De los 160 casos de santiaguenses que murieron de forma violenta durante el año, una gran parte no ha sido solucionada y permanece en los archivos policiales. Las muertes por ajuste de cuentas, por asuntos de drogas y por atracos aumentaron de manera considerable, a pesar de que estadísticamente la cifra de víctima es menor al 2013, año en el que fueron ultimados 174 personas en distintos hechos.
En el trimestre enero-marzo de este año 2014, se registró un aumento de las muertes violentas con un total de 47 víctimas. Si se compara con el mismo trimestre del año 2013, en que se reportaron 36 muertes.
De esa cifra, quince fueron feminicidios. Uno de los casos más sonados es el del camarógrafo del canal 25, Newton González, quien fue ultimado por los tiros que le hicieron varios sicarios, a escasos metros de donde opera la Dirección Cibao Central de la Policía. Aunque fueron interrogadas varias personas, incluido los hijos de varios empresarios, todavía se desconoce hasta el móvil por el cual le quitaron la vida. Como este, al menos otros 25 casos importantes siguen en el limbo, sin recibir respuesta de la Fiscalía de Santiago o la Policía.
Otro caso es el asesinato del abogado Amancio Herrera Turbí, ultimado por sicarios cuando llegaba a su oficina en la avenida Las Carreras. Herrera Turbí presuntamente fue mandado a matar por una pareja de esposos que se negó a pagar los honorarios debido a que estaban en trámites de divorcio.
Al hombre que la familia sindica del crimen guarda prisión, pero no por ese hecho, sino por el porte ilegal de armas de fuego.
En tanto que en el caso de Anelka Miguelina Liranzo, de 26 años, quien fue hallada descuartizada y tirada entre matorrales, en la comunidad de Hacienda Estrella, en la autopista Joaquín Balaguer, por el hecho las autoridades apenas tienen sospechosos.
Los homicidios han disminuido
El ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, aseguró en que de acuerdo a las estadísticas sobre criminalidad, se ha disminuido la tasa de hechos violentos. Cree que hay más percepción negativa que de la realidad.
Actualmente la tasa de criminalidad en esta provincia es de un 15.6 por cada cien mil habitantes, de acuerdo al informe más reciente del Voluntariado para la Seguridad de Santiago (Voses).
Según datos de Voses, el enfoque general de la tendencia por mes de las muertes violentas para los últimos seis años ha sido estacionaria o constante, ni disminuye significativamente ni aumenta, por lo que se ha mantenido un reporte de entre 10 y 20 muertes por mes.
De esos casos, un 90% de las víctimas han sido hombres de entre 18 y 38 años. Las muertes con armas de fuego representan el 70% de los casos.
La comunidad Don Pedro figura entre las zonas con más homicidios, en varios casos agentes policiales ultimados por bandas de atracadores; empleados privados atracados y asesinados para despojarlos de dinero. Al menos 11 personas fueron abatidas en Don Pedro y varios motoconchistas resultaron heridos durante atracos. Otros lugares con alto nivel de violencia son Navarrete, Tamboril y San José de las Matas.
Los muertos por enfrentamientos entre grupos rivales que se disputan los puntos de drogas y las muertes extrajudiciales estuvieron a la orden del día. En los primeros quince días de diciembre se han reportado al menos diez casos, la mayoría fueron en enfrentamientos con agentes policiales o grupos rivales.
