Alimentos y hábitos que potencian tu cerebro

Los problemas de memoria pueden ser pequeños olvidos o pérdidas de memoria importantes, y pueden suceder a menudo, esporádicamente o en épocas de estrés o tensión emocional.

Los problemas de memoria pueden ser pequeños olvidos o pérdidas de memoria importantes, y pueden suceder a menudo, esporádicamente o en épocas de estrés o tensión emocional.Es importante diferenciar los olvidos puntuales causados por situaciones de cansancio, distracción o estrés, en los que olvidamos un nombre, una fecha o algún detalle similar, de las pérdidas de memoria más importantes y cada vez más recurrentes, en las que se pueden no recordar acontecimientos o cosas que se hayan hecho.

Hay que recordar que el cerebro es el órgano más poderoso del cuerpo y que de éste se derivan todos los procesos mentales que llevan a las personas a convertirse en seres más inteligentes . Ahora bien, de acuerdo al nutricionista Flavio Soto Jiménez, del mismo modo en que se entrenan los músculos del cuerpo para fortalecerlos, esta área también se puede desarrollar mediante una serie de buenas prácticas.

Según diversos estudios, a partir de los 30 años se pierden unas 1000 neuronas al día, y sostienen que para mantener una buena salud cerebral es imprescindible tener una dieta balanceada y realizar ejercicios, tanto físicos como mentales.

Por ejemplo, los juegos de mesa para mejorar la memoria y la concentración, como el ajedrez, las damas, armar un rompecabezas o los juegos para memorizar, como esos en los que cuentan con una serie de colores, formas u objetos y que luego tienes que recordar en qué orden se van desarrollando; son excelentes para ejercitar y mejorar el funcionamiento de la memoria mientras te diviertes.

Para que el cerebro funcione bien, el resto del cuerpo también tiene que hacerlo, él necesita de una constante y adecuada ingesta de oxígeno y nutrientes, que llegan hasta allí arriba mediante la sangre, pero el paso hacia allí debe estar limpio. Así que hacer ejercicio para mantener el resto del cuerpo de manera saludable ayuda a que el cerebro funcione bien y, por ende, la memoria pueda desarrollarse

“La memoria también entra por la boca”

“Hoy en día es muy importante saber que nuestra forma de alimentación va a ayudar o a afectar directa o indirectamente las diversas funciones de nuestro organismo, por eso debemos enfocarnos en alimentarnos de forma adecuada, no simplemente en comer lo primero que aparezca”, comenta Rafael Santos Pelegrín, nutriólogo clínico y especialista en implante de células madres.

Nuestro cerebro requiere de ciertos nutrientes para funcionar correctamente, como son la glucosa, vitaminas, minerales y grasas. Tener un balance adecuado en los mismos nos va a permitir pensar con mayor rapidez, tener una concentración más prolongada y tener mejores respuestas cerebrales ante las situaciones que se presenten en nuestro diario vivir, dice el experto.

Dice que el verde aumenta la producción de dopamina, la cual es un neurotransmisor fundamental para el cerebro. Además, ayuda a impedir desórdenes cerebrales. El aguacate es bueno para mantener y controlar un riego sanguíneo normal, el cual es esencial para el cerebro. Esto es debido a que sus grasas son monoinsaturadas.

El yogourt ayuda a la función nerviosa gracias al calcio, el cual la mejora. Además, aporta tirosina, es una sustancia que contribuye a la producción de neurotransmisores como la noradrenalina y la dopamina.

Otro alimento que no debe faltar en una dieta balanceada es el huevo, ya que impide el envejecimiento cerebral, debido a que contienen zeaxantina y luteína, dos de los indispensables antioxidantes naturales. Además, es una gran fuente de proteína.

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El plátano contiene altos niveles de potasio, magnesio, vitamina C y fibra que lo hacen un alimento inmejorable para la salud cerebral, pues todos esos elementos son conocidos por su efecto en la memoria. Asimismo, la vitamina B6, también presente en dicho fruto, ayuda en la producción natural de serotonina, norepinefrina y dopamina, neurotransmisores relacionadados con la concentración. Pescados ricos en ácidos grasos Omega 3 y Omega 6 como salmón, sardinas, atún, bacalao son ideales para beneficiar el cerebro. Estos ácidos son esenciales para mejorar la capacidad de aprendizaje desde edades muy tempranas. Los ácidos grasos Omega 3 forman parte de la materia gris del cerebro y de las membranas celulares cerebrales, por lo tanto ayudan a tener un balance emocional, mejor predisposición para el aprendizaje y una actitud positiva, ademas previenen enfermedades como la demencia y las embolias.

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