Desilusión

Estados Unidos representa para nosotros, latinoamericanos y caribeños, desarrollo y riqueza y la tendencia natural es a emigrar para allá. Pero nuestro gran vecino no es ya la tierra de las oportunidades, como lo hemos conocido siempre. Las posibilidades y oportunidades de ascenso social no son las de antes y se atribuye esto a que el sistema educativo, originalmente muy abierto, ha ido cerrándose más y más. Cuán abierto o cerrado es el sistema educativo es lo que determina si en un país se cumple el ideal democrático de igualdad de oportunidades. Estados Unidos dejó de ser modelo en ese sentido. El “sueño americano” se vuelve desilusión. Tasas más altas de movilidad social las tienen hoy naciones nórdicas. l