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Santo Domingo.- República Dominicana es el tercer mayor emisor del Caribe de turistas que viajan en procura de servicios de salud a la ciudad de Medellín, atraídos por los servicios de alto nivel en diferentes centros con especialidades médicas.
Así lo reveló el informe Atención a Pacientes Internacionales, que revela que 125 dominicanos procuraron servicios de salud durante el 2024.
El documento, preparado por el Clúster Medellín Health City, de la Cámara de Comercio de Medellín, indica que los quisqueyanos son superados en el Caribe por Curazao, mil 344; Aruba, con mil 19 pacientes; Bonaire, 316; y Puerto Rico, 98 pacientes.
Los dominicanos fueron atraídos, principalmente, por servicios de ayudas diagnósticas, que representaron el 59% de todos los servicios médicos procurados por extranjeros en Medellín; oftalmología (14%), cirugías plásticas (10%), laboratorios clínicos (7%) y chequeo ejecutivo (5%).
La mayoría de los pacientes atendidos en 2024 eran estadounidenses (3.859), colombianos (2.953), ciudadanos de países del Caribe (2.599), holandeses (1.226) y panameños (755).
Como dato curioso, se atendieron a 33 pacientes de Saint Maarten y 25 de Sint Eustatius, ambos territorios del Caribe, así como a 30 pacientes procedentes de Israel, lo que evidencia la diversidad de procedencias y el posicionamiento de Medellín como destino de salud.
También se registraron nacionalidades como la española, canadiense, alemana y argentina.
Por grupo etario, 6 mil 291 pacientes tenían entre 45 y 60 años; 6.104, entre 30 y 44 años; y 2.773, entre 15 y 29 años.
El reporte reveló que clínicas y hospitales atendieron a 23.323 pacientes internacionales en 2024, lo que equivale a un promedio de cerca de 64 personas por día.
Esta es la cifra más alta desde 2010 cuando se empezó con el registro, para un crecimiento compuesto del 15 por ciento.
La llegada de estos pacientes se mantuvo constante durante todo el año, con una participación mensual que osciló entre el 7% y 10%, lo que evidencia que se trata de un turismo especializado y no estacional.
El mes de julio fue el que tuvo más número de atenciones. En términos económicos, la facturación de servicios en salud ascendió a $64.463 millones de pesos colombianos, en 2024, frente a $61.472 millones en 2023, para un crecimiento compuesto del 14 % desde 2010.
En más de la mitad de los casos (65%), el tipo de pagador fue particular.
Estima que la derrama económica generada por este flujo de pacientes ascendió a $45.479 millones en 2024, frente a $25.004 millones en 2023.
Asimismo, se reportaron atenciones en especialidades como cardiología, gastroenterología y ortopedia.
Mónica Sánchez Álvarez, gerente del Clúster Medellín Health City, explicó que el informe se elabora con base en las cifras suministradas por clínicas y hospitales, con el propósito de diseñar estrategias que posicionen a Medellín como un destino internacional de salud.
Agregó que la llegada de pacientes internacionales a Medellín se mantiene constante durante todo el año, lo que refleja un turismo de especialidad.
Asegura que la ciudad se ha consolidado como un referente para estos pacientes por la calidad de los servicios de salud, el alto nivel de formación del personal asistencial y médico, y las certificaciones de las instituciones.
Además de los servicios de salud, otros sectores económicos se beneficiaron con la llegada de los pacientes internacionales, por concepto de hospedaje, transporte, alimentación y comercio, entre otros.
Se estima que la derrama económica generada por este flujo de pacientes ascendió a $45.479 millones en 2024, frente a $25.004 millones en 2023.
El Clúster Medellín Health City, con 16 años de fundación, es una apuesta por el trabajo colaborativo donde las empresas que se suman deciden apoyar la visión estratégica establecida, enfocada en salud y bienestar.
A partir de esa narrativa se despliega una ruta de ejecución que va más allá de la prestación de los servicios hospitalarios e incorpora el análisis de fenómenos como el envejecimiento y el diseño de propuestas para la inclusión de personas con discapacidad a espacios urbanos y vida laboral, entre otros ámbitos.
