A través de su apariencia, los pies pueden revelar una infección, mala circulación o una enfermedad

Tener dolor en los pies, cambios de temperatura, alteración en el color de la piel y las uñas, deformaciones, entre otros signos, pueden ser un indicador de problemas de salud tales como una infección, mala circulación, problemas biomecánicos de la marcha o una enfermedad, indica el cirujano podólogo y especialista en heridas, Iván Silva.

Para evitar esto, Silva subraya que la higiene general, el uso de calzado adecuado dependiendo de las actividades que se realicen, y visitar el médico cuando se padece enfermedades como diabetes, artritis, etc, es fundamental para mantener pies saludables.

Cuidado

De acuerdo al especialista, la higiene de los pies debe ser diaria, cuidando los espacios interdigitales y secándolos de manera adecuada, ya que no deben permanecer húmedos por la proliferación de hongos. De este modo se evitan infecciones.

Adaptación del calzado

A la hora de comprar el calzado es fundamental que este resulte cómodo, que sea de la talla correcta para que el pie no quede ni apretado ni “resbale” con riesgo de que provoque rozaduras o callos, aconseja. Entre los materiales a elegir los más adecuados para la salud del pie son los materiales nobles, transpirables y flexibles que facilitan el movimiento, la seguridad y la transpiración.

Consejos

1) Revise sus pies a diario observando si hay heridas, manchas o callos.
2) Lave sus pies con jabón neutro, séquese suavemente con toalla.
3) Mantenga hidratados sus pies, elija una crema o emulsión nutritiva, pero evite hacerlo entre los dedos para evitar posible micosis (hongos).
4) Use medias de algodón, no sintéticas, cuyo elástico no agreda ni apriete.
5) Corte las uñas en forma recta y empareje los bordes con una lima para evitar que se encarne.

En caso de tener un aspecto anormal en sus pies, debe visitar un podólogo para determinar la causa y recibir
tratamiento.

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