En los tres primeros trimestres del año que concluye, los productos que mayor incidencia tuvieron en el deprimido nivel de inflación fueron el pollo fresco, la gasolina regular y el plátano verde.Como sector, el grupo Alimentos y Bebidas no Alcohólicas reportaba la mayor responsabilidad del Índice de Precios al Consumidor (IPC) acumulado entre enero y septiembre, que era de 2.53%. La contribución de ese grupo fue de 4.03%.
En el período enero-septiembre el pollo fresco, que acumulaba un incremento de 2.63%, cargaba con el 0.23% de la inflación hasta entonces; la gasolina regular, con un aumento consolidado de 8.94%, cargaba con el 0.22%, y los plátanos verdes, con un alza acumulada de 23.69%, incidían en la inflación acumulada en ese período en un 0.08%. Las cifras están consignadas en el informe del Banco Central sobre el desempeño de la economía en los primeros tres trimestres del año.
El comportamiento de los principales componentes de los precios internos hasta el mes de septiembre apuntaban a que las proyecciones de inflación del Banco Central, de entre 1 y 4.5%, se cumplirán satisfactoriamente. Hasta el noveno mes del año los precios de los combustibles no habían experimentado las fuertes caídas de las últimas semanas, lo que proyecta que para el año completo el índice de precios al consumidor habrá reportado descensos mayores.
En noviembre pasado la inflación fue negativa en 0.14%, condición que bajó el nivel acumulado en los primeros 11 meses del año a 2.44%. Ese nivel apoya las expectativas de las autoridades económicas de un nivel inflacionario por debajo del punto superior proyectado, que es de 4.5%. Como los combustibles han seguido bajando y se espera nuevas rebajas, debido a que el precio del petróleo continúa deprimido, se estima que la inflación final del 2014 sea un máximo de 3.5%. Por el impacto que tienen los combustibles en el cálculo de la inflación – pues inciden en el transporte en forma directa e indirectamente en otras actividades-y por las rebajas que se produjeron durante la primera semana de diciembre y posiblemente otras posteriores, se estima que una eventual alza de la canasta en el último mes no supere el 1%.
No hay amenazas aparentes de alzas sorpresivas en los tres componentes que más habían aportado a la inflación entre enero y septiembre.
