¿Quién no tiene una maestra o un maestro que recuerde con cariño, un maestro favorito del que registra determinadas cualidades y enseñanzas?Aún en la vida más allá de las aulas, la mayoría de las personas siempre tienen a alguien que influyó en sus vidas, que contribuyó en su aprendizaje o en su crecimiento personal.
El maestro es un ser especial. Hablamos obviamente del profesional de la enseñanza respetuoso de su trabajo, su misión en las aulas y el entorno en que se desenvuelve. Ese ciudadano o ciudadana que prepara las clases, cumple los rigores en el proceso de aprendizaje de los niños o los adultos, en fin, que responde a su obligación con el sistema educativo y la sociedad en general.
La escuela es la segunda casa, toda vez que en ella se forja a los ciudadanos. Es, junto con la familia y las demás instituciones claves de orientación y crecimiento humano, un eje importante en la sociedad. Y el maestro es el elemento que decisivamente le da sentido y vida al contenido que se transmite a los educandos.
De modo, que en esta fecha, 30 de junio, reservada a los educadores, elCaribe les expresa una cálida felicitación, con la esperanza de que cada día trabajen para multiplicar el número de ciudadanos responsables que tanto requiere el país.
López Rodríguez
Monseñor Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez celebra el 25 aniversario de su elevación al Colegio Cardenalicio, en 1991.
Son muchos años de continuidad en su entrega a la fe, a la Iglesia Católica, al trabajo social y espiritual.
López Rodríguez lleva consagrado a la Iglesia 55 años, durante los cuales ha desarrollado una férrea defensa de lo que entiende son los valores y principios para la sociedad.
Resalta la defensa de la dominicanidad y el fortalecimiento de las instituciones dominicanas.
Hombre de carácter, consecuente, coherente con sus ideas, merece el reconocimiento público y felicitaciones.