El Gobierno falla en cumplir metas de presión tributaria

Al Gobierno se le está haciendo difícil cumplir las metas de presión tributaria contempladas en la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) y en los pasados acuerdos que suscribió con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Una suerte…

Al Gobierno se le está haciendo difícil cumplir las metas de presión tributaria contempladas en la Estrategia Nacional de Desarrollo (END) y en los pasados acuerdos que suscribió con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Una suerte de “un pasito para adelante y un pasito para atrás”, en materia de aprobación y aplicación de nuevos impuestos, está obstaculizando o impidiendo que se cumpla la meta de elevar la presión tributaria a por lo menos un 16%.

Al parecer, las vías se les están agotando a las autoridades fiscales para subir a esos niveles la proporción de la producción nacional que el Gobierno recibe en forma de ingresos tributarios . Unos seis intentos en la última década han aportado en forma consolidada menos de dos puntos a la presión tributaria dominicana. Ahora el Gobierno mira los niveles de exoneraciones que hay en el país, que en forma global superan el 6% del PIB.

Buen intento
La reforma tributaria realizada en noviembre del 2012, definida como la Ley 253-12 para el Fortalecimiento de la Capacidad Recaudatoria del Estado, no cumplió con los porcentajes esperados. Algunas de las figuras impositivas propuestas fueron variadas, otras suspendidas, y una proporción importante aprobadas para ser aplicadas en forma escalonada, en un período de cuatro años.

Fue un intento muy ambicioso por aumentar las recaudaciones fiscales como proporción de la producción nacional. Pero tuvo en contra el precedente, pues nunca una reforma al aparato impositivo ha aportado un 2% del PIB. Y el proyecto original procuraba un incremento de 2.2%. Al final, quedó en menos de la mitad de la aspiración.

El director general de Impuestos Internos, Guarocuya Félix, ha dicho en varias oportunidades, en forma de queja, que las metas de aumento de la presión tributaria no se han logrado porque se han hecho “reformas y contrarreformas”, porque por un lado se aprueban impuestos y por el otro, se aprueban leyes de incentivos fiscales.

De la reforma fiscal reciente ha expresado que se planteó originalmente un paquete de medidas para aumentar 2.2 puntos a la presión tributaria, con una recaudación estimada de RD$55,000 millones, pero que en el Congreso Nacional se le redujo el efecto recaudatorio; primero, a RD$45,000 millones, luego a RD$35,000 millones, para finalmente dejarla en $24,500 millones, menos de la mitad de la propuesta original.

Un informe reciente de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), que analiza la tributación  regional del 1990 al 2012, coloca a la República Dominicana entre los países de la región con más baja presión tributaria, con un 13.4%.

En el último acuerdo que el país firmó con el FMI, que cubría el período 2009-2012 y tenía un financiamiento por US$1,700 millones, las autoridades de entonces prometieron  “diseñar una estrategia para racionalizar y limitar las exenciones fiscales, fortalecer la administración tributaria y continuar modernizando las Aduanas para lograr los objetivos de ingresos a mediano plazo del programa”. Y citaba medidas, en ese sentido, para incrementar la presión tributaria en 0.2% y 0.3% del PIB.

Los ojos de las autoridades fiscales durante los últimos cinco años han estado observando lo que consideran “altas exenciones” de impuestos que hay en el país. El denominado “gasto tributario” es cuantificado y arengado en los últimos proyectos de presupuestos estatales.

Para el presupuesto del 2015, período para el cual las autoridades fiscales admiten que la presión tributaria prevista no alcanzaría la meta de 16.0% del PIB, plasmado como objetivo en la Ley 1-12 de Estrategia Nacional de Desarrollo 2030. El gasto tributario calculado es de RD$201,751.8 millones, equivalente al 6.7% del PIB. La presión tributaria esperada es de 14.1%, apenas 0.1% mayor a la proyectada para el año en curso.

Por la dificultad para ampliar la presión tributaria, el Gobierno proyecta en el 2015 aplicar cláusulas de la ley 253-12 que le permiten mantener tasas impositivas aprobadas para ser desmontadas. Una de ellas es mantener la tasa general del ITBIS en 18% y la tasa de impuestos sobre activos en 1%, “debido a que no se alcanza la meta de 16.0% de presión tributaria”, dice el proyecto de presupuesto del próximo año, bajo estudio de una comisión bicameral.

Pero el mayor empeño  para el 2015 lo plantea el Gobierno en torno al gasto tributario, que es definido como el monto de ingresos que el fisco deja de percibir al otorgar un tratamiento impositivo preferencial que se aparta del establecido en la legislación tributaria, con el objetivo de beneficiar a determinadas zonas o contribuyentes.  La idea del Gobierno es continuar la elaboración del análisis Costo Beneficio elaborado por el Ministerio de Hacienda como condición para otorgar los incentivos tributarios previstos por las diferentes leyes que crean gasto tributario . El 47% del gasto tributario del 2015, igual a RD$96,226.1 millones, corresponde al ITBIS l

RD ha tenido presión baja y cuestionada

Históricamente la República Dominicana ha tenido una presión tributaria relativamente baja, en comparación con el promedio de América Latina y el Caribe. Del 2005 al 2007, cuando el país tuvo su mejor media, con 15.2%, la región promedió 18.6%. En las últimas tres décadas, el promedio de la presión tributaria del país  ha sido de 11.9% del PIB, con  rangos del 8.3% en 1982, el más bajo, y 15.5% en el 2007, hasta el momento la proporción más elevada.  Hay quienes opinan que la presión es mayor que si se incluyen cargas como los pagos a la Seguridad Social.

15.5%
La mayor presión tributaria del país fue lograda en el 2007 y fue de 15.5%, un nivel inferior a la media regional .
0,1%
Para el 2015 el Gobierno espera subir la presión tributaria en 0.1 puntos porcentuales, para subirla de 14% a 14.1%.

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