Una observación superficial de los medios escritos permite descubrir cómo crecen las críticas al presidente Danilo Medina después de la derrota del PLD, que desde antes eran más que abundantes y agresivas, sobre todo después que alimentó la idea de reformar la Constitución para reelegirse y tras los resultados de las elecciones primarias. Desde entonces las críticas son superabundantes. Pero el Presidente no tiene defensores. No se ven las firmas en su defensa, incluso aquellas que por mucho tiempo le fueron proclives o favorables. ¿No tiene el Presidente quién lo defienda? Si eso es ahora, imagínese qué será después del 16 de agosto, cuando seguro se incrementarán los ataques.

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