“En cardiología todos los casos son difíciles”

La hipertensión arterial es uno de los factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares,  una de las principales causas…

La hipertensión arterial es uno de los factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares,  una de las principales causas de muerte a nivel mundial.

Muchas personas suelen vivir por años con este y otros padecimiento cardíacos sin saberlo y como una forma de prevención, en la República Dominicana, en los últimos años se han venido ejecutado campañas de orientación.

Entre ellas cabe destacar las charlas  educativas y monitoreos gratuitos.

En esta oportunidad el doctor Ernesto Díaz Álvarez, director médico del Instituto Dominicano de Cardiología, aprovecha para dar algunas pautas a los lectores de elCaribe sobre cómo prevenir los problemas cardíacos y señala cuáles son los principales factores de riesgo.

¿Cuáles son las personas más propensas a sufrir problemas cardíacos?
Hoy en día se conocen los llamados factores de riesgo cardiovascular, condición que hace a las personas susceptibles a desarrollar una enfermedad cardíaca o vasculocerebral, como  por ejemplo, el hábito al tabaco, la hipertensión arterial, la diabetes, tener niveles elevados de colesterol y de los triglicéridos, la obesidad, el sedentarismo y el estrés; siendo estos los llamados factores de riesgo modificables. Por otro lado, están los no modificables como son: el ser varón, la edad y la historia familiar de enfermedades cardiovasculares a temprana edad.

¿Los problemas cardíacos suelen ser congénitos?
Sí. Existen las enfermedades cardiacas congénitas que afectan a los recién nacidos y niños; aunque hay algunas que por ser menos complejas pueden comenzar en la edad adulta. También existe la predisposición genética y la  herencia que se pueden manifestar en algunas enfermedades, como la hipertensión arterial, la diabetes y la obesidad, aunque en estas últimas se puede retrasar su aparición o nunca presentarse, si el paciente realiza cambios en su estilo de vida.

¿Influye la alimentación en los problemas cardíacos?
Definitivamente sí, porque existen, a disposición del público, varios tipos de dietas, como la mediterránea, la dieta Dash y otras que han demostrado en múltiples estudios de investigación su relación con una buena salud cardiovascular. Lo ideal sería comer poca grasa saturada (grasa animal), evitar el consumo de grandes cantidades de carbohidratos, porque esto favorece el sobrepeso, la obesidad y la diabetes. Así mismo, comer con gran cantidad de sal predispone al desarrollo de la hipertensión arterial, también  debe evitarse la comida chatarra.

¿Influye el estrés  en la ocurrencia de los problemas cardiacos?
Sí. El estrés está relacionado con el infarto al miocardio,  derrame cerebral,  arterosclerosis,  obesidad y diabetes. También influyen, el consumo de alcohol y el tabaquismo .

¿Cada qué tiempo la persona debe hacerse un chequeo cardíaco?
Si ya es  paciente con una enfermedad cardiovascular establecida, lo ideal es un chequeo cada  seis meses, de lo contrario, si es una persona sana y está entre 45 y 50 años de edad  debe hacerse un chequeo anual y en caso de no control de sus enfermedades los chequeos médicos deben atender a las necesidades de la situación.

¿Tienen los dominicanos conciencia de la gravedad de este problema?
No en término general.  Hace diez años realizamos una encuesta para conocer  el nivel de conocimiento de la población sobre dichos factores, fue una encuesta regional donde participamos países de Centroamérica, el Caribe y Panamá, y en ese entonces para la población dominicana los factores de riesgo más importantes eran: el colesterol, el estrés y la Inactividad Física, dándole poca importancia a la hipertensión arterial que es una de las causas principales de riesgo.

¿Qué le aconseja a sus pacientes como medidas de precaución?
No fumar, el consumo moderado de alcohol,  práctica regular de ejercicios, alimentarse de forma saludable, reducir el consumo de grasas y sal, mantener un peso saludable, controlar la presión arterial, controlar los niveles de azúcares, controlar los niveles de colesterol y triglicéridos y evitar el estrés .

¿Qué  le falta a la institución que dirige  para mejorar sus servicios?
Nuestra institución está a nivel académico y médico de cualquier centro del área; aunque, desde luego, nos encontramos inmersos en un proceso de remodelación y cambios tecnológicos que nos permitirán brindar un mayor y mejor servicio a nuestros pacientes.

¿Qué satisfacción le ha dado trabajar con pacientes cardíacos?
Trabajar en una institución de servicio, académica y sin fines de lucro por más de 20 años es la mejor manera que puedo aportar a mi país. Para mí, mi carrera de médico lo es todo, y siempre me he tomado  muy en serio mi trabajo y  la vida de mis pacientes.

¿Cuál ha sido el caso más difícil que ha tratado?
Creo que en la cardiología todos los casos son difíciles,  se requiere de una actuación rápida y segura, porque todos los órganos del cuerpo  descansan en el transcurso de una vida, menos el corazón, pues el día que se detiene se acaba la vida.

¿Cree usted que en el país existen suficientes programas preventivos?
No. Para las enfermedades crónicas no transmisibles nunca en el país han existido reales programas de prevención, nunca se ha presentado un diálogo franco y sincero entre los estamentos estatales, el Colegio Médico y las asociaciones especializadas.

Los gobiernos prefieren invertir en grandes centros de recuperación de salud y no en la prevención.

Prevención
Si ya es  paciente con una enfermedad cardiovascular establecida, lo ideal es un chequeo cada seis meses”

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