El psiquiatra José Miguel Gómez aconseja saber la diferencia entre los conceptos meta y objetivo

El 1 de enero marca el inicio de una nueva etapa. Es sinónimo de expectativas, ideas, propósitos, planes y objetivos que no pudieron ser completados en el periodo anterior. Pero te has puesto a pensar: ¿por qué tus planificaciones no se concretaron?

Para el psiquiatra José Miguel Gómez, antes de elaborar una lista de proyectos es necesario definir la diferencia entre metas y objetivos, dos palabras que aparentemente son similares pero que en el ejercicio son totalmente distintas. La diferencia entre éstas es muy sencilla, la primera es aquella que te trazas sin poner una fecha y la segunda es un propósito que tiene fecha de inicio y tiempo de caducidad.

Para iniciar con el pie derecho las páginas de una nueva historia es necesario realizar una metodología de evaluación balanceada y un calendario de planificación de metas.

Lo primero que debes hacer y lo más importante, es crear una lista marcando las cosas positivas logradas en el año 2019 y cuáles fueron las técnicas empleadas por ti para que éstas se concretarán; por igual, tus planes de desarrollo, guías y actividades que te hicieron convertir en un ente perseverante e indescriptible.

Después de tener claro cuáles fueron nuestros fuertes en el 2019, expondremos con valor crítico los tropiezos o dificultades que impidieron que se realicen esos propósitos importantes y aquellos que han sido postergados a lo largo de nuestra vida por la famosa coletilla “lo hago más tarde”, tiempo que termina convirtiéndose en nunca.

Esa lista debe tener todas las cosas que quieres lograr para poseer una vida integral, dividirla en varias áreas te simplificará su desarrollo, la vida familiar y en pareja, proyectos personales, laborales, económicos, ahorro financiero, salud, viajes, espiritualidad, etc.

Desarrollo económico

“La gente no debe apostar su crecimiento hacia una sola área, qué es lo peligroso, por ejemplo, siempre se enfoca en lo económico, en cómo lograr un avance financiero”, indica el psiquiatra.

De acuerdo con Gómez aunque existen personas que valoran otros aspectos de crecimiento integral todavía en la sociedad dominicana hay otras para quienes la economía es lo más importante.

Un buen hábito financiero es considerar tener diferentes fuentes de ingresos. Si cuenta con su empleo formal o fijo, pero puede generar otras fuentes de ingresos con empleos de menor tiempo, estos ingresos extras generados pueden convertirse en fuentes de ahorro o de inversión a largo plazo, dice.

“Ajuste sus gastos. Aprender a vivir con menos de lo que gana contribuirá a sus ahorros y a evitar deudas innecesarias”, aconseja el especialista.

Recrearse

Hacer deporte es invertir en la salud, prevenir y mantener los lípidos bajos; la glicemia y los triglicéridos controladas. Asimismo, llevar una alimentación adecuada beneficiará el cerebro. La estimulación de este órgano se realiza con ejercicios, leyendo, pero sobre todo, compartiendo porque es un “órgano social”, asegura Gómez.

Sexualidad

Vivir con pasión, en busca de la adrenalina. Esta hormona es ideal para eliminar la tensión de nuestro cuerpo, ayuda a nuestro corazón a bombear más sangre, debido al aumento cardíaco. Además, es una respuesta natural para tener mejor visión en situaciones de alerta.

Según el psiquiatra “cuando la adrenalina estimula el cerebro se segrega dopamina, conocida como la hormona del bienestar. Esta es la razón principal por la cual muchas personas encuentran adictivo el hecho de liberar adrenalina, necesitando constantemente emociones fuertes”.

Riesgos tóxicos

Dejar de Fumar, disminuir el consumo de alcohol y las compras compulsivas, son muy importantes.

Tres aliados de las metas

Es necesario la automotivación, la autodeterminación y la autoconfianza.

Automotivación: La habilidad de motivarnos. El optimismo es uno de los requisitos imprescindibles para la consecución de metas relevantes y tareas complejas lo que se relaciona con un amplio elenco de conceptos psicológicos que usamos habitualmente: control de impulsos, inhibición de pensamientos negativos, estilo atributivo, nivel de expectativas y autoestima.

Autodeterminación: Es el grado en que nosotros mismos dirigimos de manera voluntaria nuestra conducta a través de fuerzas internas.

Autoconfianza: ¿Cómo nos visualizamos a la hora de conseguir un objetivo? Está demostrado lo importante que es para el logro de metas y objetivos, el visualizarnos a nosotros mismos consiguiéndolo. Pero si tú enfocas tu atención en lo que no quieres… ¿Qué mensaje le das a tu mente?

Todo esto lo puedes lograr dejando de lado el síndrome de la carretilla, que es un conducta que caracteriza a esas personas que sólo realizan sus proyectos y actividades cuando son motivadas por otra personas.

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