Envejecer

A veces me estremezco de pensar qué me significará envejecer en éste, mi país. No por el hecho de la vejez en sí -alcanzarla y abrazarla representa el éxito físico y espiritual de la vida -, sino porque las condiciones sociales, amén de los…

A veces me estremezco de pensar qué me significará envejecer en éste, mi país. No por el hecho de la vejez en sí -alcanzarla y abrazarla representa el éxito físico y espiritual de la vida -, sino porque las condiciones sociales, amén de los estigmas culturales que predominan en nuestra sociedad con relación a los adultos mayores, desfavorecen mis aspiraciones de ser una “envejeciente” activa e independiente. La conciencia y las políticas públicas acusan mejoría pero mayormente el estado de nuestros viejos es de abandono y marginación. A menos que el adulto mayor esté respaldado por un patrimonio económico, la perspectiva de unos “años dorados” plenos es mínima. Hay razones fundadas para aterrarse de envejecer aquí.

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas