Las alfombras pueden parecer elementos clásicos en la decoración de la temporada otoño-invierno pero lo cierto es que estas también pueden adecuarse a la decoración de verano, más aun cuando en esta temporada decorar con textiles es toda una tendencia. Hay que destacar que las alfombras, además de ser totalmente estéticas y decorativas, también tienen una funcionalidad práctica, y es la de brindar mayor confortabilidad a los espacios en donde se colocan.
Dependiendo del revestimiento del piso, muchas veces este levanta calor con las temperaturas altas del verano y nada mejor que una alfombra para poder caminar descalzo por él sin sufrir molestias. Es por esta razón que hay que elegir alfombras adecuadas para el verano teniendo en cuenta que no sean tejidos felpudos o de lana, que aunque pueden ser muy bonitas, terminarían brindando un efecto contrario al que estamos buscando, que es refrescar la estancia.
Lo ideal es buscar textiles que sean ligeros, ya que son ellos los que brindan frescura al ambiente y en esta categoría, nada mejor que las alfombras de algodón. Si eres amante de los estilos rústicos entonces opta por una alfombra de hilo que resulta totalmente fresca y decorativa, permitiendo lucir ambientes al puro estilo rural. Este tipo de alfombra es perfecta para decorar casas de campo o de montaña, como así también ambientes con estilos inspirados en ellas.
Otra opción son las alfombras de bambú que lucen mucho más modernas y combinan perfectamente con estilos contemporáneos como el minimalistas, y lucen muy bien en las salas clásicas y las rurales, ya que la belleza de este material natural es todo un atractivo. Otro de los clásicos de las alfombras es el algodón, un material ligero, perfecto para ambientes informales como dormitorios, el baño o el vestidor. Además, al ser tan frescas, resultan ideales para los meses de verano.
Agregar toques de color a los dormitorios, las salas y las cocinas a veces pueden ser algo difícil pero por medio de estas alfombras podremos hacerlo sin problemas. Este accesorio resulta perfecto para decorar ambientes modernos, como salas de estar y hasta baños; y en el caso de los dormitorios son ideales para los jóvenes y los adolescentes.
Las alfombras de verano con diseño “patchwork” también son una buena propuesta para esta temporada, ya que este estilo se ha puesto muy de moda para la decoración de los diferentes ambientes de la casa. También tenemos las alfombras en tonos pasteles que son perfectas para crear un ambiente fresco y veraniego. Así las que tienen motivo de animal print también pueden ser una certera alternativa para este verano, ya que hace los espacios mucho más llamativos.
Antes de elegirla
Las alfombras no solo cumplen una función decorativa, sino que también aportan calidez y pueden ayudarnos a ocultar las manchas o la suciedad en zonas de mucha actividad. Es un complemento estético que podemos encontrar en diferentes estilos, colores y materiales, adecuados a todas y cada una de las estancias de nuestro hogar.
El lugar elegido para colocar la alfombra, el tránsito de la estancia, así como el estilo decorativo, el material con el que esté fabricada y que sea fácil de limpiar, son algunas de las consideraciones que debemos plantearnos ante de adquirir una alfombra.
Otro punto importante que hay que tomar en cuenta antes de decidirnos por cualquier tipo de alfombra, es saber si el lugar en donde se ubicará conectará con el exterior de la casa, ya que se puede arrastrar mucha suciedad y la alfombra se deteriorará con mayor facilidad, por lo cual tendremos que escoger un material más resistente. Tanto el uso, como si tenemos hijos o animales, es determinante a la hora de elegir la fibra, la calidad del textil y también sus colores, pues la alfombra podría ensuciarse con más facilidad. Si tienes hijos o si la alfombra está en un lugar muy concurrido, evita los colores claros y las texturas que deban limpiarse muy a menudo.
El tamaño de la alfombra también es clave, dependiendo de la estancia donde queramos colocarla. Alfombras demasiado grandes que cubren por completo el suelo de la habitación, pueden resultar agobiantes. Por último, piensa en el estilo de la estancia y guíate también por tus propios gustos a la hora de escoger la alfombra más acorde al tipo de decoración de cada habitación.
Otros estilos
Si lo que buscamos es una alfombra fabricada con materiales naturales, también podemos encontrar las tradicionales alfombras de esparto, yute, bambú, madera o papel entretejido. Una opción funcional que cuenta con única desventaja, su menos resistencia al roce y, por tanto, menos durabilidad. Las famosas alfombras turcas o persas a diferencia de las de lana, están tejidas de forma plana, sin pelo, por lo que resultan mucho más ligeras. Las más típicas tienen un diseño geométrico y un colorido llamativo muy característico, donde los tonos marrones y rojizos son protagonistas. Eso sí, hay que asegurarse de colocarles una malla antideslizante en su parte inferior para evitar que se desplacen.
