El Gobierno proveerá seguro y los servicios médicos necesarios a 1,602 enfermos de VIH-Sida y que pertenecen al programa “Progresando con Solidaridad”.
Para tales fines la vicepresidenta de la República , Margarita Cedeño de Fernández, y la directora del Seguro Nacional de Salud (Senasa), Altagracia Guzmán Marcelino, rubricaron ayer un convenio mediante el cual el Gabinete de Coordinación de Políticas Sociales del Gobierno referirá al Senasa los casos identificados no solo de personas con VIH-Sida, sino también a beneficiarios que sean discapacitados.
Cedeño de Fernández explicó que las familias que pertenecen a Progresando con Solidaridad, las cuales están identificadas como pobres, serán integradas paulatinamente al régimen subsidiado de la Seguridad Social, cuya ampliación –recordó- ha sido dispuesta por el presidente Danilo Medina.
Luego de la firma del acuerdo durante un breve acto realizado en el salón Los Trinitarios del Palacio Nacional, la vicepresidenta señaló que las familias beneficiarias tendrán que cumplir con las corresponsabilidades que implica el programa Progresando con Solidaridad. Entre ellas citó que los beneficiarios tendrán que asistir a las Unidades de Atención Primaria (Unap), mantenerse vacunados y hacerse sus chequeos.
Destacó que con el acuerdo se busca beneficiar a las familias de extrema pobreza del país, para que estas cuenten con mejores servicios de salud y para hacer más efectiva la inversión que realiza el Gobierno en materia de salud mediante la prevención.
Tras ponderar el acuerdo, la directora del Senasa dijo que en lo adelante las personas que viven con VIH-Sida o que son discapacitadas no tendrán que ser evaluadas por el Sistema Único de Beneficiarios (Siuben) para recibir los beneficios.
En ese sentido explicó que tan pronto el Gabinete de Políticas Sociales identifica un caso, lo notifica y esta persona ingresa de inmediato al régimen subsidiado del Senasa.
