El coordinador nacional del movimiento Patria para Todos, Fulgencio Severino, consideró que a pesar del excesivo endeudamiento, la inversión extranjera y el ingreso de recursos provenientes de vías ilegales en República Dominicana, los gobiernos de los partidos políticos tradicionales no han enfrentado con éxito los principales problemas del país.
Citó entre ellos la pobreza, la inseguridad ciudadana, los apagones, la recogida de basura, la falta de agua potable, la asistencia sanitaria, las pensiones y el sufrimiento de las mayorías de la población.
Señaló que la persistencia de estos males a pesar del manejo de esos recursos se debe a que esos políticos usan el gobierno para beneficios particulares y aprovechan sus funciones públicas para el tráfico de influencia, la corrupción y el enriquecimiento.
“Muchos de los dirigentes de esos partidos han salido del gobierno con empresas y muy ricos”, acotó a través de una nota de prensa.
Severino consideró que las consecuencias “de esas perversas gestiones” se observan en un país con males que hace muchos años que muchos otros países han superado.
“No gobiernan pensando en el bienestar de la población y del país, sino en el suyo y el de grupo minoritarios”, dijo y añadió “Así actúa el Congreso apoyando leyes y préstamos sin tomar en cuentas el interés de la nación, los decretos y los proyectos del gobierno son parte de una estrategia que busca el enriquecimiento de grupos del partido en el poder y la justicia es protectora de ese modelo de funcionario”.
Señaló que en el país no hay gobierno, Congreso, ni justicia. Hay personas imbuidos de los más altos poderes, los cuales utilizan para beneficiar a reducidos grupos económicamente poderosos y a los congresistas, funcionarios y representantes de la justicia. Enfatizo el Dr. Severino, coordinador del MPT
“Hoy en día persisten dos ciudadanos en el país, gente muy adinerada, que lo ha conseguido durante el desempeño de su función en el gobierno y otras instituciones del Estado, con salarios abusivos y actos de corrupción como son el tráfico de influencia, el encarecimiento de las compras del Estado para recibir comisiones, la creación de nóminas irreales, y por el otro lado hay una población carente de los servicios básicos elementales”, planteó a través de una nota de prensa.
