SANTIAGO.-El ingeniero Temístocles Montás invitó a la juventud dominicana acompañarlo en su proyecto presidencial de cara a ganar las elecciones de 2016 confiando en que encarna un liderazgo democrático para construir un país donde se pueda vivir, trabajar y estudiar dignamente para superar las precariedades que atraviesa la población.
Montás habló ante cientos de jóvenes de esta ciudad convocados por el movimiento “Jóvenes de Santiago con Temo”, durante un acto celebrado en el hotel Matum, donde pidió a los presentes que pese a las dificultades porque atraviesan las personas más jóvenes, “hay que levantar el ánimo y seguir luchando por un país digno, donde hacer política se convierta en una actividad honorable”.
El acto, que reunió a jóvenes profesionales, estudiantes y representantes de diversos sectores de Santiago, fue abierto con palabras de la joven Ibreska Pérez, quien expuso las necesidades y limitaciones de la juventud dominicana en términos de satisfacción de ss necesidades básicas en cuando acceso a la educación y empleo.
Montás dijo que de acuerdo con un estudio recientemente realizado por el Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, en la juventud dominicana hay una idea generalizada de que no vale la pena luchar porque los políticos son todos mentirosos y ladrones que no encaran los problemas nacionales y solos quieren hacerse ricos.
Una nota del equipo de prensa de Montás, cita al alto dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) expresando que esto sucede en un contexto de gran precariedad económica y de aparente carencia de oportunidades, tanto por ausencia como por baja remuneración de los trabajos.
“Esto ocurre”, dijo Montás,“en el marco de una sociedad que estima, de más en más, los valores materiales: la buena presencia, la capacidad de consumo, la capacidad de resolver. Este aparente cierre de caminos para generar ingresos se convierte en “caldo de cultivo” de respuestas delincuenciales que son el inicio de un camino sin retorno”.
Admitió que las condiciones de vida de la juventud son muy precarias porque la tasa de desempleo de ese segmento de la población es mucho más del doble que la tasa general de desempleo del país.
“Resulta notorio que el 20.3% de la juventud ni estudia ni trabaja. Este fenómeno muestra que una parte muy importante de los jóvenes de 15 a 24 años se encuentran marginados de dos de los principales mecanismos de integración social, la escuela y el trabajo”, apuntó Montás.
No obstante, el dirigente del PLD señaló que la otra cara de la realidad es más optimista porque la juventud desea el bienestar, y quiere encontrar razones para esperar y creer en un futuro incluyente para todos y del cual tengan derecho a ser parte.
“Tengo el compromiso de tratar de convencer a la juventud de que no es verdad que todo tiempo pasado ha sido mejor, sino que nuestro presente es ciertamente más complicado, mucho más complicado”, manifestó el también ministro de Economía, Planificación y Desarrollo.
Montás consideró que la juventud históricamente ha sido la impulsora de los grandes cambios de época y en la coyuntura de 2016 debe acompañar la consolidación de un liderazgo democrático en el PLD y en el país que tuvo su mayor impulso con la victoria de Danilo Medina en las elecciones de 2012.
Confió en que la juventud luche y trabaje para fortalecer “un liderazgo veraz, no importa las consecuencias” y que estimule la autonomía, no la dependencia y que sea capaz de conducir las transformaciones que requiere la sociedad dominicana.
“Creo en un liderazgo que no obstaculice el relevo necesario. Creo que el líder verdadero es aquel que propicia y facilita su sustitución, sin traumas, precisamente para oxigenar el sistema democrático y llenar de brío nuevo y juvenil al liderazgo”, apuntó Montás.
Descartó que un líder verdadero se considere a sí mismo insustituible, porque los grandes líderes se dedican día y noche a trabajar para fortalecer su partido, darle valor a la vida institucional y a formar sus bases para que vengan cada vez mejores relevos.
“Creo que un líder verdadero es el que actúa con previsión y no espera a que le caigan encima los años, aspirando hasta que ya no aguante, y da paso a los nuevos liderazgos para que sigan los afanes para conquistar horizontes de desarrollo no alcanzados”, apuntó el alto dirigente del PLD.
Montás manifestó que “el líder cabal tiene la sabia virtud de comprender los tiempos; es el que está dotado de la suficiente inteligencia emocional para ceder el paso, a tiempo, sin hacer reperperos y sin necesidad de que se lo pidan y mucho menos de que se lo tengan que arrebatar.
Recordó que el PLD es un partido que le debe mucho a la juventud porque fueron jóvenes los que junto a Juan Bosch construyeron este importante instrumento de lucha para hacer política de manera diferente. “Esto sigue estando a la orden del día y por eso estoy hoy aquí para invitarlos a no perder la fe, a levantar el ánimo y seguir luchando por un país digno, donde hacer política se convierta en una actividad honorable”, concluyó Montás.
