Santiago. La iglesia Católica consideró urgente y necesario aplicar nuevas medidas para detener la frecuencia de los hechos delictivos que tanto daño hacen a la imagen del país.
“No hay que hacer grandes investigaciones para hacerle frente a este mal que nos abate. La mejor manera para enfrentar esta campaña de descrédito, a veces interesada, es demostrando con hechos que todavía seguimos siendo uno de los destinos más seguros para nuestros visitantes, si nos comparamos con la mayoría de los países del área”.
En su editorial el periódico Camino plantea el desarme de civiles que de forma ilegal poseen un arma como una de las medidas que frenaría la ola de robos y atracos que afecta a los dominicanos.
“Es asombroso observar la cantidad de jóvenes armados que las utilizan para matar a quienes se resisten a sus fechorías. ¿Dónde adquieren estas armas, cómo las consiguen?”. Y advierte que las autoridades encargadas de velar por el orden y la seguridad deben dar respuesta a estas inquietudes.
