Lipoescultura, tras la figura perfecta

La mayoría de las mujeres soñamos con el cuerpo perfecto, y parece que los médicos cirujanos han podido cumplirnos varios deseos.

La mayoría de las mujeres soñamos con el cuerpo perfecto, y parece que los médicos cirujanos han podido cumplirnos varios deseos. Desde los mejores retoques en nuestro rostro para mejorar el aspecto, hasta hacernos adelgazar en una simple cirugía…el karma del cuerpo perfecto se acabó.

Una de las prácticas quirúrgicas que últimamente están teniendo una gran demanda entre las mujeres es la lipoescultura, un procedimiento estético que tiene por finalidad esculpir el cuerpo, con la idea de darle forma atractiva y estilizada. Es importante saber y recordar que la lipoescultura no es procedimiento para perder peso, sino para modelarlo eliminando aquellas zonas que ni con dietas ni con ejercicio se pueden eliminar.

Normalmente se tiende a confundir lipoescultura con liposucción, pero entre ambas existe una diferencia importante. La liposucción en sí tiene una definición mucho más amplia, ya que se denomina así a cualquier procedimiento que utilice la tecnología de destruir células grasas y eliminarlas del cuerpo a través de la succión. En general, la liposucción es utilizada para sacar grandes cantidades de grasa del cuerpo, en especial en esas áreas que se acumula mucha cantidad de células adiposas, tales como las piernas, muslos, nalgas y abdomen. Sin embargo, la lipoescultura es una liposucción “menor” ya que se realiza para extraer menos cantidad de grasa y amoldar el cuerpo. Es un procedimiento pensado para atacar aquellas áreas que no son consideradas apropiadas para una liposucción, como la cara y el cuello.

De acuerdo con Eduardo Mejía, cirujano plástico egresado del Instituto Ivo Pitanguy de Brasil y miembro de la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva (SODOCIPRE), la lipoescultura actualmente es uno de los procedimiento más solicitados en cirugía plástica, el cual se realiza con el fin de extraer el acumulo de grasa que pudiera estar localizada en cualquier parte del cuerpo. Se puede realizar en diferentes zonas del cuerpo como el abdomen, piernas, brazos, nalgas, rodillas y papada. “Esta cirugía es un procedimiento serio y delicado. Para determinar si la paciente califica para ser sometida al mismo, ésta debe pasar por una evaluación cardiovascular con el fin de valorar su estado de salud. Un vez que todos los resultados de las pruebas se encuentren dentro de los parámetros normales, y el cardiólogo manifieste su aprobación, se hace la evaluación pre-anestésica, en la cual el anestesiólogo conoce al paciente y verifica los estudios realizados previamente. Esto le sirve como guía para determinar el tipo de anestesia que usará”, comenta Mejía.

Este procedimiento, que se hace bajo anestesia general, consiste en la extracción de grasa o tejido adiposo de diversos partes del cuerpo, introduciendo bajo la piel una cánula conectada a una bomba de vacío. El tiempo de recuperación es bastante rápido, pudiendo realizar actividades normales a la semana del procedimiento, y el sangrado, hinchazón y moretones son mínimos.
Cabe recordar que la lipoescultura no es un método de reducción de peso, es una forma de esculpir el cuerpo y eliminar grasa localizada que de otra manera no podría ser destruida, ni mediante ejercicio, ni dietas.

En cuanto al costo, comenta el especialista, la satisfacción vale más que cualquier otra cosa. Por eso es de suma importancia elegir un médico certificado y con el cual se tenga empatía desde la consulta. “El valor del procedimiento varía entre un médico y otro, por lo que ofrece. Pero no es un procedimiento costoso”, dice Mejía.

Candidatos a este procedimiento

Mejía aclara que esta cirugía no está indicada a pacientes obesos, ya que su fin no es hacer bajar de peso; el propósito es mejorar el contorno corporal después que el paciente haya alcanzado un peso que, para su estructura física, se considere normal. Es importante resaltar que, en artículos publicados de trabajos científicos, se estipula que el límite de volumen a retirar es de 3-5% del peso corporal del paciente. “A resumidas cuentas, esta cirugía tiene como fin mejorar la silueta y reducir medidas, no el peso”, dice.

La edad que se tenga condiciona el tipo de cirugía plástica que se pueda realizar y sus resultados. En el caso de la “lipo”, como muchos han bautizado este intervención médica para que suene menos imponente, es recomendable realizársela después de los 18 años y hasta los 50 aproximadamente, por un asunto de calidad de piel y retracción. Hay que destacar que la cirugía no se le indicará al paciente si no goza de un excelente estado de salud. Es importante que no fume, que cuente con una piel firme y de buena calidad y que tenga menos de un 30% por encima de su peso ideal, comenta el galeno.

Luego de la cirugía

Los cuidados post operatorios dependerán de cada paciente, en especial, de su historial médico y el porte de la cirugía. Eduardo Mejía, dice que normalmente individualizan cada caso para evitar eventualidades. Eso se le explica al paciente extensivamente. Los cuidados son diferentes de un médico a otro, lo importante es que el paciente siga las órdenes del especialista para que el resultado sea exitoso. Un punto muy importante lo constituye el hecho de que el paciente debe permanecer hospitalizado por 24 horas luego de la cirugía, para ser monitoreado.

Importante
El paciente debe tener una piel firme y menos de un 30% por encima de su peso ideal para someterse a la cirugía.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas