El Ministerio Público solicitará al juez de la Instrucción Especial que lleva el juicio penal en contra de la magistrada suspendida, Awilda Reyes Beltré, que le revoque la prisión domiciliaria y la envíe a una cárcel, a los fines de que ésta no se ausente del juicio disciplinario.La solicitud la hará el procurador general adjunto del Departamento de Litigios y Dictámenes de la Procuraduría General de la República, Víctor Robustiano Peña, quien durante la audiencia de ayer pidió al Consejo del Poder Judicial que entregue las actas de los siete aplazamientos que lleva el proceso, a los fines de fundamentar su petición.
Robustiano Peña solicitó además que Awilda Reyes sea evaluada por un médico legisla a los fines de determinar si en efecto se encuentra mal de salud, tal y como argumentó ayer su abogado Tomás Castro, quien mostró una licencia médica por tres días, que fue otorgada a la magistrada por presentar cefalea y estrés.
Frente a esto, el CPJ presidido por Estanislao Radhames Rodríguez, ordenó un aplazamiento hasta el próximo 27 de marzo, a los fines de que Awilda Reyes acuda a la audiencia y pueda preparar sus medios de defensa, debido a que será asistida por un nuevo abogado.
Además, los consejeros dejaron a cargo del MP las diligencias para homologar la licencia médica y ordenó a la secretaria del CPJ brindar todas las facilidades a las partes, para que hagan expedir copias de actas y documentos.
Reyes Beltré, quien fue enviada en el año 2015 a la Cárcel de Najayo por tres meses, como medida de coerción y posteriormente se le varió la medida por prisión domiciliaria, lleva más de un año y tres meses suspendida de su cargo sin disfrute de salario y además enfrenta un proceso penal en el cual es imputada, junto al exconsejero Francisco Arias Valera, de prevaricación y soborno.
En la pasada audiencia, la magistrada suspendida, solicitó al CPJ que cite como testigos al presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Germán Mejía y al exprocurador, Francisco Domínguez Brito.
