En medio de dolor e indignación sepultaron este viernes los restos de una niña de dos años de edad, que habría sido estrangulada y abusada sexualmente, y cuyo cadáver fue hallado cerca del patio de su residencia, en el sector Palavé de Manoguayabo en Santo Domingo Oeste.
Se trata de Yulissa Contreras, de descendencia haitiana, quien fue hallado en un pozo séptico en construcción, la tarde del pasado miércoles, justo seis horas después de que familiares la dieran por desaparecida.
Familiares y vecinos de la víctima acusan del hecho a un vecino conocido como “Fary”, quien según dicen actuó de forma extraña al enterarse del hallazgo y luego huyó del lugar junto con su esposa e hijos, dejando su vivienda abandonada.
El padre de la menor, Junior Contreras sospecha del mencionado vecino, de sustraerla y agredir a la pequeña mientras se encontraba sola, llevándola hasta el pozo, donde fue aparentemente violada y estrangulada y su cuerpo arrastrado varios metros y dejado desnudo en una pequeña zanja.
En medio de llanto, una vecina narró que en el momento en que el médico legista movió el cadáver que estaba boca abajo todos se asombraron al ver que en su parte íntima había mucha sangre.
De igual modo, Junior Contreras explicó que hace unos días, Yulissa y sus hermanos de 6 y 8 años se quedaban solo en la casa porque su madre tuvo que viajar a Haití a cuidar de su padre, situación que les obligaba a quedarse solos en casa mientras él trabajaba.
Los familiares de la niña exigen justicia y que se investigue al vecino conocido con “Fary”, quien después del hecho “huyó de la comunidad junto a su familia de forma extraña”. Piden que este caso no quede impune.
Los restos de la pequeña fueron sepultados ayer a las 10 de la mañana en el cementerio de Hato Nuevo, en Manoguayabo.
