Esposa de Pachy Carrasco: “Cómo despedirte si aún la música existe”

La viuda del músico Pachy Carrasco, la actriz y comunicadora Liz Soto, rompió el silencio tras la muerte de su esposo el pasado 5 de enero.

La viuda del músico Pachy Carrasco, la actriz y comunicadora Liz Soto, rompió el silencio tras la muerte de su esposo el pasado 5 de enero.A través de un mensaje en Instagram, Soto expresó el dolor por la partida del reconocido músico, con quien procreó dos hijos. A continuación publicamos el texto íntegro que colgó en la famosa red social:

“Cómo despedirme si a diario en cada sonrisa de los niños veo tu rostro, el reflejo de ese amor tan puro y sincero que sembraste en ellos llenándolos de besos, de cariñitos, apoyando cada una de sus ocurrencias, siendo juez y parte de cada día en sus vidas. Cómo despedirte si aún la música existe, esa que te hacía el hombre más trabajador, dedicado y responsable, llevando más que una pasión por ella todas las emociones, notas, melodías que te hacían volverte loco y no despegarte hasta lograr justo lo que estaba en tu cabeza. Cómo despedirte si llegaste a mi vida para transformarla en una mejor vida siendo mi mejor mitad, cómplice y compañero de vida en las buenas y en las no tan buenas. Gracias por regalarme lo mejor de nosotros, nuestros hijos. Gracias por hacerme enojar y sonreír al mismo tiempo y con la naturalidad que te caracteriza decirme MA’ y ya con eso estaba todo resuelto.

No te despido PA’ te digo hasta luego, mientras haré de nuestros hijos hombres y mujeres de bien con tu ejemplo que queda grabado en cada persona que te conoció, con esa sonrisa hermosa y única que hacía sonreír a todos, llenando cada espacio con tu magia que hacía que todos sin conocerte te amaran y se enamoraran de ese ser tan especial que eres, y digo eres porque lo que sembraste en cada persona permanecerá eternamente.

47 años vividos en amor junto a los tuyos, haciendo lo que te gustaba y coño!!! Cuánto te lo disfrutabas, ya sea en tarima o en tu cueva favorita (tu estudio) y sé que te faltaron tantas cosas por hacer, tanto amor por dar y recibir, tantos coños por decir. Tu casa sigue llena de besos para ti, de pitos para ti, de amor para ti, de PA’ para ti.

(Salmos 94:19) En la multitud de mis pensamientos, dentro de mí, tus consolaciones alegran mi alma”.

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