Guerra.- El equipo de Softball Los Hijos de Cuchipe celebró su segundo Clásico de Softball ‘Entre Amigos’, oportuno para reconocer a dos personalidades del béisbol en la comunidad cañera, por sus aportes al espectro deportivo y social aquí.
Sin temor a la intempestiva lluvia dominical, elCaribe estuvo dando cobertura e intercambiando impresiones con los equipos líderes, amigos y contricantes integrados por los Toleteros de Cuchipe y Willy Cena, en colores patrios como el blanco, rojo y azul; las Estrellas de Rafael Amador, en Verde y blanco de la esperanza y la Gloria De Dios, quienes se consagraron por segundo año como equipo campeón del Clásico «Entre Amigos» con uniformes negros tipografiados en letras amarillas.
Durante casi cinco horas se mantuvo la alegría y adrenalina de fanáticos en el play de béisbol Pipí Amador, donde sus organizadores expresaron que el objetivo es atraer a la ñinez, adolescencia y juventud a las lides de la capacitación y entrenamiento corporal y mental; igualmente, reencontrar varias generaciones dedicadas al arte del guante y la pelota.
«Honrar a los grandes hombres, honra. Honrarlos en vida, honra más», animó Franklin (Espartaco) Rodríguez, vegano, quien desde niño ha despuntado como deportista y anfitrión de torneos, triangulares y miembro de equipos de softball, también exaltando la trayectoria formativa y gerencial de Germán Bienvenido (Cuchipe) Pantaleón; a quien cada año se dedica el referido clásico.
En ese orden fueron reconocidos con sendas placas al mérito deportivo municipal, Rafael (Pipí)Amador, como precursor y formador de las ligas y movimientos deportivos del municipio San Antonio, el mismo Pueblo de Guerra, que hoy reclama una cancha de baloncesto profesional y la instalación de un polideportivo por la abundancia de terrenos según afirmaciones de inquietos deportistas guerrenses.
Igualmente, Leopoldo (Don Leo) Rosario; por aportar al desarrollo del deporte desde su empresa (venta de pollos) y a su vez, compartir añoranzas y satisfacciones personales con el discipulado que corroboran que entre Cuchipe, Pipí y don Leo, existe una vocación de enseñanza y formación.
“Cuchipe y Pipí son nuestras guías y consultores permanentes”.
Asimismo, el embajador deportivo e ideólogo, Germán Bienvenido Pantaleón Girón Jr, hijo de Cuchipe, prometió desde el primer torneo en mayo del 2017 que la actividad se convertirá en un clásico para constantemente homenajear a los precursores del deporte de aquí”.
«Nuestro objetivo fundamental es que los niños, jóvenes y adultos, hombres y mujeres se enfoque en disciplinas deportivas y saludables como el baloncesto, béisbol y softball.
Aspiramos realizar futuras versiones de torneos interrurales en comunidades de La Reforma de Mata de Palma, Bella Vista, Estorga, el Mamón, la Loma, el Toro, Baní y otras zonas aledañas a Guerra y Santo Domingo Este», explicó Pantaleón hijo.
Agregó que el buque insignia del Clásico Entre Amigos son las escuelas. «Los niños son una fuente de crecimiento, desarrollo, porvenir y en fin de futuro. Tenemos que aportar más a nuestra juventud para apartarlos de distractivos vacíos y perjudiciales a la salud y a su familia», ponderó quien perteneciera a la liga infantil, juvenil y de veteranos de aquí.
La Copa de Campeones fue conquistada por la Gloria de Dios por segundo año consecutivo y entre todos los jugadores destacaron Anthony castillo, líder de carreras empujadas; Kevin de la Mota,
Líder en home run, líder en picheo Camilo Castro y Miguel Ángel Santana, jugador más valioso.
Los equipos contendores fueron acompañados por las madrinas quienes dieron un toque de ternura e ingenuidad, entre ellas Génesis Pantaleón, Crismery (la Beba) Fabián y Vismari Vásquez, como emblema de tres generaciones familiares formadas en el softball femenino y con actitudes dirigidas al deporte.
Para la celebración del acto y torneo deportivo la producción general estuvo a cargo de Franklin Olivo Rodríguez (Espartaco), German Pantaleón (Cuchipe) padre e hijo; Willy Cena, Cristina Vásquez y Jazmin Santana. Además la confianza de sus patrocinadores oficiales: Editora Castro, Casa Gloria y la Bodega Olga; manteniendo la unión y semilla sempiterna de la amistad, el respeto y la admiración hacia sus mentores.
Por Adalgisa Corcino
