El Ministerio de Salud Pública presentará mañana un análisis sobre el comportamiento epidemiológico del coronavirus, tras agotarse la fase uno de reapertura económica y ante el inicio de la siguiente etapa.
El titular de la cartera, Rafael Sánchez Cárdenas, dijo que la evaluación abarcará, tanto los catorce días previos al reinicio de las actividades productivas como las dos semanas posteriores, de manera que se puedan valorar los hechos a partir de “datos fríos” y no de emociones o juicios que puedan resultar perturbadores para la toma de decisiones por parte del Gobierno.
El funcionario adelantó que pese a la notoria movilización de personas en los últimos días y en especial, durante la celebración del Día de las Madres, así como la alta incidencia viral en el Gran Santo Domingo, tanto la tasa de letalidad como la de positividad de las muestras procesadas continúan su tendencia a la baja, colocándose en 2.86% y 18.49%, respectivamente, mientras que la ocupación hospitalaria se mantiene por debajo del 40%, lo que refleja un control de los indicadores.
En ese sentido, enfatizó que el país está demostrando ser capaz de enfrentar la enfermedad con un menor impacto en cuanto a la letalidad e incidencia.
En la actual coyuntura, Sánchez Cárdenas considera imprescindible no sólo amortiguar el impacto de la epidemia sino también continuar la expansión de la economía a fin de que las empresas no languidezcan, ya que si las personas se quedan sin trabajo y sin ingresos la convivencia social y política se tornaría prácticamente imposible.
“Aquí de lo que se trata es de una combinación del factor salud, económico, social, y político, que también lo tenemos planteado. De manera que no hay contradicción en el pedido (de extensión del periodo de Emergencia) que se ha hecho y ha sido aprobado por doce días por el Congreso que debería, desde mi punto de vista, mantenerse todo el tiempo que sea necesario, de manera que el país pueda ir recuperando su economía pero simultáneamente manteniendo bajo control la epidemia”.
En ese sentido, dijo que todos los países del mundo que han reiniciado gradualmente su actividad productiva han tratado de mantener a la par medidas de emergencia y contingencia como el toque de queda, limitaciones de circulación y la realización de operativos para mitigar los efectos de la enfermedad que en las últimas 24 horas provocó 287 nuevos contagios y ningún fallecimiento en el país.
Sostuvo que es un error entender la salud estrictamente desde el punto de vista clínico, ya que ella es la resultante de una combinación biopsicosocial, en la que el contexto socioeconómico incide de manera determinante. “De manera que para mí, no es en modo alguno, una novedad entender la salud en estos términos y que cuando los gobiernos tienen que tomar la decisión, cuando se ejerce de verdad el papel responsable ante la sociedad, hay que levantar la economía porque no nos vamos a encerrar a esperar que el COVID-19 desaparezca y dejar que languidezca la economía”. Resaltó que el hecho de que la población haya acogido masivamente la recomendación sobre el uso de mascarillas o pañuelos para cubrirse la nariz y la boca, ha contribuido a que no haya habido cambios explosivos en las estadísticas de contagio tras la apertura.
Con respecto al Distrito Nacional, dijo que en los últimos cinco días la cantidad de casos ha sido de 88, 133, 82, 85 y 54 lo que a su juicio, refleja un amortiguamiento como resultado de los operativos realizados hace dos semanas, los que según dijo, continuaron el pasado fin de semana en sectores como Villa Francisca y Borojol, donde se localizaron 56 casos sospechosos para la realización de pruebas PCR y se procedió a la respectiva verificación de contactos.
Precisó que hasta las 6:00 de la tarde del domingo, de las 641 camas monitoreadas por el sistema para el tratamiento de pacientes de COVID-19 en el Gran Santo Domingo, solo 299 estaban ocupadas, de las cuales, 68 habían requerido atención en Unidades de Cuidados Intensivos y otros 41 permanecían bajo ventilación mecánica. Resaltó que algo parecido ocurre en Santiago, otra de las provincias con mayor incidencia del país, donde hay 140 pacientes ingresados, de los cuales, solo 33 han requerido UCI, equivalente al 35% de las unidades disponibles.
No ha recomendado túneles sanitizantes
Rafael Sánchez Cárdenas también afirmó que el Ministerio de Salud Pública no ha recomendado el uso de túneles sanitizantes en la entrada de instituciones, sino más bien el rociado de cloro en las viviendas donde residen personas infectadas con el virus y en la vía pública, por ser este un producto con gran efectividad para el control bacteriano y microbiano.
No obstante, dijo que la República Dominicana tiene la potestad de no acogerse a las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que recientemente desaconsejó su uso porque no se le conoce eficacia para la protección contra el coronavirus y generar una falsa sensación de seguridad entre la población.
Sostuvo que a pesar de que el país mantiene unas relaciones de respeto y colaboración con el organismo de las Naciones Unidas los Estados pueden tomar decisiones que no necesariamente convergen con las recomendaciones que emite.
