LAS VEGAS, NEVADA (EE.UU.). Floyd Mayweather, justamente a un año de la pelea más millonaria de la historia del boxeo (la que celebró el dos de mayo del 2005 con Manny Pacquiao), ha vuelto a despertar incógnitas.
Este hombre comienza, de verdad, a despertar los demonios en esta ciudad que sigue siendo la capital del boxeo mundial y en la que Mayweather ha ganado 30 de sus 40 combates profesionales. Tras derrotar a Pacquiao, en combate montado en el emblemático hotel MGM y que le permitió consolidarse como el mejor boxeador del mundo kilo por kilo, anunció que haría una pelea más y “se iba del boxeo”.
En efecto, cuando el 12 de septiembre del pasado año derrotó por amplia decisión (unánime) al estadounidense Andre Berto, de origen haitiano, proclamó que ya colgaba los guantes.
Pero en varias ocasiones ha dejado ver que sus palabras podrían caer por el piso… ¡y hacer por lo menos una pelea más y de esa manera terminar su carrera con límpido registro de 50-0 y quedarse solo con el invicto. Rocky Marciano fue el primero que lo hizo al terminar su gloriosa carrera con 49-0 y 43 nocauts peleando en la división de los pesos completos.
El pasado sábado la compañía Mayweather Promotions, propiedad de Floyd, organizó su tercera cartelera profesional desde que fue fundada… y allí estuvo el sensacional púgil estadounidense.
Quiere volver
Mayweather reside en Las Vegas donde ha hecho prácticamente toda su carrera profesional. Aquí incluso tiene un moderno gimnasio en el que entrenan famosos boxeadores. Después de disfrutar del cartel del pasado sábado Mayweather habló brevemente con algunos periodistas y dijo que “nadie sabe si vuelva”. Su declaración fue publicada por uno de los diarios digitales. Los demás medios de Las Vegas se hicieron eco de tan “sorpresiva” declaración.
¿Mayweather se volverá a calzar los guantes? Eso sólo lo sabe él, pero -como escribí hace varias semanas- tal parece que el hombre quiere ir por la 50.
