“No es fácil abrirse camino en el medio artístico”

José Almonte se define como una persona libre, apasionada, alegre y sensible. Dice que “creo a veces que soy demasiado sensible, pero eso es bueno para crear”, para luego señalar que se considera un ser apasionado de la vida, la naturaleza y…

José Almonte se define como una persona libre, apasionada, alegre y sensible. Dice que “creo a veces que soy demasiado sensible, pero eso es bueno para crear”, para luego señalar que se considera un ser apasionado de la vida, la naturaleza y el color. Estudió arte en la Escuela Nacional de Bellas Artes (ENBA), en la actualidad, Escuela Nacional de Artes Visuales (ENAV), donde tuvo la oportunidad de ser alumno de excelentes profesores, entre los que destacó como su favorita a la artista Rosa Tavares, por su entrega y libertad ante la vida. “Mis compañeros también eran fenomenales, teníamos una hermandad que todavía continúa, en especial con Iris Pérez y Marcia Guerrero”, manifestó el artista. Aunque José no es un artista que expone mucho, cuenta en la actualidad con cinco exposiciones individuales, y más de cuarenta colectivas.

¿Fue difícil abrirte paso como artista plástico?
No es fácil abrirse camino en el medio artístico, sobre todo en nuestro país, donde no hay política de Estado para las artes visuales. Se invierte muy poco en el arte, por no decir casi nada y lo poco que aparece siempre es para el mismo grupito. Un país donde los ministros de Cultura que hemos tenido no tienen sensibilidad por las artes visuales, de hecho, han cerrado departamentos del Ministerio que tienen que ver con las artes visuales. Nuestro museo se nos cae a pedazos, porque desde arriba no hay dolientes. Esperamos que el ministro actual, que ha arrancado reabriendo esos departamentos, pueda darnos ese impulso que en realidad necesitamos. Imagínese, teniendo una de las bienales más viejas es una de las menos conocidas, con excepción del concurso de arte E. León Jimenes que mantiene su vigencia renovándose en cada versión, pero con la agravante de que la participación es muy reducida.

¿Cuál es el papel del artista plástico en la realidad social dominicana?
El artista es un narrador de historias, por lo que debe ser un ente activo frente a lo que está sucediendo en la sociedad actual, hacer las denuncias y plasmar los sentimientos del pueblo de la manera que lo crea necesario no importando la manifestación empleada. No se puede hacer de la vista gorda, sino actuar y para eso no basta con ser un gran colorista o un súper dibujante, ni siquiera colocar objetos en un espacio o usar nuestro cuerpo como soporte artístico. El arte tiene que tener contenido.

¿Influyen las creencias políticas, sociales y filosóficas en el éxito o fracaso de una obra?
Sí, aunque no siempre. Es que nada es exacto, pero no siempre va a influir en el éxito comercial, más bien en la creación de una buena obra. Se compran más cuadros en este país que buenas obras de arte.

¿Planificas las estructuras de tus obras antes de realizarlas?
Claro que sí. Mis obras son siempre planificadas en concepto y composición. Mis obras siempre tardan más en la planificación que en la realización técnica porque busco en ellas simplificar su estructura, decir más con menos. La conceptualización es la parte más importante.

¿Se hace fortuna con el arte en RD?
Creo que sí. El medio es muy difícil, de todas maneras creo que sí, pero hacer fortuna y al mismo tiempo tener una obra respetable y que trascienda es bastante complejo.

¿A qué línea van dirigidas tus obras?
Me motivan los sentimientos y los hechos, me expreso para decir, para hacer denuncias de lo que sucede. La niñez, la adolescencia, la educación y la mujer en sus situaciones de vulnerabilidad, son los temas recurrentes en mis obras. Ver cómo son vulnerados los derechos de la niñez desde una sociedad injusta e incapaz de hacer algo por ella, de crear las bases necesarias para que tenga un futuro promisorio; solo mucho bla bla bla. Las instituciones no funcionan simplemente porque no se quiere que sean fuertes. Entonces ¿qué hago? Bueno, se me ocurre que puedo aportar y no es que pueda salvar al mundo. También la problemática psicológica de la adolescencia que envuelve a todos con esto de lo confuso que es para ellos ese momento de la vida.

¿Cuáles técnicas utilizas en la realización de tus obras?
Las técnicas son mixtas, aunque suelo terminar mis obras con óleo. No soy un artista que expone mucho, solo tengo cinco exposiciones individuales, aunque colectivamente tengo más de cuarenta. La primera individual se tituló “De esto y aquello”, en la cual reflexiono en el tema de la falta de buena educación en los sectores más empobrecidos. Mi segunda exposición fue “Los sueños de Atotin”, donde busco hablar de los deseos de llegar más lejos, de ir más allá de donde la realidad nos permite llegar; la tercera se llamó “A la vista”, en la que hago una reflexión acerca de lo vulnerable que es la niñez ante un mundo que la expone a todos. La cuarta fue “Trampas”, en esta indago en las situaciones a las que se enfrentan los seres humanos, situaciones que de alguna manera no les permiten crecer y desarrollarse plenamente, y mi quinta muestra fue “La casa de Annie Paola”, aquí paso a la adolescencia y sus conflictos. La psiquis y los problemas de adaptación, el cómo arrastra y es arrastrado esa nebulosa de situaciones de no saber en qué pies estás parado.

Testimonio
No es fácil abrirse camino en el medio artístico sobre todo en nuestro país, donde existen políticas de Estado para las artes visuales”.

Reclamo
Los empresarios tampoco invierten en el arte, y el coleccionismo es muy mínimo, entonces es difícil abrirse paso en el medio artístico”.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas