El Partido Revolucionario Dominicano (PRD) realizó ayer 50 marchas-caravanas simultáneas en diferentes puntos del país y movilizó a cientos de simpatizantes que respaldan la candidatura presidencial de Hipólito Mejía.El candidato presidencial agradeció el apoyo de sus seguidores durante un breve discurso desde la intersección de las avenidas Duarte y Mella, del Distrito Nacional, donde expresó que la participación de los militantes perredeístas en las marchas-caravanas pintaron de blanco el país lo que, consideró, demuestra que el pueblo “está cansado del alto costo de la vida, de la delincuencia, del desempleo, de los problemas de la luz, de los problemas de educación”.
“Es una demostración clara, les estamos diciendo a la gente del Palacio Nacional que vayan preparando sus maletas que se van ya”, expresó Mejía cadenciosamente ante los simpatizantes que, portando escobas y banderas, le acompañaron más tarde en un recorrido por el malecón.
Mejía, que recién llegaba de encabezar un recorrido en La Vega, invitó a sus seguidores a trabajar duro y sin triunfalismos para ganar “mucho a poco” al partido oficialista en los próximos comicios.
“Y ellos, ricos todos, riéndose de nosotros y la masa pobre aguantando”, agregó el ex mandatario haciendo referencia al gobierno del PLD.
Marcha en Santiago. El candidato vicepresidencial del PRD, Luis Abinader, encabezó otra marcha-caravana que partió del sector Cienfuegos y recorrió varios puntos de la parte norte de Santiago. Seguidores de Miguel Vargas, encabezados por los presidentes de los comités municipal y provincial, el diputado Jovanny Tejada y Ulises Rodríguez, respectivamente, se sumaron a la caravana en respaldo a Mejía, en la que participaron cientos de santiaguenses que se desplazaron a pie y en vehículos.
Movimiento generalizado
Las distintas marchas-caravanas en apoyo a la candidatura presidencial de Mejía fueron encabezadas por los dirigentes locales de cada provincia del país, así como de los municipios de la provincia Santo Domingo y los de ciudades del exterior.
