta década, lo cual ha provocado graves cambios en la sociedad.

Por otro lado, 1980, se distinguió por el ingreso de Estados Unidos al mercado de los estupefacientes no sólo como el gran consumidor que ha llegado a ser, sino como productor de diversos tipos de narcotráficos. Fue en los Estados de Hawai y California donde comenzaron los plantíos. Para 1985 prácticamente en todos los estados del país del Norte se producía drogas, y en 1988, según la revista británica The Econist, cerca de 178,13 millones de hectáreas de los 3.093,13 millones que administra el servicio de bosques estadounidense, se encontraban sembradas de plantas enervantes.

La publicación asegura que el cultivo se ha incrementado en las Carolinas y en los estados de Arkansas, Oregón y Florida, y el corazón de estas lucrativas actividades es el estado de California, específicamente en el llamado Triángulo de Esmeralda, área de 161,000 kilómetros cuadrados situadas en los condados de Humboit, Trinity y Mendocino.

El controlling Drug Abuse reporta que en 1986 se detectaron más de 500 laboratorios clandestinos, donde se producían drogas artificiales, 193 por ciento más que los descubiertos en 1981.

Un informe especial preparado por la General Accounting Office (GAO) para la Controlaría General de este país, describe el de la droga “el problema nacional, que se agrava, especialmente, en las seis más grandes ciudades; Washington, Nueva York, Miami, Chicago, Los Ángeles y San Francisco.

Este estudio especial, que contiene indicadores de la persistencia en el uso ilegal de drogas en Estados Unidos, señala que la demanda y venta de estupefacientes ha aumentado en los años 80, con todos sus efectos devastadores.

También contiene una relación de los esfuerzos del gobierno federal para combatir el narcotráfico y, aunque hay diversidad de opiniones admite que hay que atacar el consumo y las causas que llevan a él a millones de estadounidenses. (88).

La cocaína en Estados Unidos
Se ha establecido conforme un reporte hecho por una publicación norteamericana, y que consta en un reporte especial, que la cocaína ha pasado a ser la droga de la que más se ha abusado en los Estados Unidos, y una modalidad de ésta, la potente y peligrosa Crack se ha vuelto hasta popular en algunas ciudades. Su precio es de 10.00 dólares la dosis (fumada) por lo que resulta accesible sobre todo a la clientela juvenil. En lo que atañe a la heroína, se desprende del informe que la más “célebre en el mercado es la Black star o alquitrán negro, superior en pureza, pero inferior en precio, por lo que ha pasado a ser la de mayor demanda y disponibilidad.

El uso de la marihuana ha declinado, de acuerdo con el Instituto Nacional para el abuso de la Droga (NIDA), pero la producción doméstica se ha incrementado. Diversos laboratorios clandestinos produjeron sustancias sintéticas conocidas por drogas, lo que emergió como un fenómeno muy significativo durante la década de los ochenta.

Las consecuencias adversas que ha acarreado el abuso de las drogas en ese país son muy graves, no sólo para el individuo consumidor, sino para la sociedad entera: el adicto ha sufrido enfermedades diversas y hasta la muerte, pasando por la pérdida del empleo y la destrucción de su familia. Pero la sociedad ha sido víctima también del crecimiento del crimen, la violencia, la corrupción pública y la reducción de la productividad, entre otros efectos derivados del abuso de narcotráfico.

Se estima que el 75 por ciento de los crímenes que se cometen en los Estados Unidos se llevan a cabo bajo los efectos de drogas diversas. En lo que toca a las drogas intravenosas, que en estos momentos son la mayor inquietud local y nacional por su conexión con el SIDA, el director del NIDA dijo en octubre de 1987 que el 25 por ciento de las víctimas de la enfermedad se contagiaron por medio de la aguja con que se la inyecta.

No obstante, el abuso de la cocaína sigue siendo lo que provoca mayor inquietud en la sociedad estadounidense. De acuerdo con la DEA, su consumo aumentó en más del doble de 1980 a 1986, mientras los precios declinaron, lo cual lo extendió aún más a las diversas clases sociales.

El NIDA especificó que el número de personas que en algún momento de su vida han consumido esta droga fue de 21,6 millones en 1982 y más de 22 millones en 1985, y el número de estadounidenses mayores de 12 años que la han utilizado se elevó de 4,2 millones a 5,8 millones, o sea el 38 por ciento de esa población encuestada”. (89).

FUENTES:
(87) El Nacional. 20 de agosto 1988.
(88) El Nacional. 11 de septiembre 1988.
(89) El Nacional. 15 de septiembre 1988.
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Mientras mis adversarios políticos y los narcotraficantes y sus aliados me amenazaban, reiteraba mis denuncias en su contra:¡Qué comiencen!

Envalentonados por la cancelación de la Procuradora de la Corte de Apelación de Santiago, Olivo de Pichardo, por los pronunciamientos negativos de algunos colegas, de la Seccional del Colegio de Abogados de Santiago y de grupos desaprensivos, sectores politiqueros, de una parte, y los narcotraficantes, por la otra, se han dado a la tarea de lanzarnos advertencias maliciosas, amenazantes e intimidatorias.

Mientras que unos dicen que ejercerán acciones judiciales contra nosotros, otros se manifiestan en el sentido de que nos aplicarán la “Operación Arepa”, o lo que es lo mismo, que nos darán candela por arriba y por abajo.

A nuestros adversarios de siempre en el orden ideológico; a los politiqueros de orilla; a los que nos adversan por prejuicios políticos o profesionales, y a sus aliados circunstanciales, les decimos que, primero, no estamos revestidos de valentía, pero no le tenemos miedo a la muerte; segundo, que amamos la paz, que no tenemos militancia política, pero no estamos solos ni aislados en el proceso social que vive el país; tercero, que si nuestros adversarios escogen el campo de violencia, responderemos con la violencia en sus distintas manifestaciones, y, cuarto, no aceptaremos provocaciones, pero tampoco humillaciones vengan de donde vengan.

Si defender la dignidad y el decoro de funcionarios judiciales serios, honestos y responsables entraña tener frente a frente a los que aquí se creen con derecho a decidir el destino del país, pueden estar tranquilos porque en eso no vamos a ceder. Defenderemos, hasta con nuestra propia vida si fuere necesario, el derecho que tiene el pueblo dominicano a que sus hombres y mujeres decentes ocupen cargos importantes en el aparato judicial.

No nos van amedrentar por el hecho de que públicamente defendamos la gestión de la Licenciada Carmen S. Olivo de Pichardo y el Licenciado Víctor José Castellanos Estrella. Estos dos ciudadanos, han defendido la limpieza de la justicia, y si por defenderlos a ellos nuestros adversarios se quieren cebar en contra nuestra, pues, que comiencen a ejecutar sus acciones.

El ser humano tiene un proceso normal: nacer, desarrollarse y morir. Y uno sabe, o le dicen, el día y el lugar en que nace, pero no el que muere. Creemos que cuando uno cae por una causa que cree justa, hasta la muerte se justifica.
Tenemos que acostumbrarnos a medir fuerzas; nuestro país no puede seguir como hasta ahora, aceptando tranquilamente que un grupo insignificante, en nombre de un poder político, económico y social mal ganado y peor ejercido y administrado, se crea con derecho a imponer sus designios a los que no aceptamos las reglas del juego como los de arriba las quieren imponer.

A la minoría que hace uso de la violencia política hay que hacerle ver que aquí no todos los hombres estamos castrados; que si es cierto que la mayoría del pueblo vota para garantizar el poder de la minoría, no es menos cierto que no todos los dominicanos vamos aceptar los dictados de pelafustanes que con dinero sucio, por un lado, y con la metralla por el otro, pretenden silenciar a los que no se venden ni se rinden. Entonces, a nuestros adversarios, que comiencen sus maquinaciones. (84).

A las acciones de los narcotraficantes en mi contra, seguía respondiéndoles apoyándome en la denuncia pública con la finalidad de que lo mejor del país se mantuviera edificado de cómo el narcotráfico estaba arropando a toda la sociedad dominicana.

He aquí un escrito que hice poniendo en evidencia la forma como el narcotráfico continuaba su labor de penetración en el ordenamiento social de nuestro país:

Cosas del narcotráfico

Si una persona con sano juicio lee en el extranjero uno de los periódicos dominicanos se forma la idea de que aquí el narcotráfico es dueño y señor de la sociedad y que tiene mucha influencia en el Servicio Judicial.

Así, por ejemplo, en los últimos días la prensa nacional ha destacado informaciones que, de una u otra forma, ligan al narcotráfico con asuntos relacionados con el Servicio Judicial. Veamos.

No escapa a la inteligencia de la opinión pública nacional que los narcotraficantes celebraron la cancelación de la Procuradora de la Corte de Apelación de Santiago, licenciada Carmen S. Olivo de Pichardo y se regocijaron cuando renunció el procurador fiscal de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos Estrella.

El procurador fiscal de Montecristi renunció a su cargo ante las presiones de sectores comunitarios que objetaron la puesta en libertad de dos personas acusadas de introducir drogas valoradas en más de sesenta y seis (66) millones de pesos.

En la ciudad de Barahona, los abogados desfilaron protestando por la tolerancia con que el fiscal maneja los expedientes en los cuales están involucrados los narcotraficantes. El cura párroco de Bonao, Justo de Jesús Jiménez, se manifestó indignado por la forma tolerante que los jueces allá tratan a los narcotraficantes.
Constantemente desde la ciudad de Puerto Plata, se denuncia la presencia de narcotraficantes y las sanciones benignas que se les impone.

Todas estas informaciones recogidas por los medios de comunicación del país, es una clara demostración de que los hechos son los hechos y no se derriten con simples palabras, lo que se traduce diciendo que cuando decimos que el narcotráfico tiene influencia y poder en el país no hablamos por hablar. Lo que pasa es que aquí, en este país de nuestros amores y sinsabores, el narcotráfico ha calado muy profundo. Y es que los narcotraficantes reparten a sus aliados dinero, mucho dinero; dispensan favores, finas atenciones; deleitan a sus aliados con regalos sumamente onerosos, y esto crea, liga, establece vínculos indestructibles.

Los narcotraficantes compran relaciones, amistades, etc. Los narcotraficantes adultos regalan solares, lujosos vehículos, posibilitan viajes de placer, regalan lujosas prendas; sus hijos, en los colegios tratan de ganar amigos prestando sus vehículos, haciendo invitaciones a las lujosas residencias de sus padres, y los que les niegan la amistad les imponen la violencia.

Y lo lamentable de todo esto es que el movimiento de opinión pública contra el narcotráfico en el país es débil. A lo mejor algunos están esperando que las drogas dominen a sus hijos para protestar; pero ya será tarde porque no debemos olvidar que en nuestra sociedad hay dos hermanos gemelos, y que andan juntos; las drogas y el SIDA. (85).

Con ejemplos vivos, reales, objetivos, siempre traté de que mi denuncia fuera comprendida en forma fácil por la mayoría del pueblo o, por lo menos por los lectores que tenían alcance a los medios de comunicación, como lo revela el artículo que transcribo más abajo:

¿Se va el patrón Santiago? ¡No!

Hace varias semanas el periodista Radhamés Gómez Pepín, visitó su ciudad natal, Santiago, y al ver el amplio desarrollo que tienen las drogas, y la fuerza del narcotráfico, se impresionó de una forma tal que lo menos que hizo fue solicitar una audiencia al ciudadano presidente doctor Joaquín Balaguer, y exponerle su inquietud.

La sorpresa de Radhamés Gómez Pepín, se justifica porque, aunque es oriundo de Santiago, hace tiempo que trabaja en la ciudad capital, razón por la cual no está llamado a conocer la situación real, objetiva, que se vive en la ciudad de Santiago a nivel de distribución y tráfico de drogas.

Tenemos la firme creencia de que talvez muchas personas que viven en Santiago ignoran, o no se preocupan por la magnitud, la influencia, el amplio desarrollo que han tenido las drogas, y en particular el narcotráfico. La forma como ha penetrado el narcotráfico en Santiago, hay que observarlo no solamente por el uso que hacen de las drogas los jóvenes, y hasta los niños, sino por el poder social que tienen los que, de una u otra forma, se benefician de ese negocio.

Los narcotraficantes no necesitan expresar ellos personalmente su sentir, tienen quien se manifieste por ellos, y la manifestación puede ser de diferentes formas. Ya en el orden ideológico, ya por la violencia, ya por la presión económica. Hay muchos padres  que tienen un criterio claro con relación a lo negativo, lo nocivo que es para el país el uso de drogas peligrosas, pero prefieren callar, guardar silencio, antes que exponerse a ser hostilizados, golpeados de diferentes formas y hasta llevar un clima de inseguridad e intranquilidad a sus seres queridos en el país o en el extranjero.

Talvez hace algunos años el narcotráfico no tenía el poder social que tiene hoy y podía ser enfrentado sin encontrar defensores abiertos, pero hoy no se puede decir lo mismo. Es, real y efectivamente, un poder, tiene un radio de acción capaz de triturar a cualquier adversario, sin importar en el terreno que sea.

En una sociedad como la nuestra en la que desde el amor hasta los plátanos son tomados en cuenta por muchos como una mercancía, y en la que el dinero mueve el corazón de los seres humanos y el acelerador de los vehículos, los que disponen de amplias sumas de dinero, logradas sin el mayor esfuerzo, tienen el poder, la voluntad y la posibilidad de hacer todo lo que su malvada conciencia les dicte.

Para que se comprenda el alto nivel de influencia de las drogas y el narcotráfico en Santiago, basta con traer a colación lo que nos contó hace unos días un amigo. El nos dijo que uno de sus hijos le preguntó, papá si el Patrón Santiago es el protector de la ciudad ¿Porqué está en la Avenida Monumental, en su caballo, con el frente hacia la ciudad de Santo Domingo, y no con el frente hacia la ciudad de Santiago? El padre le respondió al hijo: “lo que pasa es que el Patrón Santiago, se siente avergonzado del desarrollo de las drogas en esta ciudad y ha decidido marcharse a otro pueblo, además se dice que un narcotraficante, muy influyente, quiso despojar al Patrón Santiago de su caballo para utilizarlo en una operación de tráfico de drogas y el Patrón Santiago  se molestó y está tomando impulso para retirarse de Santiago”.

Le dijimos al amigo que nos hizo el cuento que no debió de darle esa explicación a su hijo porque eso podría llevarlo a la creencia de que aquí todo está perdido, lo que no es cierto, porque si el narcotráfico tiene fuerza, más tiene el pueblo cuando hace conciencia de un determinado fenómeno; lo que hay que hacer es llevar al seno de cada familia la necesidad de enfrentar el narcotráfico conforme la posibilidad de cada uno y en el área que se mueva cada persona, cada padre, cada madre, cada ciudadano. (86).l

FUENTES:
(84) El Nacional. 21 de julio 1988.
(85) El Nacional. 7 de agosto 1988.
(86) El Nacional. 16 de agosto 1988.
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Creía, y todavía hoy sigo con la creencia, que  deben ser creados tribunales especiales para conocer todo lo relacionado con las drogas ilegales, y así lo expuse en su oportunidad:Propone tribunales especiales para enfrentar el narcotráfico

“El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago planteó la creación de tribunales especiales como forma de enfrentar el narcotráfico en la República Dominicana.

Asimismo, el doctor Ramón Antonio Veras se opuso a que en el país se apruebe la pena de muerte para los traficantes de drogas, alegando que existen los mecanismos legales y constitucionales para enfrentar ese mal.

Veras manifestó que la creación de tribunales especiales para juzgar a los narcotraficantes no violaría en nada la ley de organización judicial. Ello así, amplió el presidente de los abogados locales, porque en el país hay tribunales especiales para juzgar a menores, y conocer los accidentes de tránsito y los casos de tierra.

En cuanto a la pena de muerte, declaró que el día que los mecanismos legales, la disposiciones constitucionales, el deseo y los sentimientos del pueblo sean que impongan la pena de muerte a los narcotraficantes, él la apoyaría.
Pero actualmente esa ley no sería necesaria, porque existen los mecanismos legales para enfrentar a los delincuentes del narcotráfico”, añadió. Veras comunicó que en el caso del narcotráfico lo que ha faltado son jueces serios y responsables, que estén dispuestos a hacer cumplir las leyes dominicanas y vigentes. Indicó que la nueva ley sobre drogas, aprobada recientemente por el Congreso, no solucionará en nada la presencia e influencia del narcotráfico.

Veras entiende que los tribunales especiales deben estar integrados por jueces responsables y escogidos por el Colegio Dominicano de Abogados”. (78).
Estaba consciente de que el doctor Joaquín Balaguer, no apoyaba a los narcotraficantes, y así lo escribí:

Drogas

Respondiendo a una pregunta que le formuló un periodista, el ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, declaró que “el Gobierno está haciendo lo imposible para combatir las drogas, pero lo principal es que la misma juventud se dé cuenta del peligro que eso representa para ella; se están haciendo los esfuerzos necesarios para combatir esa monstruosidad. No es un problema únicamente nuestro, sino que lo tiene hoy el mundo entero”. Dijo, además, que “para enfrentar el narcotráfico lo primero que se hizo fue someter al Congreso Nacional una ley muy drástica para sancionar el uso y el comercio de las drogas, y las autoridades tienen instrucciones de aumentar la vigilancia contra los narcotraficantes”.

Lo dicho por el doctor Joaquín Balaguer, no es más que la reiteración de la posición que él ha mantenido frente al narcotráfico. En el país nadie pone en duda que el doctor Balaguer, mantiene una posición de firmeza contra el vicio de las drogas y el narcotráfico; esto tienen que reconocerlo hasta sus adversarios más radicales.

Pero si es cierto que hay una voluntad oficial presidencial contra el narcotráfico, no es menos cierto que no se puede decir lo mismo de todos los funcionarios ni de determinadas áreas que integran el Estado Dominicano. Así, por ejemplo, en el Servicio Judicial, no son todos lo hombres y mujeres, jueces y representantes del ministerio público, que tienen una posición de línea dura contra el narcotráfico.

Hay jueces que desdicen mucho de su honestidad con su comportamiento ante los narcotraficantes. Son sumamente complacientes con los delincuentes que han hecho de las drogas una especie de comercio normal y lícito.

A nivel de nuestros hombres de uniformes, creemos que la posición de más seriedad, responsabilidad y firmeza la tienen las Fuerzas Armadas. No somos remendones del sistema social que predomina en el país, pero nos damos las manos con los hombres y mujeres que de una manera sincera están dispuestos a salvar las partes sanas que quedan en esta sociedad; si podemos unir esfuerzos y voluntades para enfrentar a los narcotraficantes, pues, nos unimos aunque estemos moviéndonos con aliados que tienen un objetivo político diferente al nuestro. Lo importante es la conciencia frente a un adversario concreto, un enemigo común.

Siempre hemos dicho que no nos identificamos con el pensamiento político del doctor Joaquín Balaguer, esto está claro, creemos que ninguna persona bien nacida nos puede vincular políticamente con el ciudadano presidente, pero el doctor Balaguer, puede decir que tiene en nosotros un aliado para enfrentar, de una manera seria y responsable, a los narcotraficantes; lo mismo hemos dicho con relación a los hombres de uniformes: todos los militares que se oponen a que el país se convierta en el paraíso de los narcotraficantes, tienen en nosotros a un aliado, sin importar los puntos que nos separen en la vida política general del país. (79).

En un editorial de fecha 15 de julio de 1988, el Periódico El Nuevo Diario, destacó:

Preocupa

En este contexto habría que considerar, al margen de toda apreciación, ética, la cancelación de la licenciada Semíramis Olivo de Pichardo como procuradora de la Corte de Apelación de Santiago y la subsecuente salida del fiscal de ese Distrito y varios de sus colaboradores. Con esta cancelación el gobierno se sintoniza con su base, pues dirigentes reformistas de Santiago venían pidiendo la destitución del fiscal y la procuradora de la Corte, por “impenetrables”, y no obedientes a “los lineamientos y orientaciones del partido. (80).

Presionado por políticos reformistas, el doctor Balaguer, canceló a la licenciada Semírames Olivo de Pichardo; públicamente manifesté mi indignación, lo que molestó a dirigentes reformistas, algunos de los cuales amenazaron con accionar en mi contra ante la justicia, como lo reseñó la prensa así:

Diputado sometería Negro Veras

“SANTIAGO. El diputado reformista Luis Domínguez advirtió al presidente de la Asociación de Abogados de esta ciudad, doctor Ramón Antonio Veras (Negro), que si no identifica a los sectores oficialistas que constituyen “basura” y que están ligados al narcotráfico, lo someterá a la justicia.

El congresista Domínguez se refirió a las acusaciones que ha estado haciendo el presidente de la Asociación de Abogados de esta localidad, antes y después de la cancelación de la procuradora de la Corte de Apelación, licenciada Semírames Olivo de Pichardo.

Veras dijo que quienes promovieron la destitución de la procuradora están ligados al narcotráfico. El legislador y presidente del directorio provincial del PRSC retó al doctor Veras para que demuestre que la designada procuradora de la Corte, licenciada Dulce María Rodríguez, no es seria, honesta y capaz.

El dirigente reformista indicó que lo que le ha dolido al doctor Veras es haber perdido la hegemonía que logró imponer sobre el poder judicial en esta ciudad a través de los procuradores de la corte y la fiscalía.

Explicó que el presidente de la Asociación de abogados manejaba la justicia a su antojo a través de los licenciado Olivo y Víctor José Castellanos Estrella, en su condición de procurador fiscal.

Dijo que el doctor Veras no puede demostrar que es más serio que ningún reformista. Añadió que la designación  de la nueva procuradora es aceptable para todos los sectores. (81) El Nacional. 15 de julio de 1988. (81).

La licenciada Olivo de Pichardo, fue una funcionaria que cumplía fielmente con su deber como representante del Ministerio Público. Desempeñando el cargo de Procuradora de la Corte de Apelación de Santiago, sin cometer falta alguna, fue cancelada para el doctor Balaguer complacer a grupos políticos ligados al narcotráfico. (82)

Aunque el doctor Balaguer, declaró a la prensa que Semirames había sido cancelada en forma inconsulta y sin motivos, yo sabía que había sido una decisión suya. (83)

FUENTES:
(78) La Información. 24 de junio 1988.
(79) El Nacional. 30 de junio 1988.
(80) El Nuevo Diario. 15 de julio 1988
(81) El Nacional. 15 de julio 1988
(82) El Nacional. 17 de julio 1988
(83) El Nuevo Diario. 18 julio 1988
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Una investigación procede

Para que la comunidad de Santiago esté tranquila, y no se sigan haciendo comentarios de toda índole, se impone que se aclare la situación que se ha presentado con la falsificación de certificados médicos con fines de obtener la legalización de armas de fuego que luego van a parar a manos de delincuentes, principalmente narcotraficantes.

Si no se investiga a fondo la denuncia hecha por el magistrado procurador Fiscal de Santiago, la Asociación Médica, la Asociación de Abogados, así como editoriales de algunos periódicos, en el sentido de que se están falsificando certificados médicos para que delincuentes, vinculados al narcotráfico, obtengan armas de fuego, la ciudadanía sensata del país se va a sentir defraudada.

Resulta altamente sospechoso el hecho de que habiéndose practicado un allanamiento en el cual se ocuparon certificados médicos y de Interior y Policía, armas de fuego, dinero y otros documentos oficiales, hasta ahora la persona que debe responder de ese hecho no esté detenida aunque, según informes, el magistrado procurador Fiscal de Santiago dictó orden de prisión y conducencia en su contra.

Pero lo más grave del caso es que a la persona que se le ocuparon los documentos falsos, las armas de fuego, pertrechos y otros efectos, estaba presente al momento del allanamiento y fue detenida y, conforme informaciones que nos han sido aportadas, fue dejada en libertad desde el mismo Cuartel de la Policía Nacional.

Si el caso que comentamos no se aclara, si no se le dice a la opinión pública nacional todo lo que ha ocurrido, creemos que estamos en presencia de una burla a la Asociación Médica, a la prensa seria y responsable y a los dominicanos que creemos que la ley es igual para todos, sin importar calidades e investiduras.

Aquí se habla de que todos debemos cumplir con la ley, pero parece ser que hay leyes para dominicanos buenos y leyes para dominicanos malvados, leyes para dominicanos con “cuña” y leyes para dominicanos sin “cuñas” ni privilegios.

Si aquí se sigue poniendo en libertad a los violadores de la ley, las autoridades están descalificadas para perseguir a los delincuentes. Hemos insistido en este asunto porque para nosotros el procurador Fiscal de Santiago, merece respeto como persona, como profesional del derecho, como profesor universitario, como ciudadano ejemplar y como miembro de los gremios de abogados.

El licenciado Víctor José Castellanos Estrella, es de los pocos funcionarios del servicio judicial, que podemos decir, sin temor a equivocación, que desempeña su cargo como una colaboración al país, como una forma de aportar algo para el adecentamiento de lo que aquí muchos llaman Poder Judicial. Desde ningún punto de vista, ni de interés personal, económico ni científico, al licenciado Víctor José Castellanos Estrella, le conviene estar en la fiscalía de Santiago. En su caso se puede decir -con el lenguaje claro- que se está sacrificando por el bien del Servicio Judicial.

Pero todo tiene su límite. Por su formación de persona seria y responsable, el licenciado Víctor José Castellanos Estrella, de seguro que se está sintiendo decepcionado, defraudado, sin colaboración de las otras autoridades, al ver que ante un hecho escandaloso de falsificación de documentos públicos los presuntos autores permanecen libres, como si gozaran de una protección especial.

Conviene precisar que si las autoridades no dan una explicación seria y convincente con relación al caso de falsificación de certificados médicos en Santiago, y la puesta en libertad de la persona que se presume responsable de ese hecho, la Asociación de Abogados de Santiago y la Seccional del Colegio de Abogados de Santiago, harán por su cuenta y riesgo las investigaciones de lugar, para determinar con certeza qué intereses se mueven o se esconden en el susodicho caso de falsificación de certificados médicos, utilización de certificaciones de Interior y Policía y otros documentos públicos. (75).
He aquí otro artículo que escribí con el tema: 

Tribunal y traficantes

Periodistas que trabajan para diferentes medios de comunicación nos han preguntado qué opinión nos merece la ley que tiene por finalidad combatir el narcotráfico. A cada uno de los miembros de la prensa que nos han formulado la pregunta contestamos en igual sentido: la ley, desde el punto de vista teórico es muy buena, con excepción de la autorización de los allanamientos nocturnos; desde el punto de vista de los objetivos perseguidos, la ley la vemos como positiva, partiendo de si se lograran los fines perseguidos.

La nueva ley para enfrentar el narcotráfico está llamada a ser aplicada por los mismos jueces, que hasta ahora han juzgado a los narcotraficantes, y la generalidad de los magistrados actuales han demostrado que son tolerantes con los narcotraficantes, unos; venales, cobardes e irresponsables, otros.

Muchos jueces cuando están en presencia de un narcotraficante se pavonean de cobardía, se comportan sumisos, débiles, les basta con que los abogados que defienden a los narcotraficantes les hagan una solicitud cualquiera para que de inmediato sea acogida, no importa lo absurda que sea.

La práctica de la vida nos ha enseñado que muchos jueces son drásticos, severos, con los ciudadanos acusados de sustraer gallinas, televisores, ropa vieja, etc., pero sumamente graciosos, tolerantes, amables y hasta dispensan amplias sonrisas a los narcotraficantes. Y en esto no hay diferencia entre jueces de primer grado o de apelación.

Para que la ley para enfrentar el narcotráfico pueda lograr los fines por ella perseguidos, se precisa crear tribunales especiales para este fin, integrados por hombres y mujeres, abogados y abogadas sugeridos al Senado por el Colegio de Abogados.

De lo contrario, nada se logrará y los narcotraficantes seguirán siendo, como hasta ahora, dueños y señores de una gran parte de la sociedad dominicana; imponiendo el terror con sus armas de fuego legalizadas con documentos falsos, o comprando magistrados con los cajones de dinero que tienen en el país y que han invertido, para lavar su dinero sucio, en las diferentes áreas de la economía nacional.

Crear tribunales especiales para juzgar a los narcotraficantes, no sería nada nuevo en nuestro sistema de organización judicial. Existen tribunales especiales para conocer los accidentes de tránsito; tribunales especiales para asuntos laborales y un tribunal de tierras para conocer de todo lo relacionado con la Ley de Registro de Tierras, entonces, ¿Por qué no crear un tribunal especial para juzgar a los narcotraficantes?

El gobierno tiene a su alcance todos los medios y recursos para enfrentar, desde el punto de vista legal, a los narcotraficantes. Lo que ocurre es que aquí la cobardía de algunos jueces, y la venalidad de otros, han hecho inoperante todo el ordenamiento legal destinado a frenar o eliminar el narcotráfico. Ha pesado más en la conciencia de muchos jueces, la mayoría de los cuales tienen hijos, el dinero fruto del soborno o el miedo, que la decisión de enfrentar a todo un grupo de criminales.

Muchas veces nos hemos sorprendido al ver a mujeres, que tienen hijos y desempeñan el papel de jueces de primer grado o de cortes, tratando con manos de seda, con tolerancia, o aceptando dinero de narcotraficantes.

Por todo lo anterior es que creemos que se deben crear tribunales especiales para juzgar a los narcotraficantes. Los hombres y mujeres a ser designados por el Senado, deben ser sugeridos por el Colegio de Abogados de la República Dominicana, que es el organismo que conoce a los abogados y abogadas que tienen entereza, valor y no inclinan la cerviz por “tragos”, por dinero o por cobardía. (76)

Grupos mafiosos, y resentidos personales, hicieron causa común para que fueran cancelados los licenciados Víctor José Castellanos Estrella y Semírames Olivo de Pichardo. No perdí tiempo en salir nuevamente en defensa de los dos funcionarios:

“Narcos” presionan quiten fiscal y procurador

“El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, denunció que sectores ligados al narcotráfico y al partido de gobierno gestionan la cancelación del fiscal de aquí y la presidenta de la Corte de Apelación.

El doctor Ramón Antonio Veras mencionó también entre los sectores que se mueven con la finalidad de lograr la cancelación de los licenciados Víctor José Castellanos y Semírames Olivo, a jueces de tribunales ordinarios.

Asimismo el jurista llamó a la Seccional Norte del Colegio Dominicano de Abogados a fijar su posición en torno al caso. Manifestó que por su posición seria y responsable contra los narcotraficantes, Castellanos y Olivo han encontrado la resistencia de sectores afectados con las medidas disciplinarias que ejecutan.

Veras destacó la firmeza de ambos funcionarios judiciales en imponer el orden y la disciplina interna en el Palacio de Justicia de Santiago. “Hay otro sector que, sin estar vinculado al narcotráfico, por desavenencias y asuntos personales, hace causa común con los mafiosos”, sostuvo”. (77).

FUENTES:
(75) El Nacional. 16 de junio 1988.
(76) El Nacional. 19 de junio 1988.
(77) La Información. 21 de junio 1988.
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La influencia del narcotráfico en los organismos del Estado dominicano viene desde lejos, como lo revela el escrito que publiqué dando a conocer la forma como se ocultaban informaciones vinculadas con los narcotraficantes y sus operaciones ilícitas.

He aquí una petición que hice a los fines de que se pusieran al descubierto las complicidades oficiales con la delincuencia del narcotráfico.

¿Qué se investigue?

Personas preocupadas por el desarrollo del narcotráfico en la ciudad de Santiago han expresado su sorpresa por el hecho de que una persona, a quien en un allanamiento se le ocuparon certificados médicos falsos, certificaciones de Interior y Policía para la obtención de armas de fuego y pertrechos para armas de diferentes calibres, fuertes sumas de dinero y cientos de documentos públicos falsificados, aunque fue detenida por la Policía Nacional, no fue sometida a la acción de la justicia.

No escapa a la inteligencia de nuestro pueblo que los narcotraficantes utilizan los medios ilegales para dar viso de legalidad a sus actividades, portar armas de fuego y lavar su dinero; una de las formas que utilizan los narcotraficantes para moverse con sus armas es legalizándolas con documentos falsos o falsificados.

En la ciudad de Santiago todas las personas señaladas por el rumor público como narcotraficantes, tienen dos o tres armas de fuego de diferentes calibres en su poder y las exhiben como trofeos; el objetivo de la exhibición no es solamente influir temor en el seno de la sociedad, sino también un querer demostrar que tienen apoyo, que cuentan con protección en áreas de poder.

El procurador fiscal de Santiago, la Asociación Médica de Santiago, la Asociación de Abogados de Santiago y personas independientes, han externado su criterio con relación a la falsificación de documentos para la obtención de armas de fuego y la relación que existe entre esa situación de ilegalidad y los narcotraficantes.

Creemos que lo más conveniente es que la Policía Nacional ordene una investigación y diga públicamente a qué persona se le practicó en Santiago, en el mes de mayo, un allanamiento en el que se le encontraron armas de fuego, pertrechos de guerra, certificados médicos y de Interior y Policía falsificados, una alta suma de dinero y otros documentos; si la persona a la cual se le hizo el allanamiento no fue detenida al momento de la requisa, y si fue detenida, se sometió a la acción de la justicia y si no fue sometida, que se explique a la ciudadanía el porqué, además si esa persona tiene o ha tenido relación directa o indirecta al servicio de la Policía Nacional.

Aquellos que, en una u otra forma, nos oponemos real y efectivamente, no en forma ficticia al desarrollo del narcotráfico en el país, no somos temerarios, Quijotes, locos ni ejercemos actividades públicas por gimnasia política ni por amor a la temeridad, sino porque creemos que con la colaboración seria y responsable de las autoridades podemos salvar las pocas áreas sanas que nos quedan. En este orden creemos que los hombres y mujeres del país que enfrentan a los narcotraficantes tienen que sentir, en la práctica, que las autoridades en sus grados más elevados están en disposición de tener mano dura contra la delincuencia internacional, contra los narcotraficantes que hoy se creen dueños y señores de nuestro medio. Por tanto la forma más positiva, lo que quiere Santiago es que la Policía Nacional explique cuál es la situación real con relación a la persona a la cual se le hizo el allanamiento, se le encontraron documentos falsos, armas, pertrechos, dinero, etc., y hasta ahora no ha sido sometida a  la justicia. (72)

Porque sabía de su integridad y el trabajo que hacían combatiendo a los narcotraficantes, siempre me manifesté respaldando a los Licenciados Víctor José Castellanos, y Semírames Olivo de Pichardo, como lo reseña la siguiente publicación:

Veras Ratifica Respaldo a Fiscal y a la Procuradora

“El doctor Ramón Antonio -Negro- Veras, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, ratificó el “absoluto e irrestricto” respaldo al fiscal y a la procuradora de la Corte de Apelación, del distrito judicial de aquí, quienes son presionados para que renuncien de sus respectivos puestos.

Negro Veras, en una ardorosa defensa al licenciado Víctor José Castellanos Estrella y a la licenciada Semírames Olivo de Pichardo, manifestó que esos dos funcionarios “han hecho una labor envidiable al frente de la judicatura local.

“Castellanos Estrella y Olivo de Pichardo pueden estar tranquilos en sus funciones porque cuentan con el apoyo moral y solidario de todos los dirigentes y miembros de las entidades que agrupan a los profesionales del Derecho en esta ciudad”, precisó.

El doctor Veras recordó, también, que el mismo presidente de la República Dominicana, doctor Joaquín Balaguer, ha dicho que el fiscal y la procuradora de la Corte de Apelación cuentan con todo su respaldo” por la gran labor que vienen haciendo.

Dijo que sólo algunos secretarios, desde el punto de vista político, y los vinculados con el narcotráfico son los que pueden estar interesados en que sean desplazados de sus cargos Castellanos Estrella y Olivo de Pichardo.

Negro Veras destacó que los abogados y abogadas de Santiago de ejercicio limpio, responsable, decente y humilde, están identificados plenamente con estos dos funcionarios de la judicatura nacional.

Las declaraciones del presidente de la entidad que agrupa a los abogados de esta ciudad fueron ofrecidas al programa “Acción Informativa”, el cual se transmite de lunes a sábado por Radio Acción, en el horario de 11:30 a 12:30 del día.

Desde hace días, sectores reformistas tratan de presionar al procurador fiscal y a la procuradora de la Corte de Apelación para que abandonen sus puestos alegando que no son “de la confianza” del partido gobernante. Empero los dirigentes que se esconden detrás de esas presiones han encontrado una fuerte resistencia, incluyendo de gente ubicada dentro de su propia parcela política. (73).

Mantenía permanente publicaciones de artículos destinados a orientar a la opinión pública, como se evidencia por los tres que publiqué y transcribo a continuación:

Narcotráfico y Armas

La prensa nacional informó que las autoridades habían descubierto un contrabando de armas de fuego y que su introducción al país tenía relación con el narcotráfico internacional. El Secretario de las Fuerzas Armadas, también habló con relación al encuentro de las armas.

Cada día la presencia de narcotraficantes y sus actividades delincuenciales en el país preocupa a la ciudadanía sensata que siente el peso, la influencia de personas desaprensivas que se mueven con una impunidad que asombra, sorprende y llama a la suspicacia hasta a los más ingenuos.

Cuando los narcotraficantes se arman hasta los dientes no solamente garantizan su seguridad personal, sino que imponen temor, implantan el terror en la conciencia de los hombres y mujeres sensatos del país.

No ponemos en duda que el contrabando de armas recién descubierto tenga relación directa con los narcotraficantes que residen actualmente en el país. La realidad ha demostrado que los que tienen vinculación con el narcotráfico disponen de grandes cantidades de armas de fuego.

Hace unos días se practicó un allanamiento en la residencia de una persona que el rumor público en Santiago señala como vinculada con el narcotráfico, y en la requisa se encontraron cuatro pistolas, cuatro revólveres y pertrechos para armas de diferentes calibres. No sabemos si las armas estaban amparadas por permiso legal, lo que sí sabemos es que con motivo de ese allanamiento no fue detenida ninguna persona ni sometida a la acción de la justicia. Es más, el expediente no fue enviado a la fiscalía de Santiago y tampoco se sabe si se preparó.

El poder que tienen en el país los narcotraficantes es enorme; disponen de dinero por cajones; están armados hasta los dientes con armas de diferentes calibres; legalizan sus armas por medios ilegales, disponen en sus vehículos de equipos de transmisión interna para ubicar los movimientos de sus adversarios, en fin, tienen equipos de hombres para la protección de su persona y bienes.

No sabemos por qué las autoridades no han hecho un movimiento que tenga como objetivo requerirles a las personas señaladas por el rumor público, o que han sido investigadas por asuntos relacionados con el tráfico de drogas, que entreguen las armas, que justifiquen cómo las adquirieron, que prueben cómo obtuvieron los permisos de Interior y Policía, cómo adquieren los certificados médicos, en fin, algo hay que hacer porque si los narcotraficantes disponen de dinero, influencia y, además, están armados y protegidos por equipos de hombres armados, entonces hay que concluir que este país está a merced y disposición de la mafia nacional e internacional.

Lo que sí sabemos es que con motivo de ese allanamiento no fue detenida ninguna persona ni sometida a  la justicia. (74).

FUENTES:
(72) El Nacional. 10 de junio 1988.
(73) El Nacional. 11 de junio 1988.
(74) El Nacional. 12 de junio 1988.
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Los profesionales que elaboraron el trabajo de investigación, al cual y hicimos  referencia, con relación a los adolescentes y el uso de  sustancias narcotizantes en nuestro país, hicieron el siguiente análisis:El problema del uso de drogas narcóticas en jóvenes adolescentes dominicanos es uno de los graves retos que tenemos de frente; éste no puede ser analizado a profundidad, sin valorar y estudiar adecuadamente todos los elementos o variables que se mueven alrededor del tráfico y consumo de drogas en R.D., en todo lo que es nuestra región del Caribe, y en el contexto internacional; porque incuestionablemente, todas esas variables son las que ejercen sus influjos sobre la población de nuestros pueblos pobres y sub-desarrollados y de manera especial sobre la juventud.

En nuestro estudio encontramos que el 22% de los jóvenes adolescentes usan drogas narcóticas, y a nuestro entender ello constituye un escándalo, si consideramos que algún tipo de orientación deben recibir en sus respectivas escuelas o colegios. Hay que considerar que en el país existe una amplia población juvenil que no puede asistir a las escuelas por razones económicas en unos casos, y sociales en otros, y donde debe ser más alto aún el consumo de drogas narcóticas. Las pandillas juveniles en los barrios pobres, y los chicos malos en los barrios ricos, son claras evidencias de estos problemas sociales.

El consumo de drogas narcóticas debe ser hoy día un elemento de preocupación en cada hogar dominicano, porque como podemos ver en este estudio, desde los 12 años de edad existen ya usuarios, poniendo en evidencia el consumo de las más variadas y peligrosas drogas, mezclas entre ellas y otras sustancias no menos desgarrantes. Una situación que entendemos de alto valor lo constituye el hecho, de que el 63.6% de los usuarios señalaron haber consumido drogas a instancias de amigos. Somos del criterio de que es precisamente ahí donde los propagandistas de este inhumano flagelo infiltran sus malsanos promotores; por eso, las madres, padres, maestros y tutores deben tener mucho cuidado con las llamadas esquinas calientes que existen (es una realidad) en los colegios, escuelas, barrios populares y barrios ricos o burgueses. En estas esquinas, rincones de barrios, escuelas o colegios es el punto donde se sitúan los traficantes vendedores y hacen contactos con sus posibles víctimas dándoles a probar por primera vez en forma gratuita y posteriormente ofertándoles la mercancía. Es preciso que se tenga cuidado con aquellas personas mayores que se integran a grupos adolescentes sin tener ningún tipo de relación lógica con ellos, pues en muchos casos son esos los que promueven el uso y luego otro del mismo equipo ofrece en venta con amplias facilidades de pago las primeras dosis.

Habíamos señalado que era preciso analizar ese fenómeno, dentro del cuadro general que constituye un país en profunda crisis social, económica, política y moral, pero igualmente tomando en consideración nuestra posición geográfica en el contexto general internacional en que se debate el problema del narcotráfico; por eso, entendemos de lugar tocar otros aspectos que consideramos de importancia. (69).

La vinculación que mantenía con diferentes sectores de la sociedad dominicana, y en particular con los de Santiago, me permitían tener una idea, más o menos clara, del dominio que en el futuro llegaría a tener el narcotráfico.

Narcotráfico y poder

Algunas personas que se preocupan por el auge del narcotráfico en el país nos han expresado su satisfacción por la nueva ley que tiene como objetivo sancionar en forma drástica a los narcotraficantes y a sus aliados. Si se hace abstracción de algunos artículos, desde el punto de vista teórico la nueva ley es positiva, aunque no nos hemos hecho la ilusión de que con ella se va a combatir firmemente a los narcotraficantes.

Para neutralizar a los narcotraficantes se necesita, además de una ley fuerte, tribunales integrados por hombres y mujeres que no solamente tengan un amplio dominio de las ciencias jurídicas, sino que, además, sean serios y responsables. En el país hay muchos jueces que tienen capacidad, son buenos amigos, etc., pero son irresponsables, inclinan la cerviz ante la primera acción de temor.

La experiencia práctica nos dice que los narcotraficantes están abusando de nuestro país porque aquí hay mucha tolerancia con ellos; tolerancia, por dinero, por miedo y por complicidad. El que no cede con los narcotraficantes por dinero, lo hace por complacencia, y hasta por vínculos familiares y de amistad.

El narcotraficante que es detenido por las autoridades, tiene muchos medios para obtener su libertad. Si no logra comprar a sus captores al momento de ser detenido, tiene la oportunidad de sobornar a un fiscal corrupto; si no puede sobornar al fiscal, soborna al juez de Hábeas Corpus; si el de Hábeas Corpus no acepta, entonces soborna al juez de la jurisdicción de juicio; si el juez de juicio le condena a prisión, entonces el narcotraficantes soborna al encargado de la cárcel para que le permita su fuga, y si no logra la fuga, compra un certificado de “buena conducta” y hace las diligencias de lugar para obtener su libertad condicional.

Tenemos la firme creencia de que durante mucho tiempo la familia dominicana, los hombres serios, decentes y honrados del país, estarán a merced de los narcotraficantes. El narcotráfico tiene recursos de toda índole: económico, para el que se quiera vender; de terror, para el que tenga miedo; de complacencia y halagos, para el que sea dócil de las maniobras del crimen sutil que utiliza a terceras personas para presentarse con buena cara, con rostro de ángel, con guante de seda en una mano y en la otra una daga para introducirla en el corazón, o la bolsa de dinero para el que quiera vender la orden de libertad.

No basta una ley nueva. El enfrentamiento contra el narcotráfico no es cosa fácil; el narcotráfico no es un negocio, una empresa o industria; el narcotráfico es todo un imperio. (70)

Por las acciones que desarrollaba en el país en busca de orientar a las grandes mayorías nacionales, buscaba todas las formas de mantenerme al día de todo lo que se escribía con respecto al fenómeno de las drogas y el poder del narcotráfico.

Narcotraficantes

Recientemente un cable de prensa internacional nos trajo la noticia, desde Tegucigalpa, informando que el jefe de las fuerzas armadas de Honduras, general Humberto Regalado Hernández, gestionaba la aplicación de la ley sin contemplación alguna contra su hermano Rigoberto Regalado, ex embajador en Panamá, quien fue arrestado en el aeropuerto de Miami con 13.3 kilos de cocaína valorada en más de quinientos mil dólares.

Nos sentimos sumamente satisfechos con la actitud del general Humberto Regalado, puesto que demostró con su comportamiento que no protege a los narcotraficantes y que está dispuesto a hacer que se cumpla con la ley, aunque sea contra su propio hermano. A los narcotraficantes hay que desampararlos desde todo punto de vista, para que sepan que no tienen protección en ninguna de las áreas del Estado. No basta con que se dicte una ley fuerte en contra de los narcotraficantes si ellos encuentran sectores, a nivel de poder, que les hacen la vida fácil. Precisamente, nos ha sorprendido que en los últimos días personas vinculadas, o señaladas por el rumor público como narcotraficantes, se les han ocupado en Santiago armas de fuego calificadas como de guerra y sin que presenten el permiso o la autorización correspondiente, no sólo han sido puestas en libertad, sino que no han sido sometidas a la acción de la justicia.

Lo más grave de todo es que las personas a quienes se les han ocupado las armas de guerra demuestran gozar de una plena impunidad hasta el punto de que los servicios de seguridad que participan en las requisas duran más tiempo en el operativo, que los sospechosos de ser narcotraficantes en los recintos policiales.

Cuando la ciudadanía sensata y preocupada por el desarrollo de las actividades de los narcotraficantes en el país ve que estos gozan de privilegios y protección oficial, de inmediato razona con toda razón diciendo que nuestro país se “jodió”, que aquí no hay nada que hacer, porque los narcotraficantes son dueños y señores de la sociedad.

Es de suponer la decepción que puede recibir un ciudadano decente, un padre de familia, cuando ve que a un narcotraficante, que lo han detenido portando armas de guerra sin ningún permiso o autorización oficial, lo ponen en libertad y su expediente no llega ni a las manos del fiscal. Lo menos que puede pensar es que el real o aparente narcotraficante tiene vinculación o relaciones oficiales muy poderosas que le permiten vivir impunemente en una sociedad que está sacudida por el desarrollo del narcotráfico.

Con toda razón en la ciudad de Santiago identifican como Quijote a los que, en una u otra forma, expresan su preocupación y están dispuestos a enfrentar a los narcotraficantes en todos los terrenos. Los adversarios de los narcotraficantes lucen indefensos, por lo menos en Santiago. El narcotráfico es fuerte y a veces luce reforzado, con impunidad y con mucho poder económico.

La decisión tomada por el general hondureño, debe ser imitada por todos sus colegas latinoamericanos, caribeños y particularmente por los dominicanos. Ningún miembro de los cuerpos armados o policiales, por relación familiar o de amistad, debe proteger a los que están señalados como vinculados al narcotráfico. (71).

FUENTES:
(69) El Nacional. 22 de mayo 1988.
(70) El Nacional. 2 de junio 1988.
(71) El Nacional. 4 de junio 1988.
Continuará la semana próxima

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Continuación de la reseña:

Según Negro Veras, Estado tiene medios averiguar fortunas

Veras reconoció que la lucha contra el narcotráfico y otras lacras de la sociedad no puede ser obra de una persona. Manifestó que en la lucha contra este mal, el Presidente de la República genera confianza, pues a nadie le pasa por la mente que el doctor Joaquín Balaguer, el teniente general Antonio Imbert Barrera, o el mayor general Rafael Arístides Sánchez Aybar, puedan estar patrocinando eso.

En tal sentido, consideró que cuando se reúna con el mandatario, le aportará datos e informaciones. De ahí en adelante podrá decir: “Yo piché mi juego”.

Denunció que en estos días en Santiago se hicieron unos operativos y se detuvo a varias personas vinculadas con el narcotráfico, y cuando las llevaron a un determinado departamento, les dijeron: “A ustedes los van a molestar mucho, porque Negro Veras nos tiene locos por la televisión y la radio”.

El conocido abogado sostuvo que esa es una clara incitación a que se actúe en su contra, pero siempre que la hacen hay alguien presente que es amigo y me lo informa. (63)

En ningún momento descansé de denunciar la tolerancia de la justicia con el narcotráfico, y así lo reiteré:

Veras denuncia justicia Santiago pone libertad a narcotraficantes

SANTO DOMINGO. El doctor Ramón Antonio (Negro) Veras denunció que en el departamento judicial de Santiago se dispone la libertad de reconocidos narcotraficantes por dinero, y reveló que en los próximos días será recibido por el presidente Joaquín Balaguer en el Palacio Nacional.

Veras dijo que recientemente un colega suyo le participó que un narcotraficantes santiagués fue puesto en libertad luego de pagar a ciertos funcionarios judiciales de allí, medio millón de pesos.

En ese sentido manifestó que su posición respecto al tren judicial de su provincia cambió radicalmente, porque lo consideraba uno de los más honestos del país. El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, entrevistado en el programa “Hoy Mismo”, que se produce por Color Visión, exhortó a la población nacional a luchar contra el flagelo de las drogas.

Indicó que la entidad que encabeza ha sostenido reuniones con narcotraficantes y familiares de estos, a fin de tener criterios claros de las denuncias que se hacían en las cuales se implicaba a funcionarios judiciales en  complicidad con la expedición de órdenes de libertad sin llenar los requisitos que disponen las leyes en la materia.

Veras subrayó que la posición de la Asociación de Abogados de Santiago no sólo ha determinado las amenazas en contra de su vida y la de sus hijos, sino también de otros miembros de la entidad.

Además, como había recibido un mensaje del presidente Balaguer, de que sería recibido en el Palacio Nacional para aportar las pruebas de mis denuncias, así se lo declaré a la prensa:

Encuentro con el Presidente

Negro Veras informó que en los próximos días el presidente Balaguer le concederá una audiencia donde le expondrá lo que sabe del narcotráfico en el país y su vinculación con sectores de poder.

El conocido dirigente profesional, asimismo, consideró oportuno que el presidente de la República solicite al fiscal de Santiago, licenciado Víctor José Castellanos los datos que pueda tener con respecto a la corrupción judicial de esa ciudad. (64).

La solidaridad con la lucha contra la criminalidad y el narcotráfico siempre la recibí del movimiento obrero y sindical como se comprueba por lo siguiente:

Sindicatos apoyan a Negro Veras

La mafia política y el narcotráfico han visto que sus actividades se ven obstaculizadas por la denuncia y decisión de enfrentarlos que ha hecho el doctor Ramón Antonio Veras, una persona reconocida en Santiago por su apego a la lucha contra la corrupción, el soborno, las injusticias y con un gran espíritu de solidaridad hacia los que persiguen alcanzar una causa justa.

El doctor Ramón Antonio Veras ha sido un fiel defensor de la dignidad humana, de la honestidad y el bienestar de nuestro pueblo, y se ha colocado siempre del lado de los que sufren las consecuencias de un sistema donde están muy mal distribuidas las riquezas. Además, ha sido siempre un defensor de la lucha por la libertad de los pueblos.

Es por eso que la Federación de Sindicatos de la Región Norte (Fesurno) ante la amenaza de que está siendo víctima el doctor Ramón Antonio Veras junto a su familia, llama a todo el movimiento sindical organizado a manifestarse en contra de las pretensiones y amenazas de los narcotraficantes.

Con la defensa a Negro Veras, nuestra Federación entiende que se está defendiendo el derecho del pueblo a luchar por el saneamiento de nuestra sociedad y por la liquidación de las lacras sociales generadas o engendradas por este sistema injusto, por la libertad y la justicia y por el derecho a denunciar el soborno y la corrupción. Así está reseñado en la edición No. 470 del periódico Hablan los Comunistas.

El pueblo dominicano, por órgano de sus organizaciones de masas, se identificó con mis actividades, como se evidencia por el siguiente documento:

Apoyo a Negro Veras

Las organizaciones abajo firmantes, representantes del movimiento sindical, obrero, religioso, juvenil y popular de Santiago, preocupados por la situación que hoy vive el doctor Ramón Antonio Veras, a causa de las amenazas que han lanzado en contra de él y su familia sectores cavernarios y criminales del narcotráfico, resuelven lo siguiente:

1.- Expresar su más firme solidaridad, en vista de que el doctor Ramón Antonio Veras, ha sido un fiel defensor de las causas nobles de este pueblo y también se ha colocado al lado de la clase obrera, de los campesinos pobres, del pueblo haitiano y los demás pueblos en lucha por su liberación, y de todos los que luchan contra las injusticias sociales en nuestro país.

2.- Llamar a todos los sectores democráticos del país a mantenerse en estado de alerta ante las amenazas de muerte contra los profesionales que vienen denunciando la corrupción en la justicia de Santiago, y convertirnos en un escudo que rechace a los mafiosos y fascistoides que tratan de apropiarse de las instituciones judiciales para que sus fechorías queden impunes. Por la Coordinadora de Organizaciones Populares y Sindicales. “Cim, Cut, Cgt, Asociación de Buhoneros de Santiago -ADS-, Sitracode, Sindicato de Zapateros de Santiago -FESUPNO-CUT-, Federacion de Sindicatos de La Construcción, Sitracoraasan, Sindicato de Trabajadores de La Empresa Juan Bojos, Aseusa, Sindicato Unido de La Construcción, Sindicato de Trabajadores de Blocks Y Mosaicos, Sindicatos de Carpinteros de Santiago, Sindicato de Sastres de Santiago, CUDEM-COMITÉ por la Unidad Y Los Derechos de La Mujer-, Comité de Defensa de La Ceibita, Club Hermanos Patiños, Sindicatos de Mecánicos de Santiago, Juventud Cristiana Progresistas-JCP-, Junta Comunitaria del Ciruelito, Fuerza Juvenil por el Socialismo -FJS-, UNER, Club Félix B. Martes, Club Oscar Arnurfo Romero, CTE. Apoyo 27 de Febrero, UNACHOSIN, Frente Popular De Cienfuegos, CTE. Rescate Moral La Joya, Club Social Hoya del Caimito, Club Mirador, CTE. Defensa Nibaje, Circuito de Lectores Fragmento, Club Ricardo Ramírez, Pastoral Juvenil Cristo Rey. Sindicato de Trabajadores J. A. Bermúdez, Club Miguel Ángel Garrido, CTE. Defensa Camboya y Marilópez Club Juana Saltitopa. (65).

Comité por la Paz respalda a Negro Veras

El Comité Dominicano por la Paz hace un llamado enérgico por el rechazo a la amenaza criminal que ha recibido el doctor Ramón Antonio Veras, miembro de la presidencia del Consejo Mundial de la Paz, y luchador por las causas liberadoras de nuestro pueblo.

El Comité Dominicano por la Paz recuerda que es un deber y un compromiso brindar solidaridad a los hombres que enfrentan con ética profesional y dignidad de ciudadanos la corrupción y el tráfico de estupefacientes.

Al doctor Ramón Antonio Veras se le ha pretendido amedrentar creando la angustia junto a su familia, hecho horrendo y que merece una respuesta inmediata de los hombres preocupados por el destino de la sociedad dominicana. Rafael Kasse Acta. Presidente. Silvano Lora. Secretario General. (66).

FUENTES:
(63) Última Hora. 25 de abril 1988.
(64) La Información. 26 de abril 1988.
(65) Hablan Los Comunistas. No. 471
(66) Hablan Los Comunistas. No. 471
Continuará la semana próxima

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Debo reconocer y recordar que en todo momento, con motivo de mis actividades contra el fenómeno de las drogas narcóticas, recibí el respaldo de mis colegas dirigentes de los gremios de abogados, como se evidencia en la siguiente publicación:

Colegio Abogados pide protección para Negro Veras; llama al pueblo a apoyarlo

SANTIAGO.- El Secretario general de la seccional de esta ciudad del Colegio Dominicano de Abogados, anunció el requerimiento de ese organismo colegiado a los cuerpos de seguridad del Estado, para que preserven la vida del reputado abogado Ramón Antonio Veras, ya que de no ser así el pueblo deberá agruparse para protegerlo. En declaraciones ofrecidas a reporteros de El Nuevo Diario, el doctor Gómez dijo que el Colegio de Abogados se siente sumamente sorprendido y preocupado por la información aparecida en este medio el pasado martes 19, donde se daba cuenta de requerimientos oficiales para que Veras abandonara el país, ya que no era posible garantizarle la vida, debido a sus constantes pronunciamientos contra narcotraficantes.

En esas declaraciones que se atribuye a cuerpos de seguridad del Estado haberle manifestado al doctor Ramón Antonio Veras -Negro-, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, y miembro del Colegio de Abogados, “que ellos no garantizaban su vida y que le extendía una invitación a salir del país, como una salida al peligro o a las amenazas de los agentes del narcotráfico contra la vida de este colega, nosotros exigimos como Colegio de Abogados, que los cuerpos de Seguridad del Estado, la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas, garanticen la vida del colega Ramón A. Veras”, declaró enfático el doctor Nelson Gómez.

Precisó que ese es el deber de esos organismos. “Y de no ser así, el pueblo dominicano y específicamente el pueblo de Santiago a través de las instituciones democráticas debe agruparse en un frente que sirva de protección a la vida de este prestigioso colega”, adujo.

Agregó que si el gobierno, las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional no le garantizan la vida a su colega, el pueblo tendrá que poner en sus manos la seguridad del doctor Ramón Antonio Veras, mejor conocido como Negro. (60)  
Al comentar mi estado de inseguridad ante el narcotráfico, el periodista Carlos Manuel Estrella, escribió:

El narcotráfico está ganando poder: ¡Alerta!

Si es cierta la versión obtenida por el matutino El Nuevo Diario sobre incompetencia de los servicios de seguridad del Estado para garantizar la vida del abogado santiagués Ramón Antonio Veras, amenazado por agentes del narcotráfico, estamos ante una situación que desdice mucho de nuestras autoridades y revela raíces del negocio de las drogas.

Para nadie es un secreto que el presidente de la Asociación de Abogados de Santiago ha tenido la valentía y coraje de denunciar irregularidades en tribunales locales para favorecer a personas acusadas de asuntos relacionados con drogas, a principio de año, lo que ha provocado que le amenacen.

Y en los últimos días, Negro Veras ha llegado a penetrar interioridades de los resortes de poder que utilizan los narcotraficantes cuando asegura que al presidente de la República le engañan con respecto a este asunto y que hay personas cercanas al mandatario, en el Palacio Nacional, aliadas con negociantes de drogas.

A partir de esta denuncia, de graves implicaciones tanto para la integridad de Veras como para la propia seguridad del Estado, hasta sectores de la prensa ha llegado la versión, reseñada por el tabloide El Nuevo Diario, sobre una increíble “recomendación” que hacen las autoridades al jurista para que se ponga a salvo.

Esta “recomendación”, risible e indignante -partiendo de los datos en que confía ese periódico- es la de que el presidente de la AAS abandone el país, por un tiempo” suficiente como para que se olvide su denuncia y, aparentemente, porque el Estado no puede garantizarle la integridad a un dominicano para que viva en su territorio.

Atando cabos a partir de la postura de Veras hace tres meses, cuando surgió el escándalo en la justicia local que concluyó con la destitución del procurador fiscal y el traslado de un juez vinculado en la libertad irregular de un narcotraficante, y las denuncias del jurista ahora, podemos concluir que el negocio de las drogas está ganando poder en todos los planos, en forma peligrosísima en el país. (61)
Luego de hacer mis declaraciones con relación a la facilidad de cómo se movían los narcotraficantes en el Palacio Nacional, el periodista Héctor Amparo, formuló al doctor Balaguer la siguiente pregunta: Héctor Amparo, de Radio Comercial: El doctor Negro Veras ha dicho recientemente que narcotraficantes tendrían acceso hasta el Palacio Nacional y que estaría en disposición de entregar a usted, cuando usted lo considerara, los informes sobre cuándo, cómo y los nombres de los narcotraficantes. ¿Está usted en disposición de conversar con el doctor Negro Veras?”

El presidente Balaguer, le respondió: Yo converso con cualquier persona, con cualquier dominicano, sobre todo tratándose de una persona como él, quien es dirigente político, un abogado prominente. Tiene sus ideas, que yo no comparto, pero que respeto. Con mucho gusto lo recibiría cuando él lo desee. (62).

Hago la observación de que el doctor Balaguer, en ningún momento demostró interés en recibirme, aunque estaba preparado para explicarle y aportarle las pruebas de mi denuncia.

Un emisario de su régimen me visitó en Santiago, y me comunicó que próximamente yo sería recibido por el doctor Balaguer, lo que nunca ocurrió. Creía, y así lo dije públicamente, que el gobierno sabía el poder económico del cual disponía el narcotráfico en el país en ese momento, lo que me motivó a decir:

Según Negro Veras, Estado tiene medios averiguar fortunas.

El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, Ramón Antonio Veras, afirmó que el gobierno tiene los mecanismos necesarios para determinar la procedencia de las fortunas de todos los dominicanos y extranjeros que residen en el país. En tal sentido, no considera necesario que el gobierno dominicano firme con el de Estados Unidos un acuerdo de información tributaria.

No hay que ser un sabihondo para saber cómo determinado banquero, determinado empresario -entre comillas- en el 85 andaba en una bicicleta y hoy es dueño de bancos y tiene tres Mercedes Benz”, subrayó Veras.

Citó como ejemplo, que en la urbanización donde reside, casas que se construyeron en el año 1980 a un costo de 80,000 y 100,000 pesos, han sido compradas por presuntos narcotraficantes en RD$1.5 millones. Indicó que en Santiago los narcotraficantes compran viviendas para destruirlas y construir una piscina, o porque el techo de la de al lado le molesta.

Y si uno, que no tiene mecanismos para determinar fortunas, sabe eso, el gobierno dominicano, que tiene recursos y mecanismos institucionales para averiguar la procedencia de fortunas de personas que tienen 12 y 14 vehículos privados, con mayor razón puede investigar esto”, argumentó esta mañana en el programa televisado Hoy Mismo, que se difunde por Color Visión.

En su opinión, no es indispensable para el Estado firmar acuerdos con ningún organismo internacional para determinar el origen de esas fortunas.

Veras manifestó que el narcotráfico incide negativamente en la banca de origen sano, debido a que la gente ve con suspicacia la procedencia de fortunas que se crean de la noche a la mañana.

Dijo que por tal motivo no pone en duda que en el país el narcotráfico puede influir de una u otra forma en el proceso electoral. Manifestó que no hay que descartar  que los narcotraficantes le den su aporte a un partido político cualquiera que pueda inclinar la balanza a su favor, y ese aporte compromete.

Veras ratificó que tanto él como su familia son objeto de amenazas de muerte y apuntó específicamente que en la urbanización Cerros de Gurabo se han hecho reuniones con fines de eliminarle. Reveló que la Policía cuenta con una denuncia escrita que recibió de un colega y amigo, donde se advertía que lo iban a eliminar.

Con un nudo en la garganta y lágrimas asomando a sus ojos, el reconocido abogado advirtió que si le ponen la mano a uno de sus hijos, les responderá a los narcotraficantes. (63)

FUENTES:
(60) El Nuevo Diario. 21 abril 1988.
(61) La Información. 20 de abril 1988.
(62) El Nacional. 24 de abril 1988.
(63) Última Hora. 25 de abril 1988.

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Refiriéndose al tema relacionado con mi denuncia, y los funcionarios del Palacio Nacional que favorecían al narcotráfico, el doctor Marino Vinicio Castillo,en esa época, le declaró a la prensa lo siguiente:Vincho sugiere a Negro Veras identifique “narcos” Palacio

El doctor Marino Vinicio Castillo –Vincho- exhortó al presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, a que utilice la televisión, los periódicos y la radio para identificar a las personalidades ligadas al narcotráfico que frecuentan en Palacio Nacional.

En torno a la denuncia, Castillo entiende que Veras debe ir a los medios y revelar la identidad de esas personas, ya que llevándolo sólo al Palacio Nacional, lo puede recibir un funcionario que pueda estar ligado al sector, lo que contribuirá con que las cosas no pasen de ahí.

Al doctor Negro Veras le sobra valor para hacer su denuncia pública, ya que se ha caracterizado por hacer valientes denuncias y le sugerimos que lo haga porque eso le garantizaría el respaldo de la sociedad sana”, argumentó el dirigente político. (56)

Primera fila

De seguro que serán muy concluyentes las pruebas que alega poseer el abogado santiagués Ramón Antonio Veras cuando dice que está en disposición de entregarlas al presidente Joaquín Balaguer y demostrarle así que supuestos agentes del narcotráfico tienen tarjetas de acceso nada menos que al Palacio Nacional. La acusación es sumamente grave, pero lo que verdaderamente importa, a la hora de juzgar las pruebas, no es que los narcotraficantes puedan o no entrar a la Casa de Gobierno. Lo que importa es que esas pruebas puedan conducir a las barras de un tribunal a quienes trafican con una mercancía que destruye vidas y voluntades y daña a la sociedad en una forma en que le será muy difícil recuperarse en el futuro. De cualquier forma, habrá que esperar la reacción del presidente Balaguer ante el pronunciamiento del doctor Veras, sin pasar por alto que el mandatario ha comprometido el crédito de su gobierno en la persecución y castigo al narcotráfico”. (57).

En nuestro país el negocio de la producción, consumo y tráfico de estupefacientes nunca ha estado solo; ha contado siempre con grupos pagados que están a su servicio, y disfrutan golpear a todos aquellos que decidan hacerle frente. Personalmente comprobé esa situación porque hace varios años, allá por la década del ochenta del pasado siglo, fui objeto, en unión de todos mis familiares, de las acciones más malvadas, sucias y penosas, y que iban desde la difamación e intimidación hasta acciones directas de tentativa de asesinato.

Pero así como el narcotráfico y sus aliados pagados dirigieron sus cañones contra mi familia y contra mí, también fui testigo de la solidaridad activa y militante de los sectores más dignos y representativos del país, los cuales expresaron su abierta identificación con mi persona y la lucha que llevaba a cabo contra el narcotráfico. He aquí una reseña de un gesto de solidaridad organizado por amplios sectores de Santiago:

Harán acto contra drogas

La lucha contra los males sociales, especialmente el narcotráfico que impulsa el jurista Ramón Antonio -Negro- Veras, recibirá un vigoroso respaldo en un acto que se celebrará a final de este mes, en esta ciudad.

Con esos propósitos tuvo lugar la primera reunión en el local de la Alianza Cibaeña, el pasado lunes, en la que participaron representantes de decenas de organizaciones sindicales, profesionales, estudiantiles y populares de Santiago.

En la preparación del acto, que será especie de homenaje al abogado local, están involucrados el Colegio y la Asociación de Abogados de Santiago que fueron las entidades que tuvieron la iniciativa, así como el Comité Dominicano para la Defensa de los Derechos Humanos, filial de aquí, y la Federación de Organizaciones Profesionales (Fedopro).

Por igual trabajan en ese sentido la filial en esta ciudad del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP), la Coordinadora de Organizaciones Sindicales y Populares, la Unión Nacional de Estudiantes Revolucionarios (UNER) y el Comité Pro integración del FALPO Santiago.

Asimismo participan en la organización del acto de reconocimiento a Negro Veras, el Sindicato de Trabajadores de la Corporación Dominicana de Electricidad (Sitracode), la Federación de Sindicatos Unidos de la Región Norte (Fesurno), el Frente de Lucha de la Zona Norte, el Comité de Solidaridad con el Pueblo Haitiano y organizaciones feministas.

La actividad se programa para el próximo 27 de los corrientes, a partir de las seis de la tarde, en el local de la Asociación de Abogados de Santiago. Se espera la presencia masiva de todos los sectores locales.

Los representantes de federaciones, sindicatos y demás entidades presentes en el encuentro se comprometieron a trabajar duramente para garantizar la presencia de cada sector en el homenaje al abogado Negro Veras.

El mismo tendrá como objetivo, aparte de respaldar la responsable lucha del jurista contra el narcotráfico, contrarrestar la campaña en su contra que mantienen sectores inescrupulosos de esta ciudad, a los que se liga dentro y fuera de la judicatura.

Para el próximo viernes se programó un nuevo encuentro el cual servirá para evaluar el trabajo que se hace con miras al homenaje que incluirá –según se adelantó- la entrega de pergaminos y placas de reconocimiento a Negro Veras, así como intervenciones artísticas”. (58)

El enfrentamiento que llevé a cabo contra los narcotraficantes llegó hasta el punto de que los organismos de seguridad del Estado me hicieron saber que al país habían llegado pistoleros colombianos con el fin de atentar contra mi vida, y que lo más prudente sería que por un tiempo saliera del país con mi familia. Ante tal información respondí procurándome medios y hombres para hacerle frente a cualquier situación contra mi persona y mi familia; estaba dispuesto a todo. La prensa reseñó la situación así:

Comité Derechos Humanos afirma organismos de seguridad están en el deber de proteger a Negro Veras

El presidente del Comité Dominicano de los Derechos Humanos consideró ayer que si los organismos de seguridad del Estado no garantizan la integridad personal del doctor Ramón Antonio Veras, y es cierta la versión de que el profesional fue “invitado” a salir del país por tales razones, estamos ante un precedente muy delicado. En tanto que el mayor general Fernando A. Sánchez Aybar, Jefe de la Policía Nacional, dijo ayer que la institución del orden está en capacidad de garantizar la integridad personal de Negro Veras y la de cualquier otro dominicano.

El doctor Ramón Antonio Martínez Portorreal, presidente del CDDH, indicó que si se le pide al doctor Veras que abandone el país porque los organismos de seguridad del Estado no pueden garantizarle su integridad personal, se le estaría dando cabida a que los narcotraficantes realicen sus actividades de manera “legal” o amparados en la oficialización que implicaría la desprotección a quienes se atreven a denunciarlos seriamente.

“Los organismos de la seguridad del Estado están en el deber, en la obligación, de ofrecer todo tipo de protección a todos los hombres públicos, que, como el doctor Negro Veras, se han atrevido a denunciar valientemente las actividades de los narcotraficantes y otros delincuentes”, dijo a El Nuevo Diario el doctor Martínez Portorreal.

El presidente del CDDH expresó que esa protección de los organismos de seguridad debe ser dada, hasta en contra de su voluntad, no solo al doctor Veras, “sino también a los periodistas, a los jueces y/o a cualesquiera hombres o mujeres públicos que tengan la valentía de denunciar todo cuanto anda mal en nuestro país.

De su lado, el Jefe de la Policía, mayor general Fernando A. Sánchez Aybar, manifestó que la institución que dirige garantiza plenamente la integridad física del presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, y dijo que en ningún momento el doctor Veras ha sido “invitado” a salir del país.

“Quienes publicaron la denuncia “hablan de fuentes, pero no es el doctor Veras quien ha hecho la denuncia”, manifestó el mayor general Sánchez Aybar.
Reiteró que la policía garantiza la vida de cualquier ciudadano, “y más al doctor Veras” a quien definió como un ciudadano ejemplar.

Ayer la fuente que dio la información a El Nuevo Diario sobre la conversación entre el Jefe de la policía y el doctor Veras, reiteró que al jurista santiagués ciertamente se le pidió que abandonara la nación “hasta tanto los mafiosos se olviden del problema. (59).

FUENTES:
(56) La Información. 18 de abril 1988.
(57) El Nacional. 18 de abril 1988.
(58) La Información. 19 de abril 1988.
(59) El Nuevo Diario. 20 de abril 1988.
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La presencia del narcotráfico, su influencia en los organismos del Estado dominicano, comenzó a ser de notoriedad en la década del ochenta del siglo pasado.

En un determinado momento fui informado de que funcionarios que desempeñaban cargos cercanos al doctor Joaquín Balaguer, a cambio de dinero ofrecían favores oficiales de todo tipo a reconocidos narcotraficantes. Así lo denuncié y la prensa escrita se hizo eco de mi declaración en la forma siguiente:

Negro Veras afirma funcionarios de alto nivel dan “Pases” a narcotraficantes para entrar al Palacio Nacional

“El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago denunció ayer que personas vinculadas al narcotráfico han sido favorecidas con “pases” para penetrar al Palacio Nacional, los cuales habrían sido facilitados por funcionarios de alto nivel del gobierno central.

El doctor Ramón Antonio Veras afirmó que “personas de alto rango dan permisos para el uso de metralletas a personas que trabajan en el “negocio del narcotráfico”.

El doctor Veras manifestó que a pesar de que el gobierno y los organismos de seguridad del Estado han anunciado que tomarán una serie de medidas para contrarrestar el tráfico de drogas narcóticas en Santiago, sigue campeando el narcotráfico.

Tras calificar como muy delicada la situación que envuelve el sucio juego del narcotráfico, el presidente de la Asociación de Abogados de Santiago relató que las autoridades de esa ciudad fueron a allanar a un señor y éste salió con una metralleta en la mano a enfrentar a quienes fueron a realizar las pesquisas. “Lárguense de mi casa, ¿qué es lo que quieren?”, habría dicho el afectado en tono enérgico.

“¿Y ese carro con placa oficial?” preguntó una de las personas que practicarían el allanamiento.

“Mío”, respondió el señor de la metralleta.

“Y… ¿Esa ametralladora?”, volvió a inquirir la autoridad que practicaría el allanamiento, a lo que el dueño de la vivienda que se allanaría respondió: “Mía también”.

Entrevistado en el programa “Síntesis” que produce el doctor Julio Hazim en los canales de Teleantillas, el doctor Negro Veras insistió en que el narcotráfico “sigue campeando en la ciudad de Santiago”.

El Nuevo Diario se enteró en fuentes de entero crédito que el teniente general Antonio Imbert Barrera, secretario de las Fuerzas Armadas, recibió nuevamente al doctor Negro Veras el pasado miércoles y conversaron por espacio de más de cuatro horas.

La fuente que reveló la información manifestó que el encuentro se produjo en horas de la tarde y que el tema principal fue el narcotráfico y las denuncias de torturas a personas detenidas en el cuartel de la policía en Santiago.

Se dijo que el doctor Veras llegó a la sede de las Fuerzas Armadas en un carro privado, color amarillo, conducido por un hombre de color blanco. De inmediato fue introducido al despacho del general Imbert.

En otras oportunidades el doctor Veras y el general Imbert han sostenido reuniones, aunque esta fue la más larga. Se cree que el abogado santiagués y el general Imbert Barrera trataron temas relacionados con los últimos hechos ocurridos en el país y particularmente en Santiago.

El doctor Ramón Antonio Veras ha mantenido, en su condición de presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, una denuncia constante contra los métodos de torturas que se han aplicado contra personas detenidas durante el reciente llamado a huelga.

Las opiniones más socorridas, según la fuente, es que el doctor Veras y el general Imbert Barrera, al parecer se extendieron tanto durante la reunión porque hubo diferencias en los temas tratados entre el jurista y el alto militar”.
Aunque el doctor Veras llegó a la secretaría de las Fuerzas Armadas en un vehículo privado, al final del encuentro salió en uno militar, de los que están asignados a las Fuerzas Armadas, según la fuente.

Se recuerda que hace algún tiempo este mismo periódico fue informado de una reunión entre el doctor Veras y el general Imbert Barrera. En la ocasión ninguno de los dos reveló lo tratado ni dieron a conocer a la opinión pública el motivo de su reunión”. (52)

A nuestra denuncia de protección de altos funcionarios a los narcotraficantes, respondió el doctor Rafael Bello Andino, en los siguientes términos:

Bello pide a Veras identifique “narcos”

“SANTO DOMINGO. El secretario de la presidencia, Rafael Bello Andino, pidió ayer al abogado santiagués Ramón Antonio Veras que identifique a los presuntos narcotraficantes que poseen pases de ingreso al Palacio Nacional, como denunciara el jurista.

Bello Andino exhortó a Negro Veras a que le ofrezca informes confidenciales acerca de los alegados narcotraficantes, en caso de que entienda que por razones de seguridad personal no deba darlos a la luz pública.

Mostró su disposición a reunirse en cualquier momento con el presidente de la Asociación de Abogados de Santiago o a recibir cualquier llamada telefónica con fines de ofrecer los datos.

Bello Andino indicó que en varias ocasiones ha sostenido reuniones con Negro Veras para tratar problemas de interés nacional y citó, entre estas la celebrada en relación con inquietudes que tenía el dirigente de los abogados sobre las cárceles del país”. (53)

En razón de que sabía que el doctor Balaguer, estaba al margen de las estrechas relaciones de funcionarios suyos con narcotraficantes, hice hincapié en que solamente a él, al doctor Balaguer, le haría entrega de las pruebas escritas que tenía en mi poder y que servían de base a mi denuncia, y así lo dije públicamente.

Dice tiene pruebas sobre narcotraficantes entran Palacio

“SAN FRANCISCO. El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago dijo aquí que está en disposición de ofrecer públicamente las pruebas de que los narcotraficantes poseen tarjetas para entrar al Palacio Nacional.

El doctor Ramón Antonio Veras agregó que acudirá a la cita que le hace el secretario de la Presidencia Rafael Bello Andino, si el presidente de la República doctor Joaquín Balaguer, está presente en la reunión.

Consideró que al presidente Balaguer le conviene que él aporte las pruebas, ya que Balaguer está dando demostración de enfrentar el narcotráfico. Veras manifestó que al mandatario de la nación le están engañando con el tráfico de drogas”. (54)

La prensa difundió la noticia de que estaba dispuesto a ubicar a los narcotraficantes que disfrutaban de favores por parte de funcionarios del régimen del doctor Balaguer:

Veras identificaría “narcos”

“SAN FRANCISCO DE MACORÍS. El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago proclamó que en el Palacio Nacional hay personas muy cerca del doctor Joaquín Balaguer ligadas al narcotráfico e indicó que al jefe del Estado lo están engañando en relación a ese sucio y criminal negocio.

El doctor Ramón Antonio Veras -Negro- destacó que en la casa de gobierno “hay personas muy cerca del mandatario” que están supuestamente ligadas al narcotráfico.

Informó que tiene datos que revelan que los narcotraficantes han logrado pases para entrar al Palacio cuando les dé la gana, alegando que esos permisos fueron suministrados por funcionarios importantes.

“Estoy en disposición de suministrarle los nombres de esas personas al presidente Balaguer, siempre que él lo estime necesario”, afirmó Negro Veras.
Sostuvo que está presto a identificar a los narcotraficantes que merodean por el Palacio Nacional, pero que sólo lo haría frente al jefe de Estado y previas condiciones que propondrá.

Además, conforme al máximo dirigente de los abogados de Santiago, se darían los nombres de los funcionarios que están ofreciendo los pases a las personas mezcladas al sucio y criminal negocio.

Declaró que si Balaguer está en disposición de pasar por la puerta ancha de la historia no debe rechazar la propuesta que le formula, ya que permitirá conocer los pormenores de la combinación del narcotráfico con gentes influyentes del Palacio Nacional.

Por otra parte, el presidente de la Asociación de Abogados de Santiago dijo que en esta ciudad hay un deterioro total de los derechos humanos y las libertades públicas.

Destacó que ejemplo de esto lo constituyen las torturas que se aplican en la policía contra personas que han sido detenidas por razones políticas.

Reveló que en el Servicio Secreto de la Comandancia Norte de la Policía se están cometiendo grandes atropellos contra los ciudadanos que son detenidos”. (55).

FUENTES:

(52) El Nuevo Diario. 15 abril 1982.
(53) El Inforamción. 16 de abril 1982.
(54) El Noticia. 16 de abril 1982.
(55) El Información. 18 de abril 1982.
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No tenía la menor duda de que el presidente Balaguer y el general Imbert estaban identificados en la lucha contra el narcotráfico. Por tal razón declaré lo siguiente:

Negro Veras. Sólo excluye JB, Imbert de drogas

“SANTIAGO.- El abogado y político doctor Ramón Antonio Veras (Negro) denunció hoy aquí que en la República Dominicana “sólo las sillas del presidente Joaquín Balaguer y del teniente general Antonio Imbert Barrera no están tocadas por el narcotráfico”.

Veras, quien es también un activista por los derechos humanos, señaló que “fuera de esas dos sillas, de ahí en adelante no confío en más nadie. Creo que el narcotráfico -agregó el jurista- ha tocado todas las instituciones del país”.
El doctor Veras, que se ha caracterizado por su lucha contra las drogas, dijo que continúan las amenazas de muerte contra su persona, “esta vez adquiriendo mayor características, ya que mis hijos y mi esposa están siendo amenazados de muerte por los narcotraficantes”.

En varias ocasiones, tanto el doctor Veras como amigos suyos y sectores de la sociedad han expresado preocupación por la campaña de amenazas del narcotráfico contra aquél. El doctor Veras reiteró anoche que la puesta en libertad, de José Rodríguez fue irregular y que hubo corrupción en la justicia. (47).

Para que no quedara ninguna duda con respecto a mis declaraciones haciendo referencia al doctor Balaguer y al General Imbert Barrera, aclaré mis ideas así:

Aclara sospecha sobre el narco

SANTIAGO.- El doctor Ramón Antonio Veras aclaró hoy que se refirió a instituciones del Estado y no a personas u organismos privados cuando declaró que sólo excluía del narcotráfico al presidente Joaquín Balaguer y al secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general Antonio Imbert Barrera.

En declaraciones escritas, Veras manifestó que “cuando decimos que en nuestro país sólo las sillas del doctor Joaquín Balaguer como Presidente de la República, y el secretario de las Fuerzas Armadas, no están tocadas por el narcotráfico, nos referimos a las instituciones del Estado. No nos referimos a personas ni organismos privados.

Aseguró que en el país existe temor a nivel del pueblo de denunciar el narcotráfico porque muchas veces no se sabe “si el que va a ir a la cárcel es el que denuncia el narcotráfico o es el traficante”.

Añadió que hay precedentes de personas que han denunciado al narcotráfico y al día siguiente aparecen “con el tiro en la nuca”.

Dijo que realmente existe desconfianza pública para que la ciudadanía se anime a poner en conocimiento de las instituciones del Estado la realidad del narcotráfico.

“Los capos andan y se mueven con una impunidad que resulta sospechosa”, expresó Veras.

Indicó que el pueblo luce impotente ante dicha impunidad, y agregó que basta con darle seguimiento a un expediente en el que figure un narcotraficante para de inmediato darse cuenta  que el narcotráfico es dueño de “nuestro medio a nivel de poder.

El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago estimó que los narcotraficantes solucionan sus problemas con suma facilidad porque su dinero abre y cierra las puertas. (48)

Me sentía que no estaba solo enfrentando el narcotráfico. Las voces más sensatas hicieron causa común conmigo. He aquí un llamado del periodista deportivo Leo Corporán:

¿Te enteraste?

Los clubes deportivos y culturales de todo el país deben respaldar la lucha contra las drogas del doctor Ramón Antonio Veras (Negro), quien reiteró ayer que él y su familia reciben amenazas de muerte de los traficantes.

Asimismo deben apoyar las denuncias del periodista Radhamés Gómez Pepín, a través de su columna “Pulsaciones”, en relación al terrible mal de las drogas.

El doctor Negro Veras y el periodista Gómez Pepín han dado la voz de alerta. Y el silencio del movimiento clubil es malo. Los clubes deportivos y culturales están en inercia. Y están perdiendo el apoyo de sus barrios. ¿y por qué?
Pienso que es por la indiferencia. Las drogas nos arropan y nos quedamos callados. Y muy pronto, las drogas arroparán a nuestros hijos, hermanos, amigos y familiares”.

Y eso hay que evitarlo. Recuerdo del pasado la férrea solidaridad mostrada por el movimiento clubil con las ideas y las luchas sanas a favor del pueblo.

¿Qué nos está pasando? Lo cierto es que en ocasiones me siento como si se me hubiera terminado el agua. Sin embargo, en breve vuelve el optimismo pues sigo confiado en el despertar de los clubes deportivos y culturales. (49).

En la lucha contra el crimen del narcotráfico, en mi condición de presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, manifesté mi firme decisión, como lo reseñó la prensa:

Abogados Santiago anuncian combatirán tráfico drogas

La Asociación de Abogados de Santiago (AAS) manifestó estar en disposición de enfrentar el crecimiento del narcotráfico en la República Dominicana, y solicitó la cooperación de todos los sectores sensatos para frenar esta acción.

El doctor Ramón Antonio Veras (Negro), presidente de la AAS, destacó la responsabilidad del secretario de las Fuerzas Armadas, teniente general Antonio Imbert Barrera por su marcado interés en combatir el narcotráfico.

Señaló que ojalá aparezcan hombres y mujeres con la calidad y responsabilidad del general Imbert Barrera para hacerle frente al narcotráfico.

Hablando en un rueda de prensa en la Alianza Cibaeña, en la calle Beller, el doctor Veras afirmó que el narcotráfico está penetrando en lo más profundo de nuestra sociedad.

Dijo que la Asociación de Abogados de Santiago luchará por frenar esta acción que tanto daño le está ocasionando a la sociedad de hoy y a las generaciones futuras.

“Vamos a enfrentar este caso con seriedad y responsabilidad, y agradeceremos cualquier denuncia que llegue ante nuestra entidad relacionada con el narcotráfico”, apuntó el doctor Veras. (50)

Para enfrentar el narcotráfico utilicé todos los espacios a los cuales podía tener acceso, principalmente en los medios de comunicación. He aquí un artículo que escribí para dar respuesta a la inquietud de un estudiante:

Ante el narcotráfico

Un estudiante de derecho nos preguntó hace unos días si en el curso de nuestro ejercicio profesional habíamos defendido ante los tribunales a un drogadicto o traficante.

Le respondimos al estudiante, que nunca habíamos asistido en sus medios de defensa a un drogadicto, a un traficante ni a un contrabandista.

 Nuestra posición a no defender a drogadictos y traficantes es por cuestión ideológica. Responde a un criterio político nuestro, no profesional.

No criticamos a ningún abogado o abogada que en el normal ejercicio de su profesión, y utilizando los recursos legales, asista en sus medios de defensa a un drogadicto o traficante. Eso es normal y correcto y está al abrigo de toda crítica.

Una cuestión es actuar ajustado a las normas de la ética del ejercicio profesional, y otra actuar conforme la ética profesional y criterios ideológicos. (51).

FUENTES:
(47) El Nacional. 19 de febrero 1988.
(48) El Nacional. 20 de febrero 1988.
(49) El Nacional. 20 de febrero 1988.
(50) Listín Diario. 23 febrero 1988.
(51) El Nacional. 27 de febrero 1988.

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Los fenómenos sociales tienen que ser combatidos con el accionar de los mejores hombres y mujeres de la sociedad, sin importar posición social o criterio ideológico.  Con esa creencia, en su momento, me manifesté por la necesidad de una conjunción de fuerzas sociales para darle de frente al crimen del narcotráfico. Por tal razón sugerí lo siguiente:

Veras favorece
Frente contra narcotráfico

“El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, doctor Ramón Antonio (Negro) Veras, favoreció ayer la formación de un frente amplio contra el narcotráfico.

Veras dijo que en ese frente deben participar las autoridades y las personas conscientes del país. El presidente de la ASS al hacer la sugerencia se identifica plenamente con el coronel Ramón Antonio González Contreras, jefe del departamento de Narcóticos de la policía, quien hizo el planteamiento por primera vez.

“Creemos que con sus palabras el coronel González Contreras ha interpretado el sentir de amplios sectores de la vida nacional que están interesados en que se enfrenten a los verdaderos narcotraficantes con firmeza y decisión”, comentó Veras.

Explicó que se puede formar un abanico de personas e instituciones que hagan causa común, porque según afirma, el narcotráfico hay que controlarlo. Enfatizó que si la policía arrastra limpieza y seriedad contra los narcotraficantes, “nos tendrá como un aliado”.

Creo que se debe enfrentar con la misma fuerza a los que están en operaciones de tráfico, como a los que les hacen el juego, sea en el servicio judicial, en los cuerpos policiales y armados, y otras instituciones del país.

Subrayó que el frente propuesto por el coronel González Contreras y que él respalda plenamente puede llegar a ser tan amplio al extremo de que se den las manos hombres y mujeres que aquí son adversarios rabiosos en el orden político e ideológico.

Empero, Veras estima que para que se comience a integrar el frente amplio se requiere que la Policía Nacional predique con el ejemplo. Sostuvo que en los últimos tiempos, hombres y mujeres se sienten animados en la lucha contra el narcotráfico, porque han visto que desde que el teniente general Antonio Imbert Barrera está al frente de las Fuerzas Armadas se le han dado golpes duros al narcotráfico”. (43)

En mi condición de presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, hice ante el país una relación de las irregularidades que se ejecutaban en Santiago para favorecer a personas ligadas con la delincuencia, especialmente a los narcotraficantes que, para esa época, -1988-, todavía no constituían un sector de poder, como lo son ahora. En la denuncia se indicaron las personas por sus respectivos nombres y las acciones que hacían a favor del narcotráfico. La prensa reseñó la denuncia así:

AAS revelará hoy detalles de caso Muñeco

“La Asociación de Abogados de Santiago denunciará hoy las personas que intervinieron en la puesta en libertad del supuesto narcotraficante José Rafael Rodríguez Vargas (Muñeco), que recientemente causó un revuelo en esta ciudad. Asimismo la AAS, revelará los detalles de la investigación realizada por la entidad en torno a las anomalías que se producen en el Palacio de Justicia de Santiago, denunciadas hacer varios meses por ese gremio”.(44)

En los primeros meses del año 1988, el encargado de enfrentar a nivel policial el narcotráfico en Santiago, también se pronunció a favor de un frente contra el narcotráfico, lo que me motivó a escribir:

Frente al narcotráfico

Resultan muy positivas las declaraciones hechas recientemente por el Coronel Ramón Antonio González Contreras, comandante del Departamento Contranarcóticos de la Policía Nacional, en el sentido de que favorece la formación de un frente amplio de lucha contra el narcotráfico, en el que participan unidos las autoridades y las personas conscientes del país.

Creemos que con sus palabras el coronel González Contreras, ha interpretado el sentir de amplios sectores de la vida nacional que están interesados en que se enfrenten a los verdaderos narcotraficantes con firmeza y decisión.

De seguro que en el frente amplio que sugiere el Comandante del Departamento Contranarcóticos, estarán integradas todas las fuerzas sanas del país. Se puede formar un abanico de personas e instituciones que hagan causa común para un objetivo común. Nosotros creemos en los hechos, en la realidad de la vida; si vemos que la Policía Nacional enfrenta con limpieza y seriedad a todos, que se lea bien, a todos los narcotraficantes, de seguro que nos tendrá como un aliado. Pero los hechos son los hechos y no se derriten; creemos en hechos, no en palabras.

Enfrentar a los narcotraficantes, según nuestro criterio, no es apresar a dos o tres jóvenes enfermos por las drogas, no; enfrentar el narcotráfico es golpearlo en su propia base, ubicarlo, investigarlo, denunciarlo; enfrentado con la misma fuerza a los que están en las operaciones de tráfico como a los que les hacen el juego, sea en el servicio judicial, en los cuerpos policiales y armadas, y en otras instituciones del Estado.

El frente propuesto por el Coronel González Contreras, puede llegar a ser tan amplio que en él se den las manos hombres y mujeres que aquí son adversarios rabiosos en el orden político e ideológico. Pero para que se comience a integrar el frente amplio precisamos que la Policía Nacional, comience predicando con el ejemplo.

En los últimos tiempos los hombres y mujeres sensatos del país se sienten animados en la lucha contra el narcotráfico porque han visto que desde que el teniente General Antonio Imbert Barrera, está al frente de la secretaría de las Fuerzas Armadas, se le han dado duro golpes a los narcotraficantes. El teniente General Imbert Barrera, está demostrando, en la práctica, que no anda haciendo componendas con los que aquí han hecho un negocio normal de la cocaína. (45)
Los narcotraficantes llegaron a ver en mi persona a un enemigo personal, y por vía de consecuencia dirigían sus amenazas contra mi y mi círculo familiar.

Una acción cobarde del crimen del narcotráfico fue que, aprovechando la  ausencia mía en mí residencia, quisieron eliminar físicamente a mi compañera Carmen, pero ella, con el valor personal que siempre le caracterizó, se enfrentó con sus atacantes; hice la denuncia del hecho, y la prensa lo reseñó, incluyendo un editorial del periódico El Nacional de fecha 19 de febrero de 1988, con el siguiente contenido:

Grave denuncia

El doctor Ramón Antonio Veras, (Negro) es el presidente de la Asociación de Abogados de Santiago. Es un profesional muy conocido, no sólo en la ciudad cibaeña, sino en todo el país. Ha contado con un ejercicio exitoso y es respetado en todas las esferas de la vida nacional, pues ha sido un hombre de conducta intachable, que jamás se ha prestado a maniobras o componendas.

El doctor Veras, desde hace algún tiempo, es objeto de amenazas formuladas por personas -vamos a llamarlas así- que no suelen dar el frente y se esconden en el cobarde anonimato. Esas amenazas se producen después que el doctor Veras ha dirigido una campaña de denuncias contra el narcotráfico y la judicatura de la ciudad en la cual reside.

Muy recientemente se amenazó a los hijos del doctor Veras, menores de edad, y el abogado no vaciló en denunciarlo, públicamente, reiterando sus ataques contra aquellos que, por afán de lucro fácil, destruyen a la sociedad.

El doctor Veras, junto a sus compañeros de asociación, ofrecieron su respaldo a las Fuerzas Armadas y a su secretario, teniente general Antonio Imbert Barrera, en cuanto esfuerzo realicen para contener el nocivo tráfico de estupefacientes. Al mismo tiempo, denunciaron  supuestas irregularidades existentes en la judicatura de Santiago, que ameritan la intervención de la Procuraduría General de la República y de la Suprema Corte de Justicia.

Esta mañana el doctor Veras denunció que, en las últimas horas, su esposa ha sido víctima de distintas amenazas y llegó al extremo de decir que a nivel institucional sólo excluye de posibles implicaciones en el tráfico de narcóticos al presidente doctor Joaquín Balaguer y al general Imbert Barrera.

Ese es un cargo grave, muy grave. Al doctor Veras, en el aspecto ideológico, se le conoce como un hombre de definida participación de izquierda, aun cuando no milite en partido político alguno. Eso no invalida sus denuncias ni puede mover a pensar que las mismas obedecen porque es opositor al gobierno actual. Su actitud fue la misma –la de denunciar cuanto consideraba incorrecto- frente a la pasada administración pública, pese a que, por años, fue compañero de bufete del ex presidente Salvador Jorge Blanco, con quien rompió relaciones en pleno gobierno de éste.

El gobierno dominicano, pues, está en el deber, ante todo, de ofrecer la debida protección al doctor Veras y a su familia. Es muy importante, al mismo tiempo, que disponga las investigaciones de lugar sobre las denuncias formuladas por el doctor Veras, en su calidad de presidente de una asociación de abogados. (46).

FUENTES:

(43) La Información. 17 de febrero 1988.
(44) La Inforamción. 18 de febrero 1988.
(45) El Nacional. 19 de febrero 1988.
(46) El Nacional. 19 de febrero 1988.
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No podía perder ninguna oportunidad para denunciar la penetración del narcotráfico y su influencia. Los medios de comunicación, siempre receptivos a mis denuncias, recogieron mis opiniones que buscaban alertar al país y a las autoridades de cómo crecía la influencia del negocio de las drogas.

He aquí una de mis denuncias:

Narcotráfico aumenta en Santiago

Santiago.- El narcotráfico ha crecido en grandes proporciones en Santiago en los últimos años Y mantiene en estado de zozobra a importantes núcleos de la población, mientras que la policía, a pesar de sus esfuerzos, no ha podido destruir las ramificaciones y raíces de la distribución de drogas.

La justicia, el principal apoyo de la policía, en cambio, ha sido lenta y pasible con los narcotraficantes. Un alto porcentaje de los sometidos han sido liberados por los tribunales y los fiscales de turno.

Hay que luchar con fuerza y valentía contra el narcotráfico, afirmó el doctor Ramón Antonio Veras, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago. (38)

Ante el escándalo que produjo la comprobación de la puesta en libertad de narcotraficantes en forma ilegal, el presidente de la República procedió a cancelar al fiscal titular, y en su lugar designó al licenciado Víctor José Castellanos Estrella. La prensa hizo la siguiente reseña de la toma de posesión del nuevo fiscal.

Nuevo fiscal Santiago promete erradicar la delincuencia y adecentar el palacio
“Santiago.- Con la promesa de que convertirá el Palacio de Justicia de este municipio en funcional y decente y de que hará el mayor esfuerzo posible por erradicar la delincuencia, asumió su cargo el nuevo procurador fiscal de aquí.

En el desarrollo del acto de posesión el licenciado Víctor José Castellanos escuchó las recomendaciones que les hicieron el doctor Ramón Antonio Veras, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, y el general Salomón Delmonte Tavárez, jefe del comando regional norte de la policía.

Negro Veras reclamó a la autoridad judicial que no desmaye en su pretensión de limpiar moralmente el Palacio de Justicia de este municipio.

Aquí deben ponerse las cosas en orden, que los empleados judiciales hagan las labores que están llamados a realizar y que los alguaciles trabajen ajustados a las normas legales”, recomendó Veras.

De su lado, el licenciado Castellanos agradeció las recomendaciones de Veras y el jefe regional de la policía, prometiendo que pondrá en práctica cuanto antes las mismas”. (39)

Porque tenía la firme creencia de que la lucha contra el fenómeno de las drogas y el narcotráfico no podía ser la obra de una persona u organismo individual, escribí lo siguiente:

Unidad contra el narcotráfico

En la ciudad de Santiago se ha formado una especie de frente ideal contra el narcotráfico. Diferentes sectores han rechazado la influencia que puedan ejercer los narcotraficantes contra el Departamento Judicial de Santiago.

Con motivo de la toma de posesión de licenciado Víctor José Castellanos Estrella, como procurador fiscal de Santiago, se manifestó en el sentido de que desde la fiscalía enfrentará decididamente el narcotráfico y otras lacras de la sociedad.

En igual sentido se han pronunciado el presidente del Colegio de Abogados y el secretario general de la Seccional de Santiago. Los medios de comunicación –escritos, radiales y televisivos- de Santiago por medio de juiciosos editoriales han condenado las pretensiones de los narcotraficantes de penetrar el Departamento Judicial de Santiago.

Las organizaciones religiosas, estudiantiles, sindicales y culturales también han dicho ¡presente! contra los narcotraficantes y sus actividades delincuenciales en Santiago y en todo el país.

La realidad ha demostrado que los funcionarios que quieren ser complacientes con los narcotraficantes en el sector judicial de Santiago, tendrán que hilar muy fino porque la comunidad está muy alerta en la lucha contra el narcotráfico y su interés en penetrar por medio del dinero, en el área judicial. (40)

No escatimé esfuerzo, ni dejé de tocar puertas para poner en evidencia todo lo relacionado con el narcotráfico, y denunciar sus vínculos en los órganos del Estado. En esa labor establecí buenas relaciones con el General Antonio Imbert Barrera, quien siempre se comportó receptivo a mis reclamos. He aquí una reseña periodística de un encuentro que sostuve con el General Imbert.

Trasciende reunión entre Imbert Barrera y Negro Veras; tratan sobre narcotraficantes y muerte en PN

“El secretario de las Fuerzas Armadas y el Presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, sostuvieron una larga reunión el pasado jueves en la que, según trascendió, se trataron diversos temas, entre estos la muerte del recluso Julio Daniel Rosario Vargas, y la amenaza de muerte a los hijos del jurista, entre otros.

Se estableció que el teniente general Antonio Imbert Barrera y el doctor Ramón Antonio Veras (Negro) conversaron por espacio de más de dos horas en el despacho del titular de las Fuerzas Armadas, durante la tarde del jueves.

Fuentes vinculadas a ambas personalidades dijeron a El Nuevo Diario que el abogado santiagués llegó a la sede de la Secretaría de las Fuerzas Armadas, acompañado de su esposa y de tres hombres que, según los informantes, forman parte de la seguridad personal del doctor Veras.

Recientemente el doctor Veras denunció que sus hijos estaban siendo amenazados de muerte luego de que el jurista denunciara que reconocidos narcotraficantes estaban siendo libertados por la justicia.

Transcendió también que además del tema de sus hijos y el caso del obrero de la Corporación Dominicana de Electricidad que murió en la cárcel, el teniente general Imbert Barrera y el doctor Veras conversaron sobre la situación de la justicia en Santiago. Según los informes, no es el primer encuentro que se produce entre Imbert Barrera y Veras, ya que ha habido otras reuniones anteriores, pero se desconoce el móvil de los encuentros.

Muchos de los militares de servicio en la Secretaría de las Fuerzas Armadas se sorprendieron  al ver entrar al doctor Veras a esa sede, pues como se sabe, las relaciones entre el profesional y los organismos castrenses no han sido las mejores, precisó nuestro informante”. (41)

En razón de que un abogado de la ciudad capital utilizó el nombre del general Antonio Imbert Barrera, para influir en el fiscal de Santiago, y lograr así la libertad de un narcotraficante, éste tomó una decisión en firme contra el jurista, como consta en carta publicada en la prensa de la época, la cual dice textualmente así:

Imbert Barrera acusa a doctor de pasar como su asesor para sacar ventajas personales.

“Distinguidos Abogados:

Me complace acusar recibo de sus correspondencias de fechas 4 y 12 de febrero en curso, en las cuales solicitan informaciones que consideran de interés para esa asociación de profesionales del derecho.

En torno a las mismas, debo significarles que me ha causado profunda extrañeza e indignación, la versión mentirosa puesta a circular por el Dr. Julio de Peña Santos, en el sentido de que es Asesor Legal del suscrito, con la intención deliberada de sacar ventajas o provechos personales, de acciones delictivas que se ventilan en órganos jurisdiccionales del Departamento de Justicia de Santiago, que he perseguido y combatido decididamente desde el mismo instante en que fui honrado por el Excelentísimo señor Presidente de la República, como titular de esta cartera militar, me refiero distinguidos juristas, a las actividades del narcotráfico internacional, flagelo de las sociedades de nuestros tiempos.

En otro aspecto de su interés, niego enfáticamente haber donado arma de fuego alguna al Lic. Augusto Lozada Almonte, ex-Procurador Fiscal del Distrito Judicial de Santiago y que mucho menos haya utilizado la vía del aludido letrado para efectuar la entrega de la misma; si en consideración a la investidura de funcionario del Poder Judicial, decidiere asignar arma de fuego a una persona, porque así lo demande la preservación de su integridad física, les aseguro, que habré de recurrir a los procedimientos establecidos rigurosamente en los institutos armados para realizar cargos de este tipo de propiedad.

“Finalmente, deseo dejar constancia en el seno de esa Asociación, de que en esta fecha estoy impartiendo instrucciones precisas a la Consultoría Jurídica de esta Secretaría de Estado, para que proceda a instrumentar el expediente correspondiente en contra del Dr. Julio de Peña Santos, a fin de ser sometido a la acción de la justicia ordinaria en manos del Magistrado Procurador Fiscal del Distrito Nacional, para que responda de los cargos de crimen de comercio y tenencia de arma de fuego, y del delito de usurpación de funciones militares, hechos previstos y sancionados por los artículos 2, 39 párrafo IV, de la Ley No.36, modificada, sobre Comercio Porte y Tenencia de Armas; y 258 del Código Penal. Antonio Imbert Barrera, Teniente General, E.N. Secretaría de Estado de las Fuerzas Armadas (42). l

FUENTES:

(38) El Nacional. 31 de enero 1988.
(39) La Noticia. 2 de febrero 1988.
(40) El Nacional. 5 de febrero 1988.
(41) El Nuevo Diario. 9 febrero 1988.
(42) El Nuevo Diario. 17 febrero 1988.
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Trasciende investigaciones amenazas contra hijos de Negro Veras están avanzadas

Están adelantadas las investigaciones que se realizan de las denuncias hechas por el doctor Ramón Antonio Veras (Negro) de que sectores del narcotráfico, han amenazado de muerte a sus hijos.

Conforme datos suministrados a El Nuevo Diario, uno de los más cerrados y completos servicios de inteligencia del país tiene a su cargo las indagatorias del caso, el cual según se informó posee informes de que individuos vinculados al narcotráfico “han celebrado reuniones en la ciudad de Santo Domingo y también en un hotel de la ciudad de Santiago”. En esas reuniones habrían participado personas con ligazón en asuntos judiciales.

La forma como se ha manejado la investigación y cómo se ha rodeado la seguridad de los hijos de Negro Veras es tan discreta y con tanta eficiencia que la vigilancia pasa por no ser observada ni por los mismos protegidos”, según se informó.

Se supo que fue el mismo doctor Veras que escogió el área de los servicios de inteligencia del país para suministrarle los informes en que fundamenta su denuncia. Trascendió también que el gobierno estaría al tanto de todos los “hilos que se mueven alrededor de las amenazas de muerte”. “Los servicios de inteligencia que manejan el caso tienen informes de las personas vinculadas al narcotráfico que traman contra la vida de los hijos del doctor Veras”, sentenció la fuente.

También se estableció que Negro Veras cuenta con un servicio personal de seguridad, con amplio dominio de la defensa personal. A este respecto se especificó que los cuerpos armados del país, incluyendo la Policía Nacional, tienen conocimiento directo de este servicio personal de seguridad que le acompaña desde que fuera amenazado por personas señaladas como vinculadas al crimen del periodista Orlando Martínez, de cuyos familiares es abogado”. (33)

En ningún momento perdí de vista que si en el seno del servicio judicial los magistrados se comportaban tímidos frente al narcotráfico, con el tiempo el crimen organizado se haría sentir en el país, por lo que escribí:

Justicia y narcotráfico

Si los dominicanos nos comportamos indiferentes por el trato gracioso de algunos jueces con los narcotraficantes, dentro de poco el país será controlado por un grupo de desalmados, de personas sin escrúpulos para asesinar al más tranquilo de los que vivimos en este país.

Los narcotraficantes utilizan dos métodos para penetrar en el servicio judicial; el dinero y el asesinato. El juez que no acepta el soborno tiene que esperar el tiro en la nuca.

Así como en Colombia los jueces temen sancionar a los narcotraficantes, lo mismo puede ocurrir en nuestro país si los jueces serios y responsables no reciben el apoyo, el calor solidario de la ciudadanía sensata y muy especialmente de las organizaciones profesionales del derecho. (34)
El trabajo realizado por mí en el seno de los distintos sectores del país fue apreciado en su justo valor por diferentes organizaciones que reconocieron, en su momento, que la actitud del narcotráfico contra mí y mi familia era el resultado de mis denuncias. Llegado el momento los grupos sociales con los cuales había trabajado expresaron su preocupación con relación a las acciones del narcotráfico en mi contra.

Acciones narcotraficantes preocupa entidades

“Organizaciones religiosas, democráticas, sindicales y populares de Santiago mostraron preocupación por las acciones de los narcotraficantes, quienes amenazan a los sectores que denuncian con responsabilidad el auge de la drogadicción en la zona.

Las entidades en un documento entregado a La Información, se refieren básicamente a las amenazas de muerte que reciben el doctor Ramón Antonio Veras, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, y otros profesionales que no han silenciado las actividades de los traficantes de drogas.

Precisaron que Veras ha sido un fiel defensor de las causas nobles de este pueblo y se ha colocado al lado de la clase obrera.

Los gremios llamaron a los sectores democráticos del país a mantenerse alertas ante las amenazas de muerte de que son objeto profesionales que han denunciado la corrupción judicial en Santiago.

“Debemos proteger a quienes se sienten amenazados por los traficantes de estupefacientes y rechazar a esos mafiosos que tratan de apropiarse de las instituciones judiciales para que sus fechorías queden impune”, explicó.
El documento está firmado por la Pastoral Juvenil de Cristo Rey, Juventud Cristiana Progresista, los clubes, Félix Benjamín Marte, Oscar Arnulfo Romero, Mirador, Miguel Ángel Garrido, Juana Saltitopa, así como la Asociación de Buhoneros de Santiago.

También, Sindicato de Zapateros de Santiago, Federación de Sindicatos de Industria de la Construcción, Comité de Defensa de la Ceibita, Junta Comunitaria del Ciruelito, Fuerza Juvenil por el Socialismo y las centrales Mayoritarias de Trabajadores, Unitaria de Trabajadores, (CUT), General de Trabajadores (CGT) y otras entidades de servicio de la zona. (35)
Núcleo Cultural de Santiagueros en New York

A la opinión pública dominicana

“El Núcleo Cultural de Santiagueros en Nueva York considera que con el Dr. Ramón Antonio Veras se puede disentir en criterio político, pero no se puede obviar su seriedad, preocupación y buena fe en cuanto al destino socio-económico de nuestra isla en toda su extensión.

Hoy el doctor Veras y su familia son amenazados de muerte por personas antisociales. Para nosotros, santiagueros residentes en Nueva York, estas amenazas son de gran preocupación, primero, porque siendo residentes en esta urbe se nos llama “dominican york”, la misma etiqueta que llevan muchos narcotraficantes que hoy azotan a nuestro país. Estos términos están siendo usados sin discrimen de individuos, y, segundo, porque siendo santiagueros y conociendo la trayectoria de lucha del doctor Ramón Antonio Veras, creemos que mantener silencio ante estas amenazas, que dicho sea de paso no sólo son amenazas al Dr. Veras y su familia, sino a toda la sociedad dominicana y en particular a nuestro eventual regreso. Nosotros consideramos el silencio como un acto de cobardía. Por lo tanto el Núcleo Cultural de Santiagueros en Nueva York decidió repudiar estas acciones vandálicas y apoyar públicamente a Ramón A. Veras en su lucha de denuncias y saneamiento de nuestra sociedad.

Por último, hacemos un llamado al Presidente de la República, doctor Joaquín Balaguer, para que evite que la República Dominicana se convierta en una selva donde el narcotráfico asesine a servidores públicos y personas indefensas a plena luz del día. Por el Núcleo Cultural de Santiagueros en Nueva York. El Comité Central Ejecutivo”. (36)

Siempre tratamos de separar a los jueces y fiscales buenos y sanos, de los sucios, por tal razón hacíamos hincapié en nuestros escritos destacando:

Jueces y narcotráfico

Cuando un juez o representante del Ministerio Público extiende la mano para recibir de un narcotraficante, a título de soborno por una sentencia o dictamen, una suma de dinero, le está arrebatando la espada a la diosa que simboliza la justicia para introducirla en el corazón de cada dominicano que representa lo mejor de las futuras generaciones.

El amplio movimiento de protesta que se ha levantado en la ciudad de Santiago cuando se ha hecho de conocimiento público la puesta en libertad de narcotraficantes a cambio de dinero, tiene su razón de ser en el hecho de que en Santiago el servicio judicial no conocía ese vicio, el soborno de narcotraficantes a miembros de la judicatura.

El drogadicto es un enfermo y necesita un médico, pero el narcotraficante es una lacra social, un subproducto de la sociedad, y para reeducarlo hay que darle cárcel En las mismas cárceles que genera el sistema dominante.

La sociedad en que vivimos no es la ideal ni a la que aspiramos, ni queremos vivir, pero hay que defender los puntos sanos que hay en ella, y si el Departamento Judicial de Santiago es sano en un noventa y nueve por ciento, debemos, pues, emplearnos a fondo para extirpar lo nocivo y mantener lo sano. (37) l

FUENTES:

(33) El Nuevo Diario. 29 enero 1988.
(34) El Nacional. 29 de enero 1988.
(35) La Inforamción. 30 enero 1988.
(36) El Nacional. 30 de enero 1988.
(37) El Nacional. 31 de enero 1988.

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El sentir solidario, la identificación del pueblo con los que sinceramente luchan por las causas justas, ha sido recibido por los que tienen sensibilidad.

Ante el ataque de que fui objeto por parte del narcotráfico y sus aliados, hombres y mujeres expusieron sus ideas; así lo hizo el doctor Radhamés Jiménez Peña, quien luego llegaría a ser Procurador General de la República, mediante un artículo que escribió en el vespertino El Nacional, en fecha 25 de de enero de 1988, con el siguiente título:

Solidaridad con Negro

“El ejercicio dirigencial de cualquier tipo de actividad gremial conlleva una serie de responsabilidades que los gremialistas que nos consideramos serios, tenemos que asumir sin importar los riesgos que puedan correr nuestras vidas. Nuestras responsabilidades son históricas e impostergables.

En días recientes la vida de un gremialista y la de su familia fue amenazada. Se trata del ilustre colega doctor Ramón Antonio Veras (Negro) actual presidente de la Asociación de Abogados de Santiago. La denuncia hecha por Negro Veras indudablemente que encerraba en cierto modo una extraordinaria cuota de responsabilidad. Negro cumplió con su deber, hizo lo que tenía que hacer cualquier gremialista responsable. Defender la sociedad por encima de cualquier interés particular o de grupo, es el primer mandamiento que debe cumplir al pie de la letra todo dirigente.

El enfrentamiento del colega Negro, con sectores ligados al narcotráfico, es peligroso pero necesario. Esas bandas de malhechores antisociales tienen que ser enfrentadas con decisión inquebrantable. Pero si nuestra lucha contra estos parásitos humanos debe ser cada día de mayor envergadura contra quien debemos hacer explotar toda nuestra artillería, debe ser contra todas aquellas autoridades judiciales que, haciendo un uso indebido de sus atribuciones, llegan a la deshonesta y vulgar práctica de libertar delincuentes a cambio de dinero.

Es el momento para que todos los abogados que nos consideramos serios y comprometidos con los más nobles y sanos intereses del país, brindemos nuestro apoyo y solidaridad sin ningún tipo de reservas al doctor Negro Veras.

Negro puede tener la absoluta certeza de que los abogados que conformamos el Movimiento Vanguardia Profesional del Derecho, estamos incondicionalmente a su disposición para brindarle nuestro respaldo en cualquier terreno.

La inversión de valores en que se encuentra sumergida la sociedad dominicana, permite que la misma deje pasar desapercibida las monstruosidades que a diario se cometen. La sociedad luce indefensa, desamparada, a merced de los desperdicios humanos que andan detrás de fortuna y buena vida, caiga quien caiga. La pusilanimidad es una de las características principales de estas escorias desaprensivas.

Negro puede tener la absoluta seguridad de que no está solo en su lucha contra el narcotráfico y venalidad de algunas instancias del Poder Judicial. El proceso progresivo de descomposición social es atribuible a un sinnúmero de causas, hay que frenarlo con acciones mancomunadas.

De manera, pues, que hacemos una formal exhortación a todos los abogados del país, y sectores pensantes de nuestra sociedad, para que unidos como un solo hombre, nos solidaricemos con la causa de nuestro colega de Santiago, Negro Veras.

Y a ti, Negro, te arengamos para que no des un solo paso atrás, te reiteramos que no estás solo en tu lucha contra todo lo que sea negativo para el presente y el futuro de nuestra patria”. (30)

El movimiento obrero, gremial, juvenil, sindical y político del país, manifestó su sentir contra el crimen del narcotráfico y sus amenazas contra mi familia. He aquí el escrito emitido por distintas organizaciones:

Apoyan actitud Veras caso droga

“Organizaciones sindicales y políticas condenaron ayer las amenazas de muerte que recibe el doctor Ramón Antonio Veras, junto a sus hijos, por parte de sectores ligados al narcotráfico.

Las entidades, en documento enviado a La Información, expresaron, así mismo “su firme apoyo” al presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, “quien se ha caracterizado por la defensa que hace a los trabajadores”.

Manifestaron que el doctor Negro Veras “ha denunciado a todos los corrompidos que han pretendido manejar la justicia a través de la compra del ministerio público y jueces”.

La mafia política y del narcotráfico han visto sus actividades obstaculizadas por las denuncias y decisión de enfrentarla de Negro Veras, una persona apegada a la lucha contra la corrupción, sostuvieron.

“Además, su apego a la lucha contra el soborno, las injusticias y con un gran espíritu de solidaridad hacia los que persiguen alcanzar una causa justa”, indicaron.

Las organizaciones que se pronuncian en rechazo a las amenazas de muerte contra el jurista son la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Federación de Sindicatos de la Región Norte, Partido Comunista Dominicano, Sindicato de la Construcción.

También, Sindicato Autónomo de Carpinteros de Santiago, de Zapateros, la Coordinadora de Lucha de Santiago. Consideraron que con Negro Veras se defiende el derecho del pueblo a luchar por el saneamiento de la sociedad, la libertad, la justicia y el derecho a denunciar el soborno y la corrupción en el sistema judicial.

Es un deber de todo el movimiento progresista mostrar su solidaridad y estar alerta contra las amenazas de esos sectores que pretenden acallar una voz defensora de los derechos del pueblo”. (31)

Las amenazas contra mis hijos, no me intimidaron; seguí denunciando las operaciones y penetración del narcotráfico en las distintas esferas de nuestra sociedad, como bien lo recogía la prensa de la época así:

Negro Veras asegura que el narcotráfico penetra los estratos sociales
“El doctor Ramón Antonio Veras dijo que bancos, financieras, botes y discotecas, según informes en su poder, han sido penetrados por el narcotráfico.

El narcotráfico ha penetrado en todos los estratos sociales. Incluso, aunque no quiero herir a nadie, la justicia de la capital está muy sospechosa”, puntualizó el prestigioso abogado santiaguero, al ser entrevistado por Bernardo Prats y Encarnación Pimentel en el Almuerzo de TV-13.

Dijo que si el precio que tiene que pagar en su lucha contra la drogadicción es su propia vida, lo acepta gustoso, pero advirtió que si las amenazas se concretizan contra uno de sus hijos, los narcotraficantes santiagueros pueden firmar su testamento.

El doctor Ramón Antonio Veras confirmó, por otro lado, que la zona que hace frontera con Haití es uno de los puntos clave de tráfico de drogas narcóticas.
Refirió que un jovencito fue apresado en la frontera con un cargamento de 505 kilos de cocaína pura, y dicen las malas lenguas que repartió un cuarto de millón de pesos para obtener su libertad en Santiago”. (32)

Debo reconocer que el gobierno de turno se ocupó de investigar y brindarle protección a mi familia, principalmente por las gestiones que en ese sentido hizo el General Antonio Imbert Barrera, además de que personalmente busqué amigos expertos en seguridad personal que se mantuvieron siempre a mi lado. Así lo reseñó la prensa.

FUENTES:

(30) El Nacional. 25 de enero 1988.
(31) La Información. 26 de enero 1988.
(32) El Noticia. 26 de enero 1988.
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El mismo periódico (El Nacional), en la misma fecha que publicó la declaración de Velázquez Mainardi, también reseñó la siguiente información:

Solicitan protección

La Central Obrera Dominicana (COD) y el Consejo Nacional de Defensa al Consumidor (Conadeco) solicitaron al presidente de la República que ordene la debida protección de la vida al doctor Ramón Antonio Veras, y su familia.

Señalan las entidades que Negro Veras ha sido un consecuente luchador por los intereses del pueblo trabajador y es un deber de todas las fuerzas democráticas constituir un muro de contención alrededor del jurista para evitar que las manos del narcotráfico atente contra su vida.

La COD y Conadeco acusaron a la justicia dominicana de ser débil frente al narcotráfico y “en parte son responsables, no sólo de la descomposición moral que vive la sociedad dominicana, sino del auge que ha tomado el consumo de drogas en todo el territorio nacional”. (24)

En ningún momento demostré temor ante las amenazas contra mis hijos. Por el contrario, día por día reiteré mi decisión de darle de frente al crimen organizado, al narcotráfico, por lo que escribí:

Denuncia y advertencia

Si los narcotraficantes atentan contra la vida de uno de nuestros hijos, nos van a encontrar de frente y utilizaremos todos los recursos, materiales e intelectuales a nuestro alcance, para hacer justicia, la justicia que entienden los mafiosos. En este enfrentamiento con el narcotráfico no estamos solos. Sabemos dónde están nuestros adversarios ligados al narcotráfico y el más mínimo atentado a un hijo nuestro lo vamos a interpretar como un reto.

La denuncia está hecha. Nosotros vamos a seguir haciendo vida normal, pero que no intente un narcotraficante tocarle un pelo a un hijo nuestro. (25)
Desde el sur profundo, el reverendo Mamerto Rivas, se pronunció así:

Obispo pide 20 años contra narcos

“El obispo de Barahona, monseñor Mamerto Rivas, abogó hoy por penas de 20 años de cárcel “a pan y agua” para los delincuentes a quienes se les pruebe la comisión del tráfico de drogas narcóticas.

Y expuso que aquellas personas convertidas en adictas por culpa de los traficantes deben ser ayudadas para que se liberen del vicio, pero a éstos últimos “métanle 20 años a pan y agua”, y denle de vez en cuando un mangucito” para variarle la pena dietética.

El prelado hizo el planteamiento al elogiar la postura adoptada por el abogado Ramón Antonio Veras, al expresar que no le atemorizan los narcotraficantes que están amenazándole de muerte a él y a sus hijos”. (26).

El gremio de los abogados y abogadas del país, que en sus comienzos fue un verdadero instrumento de lucha de los profesionales del derecho, en torno a mi situación declaró lo siguiente:

Colegio de Abogados solicita a Presidente proteja a Veras ante amenazas narcotráfico

El colegio de Abogados, Seccional Santiago, reclamó ayer del presidente Joaquín Balaguer dar protección al doctor Ramón Antonio Veras, ante las amenazas que recibe de narcotraficantes.

Asimismo, la entidad profesional alertó a la opinión pública sobre estas “macabras amenazas”, ya que son revelaciones del peligro que se cierne sobre la justicia y la sociedad en general. En documento a la prensa enviado a La Información, el gremio expresa su firme y decidido apoyo, así como su solidaridad con Negro Veras, quien es presidente de la Asociación de Abogados de Santiago.

Indicó que esas amenazas tienen el propósito de tratar de amedrentar al jurista santiaguense, para que detenga “su valiente y firme decisión de impedir que el narcotráfico penetre y mine la moral de la justicia en Santiago.

Manifestó que no solo pretenden callar la voz de un abogado que se ha destacado por ser un fiel defensor de los derechos humanos y las libertades públicas, sino que constituyen un peligro para la judicatura”. (27)
Para que no se pusiera en duda que sabía de los favores que recibían los narcotraficantes de grupos encubiertos, escribí el siguiente artículo:

Solidaridad con el narcotráfico

Aunque vivimos con el enfrentamiento diario a los sectores más negativos y retardatarios de la sociedad dominicana, y sabemos hasta qué punto son portadores de designios malvados, no sabíamos que tenían una base tan amplia de sustentación para buscar defensores cuando en una u otra forma son denunciados por sus fechorías.

Con motivo de la denuncia que hicimos en el sentido de que en Santiago, personas vinculadas al narcotráfico estaban obteniendo su libertad a cambio de dinero, hemos visto con pesar la solidaridad de personas que, creíamos decentes, han brindado a los que sirven a los delincuentes de cuello blanco y han hecho del tráfico de drogas algo así como una actividad de lícito comercio”.
No escapa a nuestro conocimiento que los que participan en el negocio de la cocaína disponen de grandes cantidades de dinero que les permite ganarse la simpatía, la “amistad” y la condescendencia de personas que, aunque no están vinculadas al narcotráfico, no se sienten mal cuando un narcotraficante le hace una fiesta hogareña, le regala un largo viaje o un bello vehículo.

El dinero fruto de narcotráfico toca ya no solamente la conciencia de muchos dominicanos, sino también el corazón y la dignidad. El narcotraficante en razón de que se gana su dinero en forma fácil, no tiene inconveniente en despojarse de 100 ó 200 mil pesos oro para ponerlos en manos de personas que puedan hacerle un servicio, o por lo menos comportarse en forma indiferente.

Aquellos que en Santiago han hecho causa común con los narcotraficantes y sus cómplices, algún día comprenderán que su comportamiento contribuye a sembrar la destrucción no solamente de su propia familia, sino la esencia misma de los fundamentos en que descansa el amor, la comprensión, el afecto, la solidaridad y la identificación entre todos los dominicanos que creen que se debe mantener el lazo familiar como vínculo indestructible de la sociedad, y que la mercancía dinero no debe servir para destruirlo. (28)

La solidaridad conmigo se manifestó por todas partes, por medio de comentarios, editoriales y artículos, como se evidencia por el escrito que transcribo a continuación:

Acontecer

“El gobierno debe poner atención a la denuncia hecha por el doctor Ramón Antonio Veras (Negro), en el sentido de que él y sus hijos son asediados con amenazas de muerte que provienen de sujetos ligados al narcotráfico. Entiendo que todavía estamos a tiempo, y que tanto el doctor Veras como sus hijos deben recibir la garantía y protección necesarias de parte del gobierno.

Nosotros aplaudimos la valentía y firmeza del doctor Veras, quien a sabiendas del peligro que corre, ha mantenido una postura de denuncia y enfrentamiento a los narcotraficantes. Estamos convencidos de que la sociedad toda sabrá ofrecer el apoyo que las circunstancias impongan tanto a Veras como a sus hijos”. (29).

FUENTES:

(24) El Nuevo Diario. 21 enero 1988.
(25) El Nacional. 21 de enero 1988.
(26) El Nacional. 22 de enero 1988.
(27) La Inforamación. 23 de enero 1988.
(28) El Nacional. 23 de enero 1988.
(29) El Nacional. 24 de enero 1988.Continuará la semana próxima

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Para salirle al paso a una campaña que habían hecho algunos grupos ligados al narcotráfico para indisponerme con los jueces y fiscales de Santiago, escribí el siguiente artículo a manera de aclaración:

Explicación: Caso Justicia

En distintas oportunidades, y por diferentes medios de comunicación, habíamos dicho que el Departamento Judicial de Santiago estaba integrado por los jueces y representantes del ministerio público más serios y honestos.

Los criterios que externamos exaltando las virtudes de los miembros del Departamento Judicial de Santiago, muchas veces nos costaron enfrentamientos con directivos de la Asociación de Abogados de Santiago, con altas instancias policiales y hasta con hombres y mujeres del pueblo que consideraban muy absoluta y definitiva la consideración que exponíamos respecto a la conducta de los jueces y representantes del ministerio público de Santiago.

El día 6 de enero en curso, un abogado de Santiago que merece todo nuestro respeto y confianza, nos dijo que a un amigo suyo, detenido por traficar con cocaína, le habían proporcionado la libertad funcionarios judiciales de Santiago, a cambio de una suma de dinero.

El 7 de enero, al otro día de recibir la información del abogado amigo, un periodista nos preguntó qué podíamos decir con motivo del día del Poder Judicial, le respondimos “que considerábamos penosos, asqueante y decepcionante la libertad de más de 150 presuntos delincuentes, y que lo más grave de todo es que es un secreto a voces en la sociedad de Santiago, que se liberan a personas ligadas al narcotráfico por dinero.

Lamentablemente nunca se deja rastro de la corrupción. Un acto de corrupción no es un acto auténtico ni bajo firma privada legalizado; el corrupto y el corruptor no se reclaman prueba escrita. Desaparecer la prueba de corrupción es tan común que hasta los papeles del Palacio Nacional, en determinada coyuntura política del país, han desaparecido para eliminar todo medio de prueba.

En el mismo periódico que el procurador fiscal produjo sus declaraciones, se lee: “Por su parte, jueces de la Corte de Apelación de Santiago que pidieron no se les identificara, dijeron que con las declaraciones, Veras demuestra un desconocimiento total de las leyes sobre drogas.

Los magistrados aclararon que la ley sobre drogas no contempla en ninguno de sus artículos la libertad de confinados bajo fianza”.

Es posible que los jueces de la Corte de Apelación que emitieron la declaración, antes citada, tengan algo de razón, pero no toda la razón. Dentro de nuestro limitado conocimiento de derecho sabemos que la ley sobre drogas no contempla la libertad bajo fianza.

De lo que no se dieron cuenta “los jueces de la Corte de Apelación de Santiago” que emitieron la opinión ya señalada, es que en ningún momento dijimos, ni hemos dicho, que los narcotraficantes salen en libertad bajo fianza; lo que sí dijimos fue que en Santiago es un secreto a voces que se están poniendo en libertad a narcotraficantes por dinero. Los jueces de la Corte de Apelación de Santiago, que opinaron respecto a lo que dijimos el 7 de enero, erraron el tiro.

No solamente se paga dinero para salir bajo fianza. También hay fianzas cimarronas en las cuales no interviene ningún contrato escrito. Se ejecutan en el dando y dando, naturalmente dando la libertad a quien no puede obtenerla bajo fianza legal. No queremos polemizar con los funcionarios judiciales de Santiago.

Sabemos que en Santiago la gran mayoría de jueces y representantes del ministerio público son serios y que el mal comportamiento de uno no entraña el mal comportamiento de todos.

En el periódico El Nacional, su director escribió lo siguiente:

Las amenazas a Negro Veras

“A nadie ha sorprendido la respuesta dada por el jurista santiaguero Ramón Antonio Veras, frente a las intenciones de una mafia ligada al narcotráfico que lo amenazan de muerte a él y a sus hijos, Veras ha dado pruebas sostenidas no sólo de ciudadano de pulcras actuaciones, sino también de gran valentía. Se trata de un hombre que no se arredra ante el peligro, a juzgar por sus actuaciones desde que era un estudiante antitrujillista.

Contrariamente a los que esperaban de él sus enemigos, Negro Veras les ha advertido que sabe donde están sus adversarios ligados al narcotráfico y consumo de drogas y que “al más mínimo atentado contra un hijo nuestro lo vamos a interpretar como un reto”. Su actitud es la de un gallo de lidia pura sangre o de un pececito Beta, cuya principal característica es que combaten sin tregua hasta la muerte”. (21)

¡En Defensa de la vida del doctor Negro Veras y de sus hijos!

“La vida del doctor Ramón Antonio Veras (Negro) y de sus hijos está seriamente amenazada como consecuencia de su valiente denuncia de la corrupción imperante en el Distrito Judicial de Santiago.

Un sector de la mafia protegida por el soborno que abrió las puertas de las cárceles de Santiago, en el marco de un clima de impunidad bastante generalizado, se ha propuesto eliminar físicamente al doctor Ramón Antonio Veras o a uno de sus hijos.

La procedencia de esos planes criminales es clara y en buena medida los centros de decisión están identificados. Ese sector de narcotráfico y de la corrupción reacciona así porque aprecia que la posibilidad de sanción oficial está debilitada.

La impunidad del delito de Estado es  gran aliada y evidentemente se empeña en acallar con balas el derecho a la denuncia y combate por la moralización. La amenaza al doctor Veras ha sido extendida contra sus hijos en un gesto típico de una mafia que se siente protegida.

Pretenden silenciarlo y atormentar su valiosa familia. Y bajo ninguna circunstancia podemos permitir que se materialicen sus horrendos propósitos. La vida de Negro Veras y de su familia debe ser defendida y protegida con vigor.
El pueblo de Santiago, el pueblo del país, sus amigos, las organizaciones populares, las fuerzas avanzadas, los sectores democráticos, tenemos el deber ineludible de frustrar esos planes criminales.

Una gran muralla de protección popular, una vigorosa cadena nacional debe levantarse frente a ese proyecto criminal. La seguridad del doctor Veras y de su familia debe ser garantizada por la defensa que de él y sus hijos haga el pueblo dominicano. ¡Alto al crimen! ¡No a la impunidad! Comité Político del PCD”. (22)
Desde el periódico Nuevo Diario, mi amiga Consuelo Despradel, escribió:

A Negro Veras

“…Lo conozco desde la Universidad (UASD, por supuesto)… siempre ha sido un batallador… un peleador. Una vez, en el Alma Mater había una asamblea de Fragua y los catorcitas no dejaban hablar a Asdrúbal (PSP), (era la época que se planteaba “tirar a Moncito por una ventana”), de repente alguien se creció en las gradas e impuso silencio a aquella turbamulta fanatizada/ (como lo éramos todos en Fragua en esa época)… yo pregunté maravillada: y ¿quién es ese? Y me contestaron Negro Veras, de Santiago. Esto, a lo mejor no lo recuerda el propio Negro, a quien tengo tan presente en estos momentos y a quien me une una inmarcesible amistad… Negro, estamos contigo”. (23)

Todas las voces sensatas, progresistas y sensibles del país, expresaron su solidaridad para conmigo y mi familia, y el rechazo al crimen del narcotráfico: El hoy finado Miguel Ángel Velázquez Mainardi se manifestó en sentido de que:
Velázquez Mainardi advierte amenaza a hijos Negro Veras compromete al Gobierno como garante de los ciudadanos.

“El exdiputado Miguel Ángel Velázquez Mainardi afirmó ayer que la denuncia de que los hijos del doctor Ramón Antonio Veras están siendo amenazados de muerte compromete al gobierno como garante de la seguridad y la integridad física de los ciudadanos.

Velázquez Mainardi manifestó que el gobierno debe prestar atención no sólo en el caso del doctor Veras y su familia, “sino en la reactivación de las acciones represivas contra los jefes del narcotráfico”.

El doctor Ramón Antonio Veras, tras una serie de denuncias, enfrenta ahora, en las personas de sus hijos, una grave amenaza que obliga a la sociedad dominicana a ofrecerle su amplio y decidido respaldo”, indica Velázquez Mainardi en una comunicación escrita que remitió a El Nuevo Diario.

Agrega que ciudadanos como el doctor Veras, dada las responsabilidades que asumen, no deben permanecer aislados, sobre todo cuando penden sobre sus familiares riesgos de muerte “tras amenazas de verdaderos archiasesinos”.

El doctor Veras denunció que una banda de narcotraficantes que opera en Santiago tiene el propósito de atentar contra la vida de sus hijos en represalia por acusaciones formuladas por el jurista sobre actividades criminales efectuadas por quienes trafican con drogas narcóticas”. l

FUENTES:
(21) El Nacional. 20 de enero 1988.
(22) Hablan los comunistas. 20 enero 1988.
(23) El Nuevo Diario. 21 de enero 1982.
Continuará la semana próxima

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Contra mí y mi familia se lanzó todo el peso del narcotráfico, hasta  el punto de que el gobierno me invitó a salir del país ante la situación de que no garantizaba mi seguridad personal.

He aquí una secuencia periodística del expediente conocido en Santiago y el país como el “Caso Muñeco”:

Caso muñeco

El día 7 de enero de 1988, día del Poder Judicial, hice en Santiago una denuncia con relación a un festival de órdenes irregulares de libertad que incluían a personas vinculadas con el narcotráfico. (7)

Ante nuestra denuncia, el Procurador Fiscal de Santiago reaccionó negando la existencia de las órdenes de libertad en la forma como lo habíamos denunciado, y también declaró que yo debía presentar la prueba de mi declaración. (8)

La realidad fue que nuestra denuncia se convirtió en un verdadero escándalo nacional, pero el fiscal titular de Santiago insistía en restarle credibilidad a mi denuncia. (9)

Diferentes personas relacionadas con el servicio judicial en Santiago y todo el país, se hicieron eco de mi denuncia en torno a las irregularidades de órdenes de libertad a narcotraficantes. (10).

Mi declaración de puesta en libertad de narcotraficantes en forma ilegal, la extendí hasta la Policía Nacional. (11)

Mi afirmación de libertad irregular de personas ligadas con el narcotráfico fue confirmada porque, a instancia de la Procuradora de la Corte de Apelación de Santiago, para esa época la licenciada Semírame Olivo de Pichardo, el Procurador Fiscal titular se vio en la obligación de reapresar al narcotraficante que habíamos señalado como liberado por dinero. (12).

Luego de presentar al narcotraficante irregularmente en libertad, la Procuraduría General de la República procedió a suspender al fiscal titular de Santiago, y en su lugar designó a una magistrada que hasta ese momento había sido su ayudante. (13)

La Seccional del Colegio de Abogados de Santiago, mediante documento público, declaró que ciertamente el fiscal titular de Santiago había incurrido en falta grave con la puesta en libertad del narcotraficante. (14)

La firmeza de mis denuncias contra el narcotráfico y el consumo de estupefacientes, tomó un giro sumamente difícil para mí y mi familia. Los hechos que narro a continuación demuestran las circunstancias bajo las cuales permanecí bajo estado de inseguridad durante mucho tiempo. Los medios de comunicación se hicieron eco de mis denuncias y de las amenazas de que era objeto por el narcotráfico y sus aliados.

A continuación expongo publicaciones hechas en torno a las amenazas lanzadas por el narcotráfico y sus aliados contra mí y mi familia.

Afirma el narcotráfico amenaza

El presidente de la Asociación de Abogados de Santiago afirmó hoy que “la mafia ligada a la droga” ha amenazado de muerte a sus hijos.

El doctor Ramón Antonio Veras -Negro- manifestó que las amenazas contra su familia son motivadas por la denuncia que hiciera el día 7, y que culminó con la suspensión del procurador fiscal de aquí. El doctor Veras hizo la denuncia en un documento entregado hoy a la prensa en el que advierte a “los que están ligados al narcotráfico, que no nos van a amedrentar” y que continuará ejerciendo su derecho a la denuncia “firme, decidida y abierta”.

“Queremos mucho a nuestros hijos, pero ellos saben que su padre ha jurado morir antes que claudicar o hacer complicidad con las lacras que genera esta sociedad”, expresa.

Añade que: si los narcotraficantes atentan contra la vida de uno de nuestros hijos, nos van a encontrar de frente y utilizaremos todos los recursos, materiales e intelectuales a nuestro alcance, para hacer justicia, la justicia que entienden los mafiosos. En este enfrentamiento con el narcotráfico no estamos solos.

Advirtió que: sabemos dónde están nuestros adversarios ligados al narcotráfico y al más mínimo atentado a un hijo nuestro, lo vamos a interpretar como un reto. “La denuncia está hecha. Nuestros hijos van a seguir haciendo su vida normal, pero que no intente un narcotraficante tocarle un pelo”, indicó. Explicó que la denuncia que hiciera de que en Santiago se pone en libertad a narcotraficantes a cambio de altas sumas de dinero, irritó a “los grupos ligados al bajo fondo, a la corrupción y principalmente al narcotráfico”.

Aseguró que “es un secreto a voces que en Santiago se está poniendo en libertad a narcotraficantes por altas sumas de dinero. Funcionarios, jueces de primer grado y de apelación han reaccionado molestos, desconociendo que no somos culpables de que un grupo de personas vinculadas al tren judicial se alcen con el dinero del narcotráfico”.

El doctor Veras declinó ofrecer detalles sobre la visita que hiciera el jueves al Palacio Nacional. En círculos locales se rumora que el presidente Joaquín Balaguer habría propuesto a Veras la fiscalía local o había requerido su asesoría para hacer un nombramiento de una persona que ocupara el cargo vacante tras la suspensión del licenciado Augusto Lozada.

“Yo responderé a esa pregunta en otro momento, pero ahora no me voy a referir a eso”, expresó cuando se le cuestionó sobre el tema. (15).

Siempre he estado convencido de que enfrentar las lacras sociales entraña, en cualquier sociedad humana, exponerse a todos los riesgos, y que semejante situación se extiende a las personas más directamente vinculadas con los que deciden actuar contra los fenómenos nocivos. Por tanto, sabía que accionar ante el narcotráfico me iba a crear, a mí y a mis familiares, situaciones muy difíciles.

La posición de firmeza que asumí contra los negociantes y beneficiarios directos e indirectos de las drogas ilegales, motivó que el narcotráfico decidiera ponerle precio a la vida de mis hijos, principalmente después de la denuncia que hice con relación a la complacencia de sectores del servicio judicial con los narcotraficantes. Ante informaciones que recibí de que se habían elaborado planes para asesinar a algunos de mis descendientes, procedí a denunciar la situación ante la opinión pública y a las autoridades, como consta en distintas reseñas de la prensa escrita de la época.

El periódico La Noticia, reseñó nuestra denuncia así:

Narcotraficantes estarían tratando de dar muerte hijos Negro Veras.
SANTIAGO. Sectores estrechamente ligados al sucio negocio del tráfico de drogas en esta ciudad estarían fraguando dar muerte a los hijos del doctor Ramón Antonio Veras, presidente de la Asociación de Abogados de Santiago.

La revelación la hizo el propio jurista, quien aclaró que las agresiones que puedan recibir sus vástagos por parte de los narcotraficantes, no lo harán variar su posición de enfrentar con energía a los violadores de las leyes.

Como consecuencia de una denuncia pública que hizo Negro Veras el 7 de este mes sobre la puesta en libertad irregularmente de un grupo de narcotraficantes locales, fue suspendido el procurador fiscal de Santiago.

“Esto ha irritado a los grupos ligados al bajo fondo, a la corrupción y, principalmente, al narcotráfico”, declaró esta mañana Negro Veras.

“Hago esta denuncia pública para que sea de conocimiento general, pero que sepan los que están ligados al narcotráfico que no nos van a amedrentar, ejerceremos el derecho a la denuncia firme, decidida y abierta”, enfatizó Veras.

Aclaró que quiere mucho a sus hijos pero ellos saben que su padre ha jurado morir antes que claudicar o hacer complicidad con las lacras que genera esta sociedad.

“Si los narcotraficantes atentan contra la vida de uno de nuestros hijos, nos van a encontrar de frente y utilizaremos todos los recursos, materiales e intelectuales, a nuestro alcance para hacer justicia, la justicia que entienden los mafiosos. En este enfrentamiento con el narcotráfico no estamos solos”, abundó.

Negro Veras dijo saber dónde están sus adversarios ligados al narcotráfico y al más mínimo atentado a un hijo nuestro lo vamos a interpretar como un reto.

“La denuncia está hecha. Nuestros hijos van a seguir haciendo su vida normal pero que no intente un narcotraficante tocarle un pelo”, terminó diciendo el doctor Negro Veras. (16).

Además del vespertino La Noticia, otros periódicos recogieron mi denuncia. (17). (18). (19).

FUENTES:
(7) Listín Diario. 8 de enero 1988.
(8) El Sol y La Información.
(9) El nacional. 11 y 12 enero 1988.
(10) Última Hora. 12 de enero 1988.
(11) Listín Diario. 12 de enero 1988.
(12) Nuevo Diario 12 de enero 1988.
(13) La Información. 15 enero 1988.
(14) La Información. 16 enero 1988.
(15) El Nacional. 18 de enero 1988.
(16) La Noticia. 18 de enero 1988.
(17) La Información. 19 enero 1988.
(18) El Nuevo Diario. 19 enero 1988,
(19) Última Hora. 19 de enero 1988.
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Desde un principio, mi comunicación permanente con sectores muy diversos de la ciudad de Santiago de los Caballeros, fundamentalmente de los barrios marginados, me permitió conocer cómo el fenómeno de las drogas narcóticas estaba comenzando a penetrar en el seno de nuestro pueblo.

En un artículo que escribí en el año 1975, expuse la comunicación que establecí con una prostituta de Santiago, adicta a las drogas, con la finalidad de tener conocimiento directo de la relación entre la prostitución en mi ciudad natal, y la drogadicción. En el escrito de referencia expliqué lo siguiente:

Alcahuete, prostituta y drogas

Hace alrededor de un mes, un sacerdote católico que labora en uno de los barrios marginados de la ciudad de Santiago, me informó que un alcahuete, que apodan “Chaqueta”, está utilizando prostitutas para el negocio de las drogas. De inmediato me puse en movimiento, hice indagaciones y logré determinar el lugar y horas de funciones del afamado alcahuete. He aquí el resultado de mi actividad:

El miércoles de la pasada semana, en horas de la noche, me dirigí a la parte baja de la ciudad de Santiago e hice contacto con “Chaqueta”. En las cercanías del teatro Víctor hablé con él y le dije que tenía interés en pasar un rato con una mujer de vida alegre; me mostró varias fotografías, y me dijo que con cuál yo quería pasar la noche. Las fotografías tenían en la parte de atrás el nombre de la mujer y el precio que cobran por su trabajo. Escogí una que responde al nombre de Lupe, y su precio es de quince pesos. Después de seleccionar la prostituta tomé un carro y conjuntamente con el alcahuete fuimos a la casa de Lupe,la cual está ubicada en el Ensanche Libertad. Le pagué a “Chaqueta” cinco pesos por su mediación.

La prostituta y yo nos presentamos. Le dije mi nombre, ella me dijo el suyo, le contesté que ya “Chaqueta” me lo había dado. Lupe me preguntó qué yo quería beber; le dije que cerveza. Después de tomarnos tres cervezas me invitó a bailar, pero se sorprendió cuando le dije que no bailaba. Me dijo que yo era un hombre anticuado, pues todos los hombres que la visitan, hasta los viejos, daban su vueltecita: le contesté que nunca me había preocupado por el baile, que eso no era determinante en la vida de un hombre.

Después de esa conversación me puse suave, y le dije que no tomara eso a mal, que quizás en el curso de la noche me decidía a bailar. Con esto quise darle confianza a Lupe para que no se me pusiera reacia.

Charlamos un poco, me contó dos o tres chistes y yo hice lo mismo. Me dijo que tenía veinticuatro años de edad, que era de Los Hidalgos de Puerto Plata, y que tenía siete años como prostituta. Ella es blanca, de bonito cuerpo y con una dentadura bien pareja; lucía esa noche un bello pantalón azul que hacía combinación con el color de su piel y su blusa roja.

Desde que comenzamos a tomar cerveza, ella también se puso a fumar cigarrillos. Después de un largo rato me preguntó, Ramón y por qué tú no fumas? Le expresé que no fumaba, pero que no me molestaba el humo, que podía seguir fumando.

Cuando terminé de hablar, ella se dirigió hacia un tocadiscos, puso un disco con música extranjera y me preguntó si me gustaba; le contesté que no, pero que la dejara si a ella le gustaba. Lupe bajó un poco el volumen del tocadiscos, y me dijo: Ramón, si Chaqueta te trajo aquí, seguro que tú fumas, pues él sabe que me gustan los amigos que fuman y no puede ser que te traiga donde mí sin tú ser de la cofradía.

De inmediato capté lo que ella me quería decir, y le dije: Lupe, yo no fumo, pero talvez si tú me enseñas, lo hago. Lupe fue a su habitación, contigua a la sala donde nos encontrábamos sentados, y regresó con un cigarrillo de color raro, diciéndome: Ramón, me voy a fumar este a tu nombre, cuando te vayas tienes que pagarlo. Me puse nervioso. No supe qué decirle. Sólo atiné a contestarle; Lupe no lo fumes, te voy a regalar el precio del cigarrillo, pero no hagas uso de él; ven siéntate, déjame ver en mis manos ese cigarrillo. Lupe me pasó el cigarrillo, era de marihuana. De ahí en adelante ella me tomó confianza y me dijo: “No quiero que le digas esto a nadie, te lo he dicho porque quiero que tú seas de mi grupo. Le contesté que no lograría incorporarme, pues soy un rotundo enemigo de las drogas y del sistema que las genera. Que trataría de hacer que ella saliera del grupo y abandonará el vicio.

Lupe me dio una larga explicación de sus actividades como prostituta, fumadora y traficante de drogas. Los cigarrillos de marihuana los tenía guardados en el centro de una estatuilla que sirve para adornar una mesita de noche. Si se le quita la cabeza a la estatuilla, de inmediato se advierten los cigarrillos.

Tomé en mis manos dieciocho cigarrillos de marihuana y le dije a Lupe: “Los voy a destruir todos y si los dueños quieren saber, que lo averigüen conmigo”. Los cigarrillos los destruí todos en presencia de ella y los quemé en una estufa que había en la cocina; le expliqué a Lupe por qué lo hacía. Ella me dijo que todos esos cigarrillos representaban un valor de más de quinientos pesos, y que seguramente sus suministradores la forzarían para que buscara el dinero.

Le di seguridad a Lupe de que nada le pasaría; que con eso yo le estaba haciendo un favor a ella y a sus amigos fumadores; que no le dijera nada a Chaqueta, que yo trataría de hacer contacto con él para explicarle lo ocurrido y advertirle que debía suspender su actividad, pues le estaba haciendo un mal a las mujeres prostitutas y a los amigos que van donde ellas. Después de pasar más de cuatro horas hablando con Lupe, le di varias indicaciones para su seguridad, y prometí hacer algo por ella para que cambiara de vida. Sin tener ninguna relación con ella, que no fuera la de conversar, le hice un regalo módico en dinero, nos despedimos, y en estos días me ha llamado por teléfono y me ha dicho que los traficantes la visitaron, y después que ella les explicó lo ocurrido se fueron y le dijeron que no me dijera nada, pero que en lo adelante no contara con ellos. (6)

CAPÍTULO II.
Mi lucha contra el narcotráfico y sus consecuencias. caso Muñeco. El Narcotráfico amenaza a mi familia. Penetración del narcotráfico. El Narcotráfico en Santiago. La Fiscalía de Santiago y el narcotráfico. Una reunión con el general Imbert Barrera. Un frente contra el narcotráfico. Asociación de Abogados y el caso Muñeco. El narcotráfico, el Palacio Nacional y la Justicia en Santiago.

A finales de los 80, en 1988, presidí en Santiago el Patronato Nacional de lucha contra las drogas, creado con la finalidad de combatir a nivel nacional el fenómeno de la producción, consumo y tráfico de estupefacientes.  Enfrentar el narcotráfico constituyó para mí una de las actividades más difíciles  en la vida pública del país, porque estaba actuando contra un fenómeno con profundas raíces nacionales e internacionales, que ya comenzaba aquí con poderosos aliados en el sector civil, político, policial y militar.

El narcotráfico le puso precio a mi vida y a la de toda mi familia. Hicieron alianza impúdica contra mí, mis adversarios políticos e ideológicos, los resentidos sociales, en fin, todos aquellos que tenían en el fondo de su alma algo en mi contra se unieron con el narcotráfico para golpearme física y moralmente: desde lanzar una mano humana en la puerta de mi oficina hasta poner a circular un pasquín infamante contra mi madre, mi padre y mis hermanas y hermanos.

Pero nada ni nadie me hizo cambiar de posición. Sabía que estaba defendiendo una causa justa, y que de mi lado estaba la razón. Me apoyé en lo mejor de nuestro pueblo, en la gran mayoría de los dominicanos y dominicanas que no estaban contaminados con la mercancía dinero que era y es el arma principal del narcotráfico.

Hice uso de los medios de comunicación para mantener debidamente informado al país de la labor que realizaba el patronato que presidía. Escribí más de 200 artículos y dicté más de cien conferencias en universidades, clubes culturales y sociales, rotarios y de leones, sindicatos, gremios, escuelas intermedias y secundarias; en fin, trabajé en una profunda labor de edificación de la opinión pública. Particularmente la Universidad Católica Madre y Maestra, fue receptiva a las varias  sugerencias que le hice para organizar seminarios y talleres relacionados con el fenómeno de las drogas.

En diciembre de 1987, en el Departamento Judicial de Santiago ocurrió un caso de corrupción relacionado con el narcotráfico, que estremeció a todo el país.

 En mi condición de presidente de la Asociación de Abogados de Santiago, me correspondió denunciar el hecho tal como había ocurrido, lo que motivó que reapresaran al narco puesto en libertad por RD$ 25,000.00, cancelaran al fiscal, trasladaran un juez, detuvieran a militares, y sometieran a la justicia a abogados y buscones de abogados.

FUENTES:
(6) El Nacional. 25 de marzo 1975.
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Doctor, ¿por qué fumo marihuana?
No puede usted desconocer que la juventud siempre vive llena de esperanzas; que lucha porque en sus respectivos países prevalezcan la igualdad, la justicia social, el bienestar colectivo y la solidaridad entre todos los seres humanos.

Pero tampoco puede Ud. desconocer que el sistema bajo el cual vivimos no nos ofrece nada; nos condena al abandono, no nos garantiza educación, trabajo, ni nada para el porvenir. Cuando terminé el bachillerato mi mayor deseo fue comenzar la carrera de odontología, pero mis padres no disponían de medios económicos para costearme los estudios, y con las instituciones que podía obtener crédito me fue imposible conseguirlo.

Ya graduado de bachiller en ciencias físicas y naturales, y al ver que una gran parte de mis compañeros con buenas posiciones económicas continuaron sus estudios, me consideré frustrado en esta sociedad, y busqué en las drogas, en el uso de la marihuana, una salida a la frustración de mis aspiraciones. Muchas veces me doy toques de marihuana solamente para hacer pensamientos de que soy odontólogo; sueño con manejar los instrumentos de un dentista; me veo sacando piezas dentales, haciendo finos trabajos; despachando los pacientes que me visitan con sus trabajos terminados, dando conferencias sobre el dominio de mi profesión, en fin, dentro de mis sueños profundos he andado varios países en congresos internacionales sobre odontología.

He querido relatar todo esto para que Usted comprenda que los que fumamos drogas, muchas veces vamos al vicio porque el medio nos impulsa a él. Sé que si viviera en una sociedad que me hubiera garantizado mis estudios universitarios, no hubiera caído en ser lo que soy hoy, un guiñapo humano, un drogadicto empedernido.

Le hago la observación de que al igual que yo hay otros jóvenes dominicanos, de extracción humilde, que fumamos drogas, no porque nos gusta el vicio, sino para tener una salida. Los jóvenes pobres que fumamos drogas por lo general somos hijos de padres que viven de su trabajo, que hacen miles de sacrificios para levantarnos y hacernos hombres ejemplares. Con esto le quiero decir que no fumamos drogas porque nuestros padres nos inducen a eso, pues muy por el contrario, en nuestros hogares siempre recibimos buenos consejos y ejemplos, pero hay que tener en cuenta que uno llega a una etapa en que como hombre quiere ser algo en la sociedad en que vive, quiere servirle a su pueblo, sea como médico, ingeniero, economista, etc. Y es muy duro cuando uno se pasa más de doce años estudiando y después que termina el bachillerato tiene que ir a un parque a sentarse.

La indicación que le hice al comenzar esta carta, con la historia de China y la India, no es para justificar el tráfico de narcóticos en el país, sino con el marcado objetivo de que comprenda que el sistema social bajo el cual vivimos es un caldo de cultivo para el negocio de las drogas.

La prostitución, las drogas, etc., lejos de hacer mal al sistema, le hacen bien. Lo que aquí interesa es comercio, no importa con lo que sea, siempre que deje buenos beneficios, y no hay duda de que hoy el negocio de las drogas deja buenos dineros.

Los que aquí viven del negocio de las drogas no desconocen el criterio moral del inglés Montogomery Martín, cuando dijo: “Sí, el tráfico de esclavos era piadoso en comparación con el del opio; no aniquilamos el cuerpo de los africanos, porque nuestro interés inmediato era conservarlos vivos; no envilecíamos su naturaleza, ni corrompíamos su mente, ni destruimos su alma”.

Pero el vendedor de opio mata el cuerpo después de haber corrompido, degradado y aniquilado al ser moral de los infelices pecadores, con lo que horas tras horas se brindan nuevas víctimas a un insaciable Moloch, ante el altar del cual asesino inglés y el suicida chino rivalizan en sus ofrendas”.

En lo que se refiere a la utilización del contrabando como forma de introducción de las drogas en el país, ese aspecto del negocio también tiene su historia.

La historia del opio hace recordar que en 1880 el número de cajones entrados de contrabando a China aumentó de 5,147; en 1821 a 7,000 y en 1824 a 12,639 en 1837 a pesar de la desesperada resistencia del celestial gobierno entraron a China de contrabando, con buenos resultados, 39,000 cajones de opio valorados en 25,000,000 dólares, y el gobierno chino había llegado a una situación insoportable con el contrabando, hasta el punto de que el Gobierno del Imperio Hsu Hai-Chi, uno de los más destacados estadistas chinos, propuso legalizar el tráfico de opio y obtener dinero de él.

También es bien conocida la forma como las potencias imperialistas se benefician del tráfico de las drogas, y se conoce el criterio que se ha externado de la penetración inglesa en la India y China con el opio: “Inglaterra en su condición de potencia presenta una flagrante contradicción con el tan cacareado cristianismo y traficante de la civilización.

En su condición de gobierno imperial finge desconocer en absoluto el negocio de contrabando de opio. Sin embargo, en su condición India impone el cultivo del opio, con gran perjuicio para los recursos productivos de ese país; incita a otra parte a mantener la elaboración al por mayor de la perniciosa droga en un cerrado monopolio que está en sus manos, por medio de todo un ejército de funcionarios espías, vigila su crecimiento, su entrega en lugares determinados, su condensación en paquetes especialmente adaptados a las conveniencias del contrabando, y por último su transporte hasta Calcuta.

Como usted observará, el tráfico de las drogas no es cuestión de ahora, y siempre ha estado ligado a la dominación de potencias extranjeras, a la explotación y al saqueo de países con economías atrasadas y a la imposición del amo extranjero. Es muy distinta la situación de la China de hoy comparada con la de ayer, pues nadie puede pensar, a no ser de mala fe, que en la China actual se haga semejante tráfico de drogas; todo está ligado al sistema, y el que predomina en la China Socialista no permite semejante comercio.

Doctor, lo que vivimos los dominicanos hoy, también lo vivió Cuba antes de la revolución. Cuba se liberó de la dominación extranjera y de allí se fueron muchos hombres que hoy están entre nosotros, y si ciertamente entre los exiliados cubanos los hay que nos han enseñado la técnica del cultivo del tabaco, otros han hecho de la técnica del tráfico de drogas un buen exilio.

Espero no morir siendo drogadicto. Tal vez llegue el día que los dominicanos humildes disfrutemos de una vida mejor, y así yo seré un dominicano útil a la sociedad dominicana, a la sociedad justa donde todos los hombres y mujeres tengan igualdad de oportunidades y donde se trabaje para satisfacer las necesidades de todos, sin distinción de raza, religión o prejuicios estrechos de toda índole. Lamentablemente, hoy no tengo oportunidad en esta sociedad dependiente; por ahora seguiré fumando marihuana para vivir en mis sueños lo que no he podido ser en la realidad a causa del sistema, aún sabiendo que con el uso de las drogas acabo con mi organismo y solamente beneficio a los traficantes del veneno.

Le envío esta carta con mi amigo (omito el nombre) y puede hacer de ella el uso que considere de lugar, pero con la condición de que mantenga en secreto  mi nombre y apellido, todo por el bien de mis padres y hermanos que no son culpables de mi situación. Atentamente. (5). l

FUENTES:
(5) El Nacional. 15 de diciembre 1974.

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Aquí hay muchos profesionales que diariamente van a los estrados a defender drogadictos y traficantes y eso no quiere decir, en modo alguno, que estén de acuerdo con la propagación de ese vicio en el país. De ahí puede usted sacar la conclusión de que yo no defienda a los drogadictos y traficantes no quiere decir que mi actuación responda a una cuestión profesional ni nada que se parezca.

Mi actuación en ese sentido responde a mi concepción ideológica, a mi forma de pensar, a mi concepción del mundo, de la vida,  de la historia, de la filosofía, del hombre, del ser humano en sí, y de la forma de resolver los problemas sociales, incluyendo el de las drogas.

Padre, tengo el criterio de que las drogas, la prostitución, la explotación de los obreros y de los campesinos, todo responde al sistema social mismo; son partes que en conjunto forman el sistema.

Creo servir mejor al pueblo orientando a las masas con relación a los vicios, y sobre las contradicciones que se dan en el seno de la sociedad, que defendiendo en los estrados a los que se benefician de toda la podredumbre que genera el sistema. Se ve mal, Padre, desdoblar la persona: combatir los vicios del sistema, y ampararse en legalismos para sustentarlos.

Puedo estar equivocado, pero creo firmemente que si todos los hombres y mujeres de este país, preocupados por los problemas sociales como usted, se dedicaran a combatir la base misma del sistema, a enseñarle a los obreros, a los campesinos y a todos los explotados las causas fundamentales de sus males y los vicios que generan, se les hace un mejor servicio que yendo a los tribunales a defender a los pocos que caen en la red de nuestra corrompida justicia.

El sistema social bajo el cual vivimos hay que denunciarlo como es: inhumano, cruel, explotador, negador de todos los valores humanos y deformador de todo lo bueno que puede tener el ser humano, y la denuncia no se puede hacer cuando uno se beneficia como profesional, en forma oportunista, de una u otra víctima del sistema.

Hubiera sido muy fácil para mí como abogado, decirle al joven mencionado en el artículo, que yo lo iba a defender, que me pagara determinada suma. Lo difícil era yo poder justificar después en los barrios marginados el por qué yo fui a defenderlo al tribunal si he dicho reiteradas veces, por medio de charlas y artículos, que no defiendo drogadictos ni traficantes.
Padre, me satisface ver hombres como usted interesados en resolver los problemas sociales. Por medio de “Casa Abierta”, se les hace un buen servicio a los drogadictos, se logra que algunos dejen el vicio, se superen y lo abandonen.
Esa es una gran labor. Pero creo que también se hace una labor positiva si todos los hombres y mujeres de este país con sensibilidad se incorporan a la lucha social para erradicar, no solo el vicio de las drogas en nuestro país, sino para acabar con el sistema que engendra los vicios aquí y en otros pueblos del mundo que viven bajo una formación económica semejante a la nuestra.

No creo que mi valor personal se pueda medir por el hecho de no defender en estrados a un drogadicto o traficante, muy al contrario, al hacerlo así actúo conforme a mi conciencia en ese momento y frente a ese caso preciso.

 Realmente no le temo a las pandillas que aquí y a nivel internacional se mueven en el negocio de las drogas, como  tampoco  a los que, al igual que los traficantes, se enriquecen en este país  acaparando artículos de primera necesidad, subiendo la leche, saqueando las riquezas mineras y mancillando la soberanía nacional, y con esto no quiero significar que me considere revestido de gran valor.

Al escribirle estas líneas no me anima tener polémica con usted, pues aunque no le conozco personalmente, el simple hecho de que se preocupe por el vicio de las drogas me lleva al convencimiento de que entre usted y yo hay más puntos que nos unen que los que nos separan. Respetuosamente. Ramón Antonio Veras. (3)

Al igual que el reverendo José Cruz, un dominicano residente en la ciudad de New York, identificado con el nombre de Eddi Garrido, mediante comunicación al director del periódico El Nacional, también criticó mi decisión de no prestar mi concurso profesional al joven distribuidor y adicto a las drogas. (4)
Doctor, ¿por qué fumo marihuana?

Por medio de artículos y reseñas de charlas dictadas por usted y publicadas en la prensa, he observado su posición con respecto al consumo y tráfico de drogas en el país. Lo que me ha movido a escribirle estas líneas es su carta de fecha 25 del mes de noviembre en curso publicada en el periódico El Nacional de Ahora de fecha 30 del mes de noviembre de este año.

En la carta de referencia, Ud. hace una serie de consideraciones con respecto a los motivos que lo llevan a no defender como abogado a los drogadictos y traficantes, y como formo parte de los que en este país consumen drogas es por lo que me he dado por aludido, y me permito explicarle algunos puntos que talvez no son de su conocimiento, con la advertencia de que el objeto de la presente no es con el fin de que usted cambie de actitud, sino el de motivar el por qué fumo marihuana al igual que otras personas.

Yo soy un joven de veinte años de edad y fumo marihuana desde los diecisiete y no pienso dejar el vicio. Parece ser que usted cree que el uso de estupefacientes es nuevo en el mundo, pero no es así. Si se remonta a épocas pasadas se dará cuenta que el desarrollo de las sociedades Inglesa, India y China está ligado al negocio de las drogas, y que las colonizaciones de la India y China por Inglaterra, tuvieron mucha relación con el opio. Veamos: “la primera guerra por el opio, de 1839-42, guerra de rapiña emprendida por Gran Bretaña contra China, inició la conversión de China en una semicolonia. Comenzó con la destrucción de los depósitos de opio de los comerciantes extranjeros en Cantón por las autoridades de China.

Los colonizadores británicos aprovecharon la derrota que sufrió la atrasada China feudal e impusieron el oneroso tratado de Nanking, por medio del cual China se obligaba a abrir al comercio británico cinco de sus puertos: Cantón, Amoy, Foochow, Ningpo y Shangai,  ceder para siempre la isla de Hong Kong a Gran Bretaña, y a pagar una fuerte indemnización. El tratado de Tientsin, que puso fin a la segunda guerra del opio, de 1856-58, le fue impuesto a China por Inglaterra y a su aliada, Francia. El tratado abría al comercio extranjero los puertos chinos sobre el Yangts, en Manchuria, en las islas Taiwán y Hainan, y también el puerto de Tientsin. Permitía residir en Pekín a los representantes diplomáticos de las potencias extranjeras; estipulaba que los extranjeros tendrían autorización para viajar libremente por todo el país para navegar por los ríos interiores.

Algo semejante podemos decir con respecto a la India: “El poder de los virreyes fue quebrado por los maharatas. El poder de los maharatas fue quebrado por los afganos, y mientras todos luchaban con todos, irrumpió el conquistador británico y los sometió a todos. En 1761 los feudales maharatas sufrieron una costosa derrota a manos de los afganos, en lucha por la hegemonía de la India.
 Debilitados por estas luchas y por las rivalidades feudales internas, los principales maharatas cayeron en poder de la Compañía de la India Oriental, y como resultado de la guerra anglo-maharata de 1803-05, se convirtieron en sus subordinados.

La Compañía de la India Oriental, fue fundada en 1600, y mediante el fraude, la extorsión, la violencia y el saqueo liso y llano, sus hombres de negocios se apoderaron de inmensas riquezas, que transfirieron a Inglaterra, amasando así fabulosas fortunas. El gobierno Británico otorgó a la Compañía de la India Oriental el derecho a monopolizar el comercio con la India y China, y también el de gobernar a la India y a cobrar impuestos a la población. El principal ingreso en los comienzos de la Compañía provenía del tráfico de opio.

Esas reseñas históricas no son invenciones, sino que es Karl Marx quien hace alusión a ellas cuando escribía en el periódico New York Daily Tribune, en agosto de 1858. Simplemente me he limitado a transcribir lo dicho por el gran científico alemán hace más de cien años. Como Ud. observará, el asunto de las drogas no es nuevo en el mundo, y si aquí proliferan las drogas es porque este es un medio para el desarrollo del vicio y el negocio. Los dominicanos vivimos bajo la dependencia de los Estados Unidos de Norteamérica, y no escapa a su conocimiento que en aquel país, eje hoy de todos los países que viven bajo el sistema capitalista, el tráfico de las drogas es tan común como en nuestro país el expendio del ron y los cigarrillos.

En el país se ha querido alarmar a la ciudadanía con el asunto de las drogas. De que el consumo de drogas acaba con el organismo, pero usted debe saber que los jóvenes que nos hemos formado en esta sociedad la gran mayoría estamos tarados, frustrados, no tenemos perspectivas, y buscamos en las drogas una salida a nuestros impulsos y sanas aspiraciones.

FUENTES:
(3) El Nacional. 30 de noviembre 1974.
(4) El Nacional. 18 de diciembre 1974.
(5) El Nacional. 15 de diciembre 1974.Continuará la semana próxima

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Al leer el contenido de la charla a que hice referencia anteriormente, se debe tomar en consideración la fecha de la misma y las observaciones que hacía de cómo se desarrollaba en el país el tráfico y consumo de estupefacientes. Lo que expuse en esa época, se confirma con la realidad de hoy, y la amplitud de cómo el fenómeno de las drogas ha ido desarrollándose en nuestro medio social.  
En el año 1974, escribí un artículo en el cual narré la visita que me hizo, en mi condición de abogado, un joven distribuidor y adicto a las drogas. He aquí el citado escrito.

Doctor Yo Fumo Drogas

El día dos del corriente mes, en horas de la tarde, visitó mi oficina un joven de unos veinticuatro años, de color blanco, contador público, soltero, domiciliado y residente en la ciudad de Santiago de los Caballeros. El joven dijo residir con sus padres, quienes son oriundos de Moca, Provincia Espaillat.

Después de identificarse y decirme sus calidades, el joven me dijo que tenía interés en plantearme un problema; le respondí que lo expusiera, que estaba en disposición de escucharlo.

Comenzó así: doctor, desde hace alrededor de cinco años que uso drogas; “me inicié fumando marihuana y ya he llegado a inyectarme, mire mis brazos como están. He venido donde usted porque varios amigos que fuman, al igual que yo, están detenidos y parece ser que me han denunciado, y he sido informado de que la policía me anda buscando, yo quiero que usted me diga qué debo hacer.
Interesado en conocer a fondo el problema del joven adicto a las drogas, le pedí que me diera más informaciones con relación a su inicio en el vicio. Me relató  que la primera vez que se fumó un cigarrillo de marihuana fue en Moca; el cigarrillo se lo regaló un compañero de estudios que conseguía las picaduras en la ciudad capital, por medio de un señor cubano exiliado que laboraba en un hotel de lujo. Después del primer cigarrillo me regaló otros más, hasta que le tomé el gusto y seguí fumando, pero ya yo tenía que comprar las picaduras.

El precio que pagaba al principio por los cigarrillos era de cinco pesos por paquetito; cada uno me daba para preparar un cigarrillo y medio. Después de cierto tiempo, mi amigo me puso en contacto directo con el cubano exiliado. El cubano me dijo que si yo buscaba buenos clientes dentro de mis amigos acomodados, los cigarrillos de mi uso me saldrían gratuitamente y él me podía dar una pequeña comisión por concepto de la venta.

En razón de que ya no podía estar sin darme mis toques de marihuana, acepté la proposición del cubano y me convertí en fumador y traficante. Donde he vendido más picaduras es aquí en Santiago y en Puerto Plata; la venta la he hecho principalmente a nivel de jóvenes estudiantes y hombres de edad madura.

El joven drogadicto me afirmó que al principio vendía tres y cuatro mil pesos al mes, pero que después sus clientes fumadores de Santiago hicieron contacto con otros traficantes en la capital y compran las picaduras directamente allá. Al bajar las ventas aquí, el intermediario cubano me retiró la entrega de las picaduras; ya no me da nada para vender y mucho menos para mi uso, dijo el joven drogadicto.

Me siguió narrando el joven. Santiago es un buen mercado para las drogas, y lo importante es que aquí los fumadores no están curtidos, no saben distinguir bien la naturaleza de la picadura, es fácil engañarlos, muchas veces hice buen negocio porque el intermediario en la capital me daba diez libras y yo la mezclaba con otra planta y la aumentaba, me ganaba el dinero de la comisión, el porcentaje de las libras que mezclaba y me quedaba con las picaduras genuinas para mi fuma; recuerdo que aquí en Santiago, había un profesor universitario de nacionalidad norteamericana que era mi mejor cliente, pues consumía hasta trescientos pesos al mes y pagaba sin ningún problema, pero después él se fue del país; me dejó buenas relaciones entre sus amigos fumadores.

Le pregunté al joven que de dónde traían la marihuana, y me dijo que al principio venía de Colombia, pero que ya no es necesario traerla, pues aquí hay buenas plantaciones y cuando las autoridades incautan determinada cantidad   es porque los negociadores que tienen siembra aquí hacen la denuncia para evitar la competencia del producto extranjero.

El asunto de las drogas se ha puesto  algo difícil”, doctor, “ya hay muchos traficantes y muchos fumadores, y en el negocio hay mucha gente metida de influencia en el Gobierno y en todos los sitios. Al principio, el negocio era bueno para mí; se hacía un negocio fabuloso, pero ya la competencia entre los que tienen plantaciones aquí y los que introducen desde el extranjero, es tremenda.

Esa es una lucha muy fuerte, y yo creo que he sido víctima del avance del negocio, pues a medida que el tráfico se ha propagado, me han aislado,  y el miedo que tengo ahora es que me eliminen físicamente, dijo el joven adicto.
Yo quiero que usted me oriente, doctor. Ya no consigo picaduras y he tenido que decidirme por inyectarme y noto que cuando estoy bajo los efectos de la droga hago malos pensamientos, y muchas veces he pensado hasta eliminar a mis padres; esto es muy duro, yo se lo confío doctor, haga algo por mí, sálveme, me  dijo finalmente el joven.

Le dije al joven que no defendía como abogado a personas  ligadas con asuntos de drogas, que no me ponía la toga bajo ninguna circunstancia para asistir a drogadictos, que lo único que podía hacer era darle consejos; que él era víctima del sistema social imperante, y que con respecto a la persecución policial, lo mejor que hacía era consultar a sus padres para que ellos le dijeran lo que tenía que hacer; que podía contar conmigo como amigo y  consejero, pero no como abogado.

Esta es la realidad: un joven dominicano, víctima de las drogas, de los extranjeros perniciosos y del sistema social dependientes de los intereses extranjeros. (2).

Tomando como referencia el citado artículo, el reverendo José Cruz, quien para esa época dirigía, por el canal 7 de televisión, un programa de orientación a los jóvenes y contra las drogas, hizo fuertes críticas al contenido de mi artículo. Le contesté al sacerdote sus observaciones en la forma siguiente:

Carta a un sacerdote

Señor: Reverendo José Cruz, director de “Casa Abierta”. Santo Domingo, D. N.
Señor Reverendo:

En el programa “Casa Abierta”, que se transmite por el canal siete de Rahintel, los domingos de doce y treinta a una de la tarde, el pasado domingo, usted, después de dar lectura al artículo que bajo el título “Doctor Yo Fumo Drogas”, apareció en el periódico El Nacional de Ahora de fecha 22 del mes de noviembre en curso, escrito por mí, hizo comentarios con relación a la negativa de mi parte a servir como abogado al joven adicto y traficante, a quien menciono en el indicado escrito.

Según su criterio, una de las razones por las cuales no le presté mis servicios profesionales al joven es porque tengo miedo a enfrentarme a los problemas que conlleva estar frente a los negociantes de estupefacientes. A ese respecto  puedo decirle que me parece que usted está equivocado, y esto por lo siguiente:

Las razones que me impulsan a no defender drogadictos y traficantes, son las mismas que me llevan a no defender contrabandistas, agiotistas y especuladores, ni a los que se ceban con los vicios del sistema que predomina aquí. En mi ejercicio profesional trato de llevar una conducta coherente con mi forma de actuar en mi vida pública y privada. Padre, yo no puedo hablarle a las masas, en los barrios marginados y en los campos, de combatir el vicio de las drogas, la prostitución, etcétera, y después ir a los estrados a defender a los que viven a expensas de esas lacras. Creo que habría una contradicción entre lo que digo y lo que hago.

Trato dentro de lo posible de llevar mi vida privada, pública y profesional en concordancia; que una responda a la otra. Así, considero que no puedo hablar de combatir  a los esquilmadores del pueblo dominicano, y luego cuando se presenta una situación adversa a esos sectores, salir a defenderlos con una toga en los estrados. Eso sería yo llevar una vida incoherente; una cosa como profesional, y otra como preocupado por los problemas sociales.

Muchas personas se acercan a mí para que los defienda en asuntos de drogas, y a todos les doy la misma respuesta: que se busquen otro abogado, que no me encargo de esos asuntos. No critico que otros colegas defiendan a drogadictos y traficantes, respeto su decisión, pues al actuar así lo hacen respondiendo a su forma de pensar y a su criterio profesional, de la misma manera que lo hago yo cuando me niego a prestarles mis servicios profesionales. (3) l

FUENTES:
(2) El Nacional. 22 de noviembre 1974.
(3) El Nacional. 30 de noviembre 1974.
Continuará la semana próxima

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Introducción

Los fenómenos sociales no hacen acto de presencia de un día para otro; ellos nacen y se desarrollan con el transcurso del tiempo en el seno de la sociedad. Los seres humanos no nacen buenos ni malos, el medio social les condiciona su vida, actitud y comportamiento, y diferentes factores determinan su forma de ser.

Transcurrieron muchos años para que nuestro pueblo se diera cuenta que en el seno de la sociedad dominicana estaba presente un fenómeno social nuevo: el consumo y tráfico de estupefacientes.

Depende mucho para el desarrollo de un fenómeno social, el alto o bajo grado de avance de las fuerzas productivas, las clases sociales que giran alrededor del sistema, y el orden social vigente en un momento dado.

En verdad, fueron muy pocos los padres que hicieron conciencia de que algo nocivo estaba incidiendo en el comportamiento de algunos de sus hijos, pero con el tiempo la realidad les dio en la cara y se dieron cuenta que el cambio en la vida de sus niñas y niños era fruto del vicio del consumo de estupefacientes.

No resulta difícil para el ser humano predecir cuándo va a llover o la llegada de un ciclón, pero no le es fácil saber la dimensión de un fenómeno de naturaleza social.

Si es cierto que durante la tiranía de Rafael Leonidas Trujillo no fue notoria la presencia del consumo y tráfico de drogas ilegales en el país, no es menos cierto que después de la intervención norteamericana de 1965, sí se observó el nacimiento del fenómeno del consumo de estupefacientes.

En un principio, en muchos hogares del país, especialmente de clase media alta, se buscaron todas las formas de cómo querer ignorar la realidad de que se estaba gestando en nuestro medio un fenómeno nuevo, hasta ese momento desconocido en su esencia: el uso por muchos de nuestros jóvenes de drogas narcóticas, principalmente marihuana.

Diferentes factores, principalmente mi vinculación con el movimiento popular, estudiantil, político y laboral, hicieron posible que desde un principio comprendiera cómo el fenómeno de las drogas había llegado a nuestro medio, lo que me permitió comenzar a exponer mi criterio en torno a ese vicio social que si en sus comienzos fue muy tímido, ya hoy su desarrollo es alarmante.

Siempre he considerado que cumplir con un deber es hacerle frente a los distintos fenómenos sociales que afectan negativamente a la sociedad humana.

Mantener una posición firme contra la producción, consumo y tráfico de estupefacientes, me llevó a enfrentamientos con sectores políticos, civiles y militares. Pero siempre procedí con la creencia de que con mis actuaciones contra el fenómeno de las drogas y el crimen del narcotráfico, cumplía con mi deber como ciudadano y padre de familia.

Hoy, cuando el fenómeno de las drogas narcótica es una expresión viva en nuestro país, he querido exponer por medio de este trabajo el desarrollo de la producción, consumo y tráfico de estupefacientes, y mi incidencia ante este fenómeno que hoy preocupa a la gran mayoría del pueblo dominicano.

En forma más o menos detallada voy  a transcribir los escritos que recogen mis actividades y sugerencias, artículos y conferencias llevadas a cabo hace varios años, cuando todavía en el país se ponía en duda que las drogas ilegales podían llegar a convertirse en un fenómeno social de gran influencia en el seno de la sociedad dominicana.

CAPÍTULO I

Los clubes culturales. Las drogas. Los sistemas sociales. Un sacerdote y yo. Escritos sobre drogas
Durante todo el régimen de los doce años del doctor Joaquín Balaguer, los clubes culturales se convirtieron en la expresión de polea transmisora del sentir de los barrios populares a las instituciones del Estado, y a los demás sectores de la sociedad dominicana.

En Santiago, la juventud creó clubes culturales en los distintos barrios de la ciudad, a los cuales comparecí a dictar charlas y conferencias de diferentes temas.

El 16 de abril de 1974, en Santiago, fui invitado por el Club Cultural Orión, de Villa Progreso, a exponer, mediante una charla, mis ideas con relación a las drogas y el sistema social imperante en el país.

He aquí los puntos que abordé en el curso de mi exposición:

1.- El sistema social que predomina en la República Dominicana es propicio para el desarrollo del vicio y el tráfico de las drogas, esto es así porque además de ser un negocio que deja buenos beneficios a los traficantes, las instituciones que genera el actual ordenamiento social no se preocupan por la eliminación de ese tipo de comercio. Algunas autoridades consideran que el negocio de las drogas es como vender tela, libros, tierra y prostitución.

2.- La justicia dominicana trata de forma diferente a un acusado por cuestiones políticas, que aquel  que cae preso por tráfico de drogas; las sanciones que les imponen a los traficantes de narcóticos, si es que les imponen algunas, son siempre benignas. Todo se debe a que las lacras que engendra el sistema vienen a ser de beneficio para sectores que mantienen al pueblo viviendo en la miseria.

3.- Un politiquero cualquiera ve muy corriente y común que un joven se “endrogue”; quienes no ven bien que los hijos del pueblo se endroguen son los campesinos, los obreros y demás sectores humildes de la población. En nuestro país nadie ha visto que un campesino o un obrero se dedica al tráfico de las drogas; quienes hacen  del tráfico de las drogas un negocio lucrativo son los mismos que tienen mentalidad para acaparar artículos de primera necesidad, les sirven a los intereses extranjeros y se ceban de  los vicios de esta sociedad. El  de las drogas no se puede ver al margen de otros problemas sociales. El que quiera combatir seriamente el consumo y tráfico de narcóticos en este país, también tiene que luchar por acabar con el sistema social que le sirve de caldo de cultivo.

4.- No es serio aquel que se pone a hablar de acabar con el negocio de las drogas, persiguiendo a dos o tres drogadictos, cuando el sistema permanece igual y cada día saca sus reservas dentro de las clases sociales dominantes que se enriquecen del vicio, de la corrupción y de toda clase de operaciones bajas.

5.- Pretender acabar con las drogas apresando a un drogadicto, es como querer acabar con la prostitución cerrando uno o dos prostíbulos; quien crea eso le hace un flaco servicio al pueblo y lleva a las masas a la confusión. La realidad de nuestro país nos dice que aquí los sectores poderosos protegen a determinado tipo de delincuentes, como los que trafican con la prostitución y las drogas. El día llegará, más temprano que tarde, que el narcotráfico será un poder en el país, cuando haga fuerte alianza con los políticos, militares, policías y sectores del más bajo mundo.

6.- Aquí a quien se persigue es a quienes luchan por acabar con el sistema, no a quienes se enriquecen de él. Entre un preso político  y un traficante de drogas, el que lleva la peor parte es el primero, y una muestra de ello es que en este país hay cientos de presos políticos, pero en las cárceles no hay uno solo por traficar con prostitutas y drogas. Los que dicen que quieren acabar con las drogas, que vayan a los barrios a difundir en el seno de las masas los males del sistema y todas sus consecuencias negativas. (1). l

FUENTES:
(1) El Nacional. 17 de abril 1974.
Continuará la semana próxima

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