Juzgar menos

Personas proclives a criticar y juzgar a otras en vez de a sí mismas, acusan mucha rigidez de pensamiento, nunca consideran las ideas distintas. Es un esquema egocéntrico, promotor de intolerancia y soberbia. El colombiano Walter Risso pondera “la mente flexible” como asiento de equilibrio emocional: “Genera menos estrés, más felicidad, menos violencia. Se opone a un relativismo fanático donde cualquier cosa es verdad y nada es mentira. Se resiste al fundamentalismo, porque piensa que cualquier principio o código puede discutirse. No acepta el dogmatismo porque el absolutismo se opone a la realidad y a las leyes de la probabilidad y repudia el oscurantismo debido a que la falta de información te sumerge en la más crasa ignorancia”.