Reflexiones sobre un proceso

Un proceso electoral singular, sin antecedes, se cierra mañana, con la vigencia de la ley de partidos 33-18.

Un proceso electoral singular, sin antecedes, se cierra mañana, con la vigencia de la ley de partidos 33-18. La modernidad que entraña el voto automatizado y la votación universal para elegir candidatos en el partido oficial. Pero persistieron las prácticas clientelares de uso y abuso de los recursos del poder en favor del candidato oficialista.

El derroche se expresó en una publicidad abrumadora y en la participación de funcionarios del gobierno sin el menor rubor, no sólo bajo el baladí argumento de que lo hacían “fuera de los horarios de labores”, sino durante cualquier hora del día. Se excedieron.

Lo mismo con los medios promocionales institucionales sobre la obra de la actual administración. Fue un uso abusivo de los recursos del poder contra los otros contrincantes del mismo partido, que se enfrentaron como enemigos.

Mientras eso ocurría, las propuestas acerca del futuro de la Nación desde esa trinchera se tornaron escasas. Nada más allá de la continuidad del programa del grupo gobernante. Al menos, los demás competidores presentaron su plataforma sobre los propósitos de lo que serían su planes de gobierno.

Pese a todo, la campaña se desenvolvió pacíficamente. No hubo violencia ni incidentes que lamentar. Eso fue muy bueno en una campaña tan activa que pareció una competencia final por la presidencia de la República.

Mañana es el día de las votaciones. El Partido Revolucionario Moderno (PRM) optó por un padrón cerrado y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) por el padrón de la JCE. En atención al interés mostrado por la ciudadanía, y al grado de agitación de las partes, se presume que habrá una consistente votación.

Hay que votar, si estos son los partidos de las simpatías de los convocados. Se hace ciudadanía ejerciendo el sufragio. Se espera que no haya coacción ni compra de votos, o se recurra al dinero para “motivar”. Pero sabemos que será inevitable.

Que la gente vote por la propuesta que considere mejor en cada partido. Que la gente aguce sus sentidos y trate de descubrir dónde están las propuestas más adecuadas para el bien de la Nación.

Esperamos que las votaciones transcurran y terminen en paz.

Posted in Editorial

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas