La Cámara Forestal Dominicana denunció ayer que en el país hay serias dificultades con la aprobación de los planes de manejo de bosque. Con esa posición la cámara respalda las opiniones emitidas por la representación local de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), en el sentido de que las trabas que se colocan desde el Ministerio de Medio Ambiente impiden que la siembra de árboles con fines comerciales se desarrolle, porque las personas tienen problemas cuando quieren aprovechar la madera.
“Ciertamente, la aprobación de proyectos forestales es un viacrucis en el país y posiblemente el representante de la FAO se quedó corto con lo que dijo. Es sumamente difícil lo que ocurre. Lo apoyamos en todo el sentido de lo que expresó”, dijo a elCaribe el presidente de la Cámara Forestal, José de Moya.
Sostuvo que en Medio Ambiente hay una comisión que no tiene como prioridad la aprobación de los planes de manejo de los proyectos forestales. “Eso va en detrimento de los propietarios de los bosques, porque en vez de acercarlos al cuido, los aleja. Si usted siembra y luego no puede aprovechar los árboles, entonces usted prefiere dejar eso”, apuntó De Moya.
Los planes de manejo son proyectos técnicamente elaborados que siguen un rigor científico, tomando en cuenta la edad del bosque, las especies y el tratamiento que requieren éstas. En base a esos estudios se hace una propuesta a Medio Ambiente sobre el volumen de madera que existe en una finca y sobre cuál es el crecimiento aproximado. A partir de eso se determina la cantidad que debe cortarse y el período. Las propuestas se hacen al Ministerio mediante un plan de manejo y el organismo debe estudiar eso, visitar el campo, comprobar la veracidad de lo que se plantea y luego expedir una certificación de aprobación. Normalmente, las fincas forestales en cuestión son proyectos pequeños, entre 150 y 3,000 tareas.
La Cámara Forestal le critica a Medio Ambiente el hecho de dar a esos proyectos el mismo tratamiento de otros que son de mucho más envergadura. “Los proyectos nuestros no tienen importancia en Medio Ambiente y eso es lo que criticamos. Nos hemos reunido varias veces con el ministro y con un viceministro, pero tal como ha dicho la FAO, en Medio Ambiente no hay conciencia sobre el tema”.
