Al menos 30 personas han sido declaradas muertas en Bahamas hasta la tarde del jueves tras el paso del huracán Dorian, si bien las autoridades advierten de que es probable que el balance final de víctimas aumente.
«Permítanme decir que creo que el número será asombroso», afirmó el ministro de Sanidad, Duane Sands, según Nassau Guardian.
«Es solo una cuestión de recuperar esos cuerpos, asegurándonos de entender cómo murieron», explicó el ministro, reiterando que el número «va a ser enorme» y que «el pueblo debe prepararse para recibir información inimaginable sobre el número de muertos» y su sufrimiento.
«Nunca he vivido nada así y no quiero volver a vivir nada como esto», confesó el político, añadiendo que el Gobierno no tiene capacidad de lidiar con esta «crisis de salud», por lo que han solicitado ayuda al director de la Organización Mundial de la Salud, entre otras organizaciones.
Por su parte, Joy Jibrilu, directora general del Ministerio de Turismo y Aviación del país, afirmó en declaraciones a CNN que «cientos e incluso miles de personas siguen desaparecidas» tras el paso del huracán.
El huracán Dorian, calificado de «catastrófico» por el Centro Nacional de Huracanes de EE.UU., tocó tierra la tarde del pasado domingo en el noroeste de las Bahamas con vientos sostenidos de 297 kilómetros por hora.
