Santiago. El presidente Danilo Medina recorrió las zonas afectadas por las inundaciones de las lluvias y el desbordamiento del río Yaque del Norte con el desagüe de la presa de Tavera e instruyó al ministro de Obras Públicas a trabajar en la construcción de puentes y vías afectadas.
Medina dijo que primero hay que atender a la gente y luego trabajarán en obras de infraestructura en las comunidades afectadas. El mandatario inició su recorrido en el barrio Duarte II de la comunidad La Gloria del sector Cienfuegos y de allí continuó por Los Rieles de Gurabo, La Cacata y Jacagua, esta última afectada con el colapso de una de sus pasarelas. “Vamos a esperar que bajen las lluvias para reparar todos los daños que se han hecho, con lluvia no podemos hacer nada y hay que atender a la gente”, apuntó Medina.
El mandatario que se hizo acompañar del ministro Administrativo de la Presidencial, José Ramón Peralta, y Gonzalo Castillo, de Obras Públicas, escuchó del director de la Defensa Civil en Santiago, Francisco Arias, el informe de daños en esta provincia que ha dejado en tres semanas de lluvia, 120 casas destruidas.
Instrucciones
Medina instruyó a los encargados de los Comedores Económicos a que dejen instalados puestos permanentes para los desplazados y que el Plan Social entregue ajuares. El mandatario, además, visitó las zonas afectadas en La Vega, Salcedo y el municipio de Arenoso en la provincia Duarte. En Salcedo, Medina hizo un recorrido junto al senador de la provincia Hermanas Mirabal, Luis Renee Canaán.
Medina recorrió también el Bajo Yuna, donde verificó el drama de sus habitantes debido a la crecida el río.
“Estamos aquí para cuando bajen las aguas hacer una evaluación de inmediato y proceder a trabajar en favor de los afectados’’, dijo Medina. Indico que las lluvias han dejado muchos daños a la agricultura.
Noroeste espera apoyo oficial
Mientras el presidente Medina hacía un recorrido por el Cibao Central, miles de familias desplazadas en el Noroeste, esperan por apoyo oficial, debido a que llevan más de una semana en casas de amigos y vecinos.
Gumersindo Hernández, uno de los siete mil afectados por las inundaciones en el distrito municipal de Palo Verde de Montecristi, comenzó a sacar lo poco que quedó de sus ajuares en la humilde vivienda de madera y zinc que se mantiene bajo agua. Una gran parte de los afectados son de nacionalidad haitiana que trabajan en los bateyes y donde aún varias familias se mantienen evacuadas.
Y es que con el desagüe de la presa Tavera, que desbordó el río Yaque Norte, siete mil personas tuvieron que refugiarse en casa de amigos y vecinos otros en iglesias. Tan solo la iglesia cristiana Rehobeth tiene 42 familias en los dos niveles que desde el pasado lunes se mantienen en condiciones precarias.
Algunas ayudas llegadas a la iglesia provienen desde Canadá como algunas mantas hechas con material reciclable.
A pesar de que las aguas han bajado, ciento de familias se mantienen en sus hogares por temor a ser víctimas de los delincuentes. Sin embargo, las mayores pérdidas las enfrentan el sector comercial, que ha visto afectarse sus mercancías. La producción de banano, aunque fue afectada, no representa pérdidas cuantiosas para el sector, pues solo en algunos lugares las plantaciones de guineo quedaron anegadas. En Castañuelas, el río Yaque sigue afectando el paso hacia varias comunidades.
Comisión de Presa reduce desfogue de Tavera
En el caso del embalse Tavera, el nivel descendió a 325.87 metros cúbicos por segundo.
En tanto, que el caudal de entrada está en 278 metros y la descarga total al río en 472 metros cúbicos por segundo.
La operación de la presa está totalmente controlada.
Las lluvias comenzaron a disminuir desde anoche aunque se pronostica un incremento para el domingo.
También algunos ríos empezaron a aumentar de caudal como el Jimenoa en Jarabacoa.
