Santiago. El aumento del consumo de agua potable por las medidas que obligan a las familias a permanecer en sus hogares por el COVID-19 ocasiona un déficit de 13% en Santiago.
Actualmente, la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago sirve 108 millones de galones por día y la demanda es de 124 millones. “La producción en sentido general es aceptable, pero la gente está consumiendo más agua al estar más tiempo en la casas”, expresó Darío Fernández, director de Comunicaciones de la Coraasan.
Fernández cree que si la población consumiera según los parámetros internacionales, el agua alcanzaría para el doble de la población de Santiago. Con el apagón registrado la noche del viernes, ocasionó otro reventón de la tubería que desde hace meses comenzó a instalar la entidad acuífera.
Esto causó que las barriadas del suroeste del municipio, que ya venían presentando sus quejas por la precariedad del servicio, quedaran sin el líquido durante la mañana del sábado.
