La Zona Colonial acoge un nuevo espacio cultural para las artes: Libélula. Este centro ha sido ideado con el objetivo de difundir la vanguardia local. En esta oportunidad abren sus puertas para recibir una serie de pequeños y minuciosos dibujos que irradian desde un centro hacia afuera, hacia dentro, hacia el infinito; como el corazón, como el amor. Esta es la propuesta de la joven Adela Dore, quien la ha titulado bajo el concepto de «Resonancias».
¿Resonancias? Sí, así es. Esas que surgen de momentos de gran transformación y aprendizaje, algunos de profunda oscuridad. Este ha sido el eje temático que Adela ha seleccionado para dicha muestra, con la finalidad de crear cierta intimidad con el formato de sus obras: “Es una manera de adentrar al espectador en mi espacio a partir del acercamiento, comenta.
Al llegar a la exposición podrás percatarte de que el círculo es el factor común en todas las obras. Están inspiradas en la filosofía de que el patrón “círculo con un centro” es la estructura básica de la creación, la cual se refleja desde lo micro hasta lo macro de la vida.
Cuando se traduce esta estructura a una representación artística se le llama “mándala”. Puede ser también traducido a sonido: “mantras”; al movimiento corporal “danza sagrada”. Todos teniendo un propósito en común, la sanación. Es como un volver a la matriz, armonizar con la gran danza de la creación y el constante renacer en los ciclos de la vida. Es lo que Adela intenta transmitir con este montaje; pues para la artista este un medio que invita a descubrir la divinidad a partir de la compresión de que reside dentro de uno mismo.
Lugar: Libélula, Espacio Cultural. Dirección: c/ Sánchez No. 125, esq. Padre Billini (2do Piso), Zona Colonial. Fecha: del 8 de marzo al 4 de abril.
