Este fin de semana el país se ocupa reverentemente en la celebración de las Madres y justo que las grandes heroínas de la vida reciban los homenajes a su altura. Las madres dominicanas son eminentemente consagradas, sus retoños siempre están por encima de ellas mismas y sus necesidades. “El que tiene hijos no muere ahíto”, decía mi mamá y al convertirme en madre comprobé la certeza y dimensión de esa afirmación. Los esfuerzos, sacrificios y esperanza de nuestras madres son modelo del amor incondicional. No hay ningún otro vínculo afectivo que supere el amor materno; sólo ellas aman los hijos por ser sus hijos. Hacer un alto para halagarlas y exaltar su entrega más que fiesta es deber.
Madres
Este fin de semana el país se ocupa reverentemente en la celebración de las Madres y justo que las grandes heroínas de la vida reciban los homenajes a su altura. Las madres dominicanas son eminentemente consagradas, sus retoños siempre están…