¡Tremendos!

La propagación del zika ya es parte de la agenda no sólo de las agencias internacionales, como la Organización Mundial de la Salud, que convocó un comité de emergencia para decidir si se considera como una crisis internacional de salud, sino de los líderes más importantes del mundo. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por ejemplo, que preocupado ha ordenado medidas extraordinarias de prevención (ya han sido detectados 51 casos), o Vladimir Putin, que dijo un disparate, pero que igual manifestó su preocupación al declarar que “ahora nos viene una porquería de América Latina. Una clase de virus (…) que afecta a mujeres embarazadas”. Con ese panorama, nuestros médicos se van de huelga. ¡Tremendos!