El deporte profesional de los Estados Unidos volvió a ser impactado ayer por las protestas contra el racismo. Siete partidos de las Grandes Ligas fueron suspendidos; otra jornada completa de los playoffs de la NBA cancelada, al igual que la programación completa de tenis del torneo de Cincinnati.
El principal motivo, unir sus voces a la protesta nacional en contra del incidente del pasado domingo en el que Jacob Blake fue baleado por un agente de la policía de Kenosha, Wisconsin.
En las Mayores, los choques entre los Medias Rojas de Boston y Azulejos de Toronto; Rockies de Colorado y Diamondbacks de Arizona; Orioles de Baltimore y Rays de Tampa Bay; Filis de Filadelfia y Nacionales de Washington; Mellizos de Minnesota y Tigres de Detroit, así como Atléticos de Oakland y Rancheros de Texas eligieron no disputar sus respectivos duelos.
Algo especial sucedió ayer antes del partido entre los Mets y los Marlins. Ambos equipos saltaron al campo, donde el plato estaba cubierto por una playera del movimiento “Black Lives Matter”, y se pararon en las líneas de base del Citi Field y los titulares de los Mets tomaron sus posiciones en el diamante y se mantuvieron en silencio por 42 segundos, en honor a Jackie Robinson, primer pelotero afroamericano en la historia de las Mayores y quien usó el número 42 en con los Brooklyn Dodgers.
Hoy, las Grandes Ligas celebrarán el Día de Jackie Robinson, jornada en la que todos los peloteros de la Gran Carpa visten el número 42.
El tenis también se adhirió a las protestas por lo sucedido con Blake al cancelar la jornada completa del ATP 1000 de Cincinnati. Se espera que la justa se reanude hoy.
La acción del hockey también fue pospuesta. El calendario de ayer presentaba los partidos entre los Filadelfia Flyers ante New York Islanders, y Las Vegas Golden Knights contra Vancouver Canucks.
