¿Cómo entender que ese animal de cerebro grande -ser humano- que ha sido capaz de comprender tan bien el mundo, creando cosas tan maravillosas como la ciencia y la tecnología, pueda realizar acciones que destruyan su propio hábitat, el planeta del cual emergió a la vida, su casa, su resguardo, su refugio?
El calentamiento global ha sido un proceso que en cuanto a lo que hace el ser humano para el cada vez mayor incremento de la temperatura del planeta Tierra, corresponde a los últimos 100 años y de esos años los incrementos de los últimos 16 años han sido los mayores.
El gran aumento de la población de 1,000 millones de seres humanos en el 1800 a más de 7 mil 400 millones a diciembre de 2016 y el consiguiente incremento del consumo de agua y energía, incide considerablemente en el aumento global de la temperatura; lo cual un día no muy lejano si no se toman las medidas de lugar y a tiempo, puede hacer invivible el planeta Tierra.
Lo dicho es algo muy grave e invitamos al lector a conocer los estudios que hoy son tan fáciles de acceder para comprender el gran peligro.
Lo dicho es para destacar los terribles efectos del huracán Trump.
Se había logrado un importante avance con el llamado Acuerdo de París Sobre el Cambio Climático del 12 de diciembre de 2015 para ser aplicado a partir del 2020 y asumido por 195 países; más el señor Trump hace cinco días, el 1 de junio, decidió retirar a los EEUU del acuerdo renunciando por lo tanto al compromiso de proteger al planeta ante esa tendencia más que probada por la ciencia; ¡la ciencia, la más importante y única referencia en la renovada búsqueda de la verdad! Y Trump, un único ser humano mortal, pasajero y fugaz como todos nosotros, es capaz además de tener la facultad de retirar a su país del Acuerdo con tan nefastas consecuencias para la humanidad toda.
Es un daño más a su país y al mundo del actual presidente de los Estados Unidos que lleva a la siguiente reflexión: ¿Cómo es posible que cualquiera persona llena de caprichos y prejuicios conocidos de antemano, pueda ser elegido Presidente y de un país cuyas decisiones individuales puedan tener tanto efecto y peso en la supervivencia de la especie humana? Es una responsabilidad que no sólo se puede atribuir al referido personaje, sino a millones de ciudadanos “educados” que lo eligieron, lo cual evidentemente cuestiona en lo más profundo esa democracia electoral.
