Santiago. Los altos niveles de contaminación que se desprenden de los 12 afluentes y las fincas para la crianza de ganado se convierten en los principales elementos de amenaza al río Yaque del Norte.A esto se agregan los desechos sólidos y líquidos altamente contaminantes que vierten las familias y las grandes empresas enclavadas cerca al Yaque.
Las preocupaciones fueron externadas por el recién electo presidente de la Sociedad Ecológica del Cibao (Soeci), Cresencio Rivera y Luis Polanco, quienes cuestionan la indiferencia de los distintos sectores gubernamentales y municipales para impedir que continúe la depredación.
Rivera recordó que al importante río del país, a su paso por Santiago, doce cañadas, arroyos y ríos vierten sus aguas, unido con los desperdicios que lanzan los comunitarios.
“Necesitamos que tanto la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos y la misma alcaldía asuman el compromiso de trabajar para impedir que sigan lanzando todo tipo de basura al río y las cañadas”, indicó Rivera.
Polanco criticó los asentamientos irregulares en la ribera del río Yaque del Norte y la utilización hasta de los 30 metros de protección, que utilizan para la ganadería a su paso por Santiago.
“Lo que sucede aquí es que no hay un régimen de consecuencias y como no se apresa a nadie, ni se toman acciones, entonces vemos como se hace lo que les venga en gana contaminando el río”, puntualiza Polanco al ser entrevistado por elCaribe.
Reveló que desde donde nace la cuenca en Jarabacoa hasta su desembocadura en Montecristi, desaprensivos toman la ribera del río para fines particulares.
Lamentó que hasta el momento ni Medio Ambiente ni otra institución, asuma la recogida de desechos cárnicos lanzados por desconocidos.
Soeci también propuso la unión de los diversos sectores para reducir el impacto.
