En los pueblos persiste la costumbre de ir al mediodía desde el trabajo a la casa para almorzar. En la capital y otras ciudades ese retrato familiar desaparece paulatinamente, por el crecimiento urbano, mayor dinamismo económico y vida más acelerada. Masivamente se almuerza “en la calle”. Fast foods, comedores, servicios de comida empresarial y otros, reemplazan la comida hogareña. Sin distinción de ambiente, ese breve tiempo de almuerzo debe ser orientado a relajarnos. Corresponde disfrutar los alimentos en tranquilidad. Nos perjudicamos física y mentalmente si durante la comida mantenemos la cabeza en prisas o preocupaciones. Vivamos cada momento en su adecuada “parafernalia”. Al almorzar, sólo paz y jovialidad.
Al almorzar
En los pueblos persiste la costumbre de ir al mediodía desde el trabajo a la casa para almorzar. En la capital y otras ciudades ese retrato familiar desaparece paulatinamente, por el crecimiento urbano, mayor dinamismo económico y vida más acelerada.&#
