La erosión de las playas y la continua degradación de los arrecifes podrían provocar que los hoteles pierdan entre US$52 y US$100 millones en los próximos diez años, según un informe publicado por el Instituto Mundial de Recursos (WRI) sobre el valor de los arrecifes.Los datos fueron ofrecidos por el director de la Fundación Ecológica Punta Cana, Jake Kheel, quien afirmó que tanto la cobertura de corales como el poblado de peces han disminuido considerablemente en el país, siendo unas de las más bajas del Caribe, afectando la calidad de las playas.
Kheel expresó que la ampliación del programa de restauración de corales, que lleva a cabo esa entidad, constituye una respuesta a la grave amenaza que se cierne sobre la industria turística nacional.
El experto atribuyó la problemática a la sobrepesca, a la falta de ordenamiento de los pueblos costeros y a la contaminación que generan algunas empresas hoteleras y las comunidades aledañas al verter sus aguas residuales sin el debido tratamiento.
Sostuvo que en el caso de la zona Este, Punta Cana se maneja con un criterio concentrado en la preservación ambiental, mientras que en Bávaro existe menos ordenamiento y planificación en ese sentido, lo que ha contribuido a una peor calidad de la arena y sus aguas.
El programa que inició hace diez años en Punta Cana y se ha ido replicando en las playas de Bayahíbe, Punta Rucia, Samaná, Sosúa y La Caleta, consiste en crear “viveros de corales” debajo del agua en armazones de soga y metal y a medida que crecen se cortan y se trasplantan nuevamente en el arrecife.
Dijo que se está trabajando en la concienciación de la población local sobre la importancia de los corales y en el entrenamiento de pescadores, estudiantes y turistas que practican buceo especializado para realizar el implante de corales.
Los corales constituyen una especie de barrera que protege las playas de la erosión y al mismo tiempo el hogar de especies marinas que allí encuentran alimento y protección.
