La cárcel preventiva de San Luis fue puesta en funcionamiento este miércoles luego de un año de construcción, tras haber sido demolida ya que no tenía las condiciones necesarias para mantener personas guardando prisión en el lugar.
Este recinto penitenciario, ubicado en el municipio Santo Domingo Este, es para albergar a 236 privados de libertad que estén a la espera del conocimiento de medidas de coerción o de su traslado a otros recintos penitenciarios.
La antigua cárcel, tenía una capacidad para solo 25 personas pero llegó a albergar simultáneamente a más de 180 privados de libertad, quienes estaban totalmente hacinados.
Mientras no estaba lista, los imputados permanecen en la cárcel del Palacio de Justicia de Santo Domingo, en una grave situación, con poco espacio ni higiene.
Según comunicó la Procuraduría General de la República (PGR), ahora en esta nueva cárcel cada interno dormirá en una cama, recibirán sus alimentos en un comedor, contarán con baños adecuados, además de que será el primer centro con celdas especiales para recibir internos convalecientes o que tengan alguna discapacidad, entre otros cambios.
El recinto está compuesto por dos edificios, uno para albergar a los internos y otro para alojar las oficinas administrativas.
