La corrupción constituye una preocupación para el Banco Mundial y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid), porque “evidencia el debilitamiento que tienen las instituciones públicas”.
Esos dos organismos, a través de sus representantes locales, firmaron ayer un acuerdo de cooperación, para complementar sus programas y proyectos, e identificar oportunidades para seguir apoyando a República Dominicana en la mejora de la gobernabilidad y la transparencia.
“La corrupción está en todas partes del mundo, lo importante es cómo la sociedad enfrenta ese mal”, dijo el director interino de la Usaid, James Watson. “Y hay que ver cuáles son las causas”, agregó el representante del BM, Roby Senderowitsch, al conversar con la prensa en un acto realizado en el Centro Franklin, en la avenida México, Distrito Nacional.
El acuerdo suscrito es parte de la Iniciativa Participativa Anticorrupción (IPAC), en la cual la Usaid y el BM juegan un rol de “participación y donantes”.
Ambos buscan que se fortalezcan las instituciones públicas y las organizaciones privadas que promueven la gobernabilidad democrática y la transparencia.
Los recursos que facilita el BM para diversos programas en República Dominicana son fielmente monitoreados, según dijo Senderowitsch, y hasta ahora no se percibe ningún indicio de desviación de dinero para actividades contrarias a los fines propuestos.
