Introducción
Esta vez, para mi crónica habitual de grandes e importantes actividades de mi ministerio, me ha parecido mejor reproducir la hecha por S.E.R. Mons. José Dolores Grullón Estrella, obispo de San Juan de la Maguana, sobre la Visita ad límina de los obispos dominicanos. La encuentro bien resumida y completa. Le agradezco de antemano la autorización que me ha dado para publicarla en esta columna.
La Visita Ad límina, pues, de los obispos dominicanos en el año 2015, ocurrió del 27 de mayo al 5 de junio. Esta visita comprendió: Encuentro con el Santo Padre, visita a las cuatro Basílicas Mayores y a los dicasterios de la Santa Sede.
También encuentro con los dominicanos residentes en Roma, con la Congregación de las Hnas. del Cardenal Sancha y misa y almuerzo en el Colegio Pio Latino Americano. Haré de ella dos entregas.
Visita al Santo Padre
Después de celebrar la misa en la tumba de San Pedro, fuimos recibidos por el Santo Padre. Entramos con los laicos que nos acompañaban, de la oficina de Prensa de la CED, Televida y la Voz de María, a ellos el Santo Padre dedicó unas palabras de cariño, que les robaron el corazón.
El Santo Padre nos invitó a entablar un diálogo franco, sobre todo aquello que nosotros pensábamos que eran las luces de la Iglesia en cada una de nuestras diócesis y cuáles eran los retos que el mundo de hoy presentaba a la evangelización. El dialogo comenzó con las palabras del Presidente de la CED, presentando nuestras Iglesias Locales, el trabajo y la vida de nuestra conferencia. Le expresamos al Santo Padre la unidad afectiva, pero sobre todo efectiva con sus 32 encuentros nacionales de pastoral, los tres planes de pastoral y la organización de nuestras iglesias, el trabajo de los sacerdotes, las religiosas y los laicos. Los principales temas abordados por el Papa fueron las vocaciones, el seminario, la formación sacerdotal permanente referente a lo humano, lo intelectual, espiritual y la vida comunitaria; hizo énfasis en la vida comunitaria de los sacerdotes; la familia, el bautismo para todos, aún para los que viven en unión natural; los movimientos apostólicos; el gran deseo del Papa es que seamos misericordioso con todos, comprendiendo la debilidad humana, invitando a la conversión y al perdón; otro tema de interés del Papa fue el del medio ambiente.
La presencia del Papa se mantuvo durante toda la visita, pues a diario lo encontrábamos por los pasillos y en el comedor de la Casa Santa Martha, donde estamos todos alojados, lo veíamos con su plato sirviéndose, siempre acompañado de un equipo diferente. Nos concedió concelebrar un día con él en la capilla de Santa Martha, donde él celebra cuatro veces a la semana, siempre con una parroquia diferente de la diócesis de Roma, que es su diócesis. Al final, después de las correspondientes fotografías, tiene un intercambio con la parroquia representada por sus sacerdotes acompañados de su consejo parroquial.
El Episcopado es una Familia
Durante estos 11 días que duró la Visita Ad límina dimos muchas gracias a Dios porque realmente pudimos comprobar y dar testimonio de que los obispos que conformamos la Conferencia del Episcopado Dominicano formamos una familia, que hemos trabajado por ser una familia, por valorarnos. Rezamos unos por los otros para que cada diócesis llegue a realizar el modelo de Iglesia que quiere el buen pastor y diseñados en nuestros planes de pastoral. Una familia eficiente que ha logrado por unos 32 años mantener un proceso de planificación efectiva, expresada en los tres planes pastorales y en las programaciones a nivel nacional cada año, apoyando a nuestros sacerdotes, religiosas y laicos en cada una de las comisiones e instituciones nacionales. Todo esto se ha logrado con sacrificio, vencimiento de cada obispo, aportando, cediendo, perdonando y celebrando.
Nuestras instituciones nos han ofrecido subsidios y buenos materiales para la evangelización, la formación de comunidades y para las celebraciones dominicales. Un puesto relevante para este logro lo tiene el Instituto Nacional de Pastoral, el órgano coordinador y de seguimiento del Plan Nacional de Pastoral. Este ha sido nuestro testimonio ante el Santo Padre y ante los dicasterios de la Santa Sede.
El episcopado como familia, como también el presbiterio como familia, hace creíble lo que pedimos a los miembros de nuestras familias, el entendimiento, la comprensión, el perdón mutuo, la permanencia en el matrimonio, la fidelidad, la ayuda mutua, el proyecto común de la educación de los hijos y la integración a la comunidad cristiana. Aunque débiles y con nuestros defectos como toda persona humana, que se reconoce pecador perdonado, llamado a ser misericordioso con todos, especialmente con los más débiles y humilde siervo de todos los hijos de Dios. Dios, que tiene todo poder, pone el resto.
Al servicio de las Conferencias Episcopales
Una nota que sobresalió en las visitas fue el sentir de los representantes de los diversos dicasterios de que ellos están al servicio de las Conferencias Episcopales, para ayudarles en la realización de la misión en las diferentes diócesis. El Papa Francisco los ha ido visitando uno por uno y dándoles sus orientaciones y comunicándoles la manera de ser Iglesia humilde y acogedora. Visitamos la Congregaciones para la Causa de los Santos (28 Mayo), El Pontificio Consejo de los Migrantes y de los Itinerantes; la Congregación para los Obispo y para la Educación Católica (29); el Pontificio Consejo “Cor Unum”, el de la Pastoral de la Salud y el de Justicia y Paz (1 julio); Congregación para la Doctrina de la Fe, el Pontificio Consejo para la Nueva Evangelización, para los Laicos, y para la Familia (2 junio); Congregación para el Culto Divino y para la Vida Consagrada (3 junio); Congregación para el Clero y la Comisión para América Latina (CAL) (5 junio).
El encuentro con Jesucristo
El cardenal prefecto de la Liturgia nos señaló lo que está a la base de cada Dicasterio: “El Encuentro con Jesucristo”. Vemos la influencia del Papa Francisco, hombre del Vaticano II, y heredero de las cinco Conferencias del Episcopado Latinoamericano. Es el aporte de la Iglesia Latinoamericana a todos los continentes.
5. Visita a la Conferencia del Episcopado Italiano (CEI)
“Comitato Per gli Interventi caritativi a favore del Terzo Mundo” de la Conferencia del Episcopado Italiano. Con motivo de presentar el último informe del proyecto aprobado para la diócesis de San Juan de la Maguana sobre aumento de la calidad de vida y protección al medio ambiente de la cuenca de la Presa de Sabaneta, y presentación de un nuevo proyecto presentado por FUNDASEP incluyendo la cuenca baja, Mons. José Grullón llevó al obispo de Cáritas Dominicana, Mons. Rafael Felipe, acompañado de Mons. Julio César, y lo presentó a Don Leonardo Di Mauro, presidente del “Comité para la intervención caritativa a favor del tercer mundo”. (Via Aurelia 468, tel. 0039-06-6630811) Cáritas puede hacer un proyecto conjunto para todas las diócesis, lo que debe firmar cada obispo en particular, sobre escuelas, formación, santuarios, hospitales, artesanía, agricultura, promoción de la mujer…
CONCLUSIÓN
CERTIFICO que mi crónica “Visita Ad límina” difundida por el Periódico “elCaribe” es reproducción literal de la hecha por S.E.R. Mons. José Dolores Grullón Estrella, obispo de San Juan de la Maguana, sobre la misma.
DOY FE, en Santo Domingo, el 2 de julio del año del Señor de 2015. l
