El padre Rogelio Cruz y el candidato presidencial coinciden en que la humildad y la vocación de servicio son las características más valiosas que debe tener un político que aspira a gobernar la nación
El candidato presidencial, Ramfis Domínguez Trujillo, continuó en los recorridos de apoyo a sus candidatos municipales. Antes de cumplir con la serie de compromisos que tenía pautados, el pasado domingo en Villa Altagracia, asistió a la misa oficiada por el padre Rogelio Cruz, en la Iglesia del Pueblo, en La Vega.
Durante el sermón, el padre Rogelio criticó que los gobernantes se crean reyes y resaltó la humildad de Jesucristo, quién enseñó que ser político, que ser rey, que gobernar es servicio.
“Hoy queremos políticos que sean capaces de servir a su pueblo, queremos políticos que bajen al pueblo; de lo contrario, esto se fue a pique y ustedes lo saben mejor que yo”, sentenció el clérigo.
En este punto recomendó a los políticos imitar el pensamiento de Jesús. “De eso se trata, de que sean reyes, pero reyes como fue Jesús: ¡rey humilde, rey al servicio de los más pobres, rey que practicaba la justicia, rey que no comía solo, sino que compartía”, insistió Rogelio.
En este sentido, tras el mensaje central de la misa, uno de los asistentes aprovechó que el padre le diera la palabra para preguntarle a Ramfis que, ¿cómo el pueblo podría saber si él no era más de lo mismo? A lo cual éste respondió que, sin ánimos de politizar la ceremonia religiosa, lo más importante es que los dominicanos sean partícipes de los procesos políticos.
“Nos toca ser guardianes de nuestra patria y nuestra Constitución, participando en todo el ejercicio político. Necesitamos ser partícipes, porque los políticos somos seres humanos y creo que cuando un político pierde la humildad, pierde el contacto con la realidad. Y la realidad de este pueblo es lúgubre y es muy triste. Por eso le pido humildad a Dios todos los días, porque lo más importante es la humildad”, precisó.
Asimismo, pidió que el pueblo siga orando por la patria, las mujeres, los jóvenes y por la gente en general, “para poder rescatar la soberanía de la patria, porque esto es una guerra política, económica, pero sobre todo espiritual. Y en la medida en que nosotros nos entreguemos siempre a papá Dios, que pongamos a disposición de él nuestras vidas, nuestros corazones, nuestro quehacer diario, en esa misma medida le abriremos la puerta para que impere su voluntad en nuestra vida y en nuestro gobierno”, enfatizó.
“En tiempos de tantas vicisitudes, él (Dios) es quien puede transformar esta patria. Por eso les digo que cuando busquen los candidatos, no busquen políticos, busquen seres humanos que quieren servirle a su pueblo”, agregó.
Al concluir la misa, los asistentes mostraron gran interés en tomarse fotos e interactuar con el candidato a la presidencia por el Partido Nacional Voluntad Ciudadana (PNVC).
Posteriormente, Domínguez Trujillo se dirigió a Villa Altagracia para cumplir con su apretada agenda política, consistente en varias reuniones privadas con distintas personalidades, así como en respaldar las candidaturas municipales de su proyecto político.
En este punto resaltó que “tenemos que liberar a la patria de nuevo y eso exige que hombres y mujeres de valores asumamos la antorcha de la libertad, la antorcha de la verdad, la antorcha de la dominicanidad, porque de quedarnos de brazos cruzados, no vamos a hacer nada; mas que ver cómo el país, nuestra soberanía, nuestros valores, nuestras tradiciones, se van desvaneciendo”.
